Comentarios al relato:

Premio Nobel

Visitante, Anímate y deja un comentario al relato de Ícaro_libre porque seguro que le hace mucha ilusión leerlo. Su esfuerzo y dedicación bien merecen unas palabras.

9 comentarios

  • Nº 36.203
  • xavimysk
  • 22 abril, 2022 (10:56)

#6

Me temo que la anécdota es apócrifa. El bueno de Albert jamás se hubiese confundido al pasar de centimetros a kilometros. En todos sus años de metidas a Mileva solo pudo acercarse 314 Km a la luna y no 314000, por no hablar de que cada vez que la metia la tenia que sacar con lo que ambos desplazamientos se anulan entre si.

Sí que es bien cierto que siendo Mileva matemática semejante error no lo hubiera perdonado  llevándola irremediablemente a pedir el divorcio,  compremos la anédota por  este lado, aunque en este caso el Nobel no hubiese llegado nunca para Albeto 

Albert no pudo llegar nunca a la luna de esta manera, por mucho que se aplicase el resto de su vida, por un error de 3 ordenes de mágnutud. Bien diferente es que su prima Elsa le hiciese sentirse como en a luna cada vez que jodian y si este fuera  el caso me alegro por ambos sin duda.

Y bueno, una vez terminadas mis frikadas numéricas, puedo confirmar que el relato está muy bien escrito, es muy divertido y se merece un 10 sin duda.

Me encantó y te felicito por ello.

Saludetes!

  • Nº 34.899
  • Tan humana
  • 23 febrero, 2022 (23:25)

#5

Jajajaja muy bueno!!!! 
felicitaciones!!!!

#4

El genio eres tú, Ícaro

Últimamente estoy muy floja en esto de los comentarios. Y tampoco es que haya leído algo que me dejara con la boca abierta. Tu relato ha conseguido ambas cosas: dejarme  embobada y dedicarte un comentario.

El formato me parece muy original. La originalidad no se debe a que el 99% sea diálogo, sino a que ese diálogo suple a la perfección la falta de narración. ¡Bravo!, en este aspecto.

El humor que destila es fresco, nada forzado y en su justa medida. La consecuencia es que mis ojitos verdes han manado abundantes lágrimas alegres y que mi sonrisa, cada vez que recordaba lo leído, no ha menguado en dos días.

Lo mejor de todo es que durante toda la lectura se ha mantenido la intriga sobre quiénes serían esos dos personajes. La sorpresa ha sido mayúscula al descubrirlos y todo ha cobrado sentido. ¡El genio eres tú, y no Albert!

No obstante, me ha impresionado más ella que él: él era un genio, y poco mérito tiene lo que expone; ella, por el contrario, destaca por sus grandes dosis de ironía, algo poco frecuente en la época donde se sitúa la escena, y menos en una mujer. Quiero pensar que le dieron el Nobel en 1922 por “sus aportes a la Física Teórica”, y no por “llevar a la luna a punta de…” a Victoria de Baden, reina consorte de Suecia en esa época.

Por último, lo mejor de “lo mejor, de ‘lo mejor de todo’”, es que escribes de lujo y siento una envidia sana que ni te imaginas.

Por cierto, he echado un vistazo rápido a tus otros escritos, y parecen tan prometedores como este. En los próximos días les dedicaré un ratito.

Gracias y buen trabajo.

Te doy cinco estrellas bien merecidas y te mando muchos besitos.

1 Respuestas

@1

Luz Esmeralda: me he puesto colorado con tus palabras. Me pone infinitamente feliz que te haya gustado el relato y lo hayas encontrado tan bueno. Te agradezco mucho lo que me has escrito.

Déjame contarte algo. Hace unos años, participé en un taller de microcuentos o cuentos breves. Entonces me enseñaron las claves para escribir este tipo de textos:

1. Un cuento breve, es aquel que se puede leer de una vez. No depende de su longitud en términis de antidad de palabras o tiempo de lectura. Un cuento bueno, lo leerás hasta el final, da lo mismo cuantas páginas tenga. Si es malo, lo dejarás, aunque sea de una carilla.

2. Un cuento de este tipo, narra dos historias. Una que es evidente, y clara. La historia misma, por así decirlo. Y otra, que se va tejiendo en forma subterránea. A veces asoma, un poco, ligeramente, hasta que de repente, te das cuenta que en realidad, estabamos hablando de otra cosa.

3. El cuento siempre tiene una revelacion sorpresiva. Un descubrimiento; una epifanía. Generalmente al final de la historia. Esta revelacion, suele enlazarse con la historia soterrada que venía en camino.

4. Agregar, ocasionalemente algunos aspectos que aterricen la historia con hechos reales o ficticios, pero que le den un contexto, es deseable.

Y eso es. Te regalo este aporte.

Un abrazo y gracias de nuevo.

  • Nº 11.496
  • edudu8
  • 05 septiembre, 2017 (14:23)

#3

Muy ingenioso tu relato, me has hecho reír y lo compartiré con amigos. Así se pueden explicar algunas genialidades de ciertas personas. 

Solamente sugerirtr que corrijas un sólo número, ya que el año tiene 52 semanas y fracción. Y tú has escrito 42. Seguramente un error de tipeo, y que no desmerece tu trabajo.

Mis felicitaciones

2 Respuestas

@1

Muchas gracias por tu comentario. Me alegra que te haya gustado. 

Me suele pasar que después de publicar un texto, veo los errores que no advertí. No debería apresurarme tanto. Desgraciadamente, al parecer, no se puede editar los textos una vez subidos a la web.

Gracias de nuevo!

Saludos

  • Nº 22.625
  • Daneel O
  • 06 agosto, 2020 (08:44)

@2

No estoy de acuerdo con edudu8 con respecto del error, pues textualmente dice:

—Bueno, resulta que un año tiene 365 días, es decir, 52 semanas.

por lo demas me ha gustado mucho tu relato y es sorprendente la manera de llevalo a un final inesperado. Por otro lado te comento que hace mas de 42 años un buen amigo (ingeniero mecanico) hizo una analogia muy similar para conocer la vida util de una vagina en comparación con el kilometraje de un motor de automovil. Saludos

#2

¡Hola!

Me alegra leer tu comentario.

Muchas gracias!!!

  • Nº 11.471
  • Sarah
  • 04 septiembre, 2017 (22:24)

#1

Hola ♥

Esplendido muy jocoso tu relato y si él se caso con su prima yo lo sabia pero mi marido mediante tu relato se ha enterado jajaja ... laugh

Saludos kiss

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