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Elena, una buena compañera de clase

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Esta historia aconteció ya hace unos años, fue en uno de mis últimos años de instituto.

En la clase donde yo estaba la mayoría eran chicas, excepto 5 chicos. Yo siempre he tenido la suerte de entablar mucha amistad con mis compañeras de clase y aunque al principio tienen una imagen de mi algo equivocada poco a poco al irme conociendo van cambiando esta imagen hasta llegar a entablar conmigo una buena amistad.

Hasta el punto que siempre que teníamos que hacer algún tipo de trabajo, exposiciones o simplemente estudiar había ciertas disputas entre ellas para ver que grupo de chicas me conseguía incluir entre ellas.

A lo primero me gustaban estas riñas entre ellas y pensaba que era por mi trabajo y capacidad para trabajar en grupo, luego pensé que podía ser por otro tipo de motivos menos relacionados con los estudios...

Estuvimos dos años casi el mismo grupo y eso hizo que tuviéramos unos lazos de amistad bastante grandes, sólo las chicas tuvieron algunos enfados.

Recuerdo el primer día, cuando llegue ya estaban todas sentadas y fue casi instintivo fijarme más en unas que en otras, exactamente me fije en tres chicas que al final tuve mis más y mis menos con cada una.

Pues bien paso el tiempo, intente prestar más atención a estas tres chicas, cada una ocupaba parte de mi tiempo sin dejar de llevarme bien con las demás pero se notaba mi interés por estas tres.

En otros relatos ya he hablado de una de ellas en este lo haré de otra.

Esta chica era la más escultural de las tres, tenía un cuerpo atlético, típico de una chica que hace ejercicio físico, ya sea aeróbic, etc. Es decir, no tenia ni un gramo de grasa, tenía sus curvas perfectamente definidas, tenía el pelo liso y rubio. (Eso fue lo que más me gusto de ella, es algo que a mí me atrae mucho de una chica, un pelo bonito), sus pechos no eran excesivamente voluminosos ni pequeños, simplemente tenía la talla ideal para aquel cuerpo, su trasero respingón y como no a juego con toda ella y como guinda su preciosa cara que junto con sus ojos claros hipnotizaba a cualquiera para realizar sus deseos.

Con el tiempo me fui ganando su confianza y amistad y teníamos largas charlas, pude conocer su carácter, su forma de pensar, etc. la primera impresión fue que era bastante liberal, cosa que me encanto y que luego comprobaría yo mismo. También supe tenía novio.( Eso es una característica que desgraciadamente tienen todas las chicas que me gustan, no se como lo hago pero muchas de las chicas por las que siento algo y ellas también sienten algo por mi igual tienen novio, por eso algunas han preferido seguir con sus novios y sólo tenerme como amigo, otras sin embargo han mantenido relaciones conmigo, esta chica de la que os relatos es de las últimas)

Bueno iré al grano, después de conocernos bien y de hacer algún que otro trabajo de grupo juntos, conocimos nuestros gustos y aficiones y es ay donde coincidimos más. Nuestra afición por el deporte nos unió y después de varios intentos de quedar conseguí que se viniera conmigo para correr o para coger la mountain bike.

A lo primero ella venía acompañada por una amiga suya ya que aunque no me lo decía le daba corte venirse sola conmigo. Yo lo comprendí pero quería estar a solas con ella y la única manera era incrementar la intensidad del ejercicio hasta que su amiga se arto y no vino más con nosotros y pienso que ella poco a poco también quería salir a hacer deporte sola conmigo y dejar a la carabina de una vez.

Hasta que por fin llegó el gran día.

Era por la tarde, hacía bastante calor, subíamos los dos por la sierra, normalmente yo dejaba que ella fuera delante de mi ya que si yo fuera delante podría dejarla atrás al imponer un ritmo demasiado rápido para ella. Además de esa manera podía contemplar su escultural cuerpo!!!!! Conforme la subida se hacía más difícil ella se tenía que levantar del sillín para realizar más esfuerzo y lo contoneaba delante de mi, eso me excitaba muchísimo, además su piel empezaba a estar un poco sudorosa y despertaba mis mayores fantasías.... y por si fuera poco todo aquello me sorprendió que durante los días que vino su amiga, ella vestía con ropa deportiva pero más recatada, pero aquel día me sorprendió gratamente al llevar un culot ajustadísimo que me mostraba sus piernas y su trasero tan prieto y firme, en la parte de arriba un top estampado igualmente ceñido que no dejaba nada a la imaginación.... sus pechos se veían deliciosos!!!!!!!

La subida seguía aun más dura y empinada, así que decidimos parar en una zona destinada al descanso y a realizar fotos. Con el tremendo calor de aquella tarde sumado al gran esfuerzo cuando nos sentamos para disfrutar del paisaje su corazón palpitaba a mil por hora y su pecho parecía querer salir por momentos de aquel top ajustadísimo, pero por si no fuera poco estaba muy sudorosa, soltó su pelo y con el bote de agua se lo mojo un poco, también su bella cara y su delicioso cuello, todo aquello lo hacía de una manera muy delicada y muy erótica, yo casi no podía aguantarme las ganas de abalanzarme sobre ella como si fuera un león atrapando a una pobre victima....

No se como podía contener aquellas ganas porque mis ojos se querían salir de su sitio, ella se daba cuenta y le gustaba ver como me volvía completamente loco con aquellos movimientos.

Pero de repente todo aquello se nos iba a fastidiar, contemplando el paisaje ella distinguió a lo lejos en la carretera lo que creía que era el coche de su novio, entonces se puso muy nerviosa y me dijo que teníamos que escondernos, posiblemente habría ido a su casa a buscarla y su madre le habría dicho que estaba con otra amiga haciendo deporte.

Sin dilaciones nos apartamos aun lado de la carretera, escondimos las bicicletas y nosotros corrimos por la montaña hasta un pequeño refugio del que yo conocía que algunos cazadores utilizaban por si les sorprendía alguna tormenta poder refugiarse, al fin lo encontramos, era un espacio muy pequeño y muy camuflado. Entre yo primero y después ella, estábamos muy juntos por el pequeño espacio del refugio, casi de rodillas y aquella situación iba a hacer que explotara lo que sentía...

Pasamos unos minutos casi en silencio, solo oíamos nuestras respiraciones alteradas por los nervios de aquella situación, después yo quise salir para ver si veía algo pero ella se puso mas nerviosa, se dio la vuelta y me sujeto para que no saliera de allí, yo accedí, me senté con las piernas flexionadas y ella igual delante de mi, agarrando mis piernas con sus brazos hacía los lados de su cuerpo e inclinándose hacía atrás para que no saliera ninguna parte de su cuerpo fuera de aquel diminuto refugio.

Aquello ya no lo podía seguir aguantando y deje salir a flote toda mi calentura....

Aparte su mojada melena hacía un lado y empezó una conversación entre susurros.

―Lo siento te molesta mi pelo?

―No, tranquila si me encanta, tienes un pelo precioso pero....

―Pero que?

Al apartar su melena y tener mi boca tan cerca de su oreja empecé a rozar mis labios contra ella y fui bajando hasta llegar a su delicioso cuello, mientras que mis manos la abrazaban por la cintura y una de ellas subía lentamente en busca de sus pechos. Era un ataque en toda regla y no pensaba dar marcha atrás ya.

Ella se dio rápidamente cuenta de mis intenciones y sin ponerse nerviosa paro mi mano que buscaba sus pechos y entrelazo sus dedos con los míos mientras susurraba

―Que haces? No es el momento ni el lugar para esto y además tengo novio o ya no sabes porque estamos aquí.

Yo seguía teniendo su jugosa oreja cerca de mi boca y entre beso y chupetón le decía:

―Elena, desde que empezó el curso me he fijado en ti, me atraes mucho, eres preciosa, llevo mil noches noche soñando contigo, me gusta tu tacto, tu sonrisa, tu forma de ser, tu boca....

No podía parar de decirle lo que hacia tiempo que sentía por ella y surtió efecto, mi compañera de clase comprobó que todas aquellas frases entre cortadas por los besitos eran ciertas y ya no ejercía resistencia sobre mi mano, la cual subió poco a poco por debajo del top hasta por fin tener en mis manos sus delicados pechos que acaricie con ternura y comprobé como se endurecían entre mis manos.

Ella soltaba resoplidos entre cortados con la respiración a mil por hora, cosa que yo comprobaba por mi mano en sus pechos y seguía susurrándole.

―Elena eres mi mujer 10, lo tienes todo, eres perfecta, si me lo pidieras yo me arrodillaría ante ti....

Todo aquello la fue enterneciendo y cuando nos quisimos dar cuenta nos estábamos besando con un deseo irresistible, ella de espaldas a mi, con la cara girada hacía mi, mientras una de mis manos seguía acariciando su tiernos pechos y la otra empezó a bajar por su curvado cuerpo hasta llegar a introducirse por debajo de su culot y poder palpar como se notaba su tanga ardiente de deseo.... con su otra mano guió la mía hasta su tremendo conejo, note como lo tenía casi totalmente depilado, solo con un pequeño monte de venus muy cortito, note como estaba al rojo vivo y lo acaricie con mucha suavidad siguiendo a su mano entrelazada con la mía todo esto nos provocaba a los dos una excitación alucinante pero el lugar no nos dejaba para mucho más. Así estuvimos bastante tiempo, mientras ella se retorcía delante de mi para excitar mi rabo y no he de decir que lo consiguió sin mucho esfuerzo y al final terminamos yo con una mano en su panocha y ella con su mano en mi rabo.

Después de la aventurilla salimos de nuestro escondite y regresamos a nuestras respectivas casas, no quedamos en volver a encontrarnos para acabar lo que ese día empezamos pero ambos sabíamos que tarde o temprano lo haríamos, ya que los dos sentimos algo muy fuerte por el otro.

 

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