Eran las 2:30 de la mañana, Leonardo, Hannah y Gabriela salían del local, habían bailado y bebido mucho… y parecían mareados, así que Leonardo prefirió dejar el carro y pagar un taxi hasta su casa, y las chicas se fueron con el…
-¿saben que…? Nunca me había divertido tanto en mi vida- dijo Gabriela… algo borracha, arrastrando las palabras y haciendo gestos con su mano – y nunca me había mareado tan rápido-
-es por culpa del tequila…- dijo Leonardo
-o del movimiento de rotación de la tierra- dijo Hannah haciendo círculos con su mano a los que todos se echaron a reír…
-saben, tengo una botella de tequila en mi cuarto… podemos seguir bebiendo ahorita…- dijo Leonardo
-nooo yo no creo que pueda beber mas…- dijo Gabriela
-noo al contrario, tienes que seguir bebiendo para que el mareo se vaya- dijo Hannah
En ese momento Leonardo reviso su teléfono celular… tenia varias llamadas perdidas de Aiden… con un gesto de tristeza cerro la tapa de su cel y volvió a guardarlo…
-¿Qué ocurre?- pregunto Gabriela que noto el cambio de humor en Leonardo
-no es nada- dijo Leonardo
-seguro que es Aiden… no tiene nade que hacer y quiere joderle la vida a Leonardo- dijo Hannah que iba con su cabeza echada hacia atrás en el asiento
-no es nada, en serio, miren ya llegamos subamos a mi cuarto sin hacer ruido…-
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Leonardo no me contesto ninguna de las 20 llamadas… sabia que estaba muy molesto conmigo, y tenia razones para estarlo, pero en los años de conocernos, nunca me había ignorado las llamadas… supongo que las cosas habían cambiado desde ese día en el sauna… pero aun así no pensaba rendirme, tenia que hablar con el, decirle lo que sentía… pero no sabia si el algún día llegaría a escucharme…
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Leonardo y las chicas encontraron la botella de tequila y volvieron a beber otro poco, mientras conversaban sobre las aventuras que Leonardo y Hannah habían atreves de los años…
-¿recuerdas esa vez que entre al cuarto oscuro porque quería saber como coño era?- dijo Hannah ya mas ebria que consiente…
-see, ese día estabas súper borracha, recuerdo que había una pareja haciéndolo y tu le decías al activo “dale con cariño, que eso no es un trapo, es un ser humano”- dijo Leonardo imitando el tono de Hannah a lo que todos rieron en voz baja
-y recuerdas ese día que hiciste el striper en la zona vip, hasta Tony estaba babeando por ti…- dijo Hannah
-como olvidarlo, esa misma noche me tire a Tony en el baño durante su descanso- dijo Leonardo…
-waow, ustedes parecen haber hecho muchas locuras- dijo Gabriela tomando de un trago de tequila
-si, unas cuantas- dijo Leonardo
-son afortunados, debe ser divertido poder hacer lo que quieran sin preocuparse-
-oh vamos, tu también debes tener tus cuentos sucios… una travesura o una locura que no le cuentes a nadie…- dijo Hannah
-no ninguna-
-si claro, nadie se cree eso, nadie es santo en este mundo- dijo Leonardo – ¿dime que es lo mas loco que has hecho?-
-es en serio, no he hecho nada que valga la pena comentar…- dijo Gabriela
-¿bueno, que es lo mas loco que has pensado, o que te gustaría hacer…?- pregunto leo
-no lo se, creo que lo mas loco que se puede llegar a hacer es un trío- dijo
-¿nunca has hecho un trío?- pregunto Hannah acercándose mas a Gabriela
-no nunca-
-¿nunca lo has pensado?- dijo Leonardo –digo en hacerlo-
-la verdad me da como curiosidad, pero nunca me he atrevido- dijo Gabriela
En ese momento Hannah acerco sus labios a los de Gabriela y deposito un suave beso en ellos, para luego separarse y darle una de sus famosas sonrisas, luego Gabriela volteo su rostro y se encontró con el de Leonardo quien también juntos sus labios con los suyos pero de manera un poco mas ruda, dejando en claro su varonil forma de besar…
Poco a poco los besos fueron haciéndose mas largos entre los tres, hasta que llegaron a la cama… todos estaba muy mareados, y Hannah que se sentía mucho los efectos del alcohol se alejo un momento hacia el sillón y se recostó un rato mientras Leonardo y Gabriela seguían besándose sobre la cama… pero sin darse cuenta el mareo y el sueño los fue venciendo a los tres hasta finalmente quedarse dormidos… Hannah en el sillón de cuero negro, Gabriela sin franela solo con sus sujetadores y Leonardo también sin franela ambos en la cama… hasta el otro día…
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Como todas las mañana la señora de servicio preparaba un surtido de frutas variadas para el desayuno del joven Leonardo… era como un ritual de todos los días… justo a las 8 y media de la mañana subía las escaleras con bandeja en mano hacia la habitación del joven, sin embargo, a pesar de ser la misma rutina todos los días, siempre había algo diferente… los y las acompañantes del joven Leonardo… siempre era alguien diferente, y algunas veces, mas de una persona…
Para la señora Eleonor (la sirvienta) no era extraño entrar con la bandeja y encontrar a joven Leonardo con alguien en la cama… y ese día, no fue la excepción…
<<Dos mujeres esta vez>> pensó… mientras ponía la bandeja sobre el escritorio y buscaba en el closet un par de sabanas con las que cubrió a los tres cuerpos que yacían dormidos… <<tendré que traer mas para las señoritas>>
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Para Gabriela no era habitual despertar en un cuarto desconocido… y menos cuando no podía ni abrir los ojos… la cabeza le dolía un mundo y la luz del sol le molestaba… no recordaba que había pasado anoche… pero al voltear a ver en la habitación descubrió el cuerpo de Leonardo junto a ella en la cama y el de Hannah en el sillón…
En su mente los recuerdos de la noche anterior cruzaron como un rayo… causándole más dolor de cabeza y explotando en un grito… que rezumbo en los oídos de Leonardo y de Hannah
Leonardo arrugo la cara y tapo sus ojos con su mano… -quien quiera que seas, ¿podrías bajarle un poco al volumen por favor?-
-¡¿Cómo que quien quiera que seas Leonardo Lionheart?!- dijo Gabriela mas indignada todavía…
-¿Gabriela?, oh dios…. ¿que hice?- dijo Leonardo incorporándose en la cama…
En ese momento Hannah se levanto del sillón corriendo hacia el baño…
-procura llegar a tiempo…- dijo Leonardo
Dentro del baño se escuchaba como Hannah vomitaba sobre el toilette
-dios que hice… como pude dejar que esto pasara….- se decía Gabriela mas a si misma que a los demás
-ah que bien… ¿tu si recuerdas lo que paso? Porque yo estoy en blanco…- dijo Leonardo levantándose de la cama…
-¡¿Cómo que estas en blanco… y como puedes estar tan tranquilo…?!- dijo Gabriela levantándose también…
-bájenle al volumen… ¿quieren? Hay gente medio muerta por aquí- dijo Hannah saliendo del baño y arrojándose de nuevo sobre el sillón…
En ese momento la puerta volvió a abrirse, y al percatarse de eso Gabriela se arrojo a un lado de la cama como para evitar ser vista… sin embargo todos pudieron darse cuenta de este movimiento… a lo que Hannah y Leonardo se interrogaron con la mirada
-oh, ya despertó joven Leonardo, aquí le traigo algo de café, creo que le hará falta…- dijo la señora de servicio sosteniendo una jarra de café…
-gracias Eleonor…. Dijo Leonardo tomándola
-oh… que bien justo lo que necesito- dijo Hannah levantándose y sentándose sobre la cama…
Al salir la señora de servicio se cruzo con leona la madre de Leonardo…
-¿Eleonor, se levanto ya Leonardo?-
-si señora leona-
Leona abrió nuevamente la puerta para encontrarse a Leonardo y a Hannah sentados sobre la cama tomando café y a Gabriela nuevamente arrojándose al suelo detrás de la cama…
-buenos días hijo…- dijo Leona sonriendo ante la ocurrencia de Gabriela
-buenos días madre…- dijo Leonardo sonriendo
-buenos días señora Leona- dijo Hannah a lo que leona asintió con la cabeza
-señorita Thompson- dijo Leona -¿y quien es la otra simpática chica? –
-oh, disculpa Leona, ella es Gabriela, Gabriela Leona, mi madre…- dijo Leonardo
-mucho gusto…- dijo Gabriela asomándose tímidamente
-al gusto es mío…- dijo leona sonriendo amablemente… -¿hijo, que planes tienes para hoy?-
-por ahora no se, ¿y tu?-
-pienso salir con tu abuela toda la tarde, así que por favor no destruyas la casa mientras no estoy…- dijo Leona
-tranquila madre-
-y si vas a usar la piscina, que sea hoy… mañana vendrá francisco a limpiarla- dijo la madre de Leonardo saliendo del cuarto
-siii siii piscina…!!!- dijo Hannah rebotando sobre la cama…
-dios, que pena…- dijo Gabriela
-si te vas a tirar al suelo por cada persona que entre…. Deberías acostumbrarte a la pena- dijo Leonardo a lo que el y Hannah rieron…
-oh mira Eleonor ya había subido el desayuno- dijo Hannah sentándose en el escritorio tomando una rebanada de manzana
-¿eso significa que había entrado antes de que despertáramos?- pregunto Gabriela –que pena…-
-si- dijo Hannah
-por lo general siempre trae el desayuno antes de que yo despierte, me gusta despertar y tener el desayuno en mi cuarto…- dijo Leonardo
-¿quieres?- pregunto Hannah ofreciéndole de la bandeja de frutas a Gabriela
-esto les parece muy normal a ustedes- dijo tomando una uva y sentándose sobre la cama…
-mmm podría decirse que es un típico despertar- dijo Leonardo
-deberías llamar a David e invitarlo a venir a la piscina- dijo Hannah tomando un sorbo de su café
-no se, las cosas han estado muy intensas entre nosotros últimamente, tal vez debería dejar que se enfríen un poco…-
-¿para que? Las cosas deben hacerse así calientes- dijo Hannah
-oigan, creo que mejor me voy… mi familia debe estar preocupada y…- dijo Gabriela
-espera, porque no te quedas, ya son casi las 12, puedes llamar a tu casa y pasar la tarde en la piscina con nosotros- dijo Leonardo
-no lo se, estoy confundida, no debí salir anoche…-
-en realidad creo que lo que necesitas es salir mas seguido, anda anímate, la pasaremos bien- dijo Hannah
-esta bien… déjame llamar a casa- dijo Gabriela sentándose sobre el escritorio y tomando el teléfono
-¿entonces, llamaras a David?- pregunto a Hannah a Leonardo que estaba sentado junto a ella en la cama
-tal vez… es que, David es un poco lento, un poco aburrido, ¿sabes? Creo que el no pertenece a nuestro mundo…- dijo Leonardo
-extrañas a Aiden…- dijo Hannah mas como una afirmación que como una pregunta
-si… un poco, no puedo negarlo-
-no es de extrañar, ustedes pasaban todo el tiempo juntos-
-si, es raro, pero sin el… mi vida no es nada divertida, siento como si faltara algo… – dijo Leonardo
-no pienses en eso, recuerda lo que dijo, el es un idiota que no merece que estés así por el, así que si no llamas tu a David lo hare yo…- dijo Hannah
-esta bien, lo llamare…- dijo Leonardo
-bien… voy al baño, enseguida vuelvo- dijo Hannah levantándose
-¿oye leo que es esto?- dijo Gabriela sosteniendo un especie de libro que estaba sobre el escritorio
-oh, ese es mi portafolio, ahí están las mejores fotografías que he tomado- dijo Leonardo
-son realmente buenas- dijo Gabriela ojeándolo –muy buenas-
-¿tu crees?-
-claro, deberías solicitar una beca en la academia de artes graficas, seguro entrarías sin problemas-
-ya lo hice, una vez… pero tuve que suspender- dijo Leonardo
-¿Por qué?-
-Leona estuvo enferma del corazón, tuvieron que operarla, el estrés era mucho, y no tenia tiempo para eso… – dijo Leonardo
-entiendo… pero tal vez deberías volver a intentarlo…-dijo Gabriela –aceptémoslo, solo trabajas en el estudio para hacer algo, porque viendo donde vives, tu realmente no necesitas el dinero…-
-tengo miedo- dijo Leonardo
-¿de que?-
-de que no me acepten, o de no ser los suficientemente bueno… de que no este listo para esto, y termine destruyendo mi futuro…- dijo Leonardo
-no seas tonto leo, ¿piensas quedarte sin hacer nada? –
-por ahora si… cambiemos de tema ¿quieres?, mejor bajemos a la piscina…- dijo Leonardo saliendo del cuarto
Gabriela sabia que el talento que había en esas fotos no debía dejarlo pasar… Leonardo era realmente muy bueno… sabia que le molestaría un poco, pero que después le agradecería…- así que tomando algunas fotos del portafolio las guardo en su bolso y salió del cuarto…
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-¿Aiden que venimos a hacer aquí?- pregunto Patrick sentado en el asiento del copiloto –sabes que Leonardo no quiere saber nada de ti…-
-tu mismo dijiste que debía buscarlo- dijo Aiden estacionando el auto frente a la casa de Leonardo
-si, pero me refería a llamarlo, pedirle que hablaran, un almuerzo, un café, algo, no venir a su casa, sabes que no le gustan las escenas en su casa, ¿Qué tal si su madre esta?- dijo Patrick
-no, no esta su auto ¿ves? Ahora deja de balbucear y vamos- dijo Aiden bajando del auto
-cuando me dijiste que necesitabas que te acompañara a algo urgente- pensé que era al medico, no a hacer esta locura…- dijo Patrick bajando también del auto y caminando junto a Aiden
-si, se que suena tonto, pero no puedo hacer esto solo-
-Aiden, detente, espera un segundo, ¿Qué piensas hacer, que vas decirle?- dijo Patrick tomándolo por el brazo
-no lo se, solo quiero verlo, decirle que lo siento, decirle cuanto lo amo…- dijo Aiden pasando sus manos por su cabeza en señal de desesperación
-sabes que el esta muy molesto… podrías lastimarlo o enojarlo mas de lo que ya esta…- dijo Patrick
-¡¿y que quieres que haga, que lo deje, que me olvide de el?!- dijo Aiden
-¡por supuesto que no!, solo piensa un poco la jugada que vas a hacer Aiden… puede que Leonardo ya no quiera nada contigo… toma las cosas mas despacio…- dijo Patrick
-no, lo siento no puedo…- dijo Aiden empujando a Patrick que cayo al piso y Aiden salió corriendo hacia la casa… pero antes de llegar a la puerta vio a Leonardo abriendo la puerta a un chico que se le hacia muy familiar… Leonardo saludo al chico con un pequeño beso en la boca y lo invito a pasar… todo esto sin percatarse que a unos metros Aiden lo observaba inmóvil…
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Eran un poco mas de las 12 del medio día, ya nos encontrábamos en la piscina cuando sonó el timbre, sabia que Eleonor debía estar ocupada pues el timbre sonó un par de veces, así que me levante y fui a abrir la puerta… era David, había llegado rápido, con un pequeño beso nos saludamos y lo invite a entrar…
-adelante pasa…- dije
-permiso- dijo David entrando a lo que Hannah inmediatamente lo llamo hacia la piscina
Antes de cerrar la puerta lo vi parado en la reja de entrada…
Me miraba con sus profundos ojos… pero esta vez llenos de una tristeza nunca vista en el… podía casi intuir el nudo en la garganta que sentía en ese momento…
Nuestras miradas se cruzaron por unos segundos que parecieron eternos… solo para luego separarse cuando miro a ambos lados con la vista perdida… paso su mano por su cabeza rapada y metió sus manos en los bolsillos… sin volver a verme… dio media vuelta y volvió sobre sus pasos…
En ese momento Patrick llego corriendo y al verlo lo tomo del hombro, a lo que Aiden se soltó de mala gana… en un corto instante pude ver su rostro y ver como sus lagrimas caigan mientras pateaba el cesto de la basura y luego siguió caminando… Patrick me miro y luego a el… vacilo un segundo, parecía querer venir a decirme algo, pero se fue tras el… ambos cruzaron y los perdí de vista
-¿ocurre algo leo?- dijo Hannah tomándome del brazo y jalándome hacia adentro…
-no, nada…- dije entrando… mi corazón latía a mil, aun no terminaba de procesar lo que había sucedido, Aiden había venido… todo el enojo que había sentido durante la semana se desvaneció en un instante, con solo verlo… y se había convertido en dolor al verlo llorar…
Continuara…