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Jugando con mis amigas - Parte 2

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A solas con Cami

Unos cuantos días después de nuestro juego previo, estábamos solas Camila y yo, nuevamente en mi casa.

Nos habíamos visto algunas veces, pero solo casualmente, no habíamos hablado por supuesto de lo sucedido anteriormente, veníamos charlando de cosas sin importancia, pero me puedo dar cuenta de que por algún motivo ella se sentía incomoda.

– qué te pasa? – le pregunto

-no… nada… me quede mal por lo de la otra vez, vos ya sabes que yo soy muy tímida, haber estado desnuda frente a todas ustedes me daba mucha vergüenza de por sí, pero además me hiciste estar parada en la puerta, así como estaba…espero que no pasara nadie en ese momento… si alguien me vio me muero de vergüenza…– me contesta

-Bueno... Fue un juego, entre nosotras que estemos desnudas no es gran cosa, somos todas mujeres…el día estaba feo y oscuro, mi calle no es tan transitada…estoy segura de que nadie te vio, además fue solo durante un minuto, la prueba extra es para darle más gracia al juego y que no sea solo sacarse la ropa- le digo como para intentar consolarla.

-si eso sí, pero vos sabes que yo soy muy sensible con mi cuerpo soy la única que no tiene casi nada de lolas… y vos con tus tetazas tamaño pelota de básquet, ya sabes que te tengo envidia… Me tenés que dar la oportunidad de vengarme, te juego una revancha nosotras dos solas- me dice

Su reto me sorprendió, yo no tenía planeado repetir la experiencia y además como ella misma me dijo, es la más tímida de todas, podría haberlo esperado de cualquiera de mis otras amigas menos de ella, y además esta vez no habíamos tomado ni nada, por supuesto yo tenía ganas de volverla a ver desnuda y ya estaba comenzando a pensar que nueva perversión le iba a pedir como prenda final si le volvía a ganar, la situación me parecía raro sobre todo porque ella es la que peor juega y yo la que mejor lo hago, pero acepto su reto (a ver si se arrepiente ji, ji) tomo las cartas y empezamos a jugar.

Nuevamente, se dio, que ya estábamos ambas con la misma cantidad de prendas iniciales; se aclaró otra ves que no valía taparse y que el juego terminaba una vez que ya estando desnuda perdieras otra vez, por lo que podías ganar aun ya habiendo quedado desnuda.

Yo tenía puesto al igual que en la ocasión anterior un jogging de color gris una remera blanca, zapatillas medias y obvio mis interiores

Ella tenía puesto una blusa color blanco y una pollera larga hasta sus rodillas y al igual que yo zapatillas medias y su ropa interior.

Empieza el juego y las primeras dos partidas trascurren rápidamente con dos victorias muy fáciles por parte mía por lo que ella es la primera en quedar con sus pies al descubierto.

La tercera partida empieza también con ventaja para mí, pero luego ella me la empieza a dar vuelta y con un final reñido me la termina ganando por lo que me toca sacarme las zapatillas.

En la siguiente ella pierde en una partida muy pareja y se saca su blusa, por lo que puedo ver su corpiño, que es de color blanco.

En la que sigue nuevamente estoy de muy buena suerte y gano sin dificultades, ella debe quitarse su pollera y puedo ver su bombacha que es de color blanco con un motivo de “Hello Kitty” en el frente (Nota: las dos somos muy fanáticas, yo personalmente tengo un montón de cosas de Kitty y la ropa interior no es la excepción, le pase a ella el gusto, aunque no esperaba verla con una bombacha de Kitty puesta).

Luego de esa partida empiezo con una racha pésima donde pierdo mis medias, mi remera y mi jogging en tres partidas que me gana ella con facilidad.

Mis interiores eran de color blanco también ambas partes.

Posteriormente, aunque todavía sigo de mala suerte, no sé cómo, pero me las arreglo para ganarle en una partida ajustada más por mi mala suerte que por el buen juego de ella.

Por lo que ella debe quitarse su corpiño.

Luego de haber podido ganar esa partida y confiada de que mi suerte iba a cambiar y que aun con mala suerte había podido ser victoriosa yo ya la podía imaginar desnuda y haciendo alguna prenda.

Luego de eso intercambiamos una victoria cada una por lo que ella quedo desnuda y yo aún conservaba mi bombacha.

Sin embargo, vuelve otra vez mi mala suerte y pierdo las dos siguientes, por lo que me también quedo desnuda y esta vez me iba a tocar a mi tener que pagar una prenda adicional.

Nuevamente y tal como había ocurrido en nuestro juego anterior acordamos que teníamos que quedarnos así desnudas como estábamos esta vez las dos hasta la hora de dormir, pero ya tenía curiosidad por saber que prenda me iba a imponer.

Ella me dice –quiero que te muestres desnuda en un lugar público, no hace falta que sea del todo.

La idea de mostrarme en un lugar con gente no me agradaba nada, aun si no era del todo, además no quería causar un escándalo.

-tenés que mostrar algo en un lugar que te vean, podes mostrar esas tetazas que tenés- me dice.

Yo le digo- aun si es solo algo rápido va a ser demasiado obvio lo que estoy haciendo, quiero cumplir con la prenda pero tiene que haber algo que pueda hacer y que sea más casual.

-ok…entonces vas a salir con la pollera o vestido o algo similar que sea lo más corto posible y sin bombacha a la calle, tenés que ir hasta algún lugar público como una plaza o algo así, y ahí te vas a tener que sentar y abrirte bien de piernas de modo que se pueda ver tu vagina.

Yo acepto a esto último aunque la idea no me gustaba ni medio, pero así es el juego, yo iba a arreglar con ella para que pudiera ver cuando cumpla la prenda

Como habíamos acordado pasamos el resto del día desnudas charlando, viendo pelis… ahora ella estaba de muy buen humor…claro había conseguido su revancha, y ahora era yo la preocupada por lo que iba a tener que hacer.

Yapa: Pagando la prenda.

Después de que habían pasado varios días, en que por estar ocupada o estar demasiado feos no se pudo hacer nada, finalmente me decido a que debo pagar la prenda como corresponde, además si lo hacía habría un mundo de nuevos juegos que podrían venir en un futuro (Nota: estén atentos que ya voy a escribir sobre eso) por lo tanto habiendo tomado la decisión la llamo.

Viene a mi casa, yo estoy vestido con un remerón color azul, zapatillas y tal como habíamos acordado no llevaba ropa interior.

-así está bien? Más corto imposible, se me va a ver todo hasta caminado no te digo nada sentada y más aún si además me abro de piernas, aunque sea solo un poco – le digo.

-sí... Estas bien… entonces salimos? A dónde vamos? Tiene que ser un lugar con gente, de lo contrario no vale- contesta.

-claro obvio, esa es la gracia de tu prenda y la pienso respetar, vamos a ir hasta la plaza, hoy está lindo y a esta hora debe haber suficiente gente- le digo.

Ella me acompaña hasta la plaza, se me hacía difícil caminar sin andar mostrando todo de antemano, cuando llegamos, veo un lugar con dos bancos uno frente al otro, le pido que ella se siente en el de enfrente y yo me siento en el otro mirando hacia ella, había bastante gente, tal cual lo que estaba planteado.

Yo saco mi celular y me hago la descuidada y abro las piernas un poco, la miro y con la cabeza desaprueba. Sigo jodiendo con el celular para disimular y me acomodo esta vez bien abierta de piernas, luego de estar un rato jugueteo cruzando y descruzando mis piernas a lo “bajos instintos” pero a diferencia del papel de ella me aseguro de permanecer con mis piernas abiertas lo más posible.

Luego ella se me acerca y me pide que cambiemos lados y me pide que esta vez no solo me abra bien de piernas sino que además me levante un poco el remerón para que pueda verse bien todo.

Ya esto a mí me parecía bastante jodido, pero me dirijo al banco que ocupaba ella, luego de un rato sentadas, yo saco nuevamente, mi celular para disimular.

Vuelvo a hacer lo mismo que antes, pero esta vez en el acomodo y me levanto el remerón tal como ella me lo había pedido, paso un tiempo lo más largo que pude en esa posición y una vez que considero que ya es suficiente me acerco a ella.

-creo que con esto ya está mas que pagada la prenda…y te habrás divertido- le digo.

-si, así es- me dice.

Próximamente continuará.

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