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Conectando de nuevo

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Desde que volvieron a intentar ser uno carnalmente después de esa casi ruptura, Daisuke no volvió a mencionar a Takeru ni a aceecarse a él, aún de todas formas, lo tenía muy facil, Takeru llevaba días en los que no se acercaba a Daisuke, su atención estaba puesta ahora totalmente en Hikari mostrandole su sex appeal y tonteando, algo que molestaba a Daisuke, tambien quería atención, sentía celos por los dos pero lo disimulaba, ahora estaba bien con Ken y aquello debía durar

Precisamente este último sentía la extrema necesidad de conectarse emocionalmente con Daisuke, recuperar ese profundo vínculo que tenían y que poquito a poco lo estaban recuperando, aunque muy de vez en cuando existieran las dudas cuando no estaban juntos, confiaba en su chico pero la brecha seguía muy reciente.

Quería hacer algo por él, por Daisuke, por los dos, por esa pareja que caminaba un poco por la cuerda floja, recordó tambien que Daisuke llevaba tiempo pidiendole algo para que la llama no se acabase, lo llevó todo en una bolsa para luego utilizarlo, cogió el tren y llegó al apartamento de Daisuke, llamó al telefonillo y esperó a que este abriese la puerta

Al abrirle, no se esperaba a Ken ahí

—¿Tu? ¿Aquí?

—¿Puedo pasar?

—Claro... Pero ¿Para que?

—Necesito que hablemos

—¿Ahora?

—Quiero que sea ahora mismo, ¿o acaso no quieres verme por estar con alguien?

—Estoy solo

—Lo sé, solo quería asegurarme que decias la verdad

—¿Porqué no has avisado como siempre haces?

—Quería saber si cumplías con tu palabra

Fueron dos indirectas que le costó digerir a Daisuke muchísimo, Ken seguía muy herido a pesar de todo

—¿Porque te has dignado a venir ahora y hablar?

—He estado viendo en silencio tus cambios y he estado reflexionando sobre todo esto, ordenando en mi cabeza todo lo que tengo planeado decirte, yo tambien se trabajar en secreto mis planes

—¿No confías en mi ya?

—Quiero hacerlo pero a veces me es muy dificil hacerlo

—¿Estás al acecho de si vuelvo a caer?

—Exactamente, nunca se sabe contigo

La relación se había vuelto un poco más tensa pero a la vez más madura, el silencio era el protagonista del momento

—Lo siento

—Por eso estoy aquí, para que hablemos un poco del tema

—No creo que sea bueno para nosotros, todo está muy reciente

—En cambio yo si pienso que puede ser muy satisfactorio hablarlo, no estoy aquí para recriminarte nada, estoy aquí para volver a conectarnos en todas las formas posibles, todo si estás dispuesto a colaborar y si quieres

—Claro que quiero

—No te obligo a hacerlo

—No quiero que lo hagas, tambien quiero hablar y escuchar lo que tienes que decirme -Le cogió una mano llevandosela a su corazón, Ken la mantuvo en el pecho de él pero la apartó al segundo.

Se sentó en la silla del comedor, Daisuke estaba un poco aturdido pero tomó ejemplo, se sentó en frente de él, se miraron a los ojos, fijamente, en silencio, Daisuke se sentía cohibido, tanto que bajó la cabeza avergonzado.

—¿Porqué la bajas?

—Me impones mucho

—Me conoces desde siempre

—Pero cuando me miras de arriba a abajo, sin inmutarte, sin hablar, me pones muy nervioso

—Solo estoy estudiandote

—No sé que quieres decir

—Estudio tu comportamiento, tu manera de ser, quiero ver si ya todo cambió

—Nada cambió, sigo siendo el mismo

—Eso lo decidiré yo ¿No crees?

--¿Y qué ves ahora?

—Aparentemente veo que sigues sigues siendo el mismo pero tal vez solo estés fingiendo, es dificil creer.

—Ken, me incomoda mucho esta situación

—Tu la provocaste

—Lo... Lo siento

—¿Eso es todo lo que tienes que decir? -su voz además de fría sonaba muy autoritaria.

—¿Sabes que estás en mi casa? -Contestó Daisuke defendiendose un poco sabiendo bastante bien que no tenía derecho a hacerlo

—Soy consciente ¿Tambien me vas a echar por decirte las verdades a la cara?

—No.. -tenía las de perder, así que una vez más bajó la cabeza

—La verdad duele ¿cierto?

—¿Porqué eres así? No te reconozco

—Lo mismo puedo decir yo sobre tí

Otra vez un silencio cada vez más incómodo

—Quiero llorar

—Eres un afortunado, yo ya descargué toda mi ira, rabia, dudas y un monton de lagrimas en todo el tiempo que me eatuviste engañando con Takeru

—No digas ese nombre

—¿Te molesta?

—Demasiado

—No es solo él, tu tambien colaboraste, pero parece que antes no te importaba aquel nombre

Las dagas voladoras en forma de indirecta directa iban volando en aquella habitación, Daisuke las aguantaba todas una detrás de otra

—Solo tengo algo que decirte, ¿como hemos llegado hasta aquí? Hasta el punto de casi no reconocernos

Las palabras de Ken sonaban tan duras que Daisuke no sabía como responder

—Quiero que contestes a unas cuantas preguntas sobre todo esto

—¿ Porque te empeñas en hacernos daño?

—Disculpa, el que empezó todo eres tú

—Ojalá nunca hubiese sucedido esto

—¿Acaso no sabías que ocurriría? Una infidelidad siempre se descubre

Otra vez silencio

—¿La obsesión por Takeru te cegaba?

—No digas más ese nombre

—¿Te sigue incomodando?

—No quiero oir hablar de él

—Pensé que te gustaba oir aquel nombre

—Ya basta por favor, deja de arrastrarme hacia él, quiero olvidarle

—No se puede olvidar de la noche a la mañana y menos si sigues viendo a esa persona casi todos los días

—Deja el pasado, mira hacia adelante

—No puedo mirar hacia adelante porque si lo miro sé que no vas a estar ahí conmigo, estarás con él -Dejó escapar su complejo de inseguridad

—insisto, no te reconozco..

—Son inseguridades que tu mismo has hecho que aparezcan de nuevo, por un minuto de libertad esto es lo que ocasionado, un socabon en mi

Hablaba para él pero no hacia él, el escenario era muy lúgrube, hacia sol aún estando todo en penumbra y los rayos de sol iluminaban su rostro pálido dandole más claridad a sus ojos

—Me das miedo

—Solo te ofrezco lo que quieres, dolor, sufrir, soy igual que Takeru, tambien te ofrezco dolor

Se levantó de la silla de golpe, creando más tensión en los dos

—Por favor, Ken vete, solo estás aquí para hacerme dentir como una mierda

—Es que lo eres

—Ya sé que lo soy, pero pienso que no merezco tanto

—¿Crees que no? Descubrir que

—Por favor no me hagas recordarlo

—Entonces borra de esa boca que no mereces tanto, eliminalo para siempre

—Te ruego que te calmes, pareces que has estado esperando hasta el día de hoy para echarme toda tu mierda encima

—La mierda que tú has provocado

—Esto es tan extraño no te conozco.

—En realidad ninguno de los dos terminamos de conocernos

—No quiero sentir más este horrible sensación

—Porque eres humano, te estoy jaciendo sentir pero a otro nivel, esto es la mínima parte de lo que he has hecho sentir, además... ¿A ti no te gustaba el dolor, yo te ofrezco dolor emocional, dolor del que se siente en el alma, es mucho peor que la física, es mucho peor que esas marcas que llevas en tu piel

—Es muy desagradable, se siente mal, me siento muy mal

—Este es el dolor que yo he estado sintiendo, duele, claro que duele, duele demasiado

La tensión unido a la presión era cada vez mas fuerte para Daisuke, odiaba ser tan debil y sacar a relucir su parte más sensible, acabó llorando, destrozado, dandose cuenta del daño tan horrible que le hizo a Ken y él ni se saba cuenta

—¿Porqué no me di cuenta de esto? -apretó sus puños golpeandolos en la mesa

—La obsesión no te dejaba ver, estabas intoxicado por la avaricia, el egoismo, la posesión. El querer algo que no te pertenecía

Daisuke siguió llorando pero Ken esta vez si necesitó estar a su lado, se levantó para acercarse a él, le cogió una mano y le hizo levantarle

—Creeme yo no soy aquí el malo, tu no eres el malo, es esa voz de fuera la que ha hecho que ahora estemos aquí

—Lo siento, lo siento mucho, lo siento -Necesitó abrazarle y lo hizo, se agarró a él como niño pequeño

—No me pidas perdón, no te disculpes, es un infierno que tu solo has provocado y va a seguir siempre así

—No, no, no quiero...

—No puedes decir eso, Takeru te buscará, eres su presa

Continuaba sollozando en sus brazos

—Ahora sientes dolor y frustración, pero quiero ayudarte a llevarlo correctamente, quiero preguntarte ¿Qué es lo que sentías al estar con él?

Daisuke dejó de llorar y ahora se mantenía callado con esa pregunta

—Puedes contar sin sentirte cohibido.

—Me resulta dificil decirlo contigo presente

—Hazlo, confía

Se lo pensó unos segundos y lo pudo decir al final

—L... Libertad...

—¿sentías que con él podías alcanzar todo?

—Por favor Ken...

—Responde por favor

—Me sentía bien, consiguiendo lo que necesitaba, tampoco pensaba mucho, me movía por mis instintos

—Esa necesidad es la que quiero transmitirte, quiero hacerte sentir la misma sensación

Dejo de aferrarse a él y le dijo

—Desvisteme, mira lo que hay debajo de mis ropas, no preguntes, solo hazlo

Daisuke no entendía muy bien pero si él se lo pidió no se podía negar, le fué desabrochando la camisa poco a poco hasta asombrarse totalmente

—!Oh!

—Desabrocha mis pantalones

Obedeció, se los bajó y Ken terminó quitandose ambas prendas de ropa

—Ropa interior, lencería de mujer, como me has pedido en muchísimas ocasiones

Daisuke no dejaba de mirarle muy asombrado, delante de él tenía a Ken con un sujetador donde se transparentaban muchísimo los pezones y en la parte de abajo un tanga de color rojo muy pequeño donde el pene era lo que más se veía ahí abajo, ropa de mujer en un cuerpo afeminado como él

—¿Quieres que yo...?

—No, no será como siempre, es mi uniforme para utilizarlo sobre tí, ahora quiero tocar profundamente tus heridas, sentirlas

—Apenas son visibles

—No me importa, quiero ver correctamente

—¿Tambien me harás daño?

—No quiero ser igual a él, quiero crear algo emocional entre nosotros, solo quiero volver a conectarnos

—No entiendo...entonces has provocado todo esto para llegar hasta aquí

- Exactamente, las emociones siempre son clave en nosotros, lo emocional nos mueve más que cualquier palabra o daño físico

—Entonces... ¿en realidad estás contento conmigo?

—No, solo estoy más consciente de lo que haces

—No entiendo lo que dices, pero me gusta

—No espero que lo entiendas -Le removió un poco la camisa para dejar ver sus cicatrices pasando un dedo por ellas

—¿Qué es lo mas excitante que sentiste ese día?

—Usó unas cuerdas...

—¿Que sentías?

—Fricción... Una sensación muy extraña

—¿Fué placentera para ti?

—S… Sí

—Podemos volver a repetirlo -Le ofreció la bolsa que habia traido y Daisuke metió la mano, al rozar con sus dedos la cuerda observó a Ken mientras la sacaba

—Quiero que los dos sintamos lo mismo, conectarnos con la sensación

La cogió ahora él y fue andando hasta entrar al cuarto de Daisuke andando como si fuera una chica, miró hacia atrás y le descubrió quieto sin pestañear.

—¿Dejarás de mirarme lascivamente y te reunirás conmigo?

—Sí, sí, perdona

Entró en su cuarto con Ken ya dentro

—Quedate quieto y desvistete

Daisuke tragó saliva y se quedó en silencio quitandose lentamente la ropa, su vulnerabilidad creció al verse completamente desnudo y Ken acercandose a él, en silencio, echandole una mirada rápida de arriba a abajo

—Te veo pensativo

—No sé que quieres hacer

--¿Confías en mi?

—No sé que quieres decir con eso, me confundes

—No soy Takeru, no quiero dejar marcas en tu cuerpo, quiero dejarlas en tu alma y la mía

Los dos se quedaron mirando, Daisuke a veces no alcanzaba el estado emocional de Ken a igual que este no entendía a veces el grado de dolor donde quería llegar Daisuke

—Dejate llevar -Volvió a decir, y con un dedo le hizo sentarse poco a poco en la silla que le habia puesto detrás de él, con las cuerdas en la mano se puso en frente

—¿Te gusta lo que tus ojos ven?

—Tu cuerpo me vuelve tan loco

—puedes manejarlo, está a tu disposicion

Se posicionó sobre sus rodillas, sentado como él y la tela del tanga pasó rozando su pene provocando la erección poco a poco

—Extrañaba tu suavidad conmigo

—¿Te gusta? ¿sientes como sube?

—Uff… claro que sí

Flexionó sus piernas arriba y abajo, tambien peovocando su propia erección contra las venas rugosas del pene de su chico

—Siento calor

—¿disfrutas nuestro intento de conexión?

—Sigue... Sigue...

Daisuke ya se estaba viniendo arriba, los pezones de Ken se veían mucho mas, todo en ese momento se veía mas visible y el calor subiendo, ese momento tan algido fué parado por Ken dejando de rozar sensualmente

—Dejame usar tu cuerpo a mi antojo -Dijo con la cuerda en su mano

Ahora el cuerpo de Daisuke era mas vulnerable y todo y no desaprovechó esa oportunidad de unirse a él, le era necesario la capacidad de volver a sentir con los cinco sentidos

Fueron necesarios 15 minutos para que las cuerdas estuvieran puestas por todo el cuerpo de Daisuke, de nuevo de puso en pie para la parte de arriba y de nuevo sentado para la parte de abajo, hasta las rodillas, la gruesa cuerda pasaban por los om9platos, costillas, testiculos, raja del ano, lugar que al sentarse Daisuke sentía incomodidad ya que la cuerda estaba debajo de su culo, tambien clavicula y por supuesto los pezones, no hablaban, pero compartian la respiración controlada en todo momento

—Siento tanta necesidad de tí ahora mismo -Le abrazó amablemente, Daisuke ahora permanecía inmovil, sus manos estaban tambirn atadas hacia atrás

—Me vuelvo tan insignificante contigo, este sentimiento al verte, al sentirte, ver como vigilas mis movimirntos con mis manos

—Me gustatn tus manos sobre mi… porque se que no me vas a hacer daño nada ha cambiado

—¿Todo es igual a esa otra vez?

—Esta vez es distinto, estás tú

—La calidez sigue ahí, ese Verano que se forma cuando te toco... Todo es mas caliente, me vuelvo mas emocional de lo que soy ya

Ken necesitaba llorar, atar a Daisuke le afectó sentimentalmente, más de lo que pensaba que iba a sentir, era una sensación rara pero debía seguir con todo

—Dime como las quieres, ¿más fuerte o mas flojo?

—Más fuerte -Como siempre arriesgando

—Tambien lo deseo, quiero recorrer con mis manos la señal de las cuerdas, quiero verlas incrustadas en tu carne

Solo tuvo que apretarlas un poco más, aunque aquello le gustaba, la expresión de Daisuke era un poco de incomodidad

—Eternizando el tacto con sabor a "mío" -Abrazó más fuerte, Las cuerdas eran una con el cuerpo de Daisuke,los pezones estaban mas rectos y mas rojos debido a la presión de las cuerdas.

Ya había pequeñas marcas de ellas en el estómago o en los brazos, qué placer era para Ken el levantar un poco las cuerdas y pasear sus dedos por la señal que dejaban

—Mío... Mío... Mío, necesidad de acariciar, necesidad de tu piel, necesidad de sentir

La parte emocional de Ken se iba haciendo más grande a medida que tocaba, conocia esa piel perfectamente, sabia donde tocar para hacer estremecer un poco a Daisuke, el tacto mas la sensibilidad de cada uno crearon ese momento mágico e íntimo que los dos pedían, Ken volvía a ser un poco dependiente de Daisuke y de su cuerpo, una vez que habia todo vuelto a ser más o menos a como era antes, Ken sacó un poco su ansiedad por él

—Necesito sentir tus reacciones, necesito unirme a tus reacciones, siento que me estés viendo como un loco desesoerado pero no tienes ni idea de lo mucho que deseaba tocarte intimamente

—No te preocupes, me gusta -Ken se arrodilló ante él

—Levantate por favor-. Yo soy el que debería estar arrodillado

—No puedo, tu me dominas con tu cuerpo. Me hace ser un adicto a tí

—No digas eso

—Besame. Por favor

—El que debería estar desesperado y pedirtelo soy yo -Ahora Daisuke estaba tranquilo, Ken le proporcionaba comfort, como antes, como siempre

—Estoy ansioso de ti, no puedo ocultar este desorden mental que tengo

Se unieron en un suave beso, al estar Daisuke maniatado totalmente no podía hacer mucho asi que Ken le metió la lengua hasta el fondo dando ligeros besos de vez en cuando

Detrás de la boca ya era el turno de las demás partes del cuerpo, ahora con un poco más de intensidad

En primer lugar queria hacerle sentir mil y una emociones así que primero se dirigió a ese pene erecto con la cuerda tocando la piel del prepucio y la punta de la uretra, agarró un poco de cuerda, escupió en la extensión y luego la soltó en su sitio, esa mezcla de saliva lubricando y las cuerdas mezclandose era algo muy sensual, eso sumado que Ken de rodillas de nuevo ordeñando aquel pene con mucha concentración, una mano arriba una mano abajo, dos manos en el glande y luego dos dedos en la uretra, provocando la erupción, prvocando que saltara una fuente de semen que se hizo realidad, cayó sobre la transparencia que Ken llevaba y un poco a su cara y sus manos.

—Extrañaba tanto la dedicación que le ponias a estas cosas...

—Lo íntimo siempre me hace esforzarme más, es para tí

—Gracias

—Aunque luego lo olvides y busques otras cosas en los brazos de tu amante

—Estaba loco

—Vas a seguir estando loco, pero yo tengo algo que jamás él podrá ofrecerte

—Un cuerpo perfecto

—No, el arte de seducir sacando provecho de lo que me potencia sexualmente

—Vamos, tu cuerpo -Rió timidamente

—Así es

—Siempre quieres quedar por encima, que orgulloso eres

—El no estar de acuerdo nunca en nada es lo que hace que se crea ese vinculo ¿No crees?

Se sonrieron en complicidad y Ken continuó besando por ptras zonas, ahora le tocaba a los muslos apretados y rojos por la fuerza en que estaban apretadas las cuerdas, Ken y su lengua iban dedicandole tiempo con la lengua los labios y las manos, suavidad extrema, lo sificiente para mandar a su novio a la locura

--Dime a que saben mis besos

Masajeó fuerte las señales chupando por todas las zonas, haciendo al final que los muslos uedasen empapados y una erección manteniendola en alto

—Habla

Daisuke estaba ocupado recibiendo todo el placer que llegaba a su cuerpo, Ken conocía cada rincon, ya que él habia sido el primero en corromper su cuerpo.

—Dime cómo de cerca te quedas del infierno al tener tu boca en la necesidad casi de mi boca.. -Lamía cada zona, apretaba mas con las manos y sus dedos mordian la carne donde estaban las señales, Daisuke echaba la cabeza hacia atrás, cerrando los ojos, sintiendo tpdo caliente y cada vez más intenso, Ken era especial para hacer el amor

—Esa O en tu boca... De Orgasmo

—Lo haces tan diferente... Ah...

—Siempre provocandome un fuerte vaiven de sentimientos y es lo que quiero transmitirtelo, al final, me eligirás siempre a mi

—¿C... Como puedes... Mmm estar.... Ta... Tan seguro?

—Es seguro, nos pertenecemos, fuimos somos y seremos siempre uno

Ahora fué mas abajo por las piernas hasta llegar a la punta de los pies, al dueño le temblaba esa zona, sentía algo muy fuerte, Ken bajaba con la lengua hacia abajo dejando rastros de saliva, los dos estaban muy cachondos, algo tan inusual como besos en las piernas les estaban encendiendo cada vez más

Cuando llegó a los dedos de los pies los fué besando tambien uno por uno tambien con pequeños masajes, manos labios y lengua con saliva era lo que más se trabajaba ahora mismo

—Deja de chupar con esa cara -La respiración era entrecortada

—No puedo… no puedo... No puedo -Se calentaba más con cada lengüetazo en cada dedo

—No me mires... No me mires... No me mires así -Casi babeaba

--Y tu deja de hacer fuerza, tus pies son míos ahora

—No puedo... Me excito... Estoy muy caliente... Mmmmm

—Dicen que en los pies están los organos del cuerpo..ahora voy a provocarte una severa alectricidad y solo estoy lamiendo

Es lo que hizo, mordía los pies y Daisuke temblaba y se arqueaba

—¿¿Tan bien lo hago??

—Jodidamente bien...

—¿Esto tambien puede hacerlo tu amante?

—No, solo quiere sexo...

—Me alegra saber eso, yo te ofrezco sexo amor y vaivenes emocionales y sensaciones de todo tipo, lo suficiente para pellizcar tu alma y aferrarme a ella al igual que tú a mi.

La temperatura era incomodamente sexual. Muy apetecible, la saliva de Ken hacia puente entre su boca y pies sin dejar de mirar a su chico totalmente excitado y jadeando abriendo la boca totalmente atado y humedo sudando

De repente se levantó y se posicionó detrás de él, era el turno de toquetear los pezones, por culpa de la cuerda que estaba totalmente aprisionada en la carne, ambos estaban rojos y muy sensibles, en especial la punta de cada uno, jugó con los dedos a tocarlos y torturarlos, Daisuke las sentía más que antes aquellas manos haciendo barbaridades, intercambiaba con las cuerdas y los pezones lamiendo las marcas que dejaban en el lugar, Daisuke estaba nadando en el placer mas absoluto

No hablaban. No era necesario para hacer el momento erótico... Hasta que Ken le dió por coger el pene amarrado al igual que un pezón y frotó ambas cosas por separado, concentrado y pasando su aliento a Daisuke a traves de la oreja, este volvió a los gemidos, manteniendo el momento muy caliente

—Vamos Daisuke moja mi mano con tu semen, quiero que te corras en mi mano -Frotaba pene y pezones, cada uno con una mano diferente.

—Lo hago... Lo hago...

—Estamos casi, ya siento mi mano mojada, solo es ordeñarte un poco más

Frotó con mas sentimiento que antes, una vez que agarraba aquel pene ya no podía soltarlo hasta que explotase todo el amor líquido que habia dentro

—Dime que se siente bien cuando introduzco la cuerda justo en la uretra, justo donde emana la fuente de semen...justo ahí -la cuerda se mojaba con las pequeñas cantidades de semen que iban saliendo con las maaturbaciones que Ken iba haciendole

—Dime que lo disfrutas cuando froto la cuerda en toda la extensión -Ken sonreí afruto del placer y de las reacciones de Daisuke

-—Exploto... Explotoo!!!!!! -Este apretó los ojos con fuerza, sentia la presión de las manos y la cuerda

—Es una lastina Daisuke, no quiero que te corras hasta que yo lo decida -Decia abusando de los pezones y del pene, ahora se concentraba en el pene solamente

—¿ Qué? -Esas palabras le sonaron un poco familiares

—Quiero ser un poco como tu amante. No te corras hasta que yo lo decida, pero como sabemos que eres un eyaculador precoz, es mejor asegurarse que no lo hagas-. Le dejó respirar unos segundos cuando vilvió con una cuerda más pequeña

—No seas como el… no seas él -Se movia de un lado a otro, caso imposible no se podia mover

—Me apetece ver como disfrutas del dolor, amas el solor y quiero recompensarte, te gusta más cuando duele -Con aquella pequeña cuerda iba envolviendo el pene, justo donde empezaban los testiculos

—¿Que vas a hacer?

—Tendrás una eyaculación cuando yo lo decida

Le desató las cuerdas que le ataban a los pies y al culo, ahora solo estaba atado de cintura para arriba

—Esto te gusta, me gusta tocar lo que mi mente pensaba, es justo lo que quería -Las cicatrices eran muy visibles en sus pies

—Eres un enfermo mental -Decia notando como Ken le abría las piernas

—No me hagas enfadar con tus calificativos tan baratos

—No hables como él -De enfadó por el tono de voz lleno de orgullo

De repente la atmosfera se volvió tensa

—No me compares con tu amante, no soy él, solo quiero acercarme a su forma de hacerte daño pero NUNCA ser él

Y follaron. Como nunca habian follado en su vida, añadido la mano entera de Ken tapando la uretra junto con la pequeña cuerda,

—¿¿Que mierdas haces??

—No tienes derecho ni a un orgasmo, no puedes eyacular ni tener un orgasmo hasta que yo lo decida

—¿porque este cambio de actitud?

—Contigo hay que ser suave y salvaje, siempre es asi entre nosotros -la mano era dueña de la uretea haciendo cosquillas, torturando los nervios de Daisuke

—Dejame... !!Sueltame…!!! -en el fondo lo disfrutaba muchisimo

—Solo quiero esa conexión de nuevo, estamos conectandonos de nuevo ¿ no es genial? -las expresiones de seduccion eroticas incpmodaban a Daisuke un poco, tenia el rostro de su novio a milimetros, lo odiaba y al mismo le fascinaba, la prision de las cuerdas le impedia pensar que es lo que sentía de verdad.

—Soy el dueño de tu cuerpo, yo decido cuando puedes expulsar

—Puto loco

—Muerete -Arremetió salvajemente 5 veces seguidas, su cadera impactaba con la cadera de Daisuke y poco le importaban los chillidos atronadores de este, expulsaba mas de una vez fluidos que los mojaban a los dos pero eso no les impedia parar, al contrario, seguian y seguian sin tener un final

—Sexo... Me pregunto como un simple término puede significar diferentes actividades -.

—¿Porqué tienes que hablar? Cierra la boca

—No me sale de la polla hacerlo

—Malhablado... Mmmmmmm

—¿Te gusto?

—Chupamela

—La tienes atrapada con mis manos

—Asqueroso

—Imbecil

Insultos suaves que se iban haciendo mas grandes. La desesperacion que sentía Daisuke se la pasaba a Ken y al final los dos compartian el mismo sentimiento

Todo eso sucedía mientras se follaban el uno a otro insulttarse mientras Ken se la metía bien fuerte mediante besos sin dar tiempo al cuerpal respirar, cuando nonse besaban se insutaban mientras follaban, la belleza que Daisuke tenia delante era a Ken moviendo su cuerpo conforme le iba penetrando

—Te odio tanto -decia con la respiracion cortante

—No te preocupes Daisuke, yo te odio mas -Jadeaba sudando

—Hijo de puta -Compartian sudor

—Se que me insultas porque no paro de torturarte, abuso de ti como quiero, como mi cuerpo quiere, ehhh??? Dime... Te gusta??? Gime... Daisuke... Te gusta... Dimelo -Ahora iba mas fuerte notando como lentamente su mano se iba llenando de semen que se eacapaba de las manos y la cuerda

—!!!!BASSSTAAAAA BAAASTAAA

-—!!!DIIIIMELOO!!!!! -ahora frotó la uretra

—ME MOLESTA TODO DE TI -Gritaba

—ME PONE ESTO DAISUKE SIENTO ADREDALINA... MUCHA ADREDALINA... MI CADERA NO PARA QUIETA -chillidos

—AAAAHHH AHHHH AHHHHH AHHHHH -Mas chillidos

—SIIGUE POR FAVOR SIGUE DANDOME PLACER -mas energia… mas placer

—!!!JODEME MAS CABRON... JODEME MAS LA VIDA!!!!-. El punto de locura llego aqui, sus rostros en complicidad estaban muy juntos

—¿¿ME AMAS DAISUKE?? -Le besó despues de decir esto sin dejar la penetracion

—TE AMO IMBECIL -Jadeaba mas de la cuenta

Se volvieron locos, eran dos animales en una silla follandose mutuamente, habia mucha electricidas en esos cuerpos, mucha pasión, pasión retenida, chispas de una conexión que volvia a ser real

Y como siempre en ellos uno de los dos debía ceder por el esfuerzo extra y ese era Ken, su mano ya no podía frotar ni sacudir más, de modo que agotado se dejó caer sobre Daisuke nonsin antes mientras desgustaba su sabor a sudor salvaje, le mordió el cuello y desataba la cuerda del pene, en ese momento un buen chorro manchó los cuerpos de ambos mientras descansaban juntos y apretujados, el cuerpo de Daisuke necesitaba aire y recuperarse, habia retradado un orgasmo y una eyaculacion que llegó pero tarde, ahora lo disfrutaba junto a su amado el dulce sabor de el final de un arrebato de pasión desmedida

—Habia olvidado la de sensaciones que era vivir y hacer el amor contigo -Se agarraba a su cuello. Observandolo bien de cerca

—Lento, viviendolo de forma salvaje, eso es hacerlo para mi y ver estas cicatrices, estas marcas, quiero estar ahora sintiendolas sobre tu piel -Le fué desatando las cuerdas poco a poco

—No cambies... Se tan emocional como hasta ahora

—Los sentimientos se deben mostrar, yo no voy a dejar de ocultarlos

—Quiero que me hagas el amor otra vez, quiero más de tu antídoto

—Quieres volver a revivir el infierno de querer más junto a mi?

—Se siente bien

Ken hizo lo posible para que los dos ahora permanecieran atados, tenia especial interes en que ambos penes pegados en la punta de cada uretra permanecieran juntos

—Entonces, atémonos juntos y dejemos que los cuerpos hablen

Otra oleada de sensaciones efimeras y salvajes se estaba acercando, perderían la razon, follarian con amor, pero teniendo una cosa asegurada, aquella chispa volvió, quizá fuese poco de unos dias, pero la locura de hacer el amor como solo ellos pueden hacerlo siempre estará ahi, todo en complicidad y comunicacion máxima.

(8,50)