Lejos de rendirme y dejar que todo muera en la miseria...
Sin pestañear
Quedó un silencio mordaz,
quedé a la sombra del sueño,
mudo, sin fe, lapidario velo,
burdo y crepuscular
Voy arder en la piel
voy a buscarte en la noche
fría, mujer y pecar... si escapo solo
un caído seré.
Sin pestañear Dios está,
debe saber que no hay
anhelo vulgar en mis brazos siempre y cuando
te deseé aquí.