Cuando me case la primera vez compramos una casa de interés social, era una casa pequeña pero agradable, al fin y al cabo era mi primer casa y estábamos súper contentos, cuando nos entregaron la casa las bardas traseras que colindan con los patios de los vecinos eran muy pequeñas, podías ver claramente el patio de cada vecino, así es como conocí a mis vecinas, principalmente una que estaba a lado con quien platicaba mucho cuando salíamos a lavar la ropa.
Después de un tiempo a la casa que colinda justo atrás de mi casa se mudó un joven moreno, pero muy atractivo, bueno, eso decía mi vecina, está bien, también yo lo creía, él vivía solo y pues también salía a lavar su ropa, era un tipo muy agradable pero también muy coqueto aunque el tuviera novia, nos decía piropos y nos sonrojaba.
Después de un tiempo ya conocíamos bien nuestras rutinas así que empecé a acomodarme más cuando él estaba en casa para coincidir más, salía a lavar cuando él lo hacía también, así que platicábamos y de vez en cuando él me lanzaba su comentario hot, al cual no respondía salvo con una risa o algo así, no le decía que lo dejara de hacer, pero tampoco le daba pie a algo más, pero eso me excitaba, así que decidí regresarle el favor, yo comúnmente lavo mi ropa interior cuando me baño así que no la cuelgo afuera, pero un día decidí hacerlo, y claro, el día que él estuviera allá, así que agarré mi ropa más mona aun y cuando no estuviera sucia y la lavé, platicamos y la empecé a colgar, claro que veía de re ojo como veía la ropa y cada vez me excitaba más, fui colgando y no simplemente así, si no que la acomodé para que se apreciara perfectamente, las tangas, los de encaje, etc., no aguantó más y me dijo, te debes de ver exquisita con cualquiera de esa ropa interior, yo me voltee y dije, qué??? y no dijo nada, pensé que lo había asustado, así que decidí quitarme el bra que llevaba, obvio, sin quitarme la playera que llevaba puesta, lo lavé y me puse agua en los pechos, para que se marcaran sobre la playera, estaba excitada y claro, con los pezones levantados jejeje, me paré frente al tendedero y empecé a colgar el bra, él se colocó y recargo en la barda, dejó de hacer lo que estaba haciendo para verme de frente, me le quedé viendo y le dije, qué paso?? y el respondió, quieres que te coja verdad??? ehhhh??? me quedé toda aturdida y le dije, de que hablas??? y el respondió, si lo que quieres es que me excite viendo tu ropa interior y dejándome ver tus senos con esa excitación, lo has logrado, inmediatamente me tapé el pecho, efectivamente tenia los pezones a tope y con lo que dijo hasta chinita se me puso la piel, no dije nada, y el continuo, si lo que quieres es que brinque la barda y te pegué una pinche cogida, solo ingresa, báñate y sal solo envuelta con la toalla, con eso sabré que deseas, si no así lo dejamos y continuamos con lo nuestro, se volteó y continuó haciendo lo suyo.
Después de un momento que me pude mover me metí a la casa, me quedé pensando un momento, no quería tener sexo solo calentar el asunto pero creo que me había pasado un poco, tenía que decidir, no voy a negar que había sido infiel, pero no con alguien tan cerca, con quien platica a veces mi marido, me metí a bañar, me depilé, salí de la regadera y aún seguía pensando que hacer, estaba sentada en mi cama solo con la toalla, me asomé para atrás y aún seguía allí, tiré la toalla frente a un espejo y mis senos seguían duros, toqué mi entrepierna y sentí la humedad caliente, mi cuerpo estaba deseando sexo, así que sin pensarlo volví a levantar mi toalla, la coloqué al rededor y salí al patio trasero, pero él ya no estaba allí, me acerqué a la barda y le hablaba, intentaba no hacerlo fuerte porque no sabía si los otros vecinos estaban y no respondía, pensé que lo mejor era regresarme y acabar con esto, pero ya estaba muy excitada y tomé una muy loca decisión, me brinqué la barda.
Sip, como toda una zorra caliente en busca de sexo, logré pasar solo con la fregada toalla e ingresé a su casa, le hablaba y no respondía pero escuchaba la regadera del baño y me acerqué y toqué la puerta, salió como loco en pelotas todo asustado y me dijo, pinche Susy, casi me matas de un susto, la verdad me dio risa, verlo mojado, totalmente desnudo con su cosota colgando y me dijo, eres una pinche puta que quiere verga para que te hayas metido así a mi casa, pensé que solo estabas provocando pero veo que no, que eres puta y me arrancó la toalla y me dejo también desnuda.
Woow, siempre te imaginé así y me la jalaba pensando en ti, hasta acá se escucha cuando mi socio te coge y gimes cabrona, ahora sé que dejas la ventana abierta para que te escuche puta, (Pausa!!! eso si no lo sabía, el cabrón me escuchaba coger y yo no tenía idea de eso), me llevo a su cuarto, me puso de rodillas frente a él sobre la alfombra y me dijo, chúpalo cabrona, me asustaste y ahora debes compensarlo, no lo pensé dos veces y se lo empecé a mamar.
Me impresionó como seguía y seguía creciendo, era lo más grande que me había comido hasta el momento, no cabía ni la mitad en mi boca y eso que me esforzaba, le besaba y acariciaba los huevos, recorría en tronco con mi lengua y jugaba con su cabeza también con la legua y lo volvía a meter, lo presionaba con los labios y solo veía como disfrutaba, si ya se, ya tenía buena experiencia con eso jejeje, bueno, el cabrón lo disfruto, seguro su novia no le hacía algo cercano a eso, me levantó de las greñas, me dio la vuelta y me empinó en la cama, me dijo eres una pincha niña traviesa y yo te voy a educar, me pegó un par de nalgadas que entre el golpe y mi grito se debieron escuchar en las otras casas, me las dejó rojas y seguían ardiendo, me dijo, no grites cabrona si no quieres que toda la colonia se entere lo puta que eres, solo apreté las sabanas con mis manos, el con una mano empezó a acariciar mi vagina y con la otra tiraba de mi cabello, me decía, pero mira que puta tan más caliente, si estas súper mojada por dentro, eso me excitaba más, lubricó su pene con su saliva y se fue acomodando, empezó a penetrarme lentamente, sentía como me abría, era grande y gruesa y seguro que él lo sabía que pasaba si lo metía de un chingadazo, por eso lo fue haciendo poco a poco haciendo que mi cuerpo su adaptara a su miembro, ya dentro el tiraba de mi cabello y me empezó a cabalgar, tiraba y rebotaba mis nalgas en él, entraba y salía y con la otra mano me daba nalgadas, estaba disfrutándolo mucho y no podía contenerme y gemía como loca, cuando me nalgueaba gritaba, me valió madres que me escucharan, el cabrón era un vaquero y le hacía falta una yegua como yo.
Mientras me cogía escupió en mi ano y empezó a meter un dedo allí, yo disfrutaba mucho pero pensé que me iba a destrozar si me cogía por allí, solo de pensarlo apretaba el ano y él lo disfrutaba, me dijo, hoy tengo que salir, pero la otra semana te voy a coger mejor zorra y me dijo, en donde quieres que me venga, dentro de ti o te los comes?? le dije que dentro no, que los echara en mis nalgas y me dijo que no los iba a desperdiciar, que dentro de mi vagina o en mi boca, y le volvía decir que dentro no, así que dijo bueno, te los vas a comer zorra y no quiero que los tires, lo sacó, me tiró del cabello y me volvió a colocar frente a su pene y se empezó a masturbar, me dijo ya viene ya viene, abre la boca y yo obedecí, lo metió en mi boca y después explotó dentro, eyaculó tanto que sentía que me ahogaba, me decía chúpalo que no quede nada y así lo hacía, me tiró del cabello hacia atrás y me dijo abre la boca, la abrí y tenía su semen allí, me dijo muy bien perrita lo has hecho muy bien, trágalos, así que me los comí y me dijo abre la boca se quedó mirando y dijo bien, ahora termina de limpiarla, tengo que salir y no quiero ir a lavarla, así que lamela bien y quítale todo y así lo hice, no sé en qué momento me volví su puta, pero ya hacia todo lo que él quería al pie de la letra, me dijo ándale cabrona, brinca a tu casa antes de que te vean, busqué mi toalla y me dijo así bríncate, luego aviento tu toalla al tendedero, quiero ver cómo te brincas desnuda, lo pensé, pero ya para ese momento lo que tenía que hacer era estar a salvo en mi casa, no lo pensé, me brinqué, creo que no me vio nadie más que él, ingresé a mi casa, fui a mi cuarto, me tumbé en la cama y así me quedé por un buen rato.
Bueno, luego les platico más experiencias con mi vecino.
No se les pasé dejar sus comentarios, si los leo y eso me motiva a seguir escribiendo, también si tienen preguntas escríbanlas en los comentarios y yo las responderé.