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Marcel y su primer y pasional engaño

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Esto sucedió cuando tenía 25 años. Desde hacía unos dos años, conocía a Andrea 22 años y éramos muy amigos. Ella vivía a 3 cuadras y estábamos bastante tiempo juntos, teníamos muy en claro que lo nuestro no iría más allá de la amistad. Corría el mes de diciembre y sus padres que vivían la provincia de Córdoba se habían mudado allá hacia unos 3 años por razones de salud del padre de Andrea, ellos volvieron de Córdoba para pasar las fiestas de Navidad y Año Nuevo con Andrea sus padres eran Marcela y Juan.

Marcela y Juan hicieron la secundaria juntos y se casaron apenas finalizaron sus estudios. Al conocer a sus padres me sentí atraído por Marcela ella era muy femenina, delicada, suave, y dulce, tanto al hablar, mirar, o sonreír y sensual casi por naturaleza. Estaba físicamente bien dotada esa atracción y deseo por ella que iba en aumento a medida que transcurría el tiempo. Pasó a ser una obsesión para mí pero no parecía una mujer fácil de abordar.

Marcela tenía 42 años pero aparentaba menos, de piel trigueña clara, era alta, 1,75mt, y delgada su cara era muy bonita de rasgos delicados, cabello negro con ondas y mechones castaños; largo hasta los hombros, sus senos redondos y erguidos de cintura pequeña y una más que atractiva cola que descubrí un día que la vi en jeans ajustados… ya que ella los usaba muy poco, en general usaba polleras por lo que se podía disfrutar sus excelentes piernas.

Pasaba el tiempo y mis deseos eran cada vez mayores, el matrimonio con Juan parecía llevarse bien, siempre se los veía juntos… pero parecían el agua y el aceite, él era el polo opuesto de Marcela, parco, casi tímido, desgarbado, no podía entender esa relación y mucho menos a medida que los iba conociendo más.

Estaba empezando a desfallecer en mis intentos por Marcela, era imposible poder estar a solas con ella, y me quedaban 10 días con las fiestas de fin de año incluidas, antes de que ellos regresasen a Córdoba.

Andrea llevó a su madre al oculista ya que presentaba inconvenientes en uno de sus ojos, en el que había tenido un desprendimiento de retina, junto a otros problemas. Andrea la llevaba a atender a su obra social Marcela debía realizarse varios estudios oculares antes que pudiesen realizarse una intervención quirúrgica, la cual podía llegar a realizarse en los primeros días de febrero. Andrea confiaba mucho en su oculista, así que hizo lo imposible para que se quedase y poder hacer el tratamiento acá. Entre todos la convencimos de manera tal que Marcela haría la operación y los estudios acá. En conclusión a partir del 1 de enero, Marcela se quedaría con Andrea.

En enero, Andrea, que había cambiado hacia poco de trabajo solo tenía 2 días de vacaciones, ella iría con sus amigas 4 días a Mar del Plata, y quiso llevar a Marcela con ella pero la oculista dijo que no era conveniente por sus ojos, exponerlos al sol la arena y el mar.

Andrea la acompañó al oculista un par de veces, el jueves debía hacerse tres estudios más, cuando la llamaron para postergar esos estudios para el viernes a las 18 hs, el mismo día que Andrea iría de mini vacaciones, razón por la cual ella iba a postergar su viaje…pero me ofrecí a acompañarla. A regañadientes Andrea aceptó la proposición.

El viernes fui a su casa antes que Andrea viajase, charlamos y a las 16 hs pasaron a buscarla… me quedé charlando con Marcela y en un momento de la charla Marcela pregunto cuál era mi relación con Andrea, yo le hablé de que éramos “como hermanos”, que los dos teníamos claro que como pareja no funcionaríamos, pero que como amigos ambos daríamos la vida por el otro.

Marcela fue a cambiarse para ir a la clínica, cuando salió no podía creer lo que estaba viendo, si estaba desesperado por ella, verla así me hizo enloquecer totalmente, estaba muy elegante, pero a la vez se la veía sensual y provocativa, su cabello totalmente suelto y lacio llegaba a la mitad de su espalda, sus ojos sin maquillar, solamente un rouge rosa pálido sobre sus carnosos labios, una remera roja furiosa sin mangas, dejaba 1/3 de su espalda al descubierto sujeta al cuello por detrás de este la remera era ajustada lo que marcaba sus senos que en virtud de su remera supuse que no llevaría corpiño, en su frente entre su cuello y senos había un orificio similar en su forma a una gota de agua esa remera dejaba su cintura al descubierto unos 2 o 3 cm, escote redondo, sus senos marcados, en su brazo derecho llevaba una pulsera dorada y en el izquierdo su reloj, y unos jeans azules súper ajustados con un labrado dorado sobre sus bolsillos frontales, marcaban su cola redonda y parada, y unas sandalias abiertas de color negro con taco tipo plataforma de corcho lo cual hacia más sensual su manera de caminar.

Fuimos caminando a la clínica donde se tenía que hacer los estudios ya que se encontraba a 4 cuadras de la casa. Se hizo 4 estudios el último de todos fue un fondo de ojos, cuando salimos de la clínica eran las 20:30 hs, la noche había tomado la ciudad, como Marcela no veía mucho caminé con ella tomándola del brazo… pero cuando hicimos una cuadra ella en un mal movimiento producto de la disminución de su visión trastabillo y estuvo cerca de un esguince de tobillo, razón por la cual caminamos tomándonos de la cintura cual si fuéramos una pareja de novios.

Llevarla así me excitó sentía que mi pene estaba levemente durito, estaba loco por Marcela, nuestro andar era suave, pero sentir en mi mano el contorneo de sus caderas más la piel fresca de su cintura que su remera permitía sentir. Pasamos por una cafetería y tomamos un café, antes de seguir caminando, sin llegar a ver bien su visión había mejorado así que la caminata fue con ella tomada de mi brazo. Llegamos a la casa, me moría por ella, se la veía tan hermosa, había dejado asomar un cuerpo excelente al que antes intentaba disimular.

Al entrar pasamos a la cocina, íbamos a tomar algo fresco, ahí ella tomó una banana y la mordió, luego la extendió hacia mí y dijo:

M- Querés compartirla es la única que hay

Le di un mordiscó, y ella con voz suave dijo:

M- Gabriel quiero agradecerte tu compañía hoy… tus cuidados… tu protección y tus mimos

G- No tenés nada que agradecerme, lo hice con gusto, no siempre se puede acompañar y cuidar a alguien tan atractiva

M- Guauuu… me parece que tenés que ir vos a la oculista… porque para verme atractiva

G- Si es cierto pero no es un problema visual debería animarme a expresar mejor mis sentimientos, debería decir que sos hermosa, delicada, suave, sensual, y que estoy enamorado de vos desde el primer día que te vi y que estoy enamorado y no puedo dejar de pensar en vos.

Ella se sonrojó un poco pero sus ojos demostraban sentirse feliz por lo que había escuchado

La mire a los ojos, ella había puesto en su boca el último pedazo de banana y dije:

G- No me vas a convidar un poco.

Extendió sus brazos rodeo mi cuello, yo la tome por la cintura y nos dimos un beso suave pero profundo su boca compartió conmigo el ultimo pedacito de banana. Nuestro beso duro un par de minutos

Cuando nuestras bocas se separaron ella dijo:

M- Ay Gabi jamás pensé que algo así me podría pasar, desde los 14 Juan fue el único amor de mi vida pero me enamoré de vos apenas te vi… te amo tanto… te deseo desde ese primer día…pero nunca me ilusioné porque jamás pensé que vos también me deseabas

Nos dimos otro beso al tiempo que la ayude a subir y sentarse en la mesada de la cocina, ella con sus pies jugueteo un poco por sobre mi pantalón con mi pene que rápidamente endureció, luego se bajó de la mesada, ella quedó de espaldas a mi, bese su cuello y apretuje sus senos por sobre la remera, los que a pesar de su edad eran muy firmes, ella llevó sus manos a su cintura y se quitó la remera, no llevaba corpiño, tome sus senos con ambas manos disfrutando la suavidad de su piel, ella gemía y repetía con voz entrecortada “si… así mi amor… estoy loca por vos”.

Ella giró colocándose frente a mi se arrodillo, yo me saque la remera y ella bajo la cremallera de mi pantalón, tomó mi pene con una de sus manos al tiempo que bajo mis pantalones y llevo su boca a mis testículos besándolos para luego deslizar su lengua por todo mi pene; en sus ojos se reflejaba la pasión y el deseo, así llego hasta la punta de mi pene y lo saboreo con sus labios para luego empezar a introducirlo en su boca, lo lamia, lo besaba y decía lo hermoso y grande que era. Luego lo deslizó por sus senos y volvió a apoderarse de él con su boca.

Luego se incorporó, nos besamos, le desabotoné el jean, lo baje, ella se colgó de mi entrelazó con sus piernas mi cintura nos besamos con desesperación yo la tome sujetando su cola y así fuimos hasta su habitación.

La acosté sobre la cama ella llevaba una diminuta tanguita color blanco con finos encajes de tul. Volví a besarla mientras le decía:

G- Te deseo tanto Marce, así casi desnuda puedo decir que tenés un cuerpo maravillosamente hermoso, deseable al que voy a poseer todas las veces que lo desees.

Volvimos a besarnos profundamente Mientras besaba su vientre fui bajando su tanguita y mis besos bajaban junto con ella, tenía su concha depilada, la besé, luego con mis dedos separé un tanto sus labios vaginales para lamerlos varios segundos, su boca gemía y gritaba, y su cuerpo se revolcaba sobre la cama mientras sus manos jugaban con mi cabello y ella decía con vos agitada y entrecortada

M- Así bebé me encanta hace de mi lo que quieras mi cuerpo es tuyo

Luego fui en busca de sus senos redondos sus pezones estaban erguidos rodeados por una aureola rosada, los acaricie con mis manos, comencé a besarlos y lamí sus pezones rosados erguidos los que parecían a punto de estallar, cuando sintió mi lengua en sus pezones un concierto de gemidos partió de su boca y ni que hablar cuando mis labios con suavidad los pellizcaban, luego me sumergí más en ellos succionándolos mientras ella enloquecía con mis caricias, pase varios minutos así saboreando uno de sus senos para luego sumergirme en el otro ella no paraba de emitir largos y profundos gemidos de placer.

Luego bajé por su tórax y lo fui besándolo por completo hasta llegar nuevamente a su vagina y saborear el néctar de la excitación vivida

M- Sos maravilloso, me enloquecen tus besos tus caricias nunca antes sentí tanto placer… te amo Gaby

Nos besamos enloquecedoramente, con inusitada pasión y moviendo mi cintura lentamente hacia que mi pene erguido juguetease en la entrada de su vagina, eso la excitaba muchísimo, su boca gemía y gritaba ahogada por el beso que nos estábamos brindando, entonces sentí sus manos aferrando mi cuerpo con fuerza, su beso se hizo más profundo y sentí su cuerpo bajo el mío agitándose, sacudiéndose en un orgasmo infernal, mientras yo la besaba y la acariciaba muy dulcemente.

G Así mi amor dame ese orgasmo por completo no te contengas me encanta ver tu carita deseosa…Te amo cielo

Cuando su cuerpo se calmó ella dijo:

M- Bebé me hiciste acabar sin ponérmela, y estoy deseando más que antes que entres en mi cuerpo, te deseo, cógeme...

Sentí que sus piernas se abrían dispuestas para recibirme en su cuerpo apoyé mi glande sobre su concha la miré y dije:

G- Llegó el momento de estar en tu cuerpo, de gozarte, de disfrutar dentro tuyo, de poderme apoderar de vos en cuerpo y alma…

Mi pene comenzó a avanzar en ella un profundo gemido nació de su boca su cuerpo comenzó a vibrar y mi pene lentamente comenzó a apoderarse de su vagina hasta introducirse por completo en ella; entonces comencé a deslizarlo en su interior lentamente como para gozar y hacerle gozar este momento; después de varios minutos y poco a poco comencé a aumentar la aceleración dentro de ella nos besábamos, acariciaba su cuerpo, su tórax, sus senos excitados y ella hacia lo mismo con el mío, quería demorar al máximo el instante de lanzar sobre su interior mi semen, ella gozaba excitada pasaron un par de minutos y ya con voz desesperada pidió casi en forma de súplica que la acabase, volví a besarla y dije:

G- estas deseando que te acabe, y yo también deseo hacerlo pero también deseo seguir disfrutándote... este es un momento sublime, único, estoy haciendo malabares por no acabar deseo tenerte así más tiempo

M- Acábame por favor Gaby, no puedo más… quiero ser tuya... sentir tu semen caliente entrando en mi cuerpo… y deseo que lo hagamos juntos

G- Un pedido tuyo es una orden como no obedecer a mi reina, pero aguanta dos minutos más

Aceleré mis movimientos nuestros cuerpos vibraban al unísono, estaba dispuesto a complacerla, nuestros cuerpos agitados y transportados a un mundo de eterno placer, a un mundo donde solo existía ella y yo… el momento tan deseado por ambos estaba llegando a su fin y dije:

G- Ahora, nena el momento llegó hagámoslo juntos...

Pasaron apenas segundos cuando sentí que mi pene eyaculaba en su interior al mismo tiempo que su cuerpo se contraía y comenzaba a sacudirse en un nuevo e infernal orgasmo, sus manos tomaron mi cuerpo se incorporó levemente depositó su boca en la mía en medio de sus gemidos, se dejó caer sobre la cama y nos besamos apasionadamente durante incontables minutos, nos acariciábamos y gozábamos a cada instante…pasaron largos minutos así nuestros cuerpos se habían aquietado ella se incorporó de la cama y dijo:

M- ya vengo mi cielo voy a ducharme.

Pasaron unos minutos fui al baño ella se estaba secando yo la ayude con la toalla y mi mano recorriendo su cuerpo luego la tomé en mis brazos llevando su espalda contra mi tórax, mi pene comenzó a parase cuando tomó contacto con la suavidad de sus nalgas, ella me miró y dijo:

M- Me encanta sentir que me deseas porque yo quiero más... mucho más… nunca pensé que pudiese engañar a Juan, pero no siento culpa, estoy enamorada de vos

G- Yo te voy a dar todo lo que vos desees, mi entrega a vos va a ser completa y también espero que vos te entregues por completa.

M- Todo mi cuerpo es tuyo, sé que deseas mi cola y va a ser tuya, pero no quiero que sea hoy, hoy te quiero disfrutar de otra manera, deseo hacer el amor con vos miles de veces, pero hoy quiero disfrutarlo de otra manera, quiero sentir tus mimos tus caricias, tus besos, disfrutar cada segundo que estemos juntos y demostrarte cuanto te amo

En ese momento sonó el teléfono, era Andrea que quería saber cómo salieron los estudios, operarían a Marcela en diez días, estuvimos hablando varios minutos

Luego fuimos a cenar y volvimos a la casa, pasamos enseguida a la habitación y tuvimos sexo 2 veces más antes de dormirnos

Esos 4 días fueron de entrega total, tan total que esa mañana Marcela me entregó su cola, y todo su cuerpo.

Marcela tuvo una operación exitosa, y se quedó en Buenos Aires hasta fines de marzo… luego volvió a su casa… ahí la distancia nos separó, nos vimos dos veces más pero todo terminó sin una despedida oficial.

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