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No hay escusa

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Esto qué les cuento me paso ya hace unos años atrás el día de mi boda,

Tenía reservado una cabaña cerca del mar, para pasar la noche de bodas, todo está perfecto,

Ese noche mi mujer uso un vestido muy escotado qué dejaba ver sus enormes melones, qué me tenían loco, ya no veía la hora qué llegara para irnos a la cabaña

Empezó la fiesta todo iba bien, mi esposa me habló y me dijo que había un problema pero ella ya lo había resuelto y qué cuando estemos solos me dice que es.

Terminó la fiesta y ya retirándose el último invitado decidimos ir nos a la cabaña, ya tenía los huevos hinchados de retener mi leche, en el trascurso a la cabaña nos empezamos a besar, le sobaba las tetas y el culo redondito qué tenía.

Al llegar a la cabaña se metió al baño a ponerse cómoda, salió y me dijo:

—El problema es qué me bajó mi mes, pero te dije que ya lo había solucionado, y le dije cuál es la solución.

Y me contesta mi esposa qué en lugar de comer papaya vas a comerte mi culo apretadito mi amor, ya lubrique mi culito amor para que me claves tu verga gorda y venosa qué tienes.

Empecé a comerme sus pezones, después de un rato la empine y le puse la cabeza de mi pene en la entrar de ese culito rico y apretadito, despacio mi amor me dijo mi esposa, y cómo fue se lo fui metiendo despacito hasta qué se comió todo después de un rato rompiendo ese culo me vine ufffff una noche de bodas inolvidable.

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