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Nada ha sido igual desde que fui violada

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Hace algunos años cuando estudiaba mi carrera tuve un amigo que conocí en el bachillerato y estaba enamorado de mí. Durante varios años me aproveché de él y siempre supe lo que sentía por mí.

Un día le pedí que me ayudara con un trabajo y el accedió a ayudarme como siempre. Y platicamos de diversos temas, entre ellos de un chico que me gustaba.

Lo noté triste y molesto, traté de animarlo pero parecía no surtir efecto en él. Él me decía que no le interesaba tenerme de una forma diferente a la de ser novios o pareja así que decidí irme de su casa.

Antes de irme, me tomó del brazo y me aventó a su cama. Intenté golpearlo pero se resistió, intenté gritar pero me cubrió la boca y me dijo que nadie me oiría porque los vecinos no estaban en sus casas.

Sintiéndome resignada lo dejé hacerme lo que él quiso, primero me metió la mano dentro de mí pantalón y me masturbó y aquí fue donde todo se puso raro puesto que sentí varios orgasmos.

Posteriormente, me quitó la blusa y mi bra, y siguió manoseándome y lamiéndome. Yo no quería que me hiciera nada pero se sentía bien y tuve varios orgasmos nuevamente.

De pronto se detuvo y creí que iba a terminar por fin y no iría a más pero no.

Cuando intenté pararme, vi como sacaba su cosa y tuve miedo, no quería que mi primera vez fuera así pero estaba paralizada.

Me quitó el pantalón y mis pantis, y comenzó a penetrarme. No sentí dolor ni nada así, de hecho entró muy fácil y nuevamente llegué al orgasmo varias veces.

Le pedí que se detuviera y él me respondió que no fuera hipócrita y siguió, hasta que terminó varias veces.

Al final me dio unas pastillas que según me servirían para no embarazarme. Y me dijo que hiciera lo que yo quisiera con ellas.

Él nunca me golpeó y de hecho me hizo llegar al orgasmo varias veces. Aun así llegué a mi casa a llorar. Y me tomé las pastillas como indicaba la caja.

No le contesté a nadie y de hecho terminé por hacerme novia del chico que le platiqué a mí entonces amigo.

Me cambié de turno para no verlo y mi relación con mi novio siguió, hasta que decidimos hacer el amor.

Tenía miedo, pero no como aquella vez. Ahora iba a hacerlo con alguien que quería y amaba, pero no fue ni remotamente placentero. No sentí lo mismo, simplemente no tuve placer, ni nada.

Le pedí que fuera más brusco, que me lo hiciera como si estuviera enojado conmigo, pero nunca sentí nada.

Al poco tiempo terminé con él.

Me sorprendió lo que había pasado y el hecho de que no tuviera la misma sensación. Así que quise volver a experimentar hasta encontrar a alguien que me ayude a sentir el mismo placer.

Así ha pasado el tiempo y después de experimentar con al menos 70 chicos en los últimos 10 años haciendo de todo, en cualquier lugar posible, jamás he vuelto a tener orgasmos como aquella vez que fui violada. No digo que no lo disfrute sino que no lo disfruto tanto como aquella vez.

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