Llevo años leyendo estos relatos, no puedo negar el placer que me hacen sentir.
Mientras los leo trato de sentir las experiencias que los protagonistas tienen. A un principio me sentí identificado con el adolescente que lograba conquistar la confianza de sus hermanas y las llevaba a la cama para hacerlas gemir de placer mientras el solo las utilizaba para satisfacer sus instintos.
He sido el hijo solitario que ve en su madre a la mujer con la necesidad de sentirse dominada y tratada como una prostituta pidiendo a gritos que sea él, su propio hijo quien la haga gozar y pedir más hasta que su hombría la inunde con ardiente y prohibida pasión.
Disfrutado de ser ese hombre maduro que sabe que sentir la joven piel de una hembra lo hará tener una erección y decide que sea alguna de las mujeres jóvenes de su familia, su hija, su nuera o bien la hermana de su mujer...
He sido todos ellos me he jugado la verga durante horas, evitando eyacular para poder seguir tocándomela y sentirla latir en mi mano...
Cada historia cargada de lujuria y censura me ha hecho sentir la necesidad de contar mi vida sexual, de compartir como descubrí el placer de poseer mujeres propias y ajenas, de utilizarlas como solo un objeto de satisfacción para después desecharlas...
Este viaje me ha llevado muy lejos y es por ello que decidí abrirme (literalmente) a poder vivir ambas partes de este placer, pues después de tener a las mujeres que deseaba tener y ser testigo del placer que disfrutaban al poseídas y tratadas como una putas decidí ser yo utilizado y tratado como una de ellas, de ser un preservativo humano que los machos que no temen cogerse a un pinche puto usarlo y enseñarle que solo es eso un objeto de uso masculino...
Quiero saber qué piensas de ellas y de mí, mándame un whatss y mantente en contacto con este semental que decidió ser una puta solo por el placer de sentir el poder de la verga...