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Mi segundo trio

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Bueno, una noche salí de marcha con unas amigas a una disco y conocí a dos chicos uno de 22 años y el otro de 24, muy jovencitos sí lo sé, pero… jeje.

Mi cabecita pensó, casi siempre me han enseñado referente al sexo y...

¿no es hora de que enseñe yo? Pues si, creí que havia llegado la hora y el momento para enseñar algo de lo que yo sabía.

Este día solo hablamos, nos conocimos un poco y la verdad me gustaron mucho los dos.

Javi, el chico de 22 años, era tímido y muy guapo, uf como me ponía cuando me dirigía a él y le hablaba despacito y sensual, se ponía muy nervioso y yo sentía como temblaba, se notaba que no tenía mucha experiencia con chicas y eso me excitaba mucho más.

Fernando tenía 24 años, era un poco más impulsivo y se ponía menos nervioso, pero aun así, cuando me acercaba a él, no hacía nada mas que fumar un cigarrillo tras otro, eso me hacia gracia, un chico seguro de sí mismo y aparentemente duro y sin embargo, una chica le decía algo bonito y se derretía.

Este fin de semana no paso nada, quise conocerlos un poco antes de lanzarme como una vampiresa.

Pase toda la semana pensando si hacía bien, pero recordaba mi primera experiencia sexual en trío y al final lo tenía muy claro, quería volver a pasar otra vez por esa experiencia tan bonita y excitante.

Por fin llego el sábado que tanto deseaba, nos vimos en la disco, estuvimos bailando un poco, tomando algo y se acercaba el momento de proponer el trío.

Y aunque no os lo creáis, ahora la que se puso nerviosa fui yo, pensaba... ¿y si me dicen, NO? pero me vestí a conciencia algo provocativa, para ponerlos muy calentitos y que no se negasen.

Os preguntareis que me puse, una blusa negra transparente, la cual dejaba ver muy descaradamente el sujetador negro con encajes en la parte inferior, una mini falta muy, muy cortita y ceñidita, que se subía al andar y por supuesto un tanga negro todo de encajitos.

Bueno llego el momento, les propuse el trío y para mi sorpresa, no lo dudaron ni un instante, asintieron los dos con la cabeza con rapidez.

Nos fuimos a un hotel, subimos a la habitación, cuando entramos ellos no sabían que hacer, me miraban, se miraban, los notaba algo nerviosos, así que como siempre me lancé, de un empujón los senté en la cama y empecé a quitarme la ropa sensual y muy lentamente, ellos me miraban muy atentos y sorprendidos, me quede en sujetador y tanga, me acerque y empecé a quitarle los pantalones y la camiseta a Javi, después a Fernando, los tumbe a los dos en la cama y empecé a besar a Javi y a pasarle mi lengua por su cuello, fui bajando hasta llegar a los pezones, mientras Fernando se acerco a mi y empezó a besarme el culito y lamérmelo.

Yo seguía con Javi pasándole mi lengüita por los pezones y fui bajando hasta llegar a la parte superior de su pene, seguía lamiéndole por todas partes pero sin tocar el pene, lo mire a la cara y madre mía lo excitado que estaba, la verdad que yo también me estaba poniendo muy caliente y más porque Fernando estaba por detrás de mí, lamiéndome el clítoris y no os podéis imaginar como me estaba poniendo de húmeda.

Le cogí el pene a Javi y empecé a lamerlo y chuparlo una y otra vez, me la metí en la boca y se la chupe muy fuerte pero a la vez muy delicadamente, no paré hasta que se corrió en mis labios.

Fernando, mientras seguía lamiéndome el clítoris, se levantó y puso su pene contra mi chochito, me penetro muy despacito, yo gemía de placer, le pedía que no parara, quería que lo hiciera más rápido y así lo hizo hasta que se corrió en mis cachetes.

Le dije a Javi que me penetrara por detrás, cuando lo hizo, di un grito de placer impresionante, le dije a Fernando que se pusiera debajo de mí y me comiese el clítoris, Dios que placer me estaban dando, no os lo podéis imaginar, estaba a punto de correrme, cuando les pedí que me lamieran el clítoris y el chochito los dos a la vez y...

Uf me corrí como una loca y ellos me lamían más y más y más, hum fue estupendo.

Nos quedamos los tres tumbados en la cama un ratito y volvimos a empezar.

Javi, el mas joven y tímido, de repente cambio de actitud, empezó a ser más impulsivo, pero más consciente de lo que hacia, y Fernando, bueno, el como la primera vez parecía algo mas seguro de sí mimo, y esta vez si que lo estaba, y lo demostró.

Javi después de descansar se incorporo, me cogió, y me levanto de la cama y empezó a comerme los labios, muy suave y delicadamente, saco su lengua, y empezó a lamerme la orejita derecha, estuvo un ratito, y eso me hacia estremecer, y poco a poco fue bajando hasta mi hombro, y mientras, Fernando hacia lo propio en mi nuca, también fue hasta mi orejita izquierda, e hizo los mismo que Javi, lo cual me excito doblemente, mi sexo ya empezaba a rezumar mis fluidos, uno y otro empezaron a comerme y lamerme desde los hombros, uno hacia mis pechos y el otro por mi espalda. Madre mía que placer, cuando note que Javi succionaba mis pechos con sus labios, al mismo tiempo que su lengua me lamía los pezones.

Sentía en mi espalda el placer que me provocaba Fernando, no dejaba de lamerme, bajando hasta llegar al culete, me lo abrió con las manos y metió su lengua, la cual no paraba de deslizar de un lado a otro hasta dejármelo muy mojadito.

Yo estaba deseando que Javi llegase a mi chochito, y no se hizo esperar, si antes lo pienso antes llega su lengua a mi clítoris, y empezó a lamérmelo, haciendo circulitos con su lengua sobre él, para después bajarla y subirla por todo el contorno de mi sexo y hacer que mis labios se despegasen por completo, mientras metía su lengua muy lentamente una y otra vez en mi chochito, sentía como si me estuviesen penetrando, pero eso aun no iba a llegar, ellos querían hacerme disfrutar, y lo estaban consiguiendo.

Javi mientras me lamía el chochito extendió un brazo y me tocaba los pechos, cogiendo son sus dedos mis pezones y jugando con ellos, dándoles pequeños pellizcos lo cual me daba mucho placer, pero yo también quería jugar, los hice levantarse y me agache, cogí sus penes que ya estaban jugosos y comencé a lamer muy suave y lentamente los testículos de uno y del otro, para seguir subiendo por alrededor de sus pollas hasta llegar a la puntita de ambas, fui chupando primero una y luego la otra, una y otra vez y así sucesivamente.

De repente, ambos me cogen cada uno de un brazo, y me levantan muy despacito del suelo, Fernando se sienta en la cama, me coge del culete con las manos y me hace sentarme encima de él y mientras lo hago, él me penetra lentamente el chochito, ummm, ahora si que note su miembro dentro de mí, lo metió con mucho cuidado, y yo me enteré, si, ya lo tenia dentro, suave y delicadamente la metía y la sacaba, mientras yo sostenía mi peso apoyándome con mis manos en sus rodillas. Javi se agachó y volvió a mordisquear mis pechos y con su mano derecha agitaba mi clítoris. Aquello era lo que yo estaba deseando, ya empezaban a follarme, y a sentir verdadero placer, estaba llegando al orgasmo pero en ese momento, Javi me levantó e hizo que el pene de Fernando saliera de mi interior bruscamente, me giró y agachándome me puso apoyada con mis brazos en la cama, quedando a cuatro patitas, y no se lo pensó, me introdujo su pene en mi chochito el cual estaba tan mojado que no note el cambio de un pene a otro, este empujaba con fuerza, una y otra vez, me cogió de las caderas y me movía hacia él sin descanso, estaba apunto de correrse, entonces Fernando lo cogió a él del brazo y lo hizo salir de mi, volvió a tumbarse en la cama boca arriba y me hizo tumbarme encima de él y me penetro la vagina, quedando mi culete expuesto a la tentación de Javi, el cual se abalanzó y me penetro por detrás, ya estaba completamente saciada y quería correrme, y ellos seguían penetrándome, cada vez sentía mas placer, cada vez, los sentía mas dentro de mi, no podíamos más, ninguno de los tres dejábamos de gemir, y sentí como Javi se corrió dentro de mi culete, uf que caliente estaba su semen, y Fernando ya no podía más pero le dije, espéra que estoy apunto de correrme, y aguanto, entonces yo empecé a moverme mas y mas rápido, notaba como me llegaba el orgasmo, gritaba de placer, ya no aguantaba más y me corrí, me agache, puse mi boca muy cerca de su polla, quería que se corriese dentro de ella, empecé a lamerla muy rápido, se retorcía de placer hasta que exploto y lleno mi boca de su semen caliente.

Fernando y yo nos quedamos tendidos en la cama, mientras, Javi se vistió se despidió y se marcho.

Yo le dije a Fernando, hoy si que he disfrutado como deseaba hacerlo, ¿nos vamos?, a lo cual el respondió: si ha sido estupendo, pero ya que esta pagado el hotel ¿quieres que pasemos la noche juntos?

Si, es buena idea y sin apenas darnos cuenta, nos quedamos dormidos.

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