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Quiero terminar lo que empezamos...

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Le tengo al lado y le miro, al tenerle cerca algo se mueve dentro de mi, mi corazón late deprisa, las tetas se me hinchan, aumenta mi respiración y mi coño empieza a mojarse. Me entran unas ganas repentinas de tocarme. Esas ganas cada vez aumentan más y más y noto mi humedad en los pantalones. Le miro de reojo, sus manos, esas manos que me vuelven loca, puede que sean unas manos comunes y corrientes para la humanidad, pero a mi me parecen lo mas maravilloso del universo, simplemente me encantan y las querría para mi, para poder admirarlas toda la vida. Le imagino acariciándome el cuerpo, sé que solo con rozarme mi cuerpo empieza a temblar. Ansío poder darle un beso, lamerle el cuello, su lóbulo de la oreja, hundir mi lengua en su boca, se que no puedo pero es lo único que verdaderamente quiero en la vida, poder ser feliz dándole todo, todo mi amor, todo mi sexo, todo. Es lo que siento en lo más profundo de mi corazón.

Se acerca a ayudarme con algo del trabajo, sus brazos rozan mis tetas cuando va a agarrar el raton del ordenador. Mis pezones duros durísimos con el roce de su brazo. Me pide en silencio que me quite el sujetador en el baño y que vuelva, al principio ando un poco reticente, se me han puesto los pezones erectos, la gente se puede dar cuenta,  además las tetas me bailan por debajo del jersey, pero solo pensar en que dentro de un rato mis tetas pueden abarcar sus manos hace que cualquier otra cosa pase a un segundo plano.

Ya en el baño, mientras me quito el sujetador pongo mis manos en mi coño y empiezo a hundir mis dedos en él, como desearía que mis dedos fueran los suyos o que fueran su polla. Tengo unas ganas inmensas de correrme, no puedo hacerlo, me llevaría un rato que no tengo. Tengo que volver a mi sitio en la oficina.

Vuelvo a sentarme con mis brazos cruzados mientras llego a mi mesa para sujetarme los pechos, no quiero que nadie me note los pezones, solo pienso en que me los chupe esa persona que tengo al lado, tan cerca pero a la vez tan lejos. Me mira de arriba abajo, él no se da cuenta de como me mira, pero yo si, se que me desea tanto como yo a él. Solo tengo ganas de que me invite a un café para poder escondernos de todos y pegarnos el uno al otro, es una sensación inexplicable las ganas que tengo de fundirme con él de cualquier manera, solo le quiero tener pegado a mi, olerle, como me gusta olerle y pegarme a él lo máximo posible, abrazarle, acariciarle hasta no poder mas.

Y por fin me invita al café, ya escondidos, me agarra por detrás y me sube el jersey para tocarme las tetas. Como me he mojado cuando he notado el calor de sus manos en mis pechos! Me hubiese desnudado ahí mismo para que hiciera de mi lo que quisiera, tengo que controlar mis ganas pero es taaaan difícil, se lo hubiese dado todo en ese instante. Y cuando se ha agachado a chuparme los pezones ha sido un momento incluso de desesperación para mí, de no poder dejarse llevar por uno de los más increíbles placeres de la vida, sentir a la persona que quieres contigo de esa manera. Su lengua me encanta, y su boca, cuando me chupa los pezones, cuando me besa, cuando me agarra la cara con sus manos, me lo comería en todos los sentidos de la palabra. Ya de vuelta a mi sitio, no he podido trabajar. No me ha importado nada. Ahora estoy en casa, voy a terminar lo que he empezado esta tarde en el baño de la oficina…

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