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Camila, la mami de mi amigo

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Esta historia sucedió en mi adolescencia, mucho antes que otras que relaté, pensé que debía guardarla para mi intimidad porque no quería que al publicarse alguien conocido de ella se pudiese descubrir ese secreto oculto, porque esto sucedió con la madre de mi mejor amigo pero ella al enterarse de mis relatos, quiso que la escribiese lo nuestro, que publicase nuestra historia de amor, así que empiezo a contarles esta relación que comenzó antes que este sublime momento se concretase.

A Camila la madre de Roberto la conocí cuando ingrese en la escuela secundaria, como era una escuela técnica pasábamos buena parte del día en ella y comenzamos a establecer amistades pasajeras y otras más profundas. Así fue que yo establecí esa amistad fiel con Roberto y Daniel, con ellos compartimos las salidas, los estudios, y las relaciones más allá del ámbito escolar, y por supuesto las rateadas. Así pasamos esos 6 años en que fuimos compinches los tres éramos casi uno solo. Esas relaciones terminaron por extenderse a la familia, y todos terminaron en una amistad tan profunda como la nuestra.

Camila en esos primeros años fue simplemente la madre de mi amigo, pero sin darme cuenta en la medida que comenzó mi interés sexual por las mujeres, en ese momento ella pasó a formar parte de mi harén privado. Ella fue la mujer a quien le dedique mi primera masturbación, tenía una foto de ella y mis amigos en un día de pileta y ella estaba con una bikini rosa que insinuaba su cuerpo mostrando las nacientes de sus senos. Ella era casi una segunda mamá para mí, era muy dulce conmigo y esa manera de ser conmigo me hizo sentir atracción por ella, pero solo eso… ella era la mamá de mi amigo.

Cuando estábamos en 4° año, los padres de Roberto se divorciaron, él estaba muy decaído y nosotros fuimos su puntal, su apoyo, y así llegamos al final de nuestros estudios. Yo era el mayor del grupo con 18 años.

En ese mes de diciembre el padre de Roberto nos llevaría a pescar al Rio Salado, saldríamos el jueves y nos quedaríamos hasta el lunes, yo el día miércoles debía rendir Ingles que la tenía previa y que jamás había contado en casa que adeudaba, así que rendir esa materia solo mis amigos sabían de ello. Luego de rendir el examen iría con ellos de pesca.

La mesa por un excedente de alumnos se desdoblo en dos, por lo que yo asé a rendir examen el día jueves por la tarde. Esto me impedía ir de pesca, pero había un contratiempo mayor como haría para ocultar la verdad… mis padres se enterarían de mi mentira… algo debía inventar para no levantar sospechas en casa.

Al enterarse de esto los padres de Roberto, sucedieron dos cosas distintas. El padre dijo que pasase la noche ahí, que rindiese el examen y que luego Camila me llevase a casa y les dijese toda la verdad a mis padres. Camila dijo que si… cuando quedamos solos mis amigos le pidieron a ella que me cubriese… que me ayudase

Pasamos la noche en casa de Roberto Por la mañana temprano mis amigos y el padre de Roberto se fueron. Yo me fui a duchar antes de ir a rendir mi examen, Camila, la mamá de Roberto antes de salir a su trabajo en el hospital (ella era enfermera), y dijo desde el otro lado de la puerta:

C- Se me hace tarde, me voy al trabajo, estudia un poco más… mucha suerte con el examen llamame para decirme como te fue y esperame, vamos a ver cómo podemos arreglar lo tuyo, déjame pensar cómo te puedo ayudar

Se fue al hospital donde trabajaba, que queda a 10 cuadras de su casa. Por la tarde rendí en forma brillante mi examen con un ocho como nota. Le mande un mensaje a Camila para contarle que había rendido bien, se puso muy contenta y me pidió que la espere en su casa para poder charlar sobre mi situación

Yo estaba muy nervioso no sabía que decir en casa si esto salía a la luz, no sabía que tenía en mente Camila pero de lo que si estaba seguro era que ella no cubriría mi mentira, le hable a ella y le dije si la podía esperar en la puerta del trabajo, estaba muy ansioso y no podía esperar más… quería saber que actitud tomaría conmigo.

La esperé en la puerta de su trabajo, al salir ella estaba con su uniforme puesto camisa y pantalón azul y una cartera de mujer colgada del hombro, me saludo en forma efusiva y me felicitó por el examen, ella pasó su brazo por el mío y mientras caminaba dijo:

C- Te agarró así porque ese que está en la esquina, me piropea y me sigue todos los días, por eso a veces salgo más tarde de mi laburo…

Ella estaba hermosa, con su cabello negro azabache, su piel morena y su uniforme ajustadito, sabía que tenía buenos senos, ahora su cola insinuaba dotes que antes pasaron desapercibidas por mí.

Ella notaba mi ansiedad pero dijo:

C- En casa hablamos más tranquilos, pero te voy a cubrir, pero este es un secreto entre tus amigos y yo y no debe salir de ese círculo.

Con sus palabras mi alma volvió a mi cuerpo, en el camino compramos mercadería y otras cosas propias de la cena. Al llegar a la casa dijo:

C- Dame 5 minutos para bañarme, y después charlamos, cuando apague la ducha pone agua para tomar mate

Cuando caminó hacia el baño que obnubilado por su cola nunca antes la había percibido así

Cuando sentí apagar la ducha pegunte si ponía el agua a lo que ella dijo:

C- Si corazón ponela bajo para que no hierva, en 5 minutos salgo

Cuando salió mis ojos se desorbitaron jamás había visto a Camila así, como de costumbre estaba muy elegante, pero nunca tan sensual y provocativa. Cami no era exuberante pero tenía muy bien puestos todos su atributos femeninos que su divorcio hizo dar a conocer, cabello negro azabache enrulado hasta mitad de su espalda, cejas finas y arqueadas, maquilados sus párpados en un tono salmón, ojos marrones vivaces y de mirada seductora, bonita de cara, labios gruesos con un pálido rouge rosado, pequeños aros en su orejas, una gargantilla dorada con su nombre “Cami” en ella, varios anillos en los dedos de su mano, una blusa remera rosa, de anchos breteles con generoso escote que exhibían generosamente las nacientes de sus senos en un tercio, no llevaba corpiño ya que sus pezones quedaban marcados en ella, llevaba puesta además una pollera de jean azul, ajustada al cuerpo que marcaba sus caderas e insinuaba su cola parada, su falda llegaba hasta un poco más abajo de sus rodillas, pero con un tajo en su frente de unos 15 cm por encima de ellas que exhibía sus buenas piernas, y unos zapatos de taco alto tipo aguja. Las medidas de Camila en esa época eran 89-65-92.

Ella estaba sentada frente a mí y mis ojos se deleitaban entre sus piernas y sus senos, pero intentando disimular eses miradas, luego de haber tomado mate se sentó a mi lado y dijo palabras más palabras menos lo siguiente:

“Que Roberto y Daniel estaban muy preocupados por vos y me pidieron, casi me rogaron que te cubriese… y terminaron por convencerme, así que viernes, sábado y domingo la vamos a pasar juntos, no le voy a contar nada a tu mamá, seria doloroso para ella saber que le mentiste… así que vamos a seguir con el cuento del día de pesca, solo tus amigos saben la verdad así que esto no lo debe saber nadie, para el padre de Roberto, yo te llevé a tu casa y le conté la verdad a tu madre. Así que espero que nunca más le mientas ni a tu madre ni a mi”

Llevó su dedo índice a la punta de mi nariz y dijo:

C- Prometido?

G- Te lo prometo, nunca más una mentira a mi mamá y mucho menos a vos

C- Cuando me miras así con esos ojitos dulces y vivaces me derretís; te creo todo inclusive si me decís que las vacas vuelan

G- Créeme es cierto nunca podría mentirte

Entrelazó los dedos de su mano a la mía y dijo:

C- Te creo cielo como no voy a creerte. Te creo y te quiero, sos muy especial en mi vida

Puso mi mano sobre su falda y la suya sobre la mía, así en esa posición la punta de mis dedos rozaba la piel suave y tersa de sus piernas.

Y dijo:

C- Sabes una cosa, me hace muy feliz que estés aquí conmigo, que pasemos estos días juntos

G- Gracias, a mí también me gusta estar con vos

Me soltó la mano, se pegó a mí y dijo

C- Voy a ser sincera con vos, mentí cuando dije que te quería… yo en realidad te amo, te amo desde que te vi por primera vez, no te puedo sacar de mi mente, pienso en vos, sueño con vos, sé que podría ser tu madre pero no lo soy, y no puedo ni quiero callar más este amor que siento por vos… Mientras decía esto empezó a besar mi cara suave y dulcemente y acariciar suavemente con su dedo índice mi pene por sobre el pantalón, y siguió… te amo como nunca amé a nadie en mi vida , sos el hombre que siempre soñé, quiero ser tu novia, tu amante, tu mujer, no importa que… solo quiero estar con vos, abrazarte , besarte, sentir nuestras pieles juntas y sentir como vibra mi cuerpo cuando tu mano me acaricia, cuando tu boca me besa y que no existe nadie más en el mundo cuando hacemos el amor…

Besó dulcemente mis labios, al mismo tiempo que sus piernas se sentaban sobre mí, sus manos rodearon mi cuello y las mías sujetaron su cuerpo rodeando su cintura durante largos minutos nos besamos muy apasionadamente ella era muy fogosa, en el fragor del momento podía ver como el tajo de su falda dejaba al descubierto casi la totalidad de sus piernas, luego de varios minutos ella se incorporó, extendió su mano y dijo:

C- Vamos a la habitación cielo… deseo ser tuya, no quiero demorar más ese momento…

Entramos y nos sentamos al borde de la cama, ella acariciaba mi brazo suavemente mientras decía:

C- Es el instante más feliz de mi vida lo soñé casi a diario, te amo Gaby jamás pensé que pudiese desear tanto a una persona

G- Yo también te amo, sos muy hermosa, no puedo creer que está aquí con vos

No besamos varios minutos, luego ella me hizo acostar en la cama, bajó el cierre de mi pantalón, se arrodillo delante mío, me bajó el pantalón, yo me saqué la remera y ella besó mi vientre, con su lengua con sus besos, me bajo el slip quedando mi pene erguido ella me miró a los ojos, lo tomo con una de sus manos y dijo:

C- Hummm… es hermoso cielo

Empezó a chupar mi pija, dulce, delicada y tiernamente como era ella, yo me paré y tome su carita con mis manos, luego ella se sacó su remera, no llevaba corpiño mis manos masajearon sus senos y me incliné para besarlos, ella gimió apasionadamente, luego siguió chupando mi pene mientras decía:

C- Mi amor, es hermoso, grande suave, tierno me vuelve loca

G- Yo estoy loco por vos Camila, sos mucho más hermosa así semi desnuda te amo, miles de veces te imagine desnuda pero nunca pensé que fueses tan perfecta

Ella deslizaba su lengua por todo el tranco de mi pene y yo cada tanto me inclinaba hacia ella en busca de sus labios para besar su boca y decirle cuanto la amaba.

Se quitó la pollera y se quedó con muy pequeña bombacha de color celeste y siguió chupándola metiéndose mi pene cada vez más dentro de su boca. Luego me incorporé tomé uno de sus senos y lo acaricie suavemente con mi mano mientras al otro lo tomé con mi boca y saboreaba sus pezones erguidos y su boca comenzó a gemir de placer.

Luego nos arrodillamos en la cama, ella pasó su mano por mi cuello y la otra sujetando mi pene, comenzó a masturbarlo, yo besaba su cuello su boca apasionada y su excitante lengua. Entonces se acostó en su cama, se abrió de piernas, corrió un poco su bombacha dejando ver su almejita depilada y rosada y mi boca abierta besó su concha y un profundo gemido nació de su boca, para luego saborear sus labios vaginales hundiendo mi boca en ella. Entonces ella se quitó su bombacha, me besó en la boca y dijo:

C- Sos maravilloso, estoy viviendo lo mejor de mi vida, te amo papito… no sabes cuánto te amo…

Seguí lamiendo su vagina ella acariciaba mi cabellera, mientras su boca daba un concierto de placenteros gemidos, besé su pierna al mismo tiempo que dos de mis dedos entraron en su vagina, (estaba poniendo en práctica todo lo aprendido con Elsa), Camila se revolcaba y gemía sobre la cama mientras sus manos acariciaban sus senos.

Luego subí por su cuerpo besando su tórax, sus senos, y su boca muy dulcemente, ella estaba abierta de piernas y yo juguetee deslizando mi pene por fuera de su vagina, su carita de gozo era un poema, luego coloque mi pene en la puerta de su vagina y lo introduje, su boca gritó y gimió de placer, su vagina súper lubricada hacia que mi pene se deslizase libremente dentro de ella, mientras su boca gemía constantemente.

Entonces un profundo gemido nació de su boca, su cuerpo se agitó violentamente y un interminable orgasmo nació desde lo más profundo de sus entrañas, mientras mi pene seguía recorriendo su vagina.

Cuando se calmó yo me acosté en la cama, ella se subió sobre mí y empezó a chupar mi pene, durante unos pocos segundos, luego se abrió de piernas y me montó introduciendo mi pene en su vagina y comenzó a cabalgarlo, yo la sujeté por sus caderas y ella gemía de placer, yo me recosté contra el respaldo de la cama, después de un rato cambiamos de posición, ella se puso en 4, besé los cachetes de su cola y luego deslice mi legua por su ano, su boca gimió profunda y placenteramente y dijo:

C- Es hermoso cielo, me estas enloqueciendo de placer, nunca viví nada igual

G- Este es solo el comienzo, juntos vamos a vivir días intensos y placenteros, te amo, no sabes cuánto te amo… lo nuestro va a ser más que sexo.

La tomé por las caderas e introduje nuevamente mi pene en su vagina, y comencé a cogerla nuevamente, ella no paraba de gemir, pasamos así un par de minutos, yo ya no podía contenerme más y dije:

G- Voy a acabar cielo, ya no puedo contenerme más

C- No lo hagas amor… muero por sentir tu esperma recorriendo mi entrañas, amo y deseo ese momento de ser tuya por completo

Bombee más aceleradamente el final estaba cada vez más próximo. La aferré por las caderas, y en ese instante mi pene estallo en miles de convulsiones lanzado dentro de su cuerpo torrentes de semen, al mismo tiempo que su cuerpo se agitaba en miles de convulsiones.

Cuando nuestros cuerpos se aquietaron ella se recostó boca abajo sobre la cama, yo acaricie sus nalgas redondas y las besé y chuponee a tal a punto que marque uno de sus cachetes, se lo dije y ella respondió:

C- No importa papi, todo mi cuerpo es solo tuyo y cuando no estemos juntos para recordarte más voy a bajar mi bombacha y al mirar tu boca en ella voy a saber que vos estuviste ahí.

Seguí besando y chuponeando su cola, me acomode y con ella acostada, volvía introducir mi pene en su vagina en medio de sus gemidos de placer, después de un rato, ella me montó, poniéndose frente a mí y comenzó a cabalgar mi pene, ella no paraba de gemir, después de unos breves minutos así sentí como su vagina se contraía y su cuerpo volvía estallar en miles de convulsiones.

Cuando su cuerpo se calmó y sin que saliese mi pene de su vagina ella se recostó sobre mí y nos dimos miles de dulces besos, estuvimos así durante largo tiempo. Nos duchamos juntos, nos cambiamos y fuimos a comer a un restaurant, lo hicimos tomados de la mano, dela cintura, besándonos, sin importarnos nada y si ocultar este amor que nos unía.

Volvimos y nos acostamos juntos, volvimos a tener sexo y luego nos dormimos abrazaditos, besándonos constantemente, ese fue el comienzo, los días siguientes vivimos casi todo el tiempo en la cama, disfrutando de nuestros cuerpos y de sexo intenso.

Seguimos viéndonos durante algo más de un año, luego tomamos diferentes caminos, ambos sabíamos que a pesar de lo que sentíamos era imposible seguir con esto.

Después nos veíamos de vez en cuando, charlábamos por TE y a veces volvíamos a tener sexo. Y este relato lo hice a pedido suyo, quiso que nuestro amor se plasmase en esta página… Hasta la próxima

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