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La madre de mi amigo, una diosa (1)

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Desde que conocí a mi mejor amigo sentí una fuerte atracción por su madre, es sin duda la mujer más bella y escultural que he tenido el placer de ver y disfrutar. Su madre, a quien llamare en este relato como Paola, es una mujer madura con unos 38 años en ese entonces, de un cuerpo escandalosamente escultural, una mujer alta de unos 1,70 aprox. de pelo castaño y ojos del mismo color, muy hermosa, con un par de tetas increíbles, muy grandes y de pezones bien parados de color marrón, un vientre algo abultado pero firme debido a su enorme cintura, un culazo precioso, bien grande y redondo, con unas piernas muy voluptuosas y grandes. Es la definición de milf, una mujer increíble y espectacular.

Con mi amigo formamos una estrecha amistad que me permitía visitar su hogar regularmente e incluso quedarme a dormir por lo que enseguida puse mi atención en su madre, quien siempre vestía de manera increíble con jeans ajustados que resaltaban su culo y poleras ajustados que apenas si aprisionaban sus enormes tetas. Lamentablemente en esos inicios se encontraba casada pero ya era posible ver la ruptura que me permitió disfrutar a mí, aunque ella siempre se comporta de muy buena manera conmigo sin dar indicios de nada. Todo comenzó a cambiar un verano en que mi amigo me invito a su casa un fin de semana, se encontraba afectado por las constantes peleas de sus padres, de las cuales culpaba a su hermosa madre de celos, así que accedí y no necesariamente por amistad.

En ese entonces yo y mi amigo contábamos con 18 años y solo pensábamos en sexo y mujeres, así que mis intenciones ese fin de semana eran espiar de alguna manera a su madre, su padre no se estaría en casa así que era mi oportunidad. La tarde del día Viernes salimos a su patio para estar un rato en la piscina, no llevábamos mucho tiempo cuando sin esperármelo su madre apareció en un diminuto bikini, me quede con la boca abierta y con el pene erecto de golpe. Se veía espectacular, tenía puesto un bikini negro muy ajustado, la parte de arriba cubría el pezón y dejaba fuera sus enormes y voluptuosas tetas, la parte de abajo cubría su sexo pero por atrás solo cubría la raja dejando a la vista de todos sus escandalosos cachetes. Nos pidió permiso para venir a leer y tomar el sol, disculpándose por su bikini, yo intente apartar la vista pero estaba en shock, era espectacular, semejante cuerpo tan voluptuoso. Se sentó y yo no pude sacar mi vista de sus tetas, ni siquiera hice empeño de mirar a otro lado y por un momento de cordura decido mirar su rostro y veo que me estaba observando fijamente con una mirada casi de reproche pero su boca mostraba una sonrisa, me hice el tonto y tomo mi toalla para cubrir la erección que se salía de mi bañador y me disculpe diciendo que tenía que ir al baño. Apenas entre comencé a pajearme con fuerza y termine con una espectacular corrida recordando su increíble cuerpo, desde ese momento me masturbaba pensando solo en ella.

Esa tarde, mi amigo y yo nos encerramos en su pieza a conversar y a jugar algunos videojuegos pero resulta que uno de los controles estaba en la pieza de su madre y me envió a mí por ellos. Me levante y me fui a su pieza pensando en todo tipo de situaciones, así que me detuve frente a la puerta y en vez de tocar entre de golpe y pude ver una hermosa imagen. Paola se encontraba de espaldas secando una de sus voluptuosas piernas apoyada en la cama ocupando solo un calzón que era tragado por su enorme culo, siguió recorriendo con la toalla sus torneadas y grandes piernas sin notar mi presencia, hasta que mientras hipnotizado en su enorme culo note como sus firmes carnes se tambaleaban con cada movimiento y pude divisar sus tetones de lado bamboleándose por lo que se me salió un gemido de placer. Ella dio un salto y se tapó rápidamente con la toalla sin dejarme ver nada más, apenas podía hablar y me disculpe como pude, ella visiblemente molesta y sorprendida me indico donde estaba el control y que para la próxima tocara la puerta. Mi pantalón parecía una carpa y sé que lo vio pero salí lo más rápido que pude.

Ya de noche no dejaba de pensar en Paola sema desnuda y mi erección ya no daba para más, o me pajeaba o terminaría llenando de semen el pijama. Me levante muy despacio y entre al baño principal para empezar a pajearme, estaba de lo mejor en mi paja a ojos cerrados cuando la puerta se abre de golpe y para mi sorpresa era la madre de mi amigo vestida sola con una ajustada polera y un calzón pequeño, ambos nos quedamos mirándonos, yo directamente a sus piernas y su coño y ella a mi pene, se disculpó y cerro la puerta de golpe. Yo no pude contenerme y con eso eyacule pero luego me invadió el miedo, no paraba de pensar en la bronca que me llegaría y si le decía a mi madre. Por suerte nada de eso paso y todo quedó en nada, me siguió tratando el resto del fin de semana tan cariñosamente como siempre y yo tampoco me atreví a disculparme.

La madre de mi amigo 17Despues de esos eventos pasaron meses, en los cuales me masturbaba recordando esos eventos e imaginandola desnuda, luego me entero por parte de mi amigo que sus padres se divorciarian, su padre engañaba a su madre con la secretaria y el se iria con su padre por lo tanto no nos veriamos tanto como antes. Al principio me molesto no ver a mi amigo pero luego recorde que su fantastica madre estaria sola y con mis hormonas pensando por mi me convencí de podria follarme a su madre. Un día de esos fui a su casa, pensando como un hombre podia ser tan tonto como para engañar a esa diosa con otra mujer, pensaba que la secretaria deberia ser mas que espectacular (y lo es pero ella entra en la historia mucho despues). Al llegar Paola me recibio en bata, en su rostro se notaba que no la estaba pasando bien, asi que mis ideas se desvanecían aunque no perdi detalle de sus piernas, pregunte por mi amigo fingiendo ingenuidad y me respondio que no se encontraba aqui pero podia pasar si gustaba, que necesitaba la compañia con una debíl sonrisa que me hizo sentir muy mal. 

Decidi pasar un rato con ella, no quize seguir fingiendo que no sabia nada asi que le pregunte por su estado y solo rompio a llorar asi que la console unos minutos mientras la abrazaba al sillón. En esa posición tenia cruzada sus piernas y una de sus enormes piernas estaba totalmente a la vista, mi vista pasaba de sus potentes muslos hasta sus hermosos pies, apenas escuchaba lo que me decia y estupidamente no aguante y comence a acariciar su muslo con impetu por lo cual se paro separo de mi de golpe y me miro indignada, muy molesta se puso a reclamarme por propasarme y luego mas se enojo diciendo que todos los hombres eran iguales y que no me aguantaria eso, me miro fijamente y me dijo que si intentaba algo no solo me daria una cachetada pero tambien una patada en los testiculos y todos se entarian de lo hice. Se fue muy molesta a su pieza y yo quede de piedra en la sala, pasaron los minutos y decidi disculparme antes de irme, apenas entre en su pieza me miro y se disculpo antes que yo dijera algo, me abrazo y me beso la mejilla, pese al miedo el contacto hizo que tuviera otra erección.

Me miró fijamente y me pregunto tímidamente si yo le gustaba, la mire estando mudo y ella siguió diciendo que sabía que sí, desde esa noche que me sorprendió masturbándome y que necesitaba esa atención de un hombre. Con esas palabras se abrió la bata y la dejo caer, quede con la boca abierta al ver semejante mujerón, sus tetas al fin a mi vista, grandes y apetecibles, firmes con ambos pezones levantados y erectos, su vientre hermoso que terminaba en su coño con una delgada línea de pelo y sus potentes piernas con sus delicados pero excitantes pies. Yo ni me moví, estaba paralizado y con el pene muy erecto, ella sonrió y me beso lentamente, con eso agarre confianza y como un desesperado le pasaba las manos por todo su cuerpo, primero las tetas que agarre con muchas ganas, muy suaves y grandes, luego me fui directo a su culo, mis manos apenas si alcanzaban a cubrirlo, mientras le agarraba las nalgas ella empezó a mover el culo mientras nos comíamos a besos como desesperados. Me bajo con ansias el pantalón y saco mi pene que salto directo a su cara, me sonrió y me dio un largo beso en el glande, era tanta mi excitación que solo podía gemir e intentar no correrme tan luego, pero comenzó una sesión de sexo oral increíble que me hizo acabar mucho semen que termino por toda su cara. Me disculpe pero dijo que no importaba, que sentía tan bien causar esa reacción, nos besamos y yo no paraba de acariciarle las tetas, el culo y las piernas.

Por un momento pareció no estar seguro y dijo que no deberíamos seguir pero empecé a chuparle sus tetones con lo cual empezó a gemir y me agarro el pene que ya estaba erecto de nuevo, me entretuve un largo rato en sus tetas hasta que me separo y con una voz de gata me dijo al oído que lo quería dentro, dirigió mi pene a la entrada de su vagina y se sentó de golpe encima mío, comenzó a cabalgar y sus tetas se bamboleaban de un lado a otro mientras le agarraba el culo como si mi vida dependiera de ello. El verla desnuda por primera vez, más la excitación y ganas que tenía me traicionaron y le dije que me venía, ella se recostó sobre mí y siguió movimiento sus caderas de manera circular sobre mi pene, termine acabando dentro de ella con fuertes gemidos de parte de ambos.

Me dijo que tenía que irme pero que volviera mañana por más, se puso la bata y me saco rápido de su casa. Volví al otro día y me abrió la puerta vistiendo un sexy conjunto de ropa interior negra que resaltaba sus tetas y una tanga que apenas cubría su coño, me arrastro hacia adentro y me llevo a su pieza mientras me sobaba el pico y yo le manoseaba sus enormes nalgas, me sentó y me comenzó a bailar, me pregunto si esto es lo que imaginaba cuando me pajeaba, le respondí que cada día lo hacía, ella solo reía mientras se sacaba el sostén revelando sus enormes tetones. Me acerca sus tetas y las chupe con ganas, tiene los pezones más ricos que he probado, estando en los mejor de chupar tetas suena el timbre, ella se acerca a la ventana y me dice que es su ex marido. Rápidamente se puso el sostén y me dijo que la esperara aquí sin hacer ruido, yo la mire extrañado y le pregunto si no se cubriría pero bajo en ese sexy conjunto de ropa interior.

Espere unos minutos pero la curiosidad pudo más, no entendía por que bajo así sin cubrirse, baje la escalera sigilosamente y me senté en la curva donde puede ver a ambos hablando. El tipo le estaba diciendo que sentía lo que había pasado, que fue una estupidez y que el verla así le había recordado lo rica que era, Paola estaba de brazos cruzados solo escuchando, su ex se acercó y le seguía diciendo que lo lamentaba mientras se acercaba a cada palabra, finalmente le pidió que al menos tuvieran una última vez y la beso poniendo una de sus manos sobre su culo. En ese momento ya me estaba molestando porque me quedaría sin ese tremendo mujerón pero aun así sentía excitación por la escena así que seguí mirando. El tipo con la otra mano termino de agarrarle el culo y cuando ya pensaba que era seguro que se la chuleaba de la nada la madre de mi amigo levanta una de sus piernotas y le da un rodillazo en los testículos al padre de mi amigo, su piernota quedo enterrada en su entrepierna, el pobre tipo solo pudo agarrarse los huevos mientras gemía y se retorcía en el piso mientras Paola le decía que era un cerdo. El sujeto se veía en mucho dolor, incluso estaba perdiendo mi erección porque de solo ver ese rodillazo me llego a doler a mí, Ella lo observo un rato atentamente hasta que le dijo que cuando se pudiera parar que se fuera de su casa.

Me vio en la escalera y me indico que subiera, entre a la pieza y se abalanzo a besarme, me miro sonriendo y me dijo por eso no te conviene hacerme enojar (lamentablemente lo experimente debido a unos problemas que hablare más adelante), me empujo y se despojó de su ropa interior mientras de golpe se sentó sobre mi pene mientras cabalgaba con los ojos cerrados y una cara de placer. Me levantada a besarle sus tetas que rebotaban sin parar, cambiamos de posición con ella abajo mientras entraba y salía de su rico y acogedor coño, pero mi excitación me traiciono otra vez y le dije que me corría, ella presiono sus talones contra mi culo, me derrame en su interior mientras me disculpaba otra vez, nos besamos y me dijo que ya iría aprendiendo con ella.

Y así empezamos a tener sexo y varias situaciones locas se dieron en el camino y espero poder contarlas en otros capítulos.

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