Nuevos relatos publicados: 13

Lucía y los amigos de su hijo (Segunda parte)

  • 14
  • 22.815
  • 9,34 (29 Val.)
  • 1

Lucía seguía disfrutando de su reciente orgasmo y trataba de entender como ese chico sin experiencia la había hecho acabar de tal forma, estaba ensimismada recordando que los 3 amigos de su hijo habían derramado su semen dentro de ella, aunque Arturo lo había hecho solo en su boca intuyo sus intenciones de hacerlo de nuevo cuando lo vio caminando hacia ella con su gorda verga apuntando al cielo.

Cuando llego a su lado le dio la mano y la ayudo a ponerse de pie, camino abrazándola y ella sentía que sus piernas no la soportaban, llegaron a un sillón grande donde Arturo se sentó y la jalo para hacer que se sentara en sus piernas y encargándose en el respaldo del sillón la jalo quedando acurrucados como dos enamorados. El chico la acariciaba lentamente pasando sus manos por todo su cuerpo haciendo sentir a Lucía un cariño que hace tiempo nadie le demostraba, se puso a observar al amigo de su hijo, tenían la misma edad pero Arturo era mucho más grande en estatura y grosor, tenía una prominente panza y su cuerpo era grueso y fuerte, cosa que pasaba desapercibida por su aún tierna cara de niño y su forma inocente y tierna de comportarse, los labios del joven estaban recorriendo su hombro y cuello llegando a sus labios que abrió para recibir la lengua en su interior, no pudo evitar recordar como esa misma lengua había provocado su primer orgasmo de esa noche y el primero que le habían arrancado de esa manera, el chico la tenía bien abrazada y pasaba de sus labios a sus senos que ya estaban un poco rojos de tanto ajetreo que habían sufrido ese día. Lucía volvía a sentir como su vagina se mojada mientras la no muy grande pero sí bastante gorda verga de Arturo la punteaba desde abajo, queriendo regresar el placer que la hacía sentir se acomodó sentándose de frente a al chico con las piernas a los lados de las de él poniendo la cabeza de su miembro en la entrada de su vagina, con ese roce el amigo de su hijo quiso dar un golpe de cadera para metérsela pero la madura lo detuvo diciéndole al oído con voz sensual que la dejara a ella darle placer, que contuviera un poco sus ganas porque nunca habían tenido entre sus piernas un mástil de esas dimensiones. Alagado Arturo dejo a su madura amante hacer su voluntad y fue sintiendo como se iba empalando poco a poco en su miembro que le transmitía como iba abarcando y abriendo al máximo la vagina de la mujer, cuando por fin sintió las nalgas reposar en sus piernas tomó a su amante de la cintura y besaba sus tetas, bajo sus manos acariciando sus nalgas y espalda mientras la mujer movía sus caderas si sacar nada de la verga que le estaba provocando mojarse cada vez más, el joven estaba experimentando un placer nunca imaginado y aviso a su compañera que quería correrse, recibiendo como respuesta el aumento en la velocidad de los movimientos de la madura que llegaba al orgasmo junto a su joven amante mezclando sus fluidos y gritos de pasión.

Lucía habían quedado descansando sobre Arturo que aún tenía su verga dentro de la vagina de quien tomara su virginidad sintiendo como salían las ultimas gotas de semen dentro de ella. Viendo el escultural cuerpo de ella Gonzalo se abalanzó levantándola de su posición y llevándola casi cargando al lado de su robusto amante, estando de rodillas el la obligo a recargar su cabeza en el respaldo del sillón dejando su culo en pompa el cual emociono más al joven que metió desde atrás su verga en el chorreante coño de la madura que lo recibió con sorpresa y gusto, en esa posición el musculitos daba fuertes embates contra las nalgas de la madura que colaboraba dando empujones hacia atrás para recibir más placer, Arturo que seguía a su lado estaba embobado viendo como las tetas de su amante colgaban sin control en cada embestida que recibía y cuando cruzo miradas con ella instintivamente fue a besarla metiendo su lengua tan dentro como podía.

Ahí estaba la madre de Daniel besando a su amigo mientras el otro le perforaba constante el coño desde atrás provocando sonidos por los fluidos que salían de él, que ya contaba con 3 corridas, una de cada una de los chicos, de pronto Juan que había estado admirando el espectáculo también quiso participar tomando del cabello a Lucía la acomodo para poder recibir su larga pero delgada verga en la boca, sin ninguna contemplación el chico la metía y sacaba hasta el fondo como si se estuviera cogiendo la garganta de la madura, provocando que saliera un exceso de babas y lágrimas con algunas arcadas que la mujer apenas pudo contener mientras su otro amigo continuaba embistiendo desde atrás. De pronto Gonzalo le pidió cambiar posiciones ya que él no había probado la boca de su amante compartida, cambiaron posiciones y ahora era Gonzalo quien recibía el calor de la lengua y Juan quien perforaba como animal desde atrás el coño, viendo esas nalgas rebotar en sus piernas la comenzó a azotar con la palmas de las manos haciendo que Lucía emitiera sonidos guturales que eran callados por le verga en su boca que llegaba hasta la garganta.

Por mucho que habían eyaculado antes los jóvenes no podían aguantar recibiendo tal placer y Gonzalo avisaba que estaba a punto de correrse de nuevo, Juan que había estado embobado viendo el deseable ojete de la madura espero el momento preciso en que su amigo metía su grande polla hasta la garganta de la bella dama para sacar su verga y apuntando al ano a su alcance la metió de un jalón hasta la mitad. Lucía no desconocía el sexo anal pero al recibir por sorpresa una nueva verga quiso gritar y sacarla pero las manos de Gonzalo en su cabeza y la verga en el fondo de su garganta le impidieron hacerlo, Juan terminaba de meter su verga hasta el fondo cuando la mujer por fin pudo tomar aire y gritar que lo hiciera con cuidado o le rompería el culo, cosa que no importo al joven que seguía metiendo y sacando la verga de ese apretado agujero, Arturo que volvía a tener la verga en condiciones tomo la cara de Lucía preguntando amoroso si estaba bien, recibió solo una sonrisa por respuesta, entonces le aviso que quería hacerla gozar otra vez y dirigiendo a su compañero pusieron otra vez a la dama sobre las piernas del gordo, la madura sabiendo lo que planeaban le pidió hacerlo con cuidado mientras bajaba ensartándose nuevamente la gorda verga de Arturo en su vagina sin que Juan sacara la suya del culo, la mujer sintió placer como nunca antes al sentir hasta el fondo dos vergas jóvenes perforándola al mismo tiempo por primera vez en su vida.

La escena era por demás excitante, al oír gemir al trio de amantes Gonzalo se había vuelto a empalmar y se masturbaba con calma, de pronto Juan entre gritos derramaba su orgasmo en el culo de la madura, no duro mucho tiempo solo ya que ahora Gonzalo era quien pretendía meter su verga, que era más grande, en el recién usado culo, Arturo abrazo a Lucía por sus nalgas y las separo para dejar el camino abierto a su amigo que comenzó a meter poco a poco su verga por primera vez en un ano, Lucía no paraba de gemir y cuando sintió que su estaba llena gritó que la mataban del placer arañando y mordiendo el hombro del joven que bajo ella sentía aún más apretado su coño que parecía querer sacarle todo el semen posible, Gonzalo disfrutaba de cada movimiento del apretado culo en donde tenía su verga hasta el fondo y queriendo incrementar el placer comenzó a meter y sacar su miembro, su compañero hizo lo mismo y tomaron buen ritmo al rellenar de verga a su entregada presa que gozaba como loca, tanto que exploto en un intenso orgasmo con un grito que debieron oír a kilómetros, pero cómo los jóvenes que le perforaban no dejaban de penetrarla encadenó otro a los pocos segundos y otro más que termino con la resistencia de los jóvenes que llenaron sus agujeros de leche casi al mismo tiempo.

Así como estaban Gonzalo tomo a Lucía desde atrás y la levanto sin sacar su polla del interior que continuaba dura y palpitando, al quitar la verga de su vagina dejo salir un reguero de esperma que mancho a Arturo por completo, cuando la tenía en el aire camino unos pasos y la dejo bajar al piso pero ella no se pudo sostener, sus piernas le temblaban y no tenía fuerza, Juan le ayudo a dejarla sobre otro sillón y la madura mujer quedo ahí tendida tratando de recuperar el aliento. Cuando todos estaban más relajados Juan se acercó a darle agua y a Lucía le causo gracia que el joven se preocupara de su constante hidratación, después de unos minutos el mismo Juan se ofreció a llevarla a la recámara donde había un baño para limpiarla ya que de sus agujeros seguía escurriendo semen y manchaba todo, la llevo casi cargando entraron a la recamara, al fondo tenía un baño amplio donde había una tina para dos personas, entraron en ella y el joven dejo correr el agua, Lucía sentía muy rico como recorría el agua toda su piel hasta que Juan empezó a sobar sus tetas bruscamente con jabón, luego lo hizo con su abdomen plano y espalda, fue bajando hasta pasar el jabón por la vulva de la mujer que sentía desagradable el roce sin cuidado del jabón aunque no podía dejar de excitarse, luego de un rato paso el jabón entre sus nalgas por el culo y fue bajando por cada pierna, cuando volvió a levantarse se podía apreciar que su delgada y larga verga estaba dura de nuevo.

La madura sintió como el chaval la hacía girar y luego la jalaba hacia abajo para sentarse sobre él, quería que la bella mujer restregara sus nalgas en su verga hasta ponerla bien dura, luego la hizo levantarse y que pusiera sus manos sobre la orilla de la tina para sin miramientos enterrarle la polla de un jalón por la vagina, estuvo bombeando un rato y luego decidió volver a usar su ano, igual que la vez anterior la saco de su vagina y se la metió por el culo, volvió a repetir el cambio una y otra vez mientras azotaba con fuerza sus nalgas y tiraba de sus tetas desde atrás, el maltrato a la madura mujer se intensificaba junto al ritmo de las acometidas, mientras le jalaba el cabello a modo de riendas le gritaba que era una perra, una zorra buscona que calentaba a los hombres por diversión, y otras landeses que, por extraño que le parecía a la madura mujer, hacían que se excitara, de pronto entro al baño Arturo y viendo el maltrato al que sometía Juan a la madre de su amigo quiso quitarlo de encima, pero el agresivo joven solo atinó a decir que ella lo estaba disfrutando como la puta que era, Lucía gemía y pedía al robusto chico que se tranquilizara, teniendo la polla del chico a escasos centímetros Juan hizo que abriera la boca y de un empujón en su culo la hizo tragar sorprendiendo al tranquilo chico que no dejaba de ver con rabia como su amigo maltrataba a la dama mientras abusaba de ella, cosa que aunque no le agradaba y junto a las caricias bucales de la señora lo hizo empalmarse de nuevo, cuando Juan no aguanto más, tirando del pelo a Lucía la hizo hincarse frente a él para terminar eyaculando en su cara salpicando el pelo y sus tetas, todavía con los restos del ultimo chorro escurriendo de la punta la embarro por toda su cara esparciendo el semen y le ordeno limpiar su verga mientras la metía en su boca, la bella dama no se negó y en unos minutos dejo el miembro reluciente, separándose de él, pero el malicioso Juan no dejo que se alejara mucho, pues tomándola del cabello comenzó a orinar sobre ella mojándola por completo y al final dejándola tirada en la bañera llena de orines se retiró del lugar.

Arturo no podía dejar así a su amada, entro con ella a la tina y dejo correr el agua mientras la enjuagaba los fluidos de su amigo, a estas alturas Lucía era una muñeca ya sin fuerzas que era movida con sumo cariño por el joven amigo de su hijo, era tal el cariño que la madura sin aviso se colgó del cuello del joven dándole un cariñoso beso que respondió al instante con la erección del joven, ella le dijo estaba muy cansada pero quería regresar la ternura y el cariño que sentía por los cuidados del joven, el gordito se alegró pero primero debía descansar y reponerse, la termino saco de la tina completamente limpia y la llevo hasta la cama donde se recostó junto a ella. Lucía estaba todavía caliente, Juan por la brusquedad del trato no la había dejado terminar y recostada sobre el gordito le pregunto porque no había el usado su culo, pregunto si no le gustaba y le parecía feo siendo de una vieja, cosa que por supuesto negó el joven y solo argumento que no la quería lastimar ya que sabía que su verga no era tan larga como la de sus compañeros pero si mucho más ancha, a la madura mujer esto le sonó de más romántico y se subió sobre la barriga del joven dándole un tremendo beso y le dijo que si era su deseo, estaba dispuesta a intentar darle placer con su ano, siempre y cuando se lo dilatara lo suficiente para no darle dolor. Tomando la iniciativa la madura se giró sobre él poniendo su culo en la boca del joven que entendió claramente su parte y comenzó a lamer el delicioso ojete de su amor platónico, ella se acostó sobre la prominente barriga del joven y comenzó una rica y lenta mamada para mantener la erección del hombre, solo sacaba esa verga de la boca para ir diciendo como ir ensanchando su orificio anal con los dedos y la saliva del chico que empezaba a desesperarse por el deseo de poseer ese rico agujero, cuando Lucía creyó estar lista, se dio la vuelta y coloco la punta de la gorda verga en su ano para ir metiéndolo lentamente, el tiempo se le hizo eterno a Arturo que ya deseaba sentir lo que era coger ese culo que devoraba y apretaba su verga dándole un placer descomunal, cuando estuvo totalmente adentro la mujer sudando suspiro diciendo al joven que era lo más grande que había metió alguna vez ahí y le provocaba tanto dolor como placer, esto último fue creciendo mientras la madura subía y bajaba dando gritos, estaban gozando de lo lindo cuando sorpresivamente entro al cuarto Gonzalo que al ver a la dama ensartada por la verga de su amigo quiso participar y se acercó a la boca de ella para que le diera una rica mamada pero a su compañero no le agrado tener tan cerca de su cara el miembro del recién llegado por lo que propuso cambiar de posición. Ahora es Gonzalo el que esta recostado en la cama mientras Lucía le daba una tremenda mamada a la verga que más le gustaba de los 3, Arturo no perdió el tiempo y volvió a encular a la madre de su amigo tomando sus nalgas para mejorar las penetraciones, que hicieron mella en la excitada mujer, tuvo un orgasmo por primera vez sin estímulos vaginales, fue la primera vez que sintió que algo en su culo le daba tanto placer y habría gritado sino fuera porque en ese momento su otro amante había logrado meter por completo su miembro en la boca de la madura llegando hasta su garganta y dejándolo ahí unos momentos para después soltar la cabeza de Lucía que tomo aire como si se estuviera ahogando. El orgasmo alentó a los dos jóvenes y ahora Gonzalo, queriendo disfrutar más, se metió bajo la madura hembra hasta colocar la punta de su verga en la vagina para después hacer que ella se metiera todo el instrumento hasta el final, con su reciente orgasmo la madura estaba más sensible y comenzó a encadenar orgasmos otra vez y a gritar de placer, nuevamente apretaba involuntariamente los miembros dentro de ella con sus espasmos haciendo que los jóvenes eyacularan en su interior dando gritos, el primero fue Arturo que al terminar saco con cuidado su verga asombrado por el tremendo boquete que ahora era el culo de su amada hembra.

Lucía estaba todavía recostada sobre Gonzalo sintiendo como la verga de este iba desinflándose y como volvía a escurrir semen por sus piernas, Arturo aún estaba de píe cuando nuevamente entro alguien al cuarto dando un portazo y dejando a los dos chicos sin habla al ver a Daniel, el hijo de la mujer que acababan de rellenar de semen, recargado con una mano en la puerta y gritando que eran unos hijos de puta.

(9,34)