Nuevos relatos publicados: 11

Trío gay en vacaciones

  • 4
  • 18.125
  • 8,60 (5 Val.)
  • 0

Me encontraba de veraneo en una localidad costera de la provincia de Alicante, disfrutando de la playa y el buen ambiente, cuando recibí en el móvil una llamada de un amiguete del norte de España que me indicaba quería pasar un fin de semana en Murcia o alrededores. Yo enseguida le ofrecí el apartamento donde me hallaba, pues hasta una semana después no llegarían mis familiares y disponía de varios días para estar juntos.

Le indiqué el lugar pues estaba muy cerca de Torrevieja en una serie de apartamentos y tras llegar y aparcar en la zona, nos saludamos y abrazamos pues hacia meses que por el trabajo no nos habíamos visto, si bien a través del teléfono y el correo electrónico estábamos en contacto permanente.

Llegó a media tarde tras varias horas conduciendo y prefirió dormir la siesta pues estaba cansado. Este amigo es gay como yo y se llama Félix y cuenta con 35 años. En la tarde salimos a dar una vuelta por la playa y ya en la noche estuvimos solos en el piso. Ambos andábamos desnudos por la vivienda sin importarnos si nos veían desde los pisos de alrededor pues no conocíamos a nadie ya que suelen alquilarse a turistas y españoles y además tampoco nos importaba mucho que nos vieran así.

Una vez cenamos en casa, salimos a pasear por la zona que se hallaba llena de gente y tras ello nos acercamos hasta Torrevieja. Allí estuvimos paseando también y conocimos a Cándido un chaval de unos 29 años muy bello que enseguida nos llamó la atención. Se encontraba en una cafetería. Tras entablar conversación con él, nos dijo que era de Alicante y que estaba por allí de vacaciones.

El era alto, 1,80 con barbilla y bastante atlético. Tanto Félix como yo medimos un poco menos y tras tomar unas cervezas le invitamos al piso. Al llegar Félix y yo quedamos de nuevo desnudos y pronto se unió Cándido. Comenzamos a besarnos y a toquetearnos y enseguida estábamos a tope. Yo que mas bien soy pasivo fui follado por Félix mientras veía a Cándido con una buena polla en erección, casi 20 centímetros, que me la enchufó por la boca. Así estuvimos un buen rato hasta que mi compañero del norte me anunció que se venía y tras sacármela me arrojó en toda la cara su leche que yo relamí pues sabe que en anteriores ocasiones me gustaba probarla. Ante ello Cándido se corría momentos después tragando parte de su lefa que también me llegó al cabello.

Hicimos un breve descanso para tomar unos cubatas y de nuevo Cándido quería guerra y fue mi colega Félix quien le ensartaba en su boca la polla, mientras yo recibía en mi ano la vergota de Cándido que me produjo algo de dolor dado su grosor, pero tras unos minutos de resistencia, entraba finalmente y de nuevo me follaba este alicantino que tras casi un cuarto de hora se corría en mi pecho, al igual que Félix que también me eligió a mi para correrse.

Al final en la cama matrimonial de la vivienda estuve acostado con Félix y poco dormimos porque durante la noche hubo toqueteos mutuos, mamadas y caricias, mientras el "invitado" Cándido dormía en otra habitación contigua y nos contó al día siguiente que se hizo un par de pajotes durante la noche.

La jornada del domingo sirvió para que yo me corriese en la boca de Cándido que me pidió descargase toda la leche en su boca y así lo hice, mientras mi compañero Félix seguía medio dormido, tras hacerle yo una exuberante paja a Cándido que tardó bastante en eyacular sobre mi espalda. Minutos después acerqué en mi vehículo a Cándido hasta Torrevieja donde le esperaban varios amigos para volverse a Alicante.

Al filo del mediodía mi amiguete Félix iniciaba su viaje hasta tierras asturianas, pero antes volvimos a follar el y yo como despedida de ese fin de semana. Como siempre iniciamos el precalentamiento con caricias y besos y pronto su verga alcanzó el máximo y comenzó a insertarla en mi agujero, mientras me pajeaba la polla. Casi nos corrimos al unísono mientras un beso apasionado sirvió como despedida momentánea a la espera de que yo pueda acercarme a tierras del Principado a devolverle la visita y tener de nuevo sexo como ocurre cada vez que podemos y tenemos ocasión.

(8,60)