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Carmen la diseñadora gráfica

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Carmen y yo habíamos trabajado en un par de ocasiones para mi anterior empresa y nuestra relación era excelente.

Comprendía exactamente mis ideas y le daba forma con una maestría increíble. Su larga experiencia en el diseño gráfico era muy evidente y sus ideas estaban siempre muy cerca de un toque tremendamente revolucionario sin salirse del marco clásico que tanto me gusta a mi. Su estilo de fotografía lo consideraba siempre como un ideal dentro de mi profesión. Reflejaba exactamente el estilo personal tan propio de Carmen , sus cuarenta y cinco años, confesados sin ningún tipo de rubor , su elegancia clásica, con un ligero toque de fashion victim era el puro ejemplo que plasmaba en su trabajo.

Aquel día llevábamos casi 9 horas volcados sobre el proyecto de una nuevo catalogó, en aquel tiempo en medio de algunas horas de cierta tensión y otras se sanas bromas, mezcladas con también con conversaciones personales, teníamos casi completa la maqueta con la idea que le había propuesto.

Para cerrar la tarde casi ya noche nos propusimos darle un repaso a la maqueta. Sentados en aquel comodísimo despacho , cada uno en un lado de la mesa , disfrutando de un refresco fresco comenzamos a repasar relajadamente las hojas recién impresas.

Ella estaba a pesar de la horas de trabajo increíblemente bella, como había echo en algunas otras ocasiones la observe detenidamente mientras ella con la vista fija en el papel y el portatil comentaba los detalles mas significativos de la maqueta .Yo mientras tanto recorría con una mirada , seguro que libidinosa, su cara , su cuello y su escote ligeramente entreabierto. Por dos ocasiones que levantó la mirada me sorprendió enganchado a los delicados remates de la copa de su sujetador.

-Te estas empezando a relajar un poco y durante esta tarde deberíamos cerrar al menos los detalles de la selección de colores y tramas.

- Si, si que me he perdido durante un rato, pero es que después de estas horas me gusta dejar escapar un poco mente para poder volver a esto, si no acaba en mi sofá en media hora. La verdad es que ya no distingo ni los colores.

- No es de cansancio idiota , es de la impresión en ese formato, parece mentira después de todos estos años. Espera que te muestro.

Se levanto de la mesa, su mano giraba el portatil y mientras ella rodeaba la mesa no puede retirar la mirada de sus ojos. Se apoyo sobre un lateral de mi sillón , apoyando copletamente su pecho sobre mi hombro, giraba de todo el ordenador.

-Ves como en pantalla lo tenemos ligeramente distinto .Puff espera estas pantallas de LCD son una autentica mierda para compartir.

Se pasó a mi espalda y se apoyo sobre mi silla para poder situar su cabeza junto a la mía y continuar la discusión. Podía notar sus tetas sobre la parte alta de mi espalda, notaba como se frotaban con cada ligero movimiento que hacía para continuar con la explicación.

-Bueno, es mejor que te vayas para tu famoso sillón hace como cinco minutos que no dices ni mu.

-Te noto un pelin desconcentrado desde hace un rato.

Una leve sonrisita se le apuntaba en la cara.

-El próximo lunes me acerco a tu oficina a final de la mañana y hacemos esas fotografías para completar la maqueta. OK?

-Hecho

La verdad no podía aguantar ni un minuto mas sin aguantar la mano que deseaba acariciarla. Deseaba a Carmen, deseaba acariciar aquel hermoso cuerpo maduro cargado de quien sabe cuantas experiencias.

Cuando entro por mi despacho era casi la hora de la comida, yo tenía todo preparado en un rincón para no tener que estar entrando y saliendo, Le ayude a instalar el pequeño petate que traía para las fotografías y me limité a observarla.

Vestía un precioso traje de chaqueta gris oscuro, se retiró la chaqueta para regalarme una preciosa vista a sus ligera blusa adornada como era habitual en ella con un hermosisimo escote.

Cuando comenzó con la sesión de fotos me retiré ligeramente para continuar observándola. La falda quedaba poco mas abajo que medio muslo y cuando Carmen se doblaba sobre la cámara se pegaba sobre su culo para mostrar la hermosura de las formas de aquella mujer.

Sus piernas estaban bellamente moldeadas y vestidas con unas medias que acentuaban el tono trigo de su piel y se remataban con unos zapatos negros de salón con un delicado y altísimo tacón. Me fascinaba realmente aquel cuerpo, y su personalidad me atraía enormemente.

La imagen de Carmen en pleno trabajo era tan excitante, que durante un buen rato me mantuve en silencio detrás de ella mientras sentía como mi pene completamente erecto latía bajo el pantalón.

- Quieres hacer el favor de dejar de verme para el culo y mover este foco un poco hacia la derecha.

Me pidió, sin levantar ni un segundo la vista de la pequeña mesa que improvisamos como mostrador.

Después de un par de fotos mas se giró y disparó una foto directamente a mi entrepierna.

-Mirón, JA JA JA JA

-Pero como no voy a mirar, estas terriblemente atractiva. Venga recoge ya que estoy hasta las mismas pelotas de la oficina. Te invito a comer.

La comida fue relajada, charlamos de multitud de cosas menos de trabajo, bromeamos y comentamos gracias subidas de tono, como hacíamos en otras ocasiones de relax.

-Por cierto me tienes que acercar a la agencia, me acercaron los chicos en coche esta mañana y se han largado a otra sesión de fotos hasta mañana. De paso podemos ver las fotos que hemos hecho hoy .

El recorrido hasta la agencia nos llevaba siempre cerca de cuarenta a cincuenta minutos, y la conversación siguió tal como la habíamos dejado. Por mas de dos ocasiones me sorprendí a mi mismo dándole un suave golpecito sobre la rodilla en medio de alguna carcajada o arrancando algún comentario, y mas me sorprendió todavía cuando su mano se apoyo sobre mi muslo también en mas de una ocasión.

En un momento , alargué mi mano para apoyarla definitivamente sobre el comienzo de su rodilla, sin intención de retirarla con rapidez. Poco a poco comenzó a deslizarse sobre su muslo, acariciando sus medias con la yema de mis dedos. Lentamente mis caricias se fueron dejando resbalar a la cara interna de su muslo, un poco mas allá del final de su falda, y girando la mirada puede ver como entrecerraba sus ojos y su boca se mantenía ligeramente abierta mientras su cabeza se apoyaba contra el asiento.

El recorrido suave de mi mano se acercó a su entrepierna, comencé a acariciar despacio los laterales de su braga y a continuación apoyar mis dedos sobre el centro de sus piernas , para notar la ligera humedad que se iniciaba.

-Espera un segundo, por favor.

Se levanto ligeramente para tirar de su falda y ayudándose del cierre de una de sus pulseras, rasgó los panties.

Mi mano aterrizó directa contra su braga, completamente mojada, arrimándola hacia un lado para disfrutar de todos los pliegues de aquel coño ardiente , deslizando arriba y abajo mi dedo hasta tropezar con su erecto clítoris humedeciéndolo con sus jugos que empapaban mi dedo.

Su mano se apoyo sobre la mía y mientras su palma apretaba ligeramente la mía contra su pubis , sus dedos empujaron los míos dentro de su coño completamente empapado. Moví despacio mis dos dedos adelante y atrás con suavidad para doblarlos luego y apretar con la yema el montículo ligeramente rugoso de aquel coño palpitante. Su cuerpo de torsionó varias veces mientras una pequeña seríe de orgasmos le obligó a romper su silencio con gemidos primero y un grito suave, largo y gutural al final.

Desde que salimos del coche dentro del parking me llevó agarrado de mi polla dura todavía dentro del pantalón hasta el ascensor , nos besamos y acariciamos como dos adolescentes sin preocuparnos en absoluto en ser descubiertos. Me empujo y arrastró de forma violenta hasta la entrada de su despacho. En aquel cálido despacho no puede dejar de besarla y apretarle todo el cuerpo mientras ella abrazada con fuerza nos dirigía hacia su mesa. Levanté a Carmen para sentarla sobre su mesa y arrimando de nuevo las bragas a un lado y a través del agujero del destrozado panty enterrar mi boca en su de nuevo, empapado coño. Mi lengua se movió despacio a los dos lados de la entrada, arriba y abajo, atrapando los pliegues suavemente entre mis labios , tirando ligeramente de ellos para soltarlos. Me enrede con la punta de mi lengua en su eminente clítoris, y separe mi cara para disfrutar de la belleza de su coño rojo de pasión .Sus manos agarraban mi cabeza y me empujaban, bajé suave mi lengua arrastrándola por toda la entrepierna hasta llegar a la entrada de su culo, donde en un remolino alocado el placer la obligó a tirarse de espaldas sobre la mesa.

Después de quitar la lengua empujé ligeramente mi dedo por la ya húmeda entrada para meter y sacarlos despacio, muy suave , mientras ella gemía de nuevo y agarraba el borde de la mesa, empujando de nuevo con fuerza con sus caderas para que la penetrase un poco mas de cada vez.

Se levantó de golpe y mientras se desnudaba me llevó hasta la pared acorralándome, mirándome fijamente , con la boca abierta y enseñándome sus hermosísimos dientes, para bajarme los pantalones.

Se agachó para besar despacio mi polla, sus labios se cerraron alrededor de la punta y empujando ligeramente su boca hacia delante cerro con suavidad sus dientes sobre la corona del glande moviendo la lengua alrededor de él.

Con dos empujones más de su boca, y su mano no pude evitar disparar un chorro blanco sobre su cara y sus tetas.

Despues de unos minutos conversando alli desnudos se levanto del enorme sofá que compartíamos recostados uno en el otro, y se sentó callada sobre uno de los pequeño sofás, separando sus piernas y ofreciéndome un hermosa vista de aquel coño, una vista que me llevó casi inmediatamente a una nueva erección. Acercándome, la senté sobre la espalda y le deslice la polla a lo largo de su coño, para luego meterla nada mas que la punta, una y otra vez despacio , muy despacio. Cuando menos esperaba, empuje con fuerza para llegar hasta el final de su cueva mojada, y sin separar la punta de mi polla de la pared final empuje una y otra vez hasta que explotamos juntos en un increíble orgasmo.

Después de la publicación de aquel catálogo no soy capaz de dejar de planear nuevas publicaciones y de excusar nuevas comidas para continuar la apasionada relación con mi caliente diseñadora.

(8,50)