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Una novia muy zorra

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Había sido el gran sueño de África. Toda su vida había soñado con casarse con aquel hombre. Habían crecido juntos y con el tiempo se había acostumbrado a su compañía. Había decidido salir con él no porque estuviera enamorado de él sino por que parecía un hombre bueno que la trataría bien. Además, eran los únicos que no tenían pareja en la pandilla. El sexo con él no era malo pero África siempre había deseado algo más. Él era demasiado clásico en el sexo, demasiado suave para los gustos de África. En el fondo, África deseaba ser tratada como una puta, una perra sumisa y esclava. A veces África se compraba las faldas mas cortas y las blusas mas abiertas solo para pasear por su barrio, le excitaban verse sometida a las miradas de los hombres y salía a pasear con esa ropa únicamente para que ellos la vieran. Luego llegaba a casa y le encantaba meterse sus dedos en el coño mientras imaginaba como la follaban, como la trataban como a una puta. Eso la encantaba y no lo había encontrado con su novio que era demasiado suave en el sexo para su gusto.

Aquel día de su boda con su novio, África se puso el vestido que había comprado para la ocasión. Este vestido le había costado una gran bronca con su novio. La falda color crema era demasiado corta y ajustada para los gustos de su novio. Más que una falda parecía un cinturón. África recordaba como su novio le había dicho: "esto no puede ser África, vas a parecer una puta". Pero África sabia como convencerlo y en el fondo de su ser no solo quería parecerlo sino serlo. Se puso aquellas sandalias anudadas al tobillo con muchísimo tacón y terminadas en punta. Le encantaban los zapatos con mucho tacón. Por arriba la americana dejaba entrever un generoso escote sin sujetador. A África en verano le agobiaban los sujetadores. Se miro al espejo antes de salir y se dijo a si misma: "si afri, ahora pareces una verdadera zorra mmmmmm".

EN EL JUZGADO

El novio paseaba intranquilo en la puerta del juzgado. Parecía que África se retrasaba un poco. De repente giro un coche por la esquina. El novio reconoció el Mercedes del padre de África. "Por fin", dijo para si.

El mercedes paro, se abrió la puerta de atrás. Los invitados se arremolinaban para ver a la novia. África salió. Los comentarios entre los invitados no se hicieron esperar. Ellas la mayoría mujeres viejas hacían aspavientos escandalizadas por el vestido de la novia. Los invitados, en cambio, la vitoreaban. En el fondo se la imaginaban follando en sus camas con ellos. África había conseguido el efecto que pretendía sobre todo en una persona. Se llamaba José y estaba entre los invitados con su novia rosa. Le había conocido a través de email antes de conocer a su novio, con el paso del tiempo se habían visto en su ciudad y habían llegado a tener una gran amistad mezclada con sexo. Ella siempre había pensado que él era magnifico en la cama. Sabía exactamente lo que quería África en cada momento.

África miro a José y a su novia. Los tres asintieron con la cabeza. El plan estaba trazado.

EN LA CEREMONIA

Los dos se pusieron delante del oficiante. El novio seguía un poco avergonzado por el vestido de su novia. África estaba exultante, por fin lo iba a conseguir. De repente, África se sintió mareada, se le iba la cabeza. Se apoyó en su novio el cual le pregunto:

―te pasa algo cariño

―estoy muy mareada cielo― contesto África.

La sentaron en el primer banco. José y su novia rosa se miraron. Era el momento acordado. Rosa avanzo advirtiendo a todos su condición de medico y si podía ayudar. Todos la dejaron pasar. La examino y luego pidió al oficiante si podían llevarla a una estancia del juzgado para que se pudiera tumbar. El oficiante le dijo:

―si claro acompáñenme.

Rosa advirtió a todos que no la atosigaran y rogo al novio que se quedara allí que era un desmayo producido por el calor. Todos se quedaron allí y rosa y la novia salieron por un pasillo que daba a un despacho con un sofá al fondo. Mientras José y algunos de sus amigos salieron por otra puerta que comunicaba con el mismo despacho con tanta discreción que nadie se entero. Llamaron a la puerta y abrió rosa que le dijo a José:

― la zorra esta lista.

Rosa disfrutaba con los juegos de su novio, cuantas veces habían ido a clubes de intercambio solo para verle follar con otras mientras ella se masturbaba. Siempre decía que ver follar a su novio con otras le excitaba mucho más incluso que cuando se la follaba a ella. Rosa se quedo en la puerta vigilando pero nadie se atrevería a desobedecer a una medico.

José entro con sus dos amigos y encontró a África perfectamente. Todo su desmayo había desaparecido conforme al plan trazado, José saludo a África y le dijo:

―hola zorra.

―hola amo― le contesto África

―así que esta es la putita que quiere ser follada como una perra― intervino juan uno de los amigos del novio.

África se acercó a él contoneándose, sabia como hacerlo. Le dio un beso en la boca tan apasionado que casi le muerde los labios mientras ansiosa acariciaba su polla por encima del pantalón. El otro amigo de José, que se llamaba Luis, se acercó a ella por detrás diciéndole:

―vas a sentir mi polla restregándose contra tu culo perra.

Luis se acercó y la tiro del pelo besándole el cuello. José mientras tanto se divertía viendo a su putita hecha un sándwich entre los dos. Ahora África se había arrodillado entre los dos. Ambos se habían bajado ya los pantalones y África no paraba de mamar la polla de Luis mientras con su mano meneaba la polla de juan. José estaba supere citado viendo como África aun vestida con su traje de perra callejera mamaba esas pollas alternativamente. África en un momento les dijo mirándoles:

―ahora soy vuestra zorra cabrones podéis usarme como queráis.

De repente se abrió la puerta. Era rosa que no había podido quedarse en la puerta, su coño estaba húmedo al oír desde fuera lo que decían dentro. Necesitaba ver a la puta de su novio en acción, eso la excitaba sobremanera. Rosa se acercó a José y le dijo:

 

―que tal va nuestra perra.

―ya te dije que era una verdadera zorra― contesto José

Rosa se acercó a ella y tirándole del pelo la levanto dándola un gran beso en la boca. Una vez que se lo hubo dado le dijo:

―veamos lo zorra que eres puta de mierda. Al suelo puta― le dijo rosa a África dándole un bofetón

África se tiro el suelo. Rosa se quito los zapatos diciéndole a África que lamiera sus pies. Mientras juan y Luis se la meneaban. Rosa le dijo a Luis:

―tu cabrón fállate a esta cerda por el culo. Le gustara.

África instintivamente puso su culo en pompa abrió sus nalgas y dijo:

―oh si quiero sentir esa polla en mi culo vamos hijo de puta métemela..

Luis se coloco detrás de ella y sin lubricarla ni nada penetro salvajemente el ano de África de un empujón violento. África soltó un aullido de dolor pero animo a seguir a Luis diciéndole:

―vamos cabrón quiero sentir esa polla aunque me duela. Fóllate a tu zorra.

Rosa, mientras tanto, se había sacado su vestido ajustado de flores, no llevaba nada debajo e invito a juan con una seña con la mano para que se acercara. Juan comenzó a lamerle los pezones a darle pequeños cachetes en sus tetas, esto la excitaba sobremanera hasta el punto de decirle a juan:

―vamos chúpamelas delante del cabrón de mi novio y tu zorra (refiriéndose a África) sigue lamiendo mis pies.

José mientras tanto ya se había quitado los pantalones y contemplaba a su putita y a su novia en manos de dos de sus amigos. Esto le excitaba hasta el punto de meneársela la tenia muy dura y estaba súper caliente. Seguía a unos metros la escena mientras se la meneaba mirándolos.

Rosa ordeno a juan que se pusiera detrás de ella diciéndole:

―vamos cerdo quiero ver como limpias mi culo con tu lengua, quiero que hagas con él lo que quieras dame cachetadas en el culo escúpelo haz lo que quieras hijo de puta.

Juan obedeció y situándose de rodillas detrás de rosa, empezó a darle con las manos en las nalgas mientras abría su culo y pasaba su lengua por el de vez en cuando. África se sentía a morir de placer con ese pedazo de polla clavado en su culo que no paraba de embestirla salvajemente. El dolor se había convertido en un gran placer mientras Luis la golpeaba en su culo ella jadeaba y sudaba como una perra en celo. África no paraba de decir lo mismo "soy vuestra zorra, hacer conmigo lo que queráis".

Mientras tanto rosa empezaba a jadear fruto del trabajito que le estaba haciendo juan. De vez en cuando miraba a África y se agachaba la cogía del pelo y la decía:

― tu no eres su puta la mejor puta soy yo― acto seguido la daba una bofetada. Esto le excitaba sobre manera, también la forma en que su novio la veía siendo follada y comido el culo por su amigo

José ya no podía soportarlo más. Estaba ya cansado de meneársela y se acercó hasta donde estaba rosa y África a sus pies. Rosa intuyéndolo se apartó a un lado y cogiendo la melena morena de África la obligo a tragarse toda la polla de su novio diciéndola:

 

―vamos cerda hija de puta comete toda la polla de mi novio.

África llena de sudores no podía ni hablar solo decía entre gemidos que quería más. Se trago toda la polla de José mientras rosa le decía:

―así zorra demuestra lo puta que eres vamos dale placer a mi novio..

África se sentía en el paraíso. Toda la vida había soñado con ello. Una polla en su culo y mamando con su boca la polla de aquel chico que había conocido en internet. Luis ya entre sudores y jadeos seguía embistiéndola por su culo con su polla, notaba sus huevos como golpeaban en su culo. África estaba empapada en sudor deseando que aquello no se acabara nunca.

Rosa mientras tanto había hecho tumbar a juan en el suelo y cabalgaba como poseída sobre la polla de juan. Rosa y juan estaban justo al lado de África lo que permitía a rosa darle unos cachetes en el culo a África e insultarla como a ella le excitaba...Luis estaba a punto de correrse ya no podía mas, había pasado mucho tiempo dando por el culo a esa puta y necesitaba correrse. Cuando estaba a punto de hacerlo el saco llenando todo el culo y la parte baja de la espalda de África de rico y espeso semen. Parecía que no se hubiera corrido en mucho tiempo pues el líquido blando y espeso salía a borbotones de su polla, no paraba de salir.

Rosa, al ver esto, se tiro como posesa a la polla de Luis limpiándosela inmediatamente e invito a juan a que se la follara en esa posición esta vez por su coño diciéndole:

―vamos fóllatela por el coño quiero ver a esta zorra empapada en leche por todo su cuerpo.

África dejando de chupar la polla de José contesto:

―ssssssssssiiiiiiiiiiiiii dámela toda cabrón quiero mas leche en mi cuerpo quiero todo vuestro.

Rosa le dio un cachete en el culo con su mano diciéndole:

―cállate zorra..

Rosa, al ver como le metían la polla en el coño a aquella putita, inclino su cabeza hacia el culo de África escupiendo en su ojete. Luego salvajemente le metió un dedo en su ano mientras le decía:

―¿te gusta puta de mierda?.

―siiiiiiiiiiiiii, ahhhhhhhhh― contesto África entre gemidos.

Rosa, dándose cuenta de que José su novio estaba a punto de correrse se levanto y se coloco a su lado. Inclinando un poco la cabeza, saco su lengua y empezó a lamer el pezón izquierdo de José mientras África seguía mamando toda su polla.

―ahhhhhhhhhhh me voy a correr putas― dijo José entre espasmos.

Rosa se arrodillo para estar a la altura de la cabeza de África, la sujeto del pelo para que mantuviera la polla en la boca empujándola de la cabeza y le dijo a José:

―vamos cariño córrete en nuestra perra que se lo trague todo la cerda.

África en ese momento sintió un chorro de leche espeso que penetraba su garganta. Le gustaba sentir como la leche bajaba por su garganta. Le hacia sentir una verdadera puta, cosa que nunca habría podido llegar a ser en sus relaciones con su novio. Quería ser humillada, necesitaba ser humillada por que eso la excitaba sobremanera.

Rosa mientras tanto lamia la cara de África recogiendo los restos de la leche que esta no podía tragar. Juan seguía clavándole su gran polla por el coño cada vez más salvaje, cada vez mas fuerte mientras no paraba de darle cachetes en su culo. Esto hacia que África se excitara aun más. Rosa se levanto adivinando por los gemidos que juan estaba a punto de correrse. Se puso a su lado y le dijo:

―vamos hijo de puta llena de leche a esta zorra, mírala es una puta vamos cabrón.

Juan, espoleado por las palabras de rosa, se corrió en el culo de África. La leche salía a borbotones y rosa aprovecho para lamerlo todo con la lengua en contacto con la piel de África mmmmmmmmmmmm eso le encantaba. África empezó a jadear mas fuerte momento que aprovecho rosa para situarse detrás de ella comiéndose todo su coño mientras le decía:

―mmmmmmmmmmmmmmm parece que la cerda se quiere correr mmmmmmmmm adelante putita hazlo quiero ver como se corre una zorra como tu.

Rosa seguía mamando con su lengua todo el coño de África. África no pudo más y después de unos gemidos casi convertidos en gritos se corrió en la boca de rosa, cosa que esta había soñado alguna vez ya que nunca había disfrutado de la corrida de otra mujer y lo deseaba.

Parecía que todo había terminado. África estaba toda mojada su culo parte de su espalda toda su cara. Todo estaba mezclado en su piel con saliva y leche. Se sentía satisfecha. Una vez todos incorporados y de pie, África intento levantarse pero José le dijo:

― no todo ha acabado para ti putita túmbate cara a nosotros. Tienes una sorpresa perra.

Ella como una esclava sumisa y obediente obedeció y vio que José, juan, Luis y rosa la rodeaban. De repente del coño de rosa salió un liquido amarillo que mojo parte de su vientre y sus tetas. Luego siguió José en su cara el cual ella intentaba beber y juan y Luis continuaron meándola por sus tetas. Ssssssssssiiiiiiiiiiiiiiiiiii, la estaban meando. África sintió que todos sus sueños sexuales se habían cumplido.

SALIENDO DE LA HABITACIÓN

Transcurridos diez minutos, todos ellos se hallaban ya vestidos y salieron en silencio. África se encontró con su novio en la entrada de la sala del juzgado y este le dijo:

¿Te encuentras bien cielo?

Si cariño, ahora estoy de maravilla. Te espero dentro― contesto África abriendo la puerta y pasando al juzgado.

El novio dirigiéndose a José, rosa, juan y Luis les dijo:

Bien chicos gracias. Habéis cumplido con lo que os propuse aquel día.

De nada pero, ¿sigue en pie nuestro acuerdo?― pregunto José.

―Claro, podéis follárosla cuando queráis, siempre que me dejéis ver como se convierte mi mujer en la mejor de las putas― contesto el novio.

Todos rieron a carcajadas.

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