Diciembre 1997, yo acababa de cumplir los 18 años, me había hecho de un amigo dos años mayor que yo, él tenía mucha suerte con las mujeres, por ser guapo y de ojos verdes, además tenía fama de cogelón con las mujeres.
Esa noche él realizó una fiesta en su casa, la cual tenía un jardín muy grande y aprovechando que sus padres no estarían el fin de semana, el organizó dicha fiesta, éramos unos 12 chavos todos hombres, bebimos y comimos algunas botanas, el caso que ya dando las 3 AM, la mayoría estábamos muy tomados, algunos ya hasta dormidos, mi amigo de nombre Daniel, comenzó a llevarnos a las diferentes habitaciones de la casa, yo fui de los últimos y a mí me metió a la recamara de su hermana que se había ido con sus papás.
Termino de acomodarnos, cuando de repente aún yo despierto lo vi entrar a la habitación y comienza a desnudarse y queda solo en bikini blanco, yo no presté mucha atención, hasta que se fue acercando a mí por debajo de las sábanas, comenzó a desabrochar mi pantalón y lo bajo dejando al descubierto mis nalgas, para esto yo me hacía el dormido, pero lo estaba disfrutando, sentía su pene rozar mis nalgas y sentí como poco a poco se fue haciendo espacio, para meterlo dentro de mi ano, debo de confesar que me dolió muchísimo, era mi primera vez, pero lo disfruté, haciéndome el dormido, estuvo así penetrándome de cucharita unos 15 minutos, cuando sentí, su respirar más agitado, y un espasmo cuando me inundó mi culo de su semen.
Se salió de mí y fue por una toalla, para limpiarme ya que fue muy abundante su venida, fue lo último que recuerdo ya que después de eso, me quedé dormido, creo que más tarde, ahora sí dormido profundamente me volvió a penetrar, porque al despertar por la mañana yo, estaba completamente desnudo de la cintura hacia abajo, cosa que al darme cuenta, me excito demasiado el aún acostado a mi lado y desnudo completamente, comencé por tocarle el pene y acariciar sus huevos, el despertó y tomándome mi cabeza con sus manos, la llevo directo a qué se la chupara, era la primera vez en mi vida que mamaba yo una verga, sabía a precum y restos de orina, cuando ya estaba bien dura, se quitó, se puso frente a mi, levantó mis piernas, las coloco en sus hombros y me penetró de nuevo, en esta ocasión ya no pudimos terminar, ya que algunos de los borrachos que estaban en las otras habitaciones, comenzaron a despertar y fueron a tocar nuestra puerta, ante la posibilidad de que nos vieran, interrumpimos el acto y nos vestimos para salir de la habitación y comenzar a beber de nuevo con los amigos.
Meses después volvimos a estar juntos ahora en la habitación de sus padres y otra en el coche de su abuelo, pero esas son otras historias.
Espero sus comentarios, saludos.