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Orgia entre mi tia y los dueño de casa

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Este relato forma parte la segunda entrega "orgia entre mi tia y los vecinos".

 

Como habrán leído fue mi debut sexual, a todo ritmo, donde aprendí a disfrutar tanto vaginas como penes. Descubrí la vida oculta de mi tia Laura, ahora esta historia es lo que nos paso a ambos, que sin buscarlo gozamos a lo grande.

Era periodo de clase, aburrido de escuchar las discusiones habituales de mis padres, me pasaba en mi cuarto simulando que estudiaba pensando en todo momento en mi ex novia y en mi mentora mi tia Laura; en esa monotonía que se repetía día tras día ocurrió un verdadero milagro, mi tia llamo a su hermana para pedir permiso a que yo la acompañara en auto a un viaje relámpago de negocios a una zona distante 500 km.

Mi madre accedió de mala gana pero haciéndome jurar que a la vuelta iba a estudiar todo lo que me faltaba para el examen de ingles; paso a buscarme puntualmente, entro a casa y después de lo saludos de rigor con mis padres se sentó a tomar un café, mientras tanto cargué la mochila y me acomode en su camioneta, cuando se despedía la observaba, vestía una pollera suelta hasta las rodillas y una camisa holgada que encubría sus maravillosas tetas, aparentaba una solterona dedicada puramente a su trabajo.

A la hora de viaje incomoda con su vestimenta decidió detener la marcha a cambiar su atuendo para manejar mas cómoda.

Paramos en una estación de combustible fue al baño reapareciendo con una calza por debajo de la rodilla azul y una musculosa blanca que marcaba sus pezones en forma llamativa los pisteros de la estación perdían la baba cuando cruzo por la pista hasta su auto.

La marcha se hizo muy lenta por la aparición de bancos de niebla en la ruta.

Bueno sobrino como va tu vida sexual- decía con la vista fija en la ruta- creo que me puedes contar cosas que con tu padres enfrente te era imposible, además como esta la ruta de lenta tenemos tiempo de sobra.

Ya te conté que mi novia era la ahijada del subdirector del colegio, la persona muy codiciosa y falsa, como no pudo llegar a ser un profesional se vengaba con todos los alumnos; tenia un hijo, Ernesto , con serios problemas de conducta, falto de inteligencia y para colmo homosexual declarado, un burro y puto total.

Era compañero de clase, pasaba todos los años por estar acomodado, todas las cosas que se enteraba el subdirector eran chismes de su hijo que nadie quería.

Con Laura congeniamos desde el primer día, el sexo con ella llego casi de inmediato, ella es dos años mayor estaba en el ultimo año del colegio. Rubia de ojos celestes con un físico envidiable por todas sus compañeras, un culo parado que me hipnotizaba con sus movimientos.

Y con el tatuaje en la cintura hacia que hiciera lo que ella me ordenase

Me ganaba en experiencia sexual pero con las lesiones de sexo que me diste formábamos una pareja acoplada perfectamente para coger en todas las posiciones inimaginables; le gustaba fantasear y disfrazarse mientras la cogia.

Pronta a pasar a la universidad solo la trancaba una materia cuya profesora era la de la amante de este viejo, una mujer soltera flaca y fea que se aprovechaba del viejo para escalar en el colegio.

No podía creer que por esa materia no tuviera el puntaje ideal para ganar la beca y librarse de esa maléfica familia, por lo que elabore un plan para hacerme del examen 48 horas antes. La maniobra fue un éxito, ella aprobó con excelente nota la prueba, salvo un pequeño detalle, el retardado de mi compañero se dio cuenta, dejo pasar el tiempo por dos semanas citándonos en su casa un sábado por la noche, en el cuarto de Laura mas precisamente. Los dos nerviosos esperamos pensando que se traia entre manos.

- Ustedes saben que guarde el secreto de lo que hicieron con el examen

- decía con voz muy lasciva mirando las tetas de mi novia- ya sabrán que me interesan poco las mujeres, pero tu culo Laura esta muy apetecible desde que mi compañero lo prueba cada día en este mismo cuarto, por lo que decidí que me paguen por no hablar, haciendo con tu trasero lo que yo quiera.

Se empezo a bajar los pantalones quedando con una verga a medio parar muy corta pero tremendamente gruesa.

- Laura me vas a dejar cogerte por tu culito, tu novio sentado enfrente va a mirar como lo hago, cualquier cosa que no quieras hacer corro y le cuento todo a mi papito y adiós tu beca. Ahora ayuda a este alicaído miembro a pararse.

Creo que imaginándose lo que le esperaba si no se iba de esa casa no dudo arrodillándose enfrente de Ernesto.

Su cara de ángel se posiciono frente al miembro del retardado, la verga no entraba en su boca por lo que su lengua la lubrico por todo su largo y ancho, sus manos la masturbaban muy lentamente solo se metía en su boca la amoratada cabeza y sus peludos huevos, realmente su grosor era de temer.

- Que esperas desnúdate- le gritaba- quiero que tu novio se masturbe así por lo menos veo una pija en la noche de hoy.

Con mi verga en la mano hacia lo que me pedían.

Groseramente al verla toda desnuda la tiro en la cama, la obligo a levantar su culito apuntando su verga húmeda a hacia el, en tres intentos no pudo introducirla mas que escasos centímetros, Laura gemía y se retorcía llorando

- No ves que me lastimas, es enorme, si quieres acábame en la boca pero no insistas me muero de ardor y dolor.

Mirando la escena me vino a la mente como había sido mi primera felacion a tu vecino, como la otra vez sin frenos me tire a mamar el miembro de Ernesto, imitaba lo de Laura pero lo masturbaba en forma más enérgica, mi verga era un palo a punto de erupcionar.

- Que lengua que boca, sigue sigue sigue tu boca lo hace como ningún otro – gemía Ernesto- esto no me lo esperaba, mi compañero de clase la chupa como el mejor.

Quizás mi novia se dio cuenta que mi inusitada arremetida la ayudaba del mal momento que pasaba, se puso a mi lado arrodillada para completar la tarea, ambos entrelazamos nuestras lenguas para satisfacer a nuestro amigo; yo seguía pajeandolo y ella sobaba sus peludos huevos.

Ahora quiero ver como se tragan mi lefa caliente si si si si si me viene.

Lanzo un chorro que empapo mi cara y las tetas de mi novia chorreando hacia su plano abdomen. No pude aguantar mas acabando con un largo suspiro.

Nos cambiamos en silencio, no volví a tener noticias de ella hasta el día que partía hacia la universidad. – Me salvaste con Ernesto nunca lo voy a olvidar.

Hasta el día de hoy no he tenido noticias de ella.

Sin darme cuenta por lo apasionado del relato estábamos cerca del balneario, como pasa siempre en esa zona después de la niebla el tiempo se destapo con una torrencial lluvia con viento, llegando a un cruce divisamos una figura haciendo auto stop de pelo largo rubia con trencitas, por compasión mi tía la cargo siguiendo bajo el aguacero hasta el centro.

La mujer muy agradecida, nos contó que era oriunda de la zona, trabajaba como domestica en varias mansiones del balneario.

Tenia 30 años su nombre era Lidia, tez cobrizo, no muy alta, ojos como el carbón rasgados, con un busto muy generoso totalmente naturales, implantados en un tórax ancho, típico del biotipo de los habitantes de la zona del altiplano boliviano, que tienen todo el cuerpo adaptado, para resistir las baja concentraciones de oxigeno.

Muy simpática era viuda, vivía con sus dos hijos, nos ofreció su casa ya que la alquilaba en alta temporada, mi tia la observaba de continuo por el espejo retrovisor.

Cuando la dejamos en su casa el vaivén de sus anchas caderas hipnotizo a mi tia lo que me imagine no iba a terminar solo en eso.

Realizamos todos los negocios y contactos, yo actuaba de secretario, a las 20 horas habíamos terminado por lo que nos quedaba todo el fin de semana libre, cuando fuimos a buscar hospedaje todos las habitaciones de lo pocos hoteles estaban ocupadas, los fines de semana pasaba siempre lo mismo.

Ante la perspectiva de tener que marcharnos se me ocurrió la idea de pasar por la casa de Lidia, última oportunidad que teníamos de disfrutar el fin de semana.

Fuimos a su casa que era modesta muy buen cuidado a escasos metros de la costa.

- Como no voy a tener lugar para los amigos que me salvaron de la lluvia- decía sonriente siempre mirando a los ojos de mi tia- pasen antes de llevarlo a su cuarto le voy a presentar a mis hijos, Rafa y Lalo.

Aparecieron detrás de ella, ahí comprobé las clases de genética que había aprendido en el colegio, los genes de Lidia y el padre de sus hijos que tendría que ser rubio y alto, se habían combinado en porcentajes exactos; ya que Lalo era rubio de ojos azules pero con el fisico grueso de su madre y Rafa era morocho con los rasgos faciales de su progenitora pero alto musculoso y estilizado, muy tímidos pero como su madre no desprendían los ojos del culo de mi tia, sabedora de esto el meneo de su cuerpo fue alevoso en todo momento.

El interior de la casa era modesto pero impecablemente limpio, los cuartos estaban separados por paneles de madera muy finos, solo había un único baño muy moderno y grande.

Compartimos la cena retirándonos ya tarde a nuestros cuartos, Lidia quedo perpleja cuando mi tia dijo que no había drama que compartiéremos el mismo cuarto.

Juntamos la cama ya que me esperaba una noche a todo sexo.

Se baño primero mi tia, me tope con ella cuando entraba al baño, solo estaba envuelta en una diminuta toalla que cubría la raíz de sus muslos.

- Apúrate sobrinito creo que vamos a festejar los buenos negocios de este viaje.

Me bañe con la verga parada pensando lo que me iba a pasar, tuve la impresión que éramos seguidos por tres pares de ojos en todo momento.

Cuando entre al cuarto el calor era sofocante como la noche, la habitación en penumbras invitaba al sexo desenfrenado, la vi acostada en la cama sin toalla que la cubriera leyendo unos documentos, se había colocado unas medias negras que la hacia tremendamente excitable, no podía creer que era toda para mi.

Nos acostamos boca arriba uno al lado del otro, su perfume mezclado con su sudor era un afrodisíaco difícil de imaginar, poso su mano en mi verga para luego agarrarla con la palma y sus dedos sin moverla

parece que ya estas a punto esto si que quema- riéndose- mi conchita quiere sentir tus dedos ahora mismo.

Los dos nos masturbábamos, mi tia bajaba y subía su mano cuando lo hacia a buen ritmo paraba para pellizcarme los huevos, yo separe sus húmedos labios para introducirme con dos dedos muy lentamente con movimientos circulares, me lo había enseñado ella misma, en su jugosa vagina que como de costumbre estaba toda depilada.

Incrementamos el ritmo llenando el cuarto de gemidos no muy altos para no despertar a los dueños. Ahora su mano se detuvo, moviendo yo mi cadera a buen ritmo, ella hizo lo mismo siendo su cuerpo sudoroso el que se meneaba contra mis dedos.

- Afloja tía porque………….- le decía al oído.

Pero mis huevos no aguantaron saliendo una crema espesa contra mi pelvis empapando mi pendejos; al minuto pude sentir como mis dedos se inundaban y como su cuerpo se tensaba al máximo.

Mucho mejor que cualquier paja que me halla hecho- le decía inclinándome para darle un beso en la boca. Su lengua me recibió complacida.

No te creas que ya termine, déjame pararla otra vez a mi manera.

Así mi verga todavía chorreada de leche fue atacada por su boca, como no soy superdotado la enterraba hasta la garganta su lengua la acariciaba y la acomodaba contra el paladar, sentía como la punta llegaba a su campañilla pero como maestra que era en ese arte aguantaba la arcada en forma perfecta.

- Ahora me voy a poner arriba tuyo- me decía siempre mirando mi miembro- te voy hacer acabar en la forma mas lento de lo que te puedas imaginar.

Se sentó en mi mástil y comenzó a cabalgarme lentamente, su cuerpo era una escultura. sus tetas hermosas y perfectas se balanceaban en cámara lenta, cada tanto la tomaba con sus manos y mojaba en pezón con su lengua, el abdomen plano perlado en sudor descargaba su fuerza contra su pelvis los minutos pasaron y no sacaba los ojos del cuerpo que me montaba, a pesar de tener mas de 40 años era perfecto, que me importa si era a base de cirugías o de algún otro retoque, a punto de acabar se afirmo en mis caderas y su pelvis era una locomotora, los elásticos de la cama estaban a punto de reventar, el piso temblaba y nuestros gemidos habrán despertado a todos los de la casa. Cuando todo termino al separarnos se quedo en cuchillas sobre mi y torrente de leche y orgasmos cayeron sobre mi abdomen.

- La verdad sobrino nunca vi que un hombre en su segundo polvo tuviera tanta leche, anda vamos a descansar que todavía queda mucho por hacer.

A la mañana Laura no podía sacar los ojos del culo de nuestra anfitriona mientras nos preparaba un exquisito desayuno, sus dos hijos que parecían dos bobitos tampoco perdían detalle del culo de mi tia note que estaban permanentemente empalados, disfrutamos todo el día en la playa Laura al sol era el centro de todas las miradas, yo en cambio no me podía sacar de la mente las vergas paradas de los hermanos, algo se me va a ocurrir.

Al regreso a la hora del baño mi tia no perdió la oportunidad de tirarse a Lidia.

- No tolero como me mueve esas caderas- me lo decía cuidando que entrara al baño- le voy a dar la mejor cogida que haya tenido en su vida.

Espero hasta que cerrara la puerta y se metió también adentro, yo me acomode para observar a través de la puerta entreabierta dejada por Laura a propósito.

- Que haces Laura porque entraste de ese modo, no pensaras bañarte conmigo- sentada en el inodoro su voz era de asombro mas que de susto, se había sacado el vestido quedando en una musculosa rosada muy justa.

- No es bañarme lo que precisamente quiero, lo único que me apetece es poder disfrutar contigo todo lo que se sobre mujeres- mientras se sacaba lentamente la remera pegada al cuerpo por el calor de la noche, quedando sus dos exuberante tetas al aire- no grites porque creo que esto lo estabas esperando desde hace rato, no creo que seas tan monja como aparentas.

Se arrodillo a su lado, una mano bajaba el borde de la musculosa fue apareciendo el borde de un enorme y erecto pezón color canela, la otra mano se dirigió a su entrepierna para acariciar por encima de la tanga el pubis de Lidia; paralizada se mordía el labio inferior para no gritar o para ahogar sus gemidos, ella misma se bajo el borde de musculosa y ambas tetas estaban afuera, las agarraba y las orientaba a la insaciable boca de mi tia, abría su boca lo mas que podía para que entrara todo el pezón, las manos de su amante pegaban mas su cabeza a sus pechos.

En un momento se saco la musculosa, cuando sus brazos estaban por arriba de su cabeza mi tia la beso con un ruidoso y húmedo beso de lengua, sus suspiros y gemidos era indescriptibles.

- Viste que no era difícil- le decía Laura – sabes besar muy bien tu lengua sabe lo que quiere, tus pezones son lo mas exquisito y excitante que haya probado.

Mientras esto pasaba de la cintura para arriba, mi tia corrió para un costado la tanga, se veía un pubis con pelos muy negros prolijamente recortados, sus dedos jugaban sobre sus labios bien oscuros hasta introducirlos en el interior de Lidia, se movían a buen ritmo en forma circular como a ella misma le gustaba, dedos y vagina se humedecían rápidamente, el clítoris bien consistente se ponía duro como una piedra siendo atacado sin piedad por los dedos sabios de mi tia.

- No te apures por favor no te apures, que quiero disfrutar mas rato- gemia Lidia- no pense que una mujer me fuera a dar mas placer que mi difunto marido.

Disminuyeron revoluciones, se desnudaron para seguir más cómodas su faena.

- Si esto te parecía increíble, vas a experimentar algo nunca por ti imaginado- hablaba mi tia mientras se sacaba la tanga blanca.

Abrió las piernas de Lidia, que permanecía sentada en el inodoro y devoro la entrepierna, fue con su lengua recorriendo cada muslo hasta llegar a la brillantes concha, no solo usaba su lengua o sus labios, sino que el dedo índice actuaba de pistón, boca y dedos actuando en perfecta sincronización, cada tanto sus dedos eran lubricados por su propia boca para seguir con el trabajo; los suspiros de su amante eran increíbles a pesar que se tapaba la boca para no despabilar a sus hijitos que de seguro miraban la escena como hipnotizados escondidos en algún lugar de la casa.

- Sigue sigue sigue ya me viene, ah, no puedo aguantar- gritaba la dueña de la casa.

En eso una marea de liquido salio de sus pliegues sin fuerza pero alcanzando a bañar sus piernas y por supuesto toda la cara de Laura

Como todo sexo entre dos personas era el turno de gozar de mi tía.

Se pararon frente a la mesada del lavatorio, lo estilizado de mi tía con lo rustico de la anfitriona se notaba.

-Nunca estuve con una mujer pero creo que te voy a poder dar mucho mas de esto- lo decía lidia mientras la besaba en la boca- esto es lo mas gozoso que me haya pasado y quiero que no termine nunca.

Con su lengua descendió hasta su concha para devorarla sin compasión ambas gemían, cada poco subía y besaba a mi tia en la boca nuevamente, sus dedos jugaban los pezones mientras pasaba la lengua en el resto de la teta.

-Sigue no pares mi putita- ahora Laura la apretaba contra su pubis- mírame cuando te hablo así veo tu cara de vicio, sígueme lamiendo hasta el fondo te voy a dar el orgasmo mas grande que he tenido. No bien dijo eso un suspiro la estremeció señal de la llegada del punto de máximo éxtasis.

Se bañaron juntas entre risa saliendo a caminar por la playa seguramente para aflojar las tensiones; me quede en el cuarto pensando en lo que había visto, esas imágenes hicieron que me empalara, lo único que me calmaba era un buen baño acompañado de una magnifica paja, cuando entro al baño ambos hermanos me ganaron de mano, para hacer lo mismo que tenia pensado, seguramente vieron la escena lesbica jamás pensada.

Rafa en la ducha, que era una gran bañera, comenzaba a masturbarse, su verga nada despreciable estaba a media erección, mientras que Lalo comenzaba a masturbarse con la ropa interior puesta, asomando por el costado de su boxer otro enorme falo nada despreciable.

Al ver esos pedazos de carne y recordando lo, ultimo sucedido con mi

mi amigo de clase y mi ex novia, quede sin palabras parado desnudo frente a ellos con mi verga parada.

- Tu tia hizo acabar a mi madre como una loca- hablaba Rafa desde la ducha- con mi hermano nos pasamos masturbándonos, acá en invierno no hay ni una sola chica disponible para tener sexo.

Sin decir nada me acerque a su hermano muy lentamente le baje los calzoncillos con dibujos amarillos y rojos, casi nos caemos cuando le levante la pierna para sacarle del todo los calzoncillos. Le toque muy despacio, los huevos bien lampiños y toda la piel que cubría en abundancia su hermosa pija.

- Que le haces a mi hermano – gritaba Rafa- yo sabia que los invitados eran raro pero esto si que es el colmo, la mujer hace gozar a nuestra madre como nunca lo había imaginado y su acompañante se desespera por nosotros, chupasela bien a Lalo porque después te espera esta bien enjabonada.

Hipnotizado como estaba acerque mis labios y los pase por la toda la piel de sus huevos y su imponente tronco, quemaba de caliente, luego pase a meterme solo la hirviente cabeza en la boca, tenia un olor a sudor muy fuerte que mas me daba la necesidad de tenerla toda adentro, una mano estrujaba sus huevos y la otra la pajeaba a buen ritmo.

Cuando le iba a preguntar si le gustaba un torrente de leche tibia y bien salada invadió mi garganta que si no la escupo en el inodoro me ahogaba.

- Ahora le toca a mi hermano, putito de la ciudad- se reía Lalo- mira como se esta pajeado para ti y prepárate que larga mas leche que yo.

Antes que posara mis manos en la entrepierna de Rafa de su pollon salieron tres potentes chorros que bañaron todo el piso quedando parte en sus manos.

- No me van a dejar con esta pija parada- mientras les hablaba se miraban pensando que iban a hacer.

Ahora el que dominaba era yo, ellos muy sumisos mientras me pajeaban me enjabonaron mi verga así la corrida demora mas en venir y cuando me llego, el chorro los baño a ambos en la cara.

Cuando llego la dueña de casa y mi tia todos dormíamos como si nada hubiese pasado.

- Creo que te fue muy bien con los hermanos, no creo que estando solos perdieras la oportunidad de tenerlos a tu voluntas, la dueña de casa no para de decir que eres el joven mas lindo que haya visto por lo que se esta regalando en forma descarada, yo en cambio me conformaría con tener a mi alcance sus dos hijitos.

A la mañana siguiente partimos los 5 a conocer unas playas casi inexploradas que era excelentes para el surf, deporte predilecto de los hermanos, nos instalamos en una playa cercada totalmente de cerros y tupida vegetación, aislada del mundo exterior.

- Tia querida – en secreto- si tenemos fiesta de sexo es ideal porque nadie nos va a observar, ni a sentir tus gritos.

Salio riéndose meneando su culo, acompaño a los hermanos hasta la costa, no paraban de hablar, su andar era incitante y provocativo, menos mal que ambos se metieron en el agua a montar olas para apagar el fuego de sus entrepiernas.

Quedamos los 3 solos, por mas que era gruesa Lidia con un bikini blanco era muy excitante, mi tia para empezar a calentar el ambiente quedo con las tetas al aire para tomar sol, algo apartada de nosotros.

-Tu tia dice que estas dispuesto a hacerme gozar como lo hizo ella- me hablaba mientras me daba el bronceador- también me hablo del tamaño ideal de tu verga, te aclaro que el padre de mis hijos era un alemán superdotado que cuando me penetraba lloraba de dolor y casi nunca pude gozar como Dios manda, por eso Laura y tu me van hacer sentirme como nunca.

Sin pedir permiso comencé a colocar bronceador en la espalda de Lidia, se acostó de espalda quedando con sus tetas hacia arriba, me atreví a correr todo el bikini quedando sus globos al aire, ella no abrió la boca solo note un pequeño estremecimiento de su cuerpo y un pequeño suspiro salio de sus labios; sus tetas naturales mas grandes que las sintéticas de mi tia, increíblemente bien duras, a pesar de los dos hijos y unos pezones oscuros que se endurecían al tacto de mis dedos.

Mis manos bajaban por el abdomen donde aparecía alguna estría, no podía ser tan perfecta, hasta su entrepierna donde su pubis era coronado por pelos bien negros muy enrulados escondiéndose para mi sorpresa unos abultados labios terminando en un grueso clítoris rosado que fue la delicia de la lengua de mi tía y ahora iba a se todo mió.

Metí mi cabeza entre sus piernas, mi lengua ataco todo lo que tenia, sus labios se engrosaban del goce, su lubricación aumentaba y su clítoris quedaba duro como el acero, con mis dedos lo estire cuanto pude mi lengua lo movía en todas las direcciones, cuando mas gemía mas rápidos eran los lengüetazos y mas rápido era la humedad que de toda su concha salía.

Al subir la vista mi tia se acercaba a nosotros desnuda y pronta para la accion.

No crean que me voy a peder esto, Lidia ya que tu lengua esta libre lubrica mi concha para estar presentable para que tu hijos la disfruten, creo que están viendo esa escena no van a demorar mucho en llegar.

La muy libidinosa se agacho como dijo, todos los músculos de la boca de Lidia se concentraron en esa delicia de vagina y culo que se abrían sobre su cara, otra vez levanto la vista y los hermanos estaban desnudos pronto para la acción y creo que mi tía era el blanco de sus miembros parados al mango.

Ven a probar esto putita fina de la ciudad- decía Lalo- me la vas a chupar hasta que quede chica, no creo que superes a tu sobrino, después te vamos a meter con mi hermano al mismo tiempo.

Se arrodillo esperando al bravucón de Lalo que casi le perfora la garganta de la fuerza que empujo su pija.

- No te hagas el hombrecito nene porque no creo que aguantes ni tres minutos.

La vi en una faena poco veces vista, su boca era un manantial de saliva que lubrico la gruesa verga sus labios recorrían la cabeza y la gruesa verga que corre la parte superior de la verga, mientras su mano sobaba los huevos, cuando iba a metérsela hasta la campanilla, era lo que mas me gustaba, un largo chorro blanco choca contra su mentón y en sus hermosas tetas.

- hablas mas de lo que aguantas, Rafa ahora te toca a ti.

Mi tia se arrodillo en la arena su boca quedo frente a la verga de Rafa este mas precavido se agarro en todo momento la base de del miembro, aguanto sin eyacular mucho mas que su hermano, pude apreciar con claridad la cara de libidinosa que ponía, gozaba como nunca la boca y su lengua realizaron todos sus malabares.

La garganta profunda era acompañada de arcadas y abundante saliva, pero ella ni se inmutaba su cara de goce seguía igual.

- Ahora si no aguanto – gimió Rafa- un profundo gemido de goce contenido salio de su boca.

Esta vez no se le escapo ni una gota, nada se perdió en la arena todo fue digerido por la golosa.

Mientras tanto me posicione entre las piernas de nuestra amiga lubricada como estaba fue muy fácil penetrarla e imponer un ritmo muy suave, la húmeda concha era un placer, a ese ritmo espere que acabara otra vez, acelere mis movimientos y con un esfuerzo final pude tener una prolongada y gozosa eyaculacion.

Terminamos la tarde en el agua disfrutando la maravillosa playa.

De regreso a la casa la anfitriona me pidió si la llevaba al centro para tramites de urgencia, a la vuelta me perdí demorando como 1 hora en llegar, a mi arribo a la casa siento a los hermanos hablando me acerco a su cuarto viendo a Laura con su tanga puesta y sus pechos al aire pronta para actuar, siendo espectador privilegiado de lo que iba a pasar ahí adentro.

Ayudo a Lalo a sacarse los pantalones, solo con verla y sentir sus manos quedo con el mástil parado a reventar. Su hermano ya desnudo también esta al máximo.

Espero que no acabes con solo mirarme como te paso en la playa, acuéstate boca arriba que les voy a cumplir el sueño de ambos, metérmela al mismo tiempo.

Se sentó muy suavemente sobre el falo de Lalo, sus huevos parecían reventar con el movimiento de las caderas, le decía algo al oído, seguro que le explicaba como aguantar la leche.

Su hermano se puso atrás, quizás con las experiencias sexuales con su hermano, se lubrico con saliva su verga parada y el orificio ya dilatado del culo de mi tia, en un solo movimiento esta levanto mas el culo y este en forma rápida la penetro; sabedora de la inexperiencia de sus amantes los movimientos eran lentos evitando que se saliesen de sus agujeros.

Ahora los tres bien acoplados se movían como expertos, la cama iba a desfondarse pero los gemidos de todos fue en aumento.

- Mas rápido, hasta el fondo que estoy acabando como nunca me había pasado.

Rafa también termino con un grito en cambio su hermano lo hizo en silencio.

- Vean la divina carga que me dejaron. Por su entrepierna y nalgas corrían chorros de líquido blanco muy espeso; los beso a ambos dirigiéndose al baño para preparar el regreso.

La despedida fue rápida, pero sabiendo que se iba a repetir todo en tres meses cuando la familia visitase a mi tía en la ciudad.

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