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Nuestra amiga argentina, el tatuado y la pendeja

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Bueno, como les conté en el relato anterior ya el tatuado le había echado los ojos a Valen -como dicen las viejas- y nos dijo de ir a la casa para hacer algo.

La cosa es que a Valen le conté la mitad de la verdad nada más. Obvio no le dije que se ‘armaban tipo orgias’ y yo me fumaba, que vale aclarar que con el único que lo hago es con él.

Obvio, sin decírmelo, sabía que se la iban a coger, con sus 18 años y ese cuerpito chiquito hermoso que tiene y más con lo puta que resulto ser.

La cosa es que la convencí para ir, ya ni me acuerdo que día era, ya que acá para mi son todos iguales.

Sin que le diga nada a Valen se puso una recontra mini ajustada, de esas que cuando nos sentamos ya estamos en bolas y yo re loca y re jugada, le quería dar una sorpresa al tatuado, me puse una mini de jean, no tan cortita, una remera y nada más (es decir estaba sin bombachita y sin corpiño, que obvio las llevaba en la cartera).

La cosa es que nos subimos a la camioneta de mi vieja, Valen se sienta en la camioneta y con esa pollerita estaba casi en bolas.

Y hay cosas que son más fuertes que yo, ya lo conté mil veces, me gustan las conchitas, pero más las pijitas.

Paro la camioneta en una calle re oscura, la beso, nos besamos (como para hacer la previa), me pongo arriba de ella, nos empezamos a meter manos por todos lados hasta que se da cuenta que ¡no tenía bombachita! Y me dice algo así:

Valen: nena, sos ¡re puta!, estas en bolas, estas preparada a que nos ¡re cojan!

Yo: nena, (como digo siempre) nunca te voy a dejar sola, si cogemos es juntas, total a vos y a mi nos encanta ver cómo nos cogen ¿o no? Y aparte es una sorpresa que le quiero dar al Tatuado.

Valen silencio, no dijo nada, seguimos juntitas, hasta que nos metimos los dedos en las conchitas y terminamos acabando las dos juntas.

Esa fue la previa que habrá durado media hora jeje

Pero ahora viene ¡lo mejor!

Como siempre llegamos a esa casucha que tiene el tatuado, toco bocina (ya que ni timbre tiene), en nada nos hace entrar, y está un amigo de el con otra chica, que yo ya conocía, bah, solo de coger, porque estuvimos juntas en lo del Tatuado.

Obvio ya estaban todos fumando y tomando, como para hacer una previa (pero no muy larga), el tatuado, me da un cigarro, lo empiezo a fumar, se lo paso a Valen (que se quedó, ¿cómo decirlo? Totalmente desubicada), al principio, no quería, le digo: “forra, en el único lugar que hago esto ¡es acá! Hacelo, va estar re bueno, vas a estar como en las nubes y gozar como una perra”, ya le estaba diciendo que se la iba a re coger.

Como siempre digo me salgo con la mía, fumamos ese, entre las dos ¡y otro más! Y (como nunca fumo, me pega fuerte, y hay cosas que ni me acuerdo, solo cuento lo que me acuerdo, pero estaba ya entregada).

Ezequiel, el amigo del tatuado, se me acerca a mi junto a Lau (la amiga de ellos que estaba ahí), y entre los tres nos empezamos a tocar, a besar, me empiezan (como siempre entre los dos a meter las manos entre las piernas y no solo me dejo sino que las abro), y veo que el tatuado ya estaba con Valen, solo los vi besándose (el Tatuado cuando la vio se quedó re caliente con ella).

La cosa es que me empiezan entre los dos a matarme, Lau, me saca la remera, me dice: “puta estas sin corpiño” y desesperada, me empieza a chupar las tetas, me las come, y a su vez Ezequiel, llega a mi conchita y me dice también: ”trola estás sin bombacha” y les digo que sí que era un regalo para ellos.

Nada, no sé ni cuánto tiempo pasó, pero ya estaba en bolas, con Lau comiéndome las tetas, besándome y Ezequiel, metiéndome esa hermosa pija que tiene en la concha (y otra vez con lo loca que estaba ni le dije que se ponga un forro).

En todo eso, la veo a Valen que el tatuado la había puesto en bolas, me di vuelta por sus gemidos, la pendeja estaba ya ¡re caliente!

La cosa, es que Ezequiel, me termina cogiendo, mientras Lau, me comía las tetas, mis pezones re duros de la calentura y escucho los gritos de Valen mientras el tatuado se la cogía y ¡acababa!

Primer paso: ya había logrado que nos cogieran ¡a las dos!

Nos quedamos en el sofá, seguimos fumando, y no me acuerdo bien (estaba re ida), pero lo que si me acuerdo es que en un momento terminamos entre Valen y yo chupándole la conchita a Lau y los chicos (y de esto no me olvido porque lo sentí y mucho) jugando con mi cola ¡y la de Valen!

Así, un rato largo, hasta que empiezo a sentir que me la empiezan a dilatar (la verdad no si era el tatuado o Ezequiel y supongo que a Valen le hacían lo mismo), mientras, le seguíamos chupando la concha y las tetas a Lau.

Hasta que siento que me empiezan a meter la pija por la cola, y por los gemidos de Valen supongo que ¡también!, lo que me acuerdo es que mientras nos cogían con Valen nos besábamos y también le besábamos la concha, las tetas a Lau, todo junto, hasta que terminamos acabando ¡casi todos juntos!

Ya no sé cuánto tiempo había pasado cogiendo, otra vez en el sofá, otro cigarro, esta vez Valen se fumó uno entero, un rato más, los chicos se paran enfrente nuestro, nos empiezan a pasar las pijas por la cara, y eso es más fuerte que yo, entre las tres se las empezamos a chupar, hasta que nos llenaron la cara a las tres de leche, y entre Lau y yo (Valen no lo hizo), se las seguimos chupando hasta dejárselas ¡bien limpitas!

Nos tiramos en el sofá los cinco, medio nos quedamos dormidos, repito, ni sé qué hora era, pero fue dormir un rato, ¡solo para recuperar fuerzas!

Lau y Ezequiel se van, nos quedamos solos con Valen ¡y el Tatuado!

El tatuado, nos dice: “nos pegamos una ducha” en ese baño asqueroso que tiene, pero me calienta, y sin preguntarle a Valen, le digo que sí.

Nos metimos en la ducha y obvio (que es lo que yo quería, los dos contra Valen, nos enjabonamos los tres juntos, así enjabonados, y agarrando una crema de enjuague le empiezo a meter los dedos a Valen en la cola, uno, dos, se la dilato bien, se la dejo de regalo al tatuado mientras le empiezo a chupar esa conchita hermosa de pendeja.

Obvio, el tatuado, se la intenta meter por la cola, no podía, yo le agarro una pierna, se la pongo arriba del borde de la bañera, para que así la pija le entrara mejor, mientras yo me encargaba de chuparle, meterle la lengua en la concha, hasta que terminó acabando (como un perra, como lo hace siempre), les digo: “ahora me toca ¡a mí!”

El tatuado, pobrecito, ya no le quedaba más lechona, pero con la chupada de concha de Valen y los dedos del tatuado en mi cola me hicieron acabar.

Bueno las cosa, es que nos secamos con unas toallas, yo la verdad, es que no estaba para manejar, así, nos tiramos en el sofá, nos quedamos dormidos, me despierto tipo 9 de la mañana y ¡MIL MENSAJES DE MI VIEJA!, le dije que habíamos ido a la casa de una amiga de Valen y nos quedamos dormidas, viendo una peli (obvio me creyó, ya que no es la primera vez que le digo eso).

Volvimos, en el viaje, con Valen mucho no hablamos, solo le dije: “nena sos re trola, lo recagaste a Migui y con todo jeje” y me dice: “y si nena, me llevas a lugares que me gustan pero fue la, primera vez que fumé y no estuvo mal” y le digo: “no seas forra, no te acostumbres, yo solo lo hago acá en el verano en la casa del tatuado”.

La cosa, es que hoy sábado, el día está lindo (pero como tengo dos meses para estar acá, no me preocupa perderme un lindo día de playa), y más que me quise quedar con Valen, que después del mediodía la pasaban a buscar para volver, pero ya la voy a volver a invitar.

Y aparte el tatuado me está mandando whatsapp para que vaya a su casa que voy a vivir algo que seguramente nunca hice y me tiene intrigada, ya que la verdad hice de todo prostituirme, orgias, tríos, pero me dice que no es nada de eso, que se yo, ¡no sé qué voy a hacer!

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