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Milena, chiquita pero fogosa

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Esto vivido con Milena, sucedió de la manera más inesperada, pero he de confesar que fue rico disfrutar de su cuerpo, el hacerla mía hasta la última fibra de su pequeño cuerpo.

Empezamos desde el principio. Conocí a Milena, que cuando la conocí tendría unos 34 años, en un Grupo de Oración en agosto del 2015 aproximadamente, pequeña de estatura, alrededor del 1,40 m., de 50 k., bonita silueta, culito redondito, senos medianos redondos, morena clara, cabellos a la altura de los hombros, ojos marrones, labios un poco gruesos, bonita de cara y trato, en fin, a pesar de no tratarnos al principio con esa confianza no es pretenciosa, más bien sencilla y eso resalta su belleza.

En fin el taller de dicho grupo terminó en agosto 2016 y para octubre ella me ayudó para una actividad de dicho grupo, comenzamos a tratarnos con más frecuencia, conocí a su novio de ese momento Javier, un hombre de mi misma edad, ella me pide que intente ayudar a su novio a ingresar en la empresa trasnacional donde yo trabajo pero a nivel del comedor, ya que Javier es chef, sin ofrecer grandes expectativas hablo con las personas del sindicato, quienes ya lo conocían, puesto que había trabajado con otra empresa de comida.

Como Javier entró rápido, Milena estaba muy agradecida, de hecho ese 23 de diciembre compartí con ella y Javier en su apartamento, pero notaba que había cierta incomodidad entre ellos, pensé que eran ideas mías, pero el tiempo me dio la razón. Para finales de Julio 2017, me encuentro a Milena en el centro y nos ponemos a charlar, ella me comenta que por la situación país se iba de Venezuela por unos meses, nos sentamos en un puesto de comida, ya que quería comprar 1 cachapa (Torta de maíz muy deliciosa).

Pide la cachapa para llevar y me comenta que las cosas entre ella y Javier no andan muy bien, que ya ella tiene 36 años, que quiere casarse pero no lo ve muy entusiasmado, en fin hablamos muchas cosas, ya yo venía algo embobado con esas tetas que a pesar de usar una franela algo holgada prometían ser de muy buen porte, cosa que luego constaté y disfruté, ya que había ido al apartamento de la mamá de Milena y de Javier a tomar café y hablar con ellos y en una ocasión Milena llevaba puesta una mini falda de blue jeans franela que dejaba ver sus hermosos senos, recuerdo que ella se me sentó al lado y dicha franela le quedaba algo suelta y como soy alto (1,84) pude contemplar ese par de masas carnosas, como pude traté de disimular pero desde esa fecha traigo esa imagen en la mente, haciéndolas protagonistas de muchas pajas, total hablamos, se desahogó conmigo contándome cosas, tratando de ser objetivo y puntual traté de aconsejarle.

A la semana de haber hablado con Milena le escribo para reunirnos ya que se iba para esa semana y me comenta que terminó con Javier, nos encontramos en su apartamento tomamos café. En octubre para finales, arribó al país estuvo en Panamá e Italia, en Noviembre ya en vísperas para la navidad, me invita para su apartamento un sábado en la tarde, después de la misa nos fuimos a su apartamento, ya teníamos la sangría y una botella de vino, nos pusimos a hablar y oír música, en eso sonó una canción de Chayanne y noto como los ojos se le humedecen a Milena, ella toma el control del aparato de música y la quita por otra más movida, como teníamos un pendrive que era mío me pide ver la carpeta de merengues, la guío y coloca canciones de Rubby Pérez Bonnie Cepeda, acto seguido procedo con mi pañuelo a secar su lágrima que empezaba a deslizar por su mejilla, estábamos de pie, tuve que doblarme algo ya que me daba casi más abajo del pecho por su estatura, ella instintivamente me abraza y le correspondo, el sentir sus pechos en mi abdomen hizo que mi miembro empezara a cobrar fuerzas, sentí temor no fuera Milena a pensar mal, pero sentí que me abrazó con más fuerza, como buscando apoyo, consuelo, empezó a llorar y le correspondí el abrazo, le dije que llorara para que desahogara, mi pene estaba tieso, sentía mi corazón latir con fuerzas como si se quisiera salir del pecho, tomé aire, me senté y la tumbé al sofá para que se sentara y abrazarla, luego de unos minutos de descargar un cumulo de emociones aprisionadas en su pecho e interior, me comentó que se sentía mal por la fecha y la ruptura con Javier, me dijo que la disculpara y le dije que por mí parte no había problema, que se sintiera en confianza, estábamos sentados en un sofá algo grande y la abracé, la recosté en mis piernas, quedando su parte trasera de la cabeza sobre mi pene que instintivamente palpitaba, le acariciaba su cabello, ya estaba más calmada, en eso se queda mirándome a los ojos y me pregunta sí me sentía bien, respondo que sí extrañado de su pregunta y riéndose se incorpora y me dice:

-Ay Ale debes ser fuerte.

Se levanta y va por más sangría, cuando regresa con los 2 vasos llenos sonaba una canción merengue pero lenta y con su mano me invita a bailar, me levanto algo apenado ya que se me notaba apenas la erección la abrazo guardando cierta distancia pero ella me atrae a su cuerpo, me tiene las manitos un poco arriba de mis nalgas y suspira, le pregunto sí ya está más calmada y disculpándose me dice que sí, inmediatamente me pregunta por el nombre de mi perfume, le pregunto sí huele mal y responde:

-No vale, al contrario me fascina, es más estaba por preguntarte, ya que a veces cuando estaba con Javier me llegaba este aroma y pensaba en tí...!

Riéndome le pregunto

-¿Cómo así?

Se separa y me pregunta si cocinamos algunos tequeños le respondo que si, me invita a pasar a la cocina para ayudarle, en lo que estamos preparando los pasapalos ella se sube a un banquito para alcanzar algo en un estante e instintivamente me coloco detrás de ella para ayudarle, Milena se voltea y riéndose me dice: "Que tal ya soy de tu tamaño!" y viéndola a los ojos le digo que bueno, no sé porque pero se movió y casi se cae la agarré casi como abrazándola, nos miramos a los ojos, casi como en cámara lenta y nos besamos.

No hubo resistencia de ninguno de los dos, ella con su mano derecha acaricia la parte trasera de mi cabeza, la sujeto por sus caderas sentándola en un mesón de concreto de la cocina, ella abre las piernas me acoplo a ella y seguimos con nuestro beso, tierno, apasionado, ya nuestras lenguas jugueteaban, le paso la lengua por su mentón bajando por su cuello, sintiendo cada latido de su corazón, la calidez de su cuerpo. Milena empezó a respirar entrecortado, puse mi mano derecha sobre su pecho izquierdo, no puso objeción seguí besando sus labios y con la mano izquierda la puse sobre su pecho derecho, masajeando esas tetas, le mordí suavemente su labio inferior, ella buscaba apretarme más, muy sutilmente busque la parte inferior de la franela de la selección vino tinto que llevaba puesta y muy suavemente la levanté.

No conseguí resistencia, apareciendo un brasier blanco, que levantaba un poco esas tetas me mira a los ojos callada y con mi mirada le doy a entender que me fascinan sus pechos, hace un gesto como invitándome a quitarle dicha prenda íntima, apareciendo unos senos redondos, pezones marroncitos claros, puntiagudos, mostrando señales de que estaba excitada, dirijo mi boca a uno de los pechos y lo muerdo muy sutilmente, emitiendo Milena un suspiro y quejido de placer, UUUMMM!, procedo a succionar como bebe recibiendo su alimento mientras con la otra mano acaricio y aprieto muy suavemente el otro pecho, Milena con ambas manos acaricia mi cabello corto, tardo alrededor de cinco minutos aproximadamente, cuando dirijo mis manos a su pantalón para desabrocharlo, en eso Milena reacciona ya que estábamos algo cerca de la ventana y a pesar de estar en un primer piso se distinguía algo, mejor nos vamos para la sala, menos mal que la cocina estaba apagada aún, la cargo así como estábamos, ella en posición sentada con sus piernas bordeando mi espalda, ella desnuda de su cintura hacia arriba, ya en la sala la tumbo en el sofá y procedo a quitarle los zapatos deportivos, bajarle el pantalón de jeans, apareciendo un bikini blanco que asomaba una inmensa Panocha, o como decimos aquí en Venezuela, una Gran Cuca, me quedé contemplando ese paisaje, anonadado, ella se tapa la zona de la vagina y me pregunta si no me gusta lo que veo, mordiéndome el labio inferior, con mirada pícara le respondo:

-Mami ya veo por qué no creciste, este cucón, no te dejó crecer, Jajaja! -y lanzándome a su cuca procedo a mordérsela y hacer como sí se la besara por encima de su bikini, esto hace que se retuerza del placer, me tome por la cabeza y quiera como introducirme hacia su interior, le bajo bruscamente su bikini, descubriendo una cuca bien depilada, carnosa, lubricada, me entretengo con la vista, la huelo, Dios, olía a paraíso, le introduzco muy suavemente la punta de la lengua, dando Milena un pequeño salto, hago como un sube y baja con la punta de mi lengua, haciendo sentir a Milena mucho placer, mientras besaba su cuquita, con mis manos le masajeaba ambos pechos, ella ya como loca posesa me tomó por mis orejas como introduciéndome a su cuquita, en eso siento que tensa sus piernas, empieza a respirar más agitado y a gemir más fuerte, viendo que lo que se aproxima es un gran orgasmo, dirijo mi mano izquierda a su boca e introduzco mi dedo medio para aplacar un poco sus gemidos que ya se estaban transformando en pequeños gritos.

-aaaahhh, aaaahhh, ale que rico! si oh ah ah ahhh!

Viniendo a mi boca una gran cantidad de líquidos, producto de su orgasmo, traté de seguir succionando y tomarme gran cantidad, ella al ver que me lo tomaba como si estuviera bebiendo el elixir de los dioses, sus líquidos representaba para mí el trofeo mayor, ella algo cansadita, producto de su orgasmo, con algunas gotas de sudor en la frente, y tratando de recuperar el aliento, me dice: "¡Guao, que fino, no me habían hecho sentir estas cosas!" mirándola a los ojos le digo: "¡Seguro?" "Mira que es malo mentir jajajaja", ella responde: "en serio!" , "Sí en serio" bajando la mirada, le dije: "Tranquila" "Eres una mujer muy bella por dentro y por fuera, con un buen cuerpo, joven, en fin puedo durar horas halagándote", terminando de decir esto, le estampé otro beso, esta vez fue Milena la que tomó la iniciativa de ir a mi pantalón para sentir y acariciar mi pene, me quité la franela, ella acariciando mis pectorales, poco a poco le fui haciendo como especie de un striptease, cuando quedo totalmente desnudo, Milena me susurra al oído vamos a mi cuarto, la tomo y la cargo en mis brazos y caminamos los pocos metros de la sala a su habitación, enciende la luz y el aire acondicionado, ya que estábamos sudados, la recuesto boca arriba de su cama y me meto a su vagina, mordiéndosela, degustándola, Milena revolcándose del placer apretando los dientes, me exclama: "Penétrame, Hazme tuya" hago caso omiso, le abro más las piernas y con la punta de mi pene erecto le acaricio su vagina de arriba a abajo rozando suavemente su clítoris, provocando en ella un manantial de líquidos, el cual me dirijo a absorber, ella maúlla como una gatita mientras se encoge se muerde los labios, ella suplica: "Por favor mi amor, métemelo" "NO aguanto, métemelo".

Tomo mi pene y lo dirijo a la entrada de su vagina mojada, la miro a los ojos, ella me observa dándome la aceptación y la bienvenida, se lo entierro hasta el fondo, a pesar de que mi pene mide unos 16 cm. Milena es estrecha, siento como se estremece, me abraza, y al notar mi desconcierto me dice: "Tranquilo soy muy estrecha de ahí abajo", "Se siente rico" dirige sus piernas a mi cintura y empiezo el mete y saca, cuando se lo entierro hasta el fondo doy como giros a mi cintura lo cual le produce un mar de placer, sintiendo como se viene en múltiples orgasmos, a pesar de esto sentía aún su vagina apretada, sintiéndola muy rica, para evitar venirme rápido, cambié de posición y me coloqué boca arriba, y a ella encima de mí, cuando estoy acostado que la tengo a ella encima de mí Milena tomó mi miembro y se lo llevó a la entrada de su vagina y se dejó caer, Milena ubicó sus manos en mi pecho y empezó el movimiento de caderas con mi pene enjaulado en su vagina, se veía bonita con los ojos cerrados, subiendo y bajando y cuando estaba abajo hacía círculos mientras tanto le tomaba sus nalgas, besaba y mordía sus pechos, besaba alternadamente sus labios para evitar gritos escandalosos que nos delataran, estábamos en el Paraíso, en una de esas, la ubico para ponerla de perrito, le abro las nalgas y veo su ano bien cerrado, meto mi lengua en su culito, fue espectacular, se le fueron las piernas, cayó rendida en la cama boca abajo, no me detuve, seguí chupando su culo, metiendo la lengua haciendo círculos, la tomé por las caderas, ya que se retorcía, gritaba, le tape la boca, metí mi dedo medio, lo chupaba fuerte, la tomé nuevamente y le asomé mi pene a su ano y me dijo con cara de terror: "Noooo, por ahí nooo! nunca lo he hecho por ahí, Hoy noooo!", la miré y le dije: "Está bien hoy no pero para la próxima será por ahí!".

Respiró como si le hubieran salvado la vida, le seguí besando su culito apretadito, ella seguía disfrutando, la penetro en su vagina y le cruzo mis piernas a la altura de las caderas, agarrándola por los hombros, ella tomó las sabanas apretándolas ya que sentía sus paredes apretar mi pene como asfixiándolo, era rico esa sensación no aguantaba más y le comuniqué que acabaría ella expresó que lo hiciera pero bien adentro, quería sentir mi semen bien adentro, cuando estaba por eyacular Milena también explotó en un glorioso orgasmo mezclando nuestros jugos, caímos rendidos en la cama mi pecho junto con su espalda, la respiración agitada, bañados en sudor, me preguntó sí podía acompañarla toda la noche y le dije que con una condición, intrigada me preguntó cuál era esa condición.

Sonriente le respondí que se volviera a repetir y que para la próxima su culito fuera mío, con cara de exclamación dijo así será, pero con una condición: pregunté por la condición y me pidió que no le doliera, ya que nunca lo había hecho por ahí y había escuchado que dolía, le expliqué que con una buena técnica y buena lubricación su primera vez no sería traumática sino muy placentera. Nos metimos a bañar, nos devoramos a besos, llamé a un sobrino para que cuidara a mi mamá, y en la noche lo hicimos otras tres veces más, como hay un dicho en mí país, esa noche Milena llevó más huevo que sartén de arepera de pobre, jejeje... Y luego les seguiré contando como estrené su culito y otra propuesta de Milena...

Espero les guste.

(9,29)