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Malena y don Antonio (Tercera parte)

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Don Antonio se paseaba por la plaza, pero ya sin la alegría que le proporcionaba el bullicio a la salida del colegio, la visión de las colegialas en cortas polleras había sido interrumpida por las vacaciones estivales. Pero por sobre todas las cosas, Don Antonio extrañaba a la rubia belleza que en forma incomprensible para él, había llevado a su casa en dos oportunidades, no entendía como esa chica había accedido a ir con él. La había cogido deliciosamente, no recordaba el sexagenario haber disfrutado tanto en los últimos años y a la chica también parecía haberle gustado.

Esa tarde realizaba su caminata habitual para hacer ejercicio, rodeaba la plaza y estaba por cruzar la calle cuando quedo paralizado al ver en la parada de colectivos a la chica que lo obsesionaba. Se detuvo para convencerse si era ella, no estaba vestida con su habitual uniforme sino que tenia un corto short de jean y una remera de manga corta, de todas maneras era inconfundible, su larga melena rubia y sus esbeltas piernas no dejaban lugar a dudas. Don Antonio se acerco y pudo darse cuenta que la chica no estaba sola. Aparentemente un hombre mayor le hablaba y la chica le daba la espalda, negando con la cabeza. Intrigado, Don Antonio se acerco mas, la chica al verlo dijo "Hola, como esta" y se acerco a lo que el otro hombre se dio vuelta y se retiro en silencio.

Don Antonio percibio algo extraño y dijo "Estas bien, te estaban molestando?", la chica le dijo "Aparecio ese hombre y me decia groserias, queria que fuera con el, yo le decia que no y seguia insistiendo. Por suerte aparecio usted" con voz entrecortada, parecia asustada y Don Antonio le dijo que no se preocupara que ya se habia ido, que siempre hay quien molesta a las chicas pero que no le iba a pasar nada. Trataba de tranquilizarla mientras no se le escapaba lo buena que estaba la pendeja con esos pequeños shorts que dejaban a la vista esas monumentales piernas, y esa carita compungida de niña, no pudo evitar sentir una fuerte pulsacion entre las piernas. "Mira, justo ahora terminaba mi caminata e iba a tomar una cerveza a casa, acompañame asi te tranquilizas, dentro de un rato veras que vas a estar bien" a lo que la chica contesto "Esta bien, usted es muy bueno, pero mejor me invita con un refresco, cuando tomo cerveza a veces hago tonterias" dijo Malena sonriendo picaramente. Don Antonio le dijo "Es bueno hacer tonterias a veces" y se encaminaron al domicilio del hombre mayor, que no podia ocultar su alegria por reencontrarse con la nena que lo enloquecia. En el camino la chica le dijo que habia ido al cole a buscar las notas, que habia aprobado todo y que estaba contenta, "Ves, es un motivo para festejar" dijo Don Antonio que ya estaba imaginando todo lo que le haria a esa espectacular rubia cuando llegaran a su casa.

Llegados a la casa de Don Antonio, Malena se sento en el sillon del living mientras el excitado hombre iba a traer las bebidas. Cuando volvio, la invito con un refresco mientras el se tomaba una lata de cerveza, se sento al lado de Malena y veia como la chica tomaba un par de sorbos y no pudo contenerse, dejo la lata sobre la mesa y puso una mano sobre el muslo de la joven. Malena dejo su refresco, mientras la mano del hombre la acariciaba dijo casi ronroneando "A usted le gustan mucho mis piernas, verdad?", "Si me encantan" le contesto mientras con otra mano la rodeaba por la cintura acercandose a la chica, su boca buscaba besarla y Don Antonio se sorprendio cuando la chica fue al encuentro de su boca y comenzo a besarlo, tiernamente al principio y con mayor pasion hasta encontrar sus lenguas y entrelazarlas. Si eso fue sorpresivo para Don Antonio, que la mano de Malena, mientras se besaban, se posara en su entrepierna acariciando su creciente ereccion fue un shock y termino por enloquecer al hombre que se tendio sobre la chica acrecentando sus besos y acariciandola por todo el cuerpo.

Malena sentia que nuevamente su cuerpo respondia a las caricias y besos de ese hombre mayor, pero esta vez ella queria ser mas activa, se habia sorprendido a ella misma cuando acaricio el duro bulto, constatando la excitacion de ese hombre, y que lo habia besado con pasion. Ahora sentia que un torbellino de sensaciones la invadia mientras el hombre le habia quitado la remera y besaba y chupaba con ardor sus duros pezones. Tenia la entrepierna totalmente mojada, tenia ganas de ser penetrada y un deseo enorme de que ese hombre le hiciera de todo.

A todo esto, Don Antonio ya estaba fuera de si, esa pendeja lo volvia loco, estaba a punto de eyacular mientras le chupaba con frenesi los pechos y se frotaba contra las suaves piernas de la joven, se dio cuenta que si seguia asi se iba a acabar en los pantalones. Se levanto, tomo a Malena de un brazo y se dirigieron al dormitorio. Se quito pantalones, zapatos y su ropa interior mientras Malena lo miraba parada frente a el, solo vestida con su corto short. El hombre se acerco y empezo a desprenderle la prenda, se la sacaba a manotazos mientras Malena ayudaba moviendo sus piernas. Verla solo con minuscula tanga blanca termino de enloquecer al enerdecido Antonio, la tomo por la cintura y se tendieron en la cama, busco como enloquecido ponerse entre las piernas de la chica y sin demora empezo a lamer los costados de la tanga y por encima de la fina tela, ya humedecida. Chupo y chupo los labios vaginales mientras Malena suspiraba, tomo por los costados la tanga y se la quito y ahora se abalanzo sobre la entrepierna de la chica, como un salvaje se dedico a chupar esa dulce conchita, sabia a nectar y Don Antonio estaba embriagado y no existia en el mundo nada mas que esa sabrosa entrepierna que estaba comiendo a besos y lenguetazos.

Malena sintio la llegada de un fuerte orgasmo en medio de las lamidas, como si fuese una descarga electrica originada entre sus piernas se abandono al placer y exploto en todo su cuerpo, arqueando su espalda y suspirando de placer. El enardecido amante de la chica se dio cuenta que ya no podia aguantar mas, se irguio y levanto con su mano por la cintura a la joven para separarla de la cama y con su otra mano guio su endurecido miembro hacia la mojada conchita de Malena, se introdujo en ella y comenzo a embestirla bestialmente dando rienda suelta a toda su excitacion acumulada. Don Antonio no aguanto mas que tres o cuatro embestidas cuando eyaculo profusamente en medio de un gutural gemido de placer, descargandose dentro de la chica que lo enloquecia, siguio moviendose hasta que su miembro flaccido se escurrio del interior de Malena. La vision de la chica, con sus ojos entrecerrados y su boquita entreabierta volvio a enardecer al hombre que se ubico de nuevo entre las piernas de esa belleza y reinicio sus lamidas y besos con renovado ardor.

Malena ya deliraba de placer, sentia que nuevos orgasmos la atravesaban, como podia ese hombre darle tanto placer lo desconocia, solo que se entregaba a el y se abandonaba como ahora en que un fuerte orgasmo la hacia gemir y suspirar, su cuerpo temblaba y se sentia liviana, flotando en el paraiso.

Luego de un rato, la pareja se levanto, Malena fue al baño donde se baño y vistio mientras Don Antonio esperaba respetuoso que la chica terminara para luego hacer lo mismo. Luego Don Antonio invito con un nuevo refresco a la chica que agradecida le dijo "Me gusta que me invite a tomar refrescos a su casa " y el hombre contesto "A mi me gusta que vengas, sos preciosa" y luego de despedirse con un beso, el hombre vio como la chica se marchaba, con su alegre y juvenil paso. Se sintio feliz.

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