Me lo contó una amiga. Sé que es pervertido y sé que probablemente no sea algo que deba compartir en línea, pero quiero compartirlo.
De nada sirve negar que me encante ser penetrada, me fascina la sensación de estar totalmente llena, embutida de un falo duro y grueso. Me encanta la sensación de que mi novio me penetre y me dé duro con su duro miembro que me haga cosas divertidas y a la vez pervertidas, sucias. Lástima no pueda estar siempre con él, así que me tocó buscar alivio a mi manera para quitarme la arrechera.
Para consolarme tengo todo tipo de juguetes sexuales, consoladores, vibradores, bolitas chinas, cremas, enemas etc. Esta vez me conseguí un consolador con base de succión para mantenerlo fijo en algún lugar apropiado. Algo nuevo y emocionante.
Se ve hermoso mi consolador, puesto sobre la pared de la ducha, o encima de un escritorio o una silla, es largo y grueso, como para tocarme todo por dentro de mi ardiente vagina. Me gusta agarrarlo mientras me siento en el sentir como mi mano se va deslizando hacia abajo mientras el otro lado desaparece dentro de mí.
Tenía muchas ganas de usar mi consolador de succión por primera vez, estaba tan caliente y lista para ser culeada por mi nuevo juguete.
Ya sabía dónde lo iba a asegurar, sobre el espaldar de la cama. Me recosté, puse una almohada cubierta con una toalla debajo de mí, no sabía qué tan desordenada iba a ser y luego bajé la mano entre mis piernas y comencé a jugar conmigo misma, cerré los ojos y me imagine todo tipo de guarradas, se sucias locuras, y me mojé muy rápidamente, estaba lista para jugar con mi amante de silicona.
Me unte de lubricante los labios de mi vagina, metí los dedos para mojarla un poco más por dentro y acerque mi excitados e hinchados labios a la cabeza del deseado palo. Tomé el siliconado y artificial vergon, lo puse más cerca y empecé a metérmelo suavemente. Lo saque y metí varias veces, que excitada estaba. Acaricie mis senos, pellizque mis pezones, y ya el consolador estaba totalmente dentro de mi vagina.
Seguí dándome con el consolador, sentía el placer que me producía, me cambie de posición y ya en cuatro me seguí culeando con el palo encantador. Me los saque, lo puse sobre la cabecera y lo deje seguro, tieso y mirándome a los ojos. Ya en cuatro me voltee y me empale despacito en él. Podía moverme libremente, tocarme con ambas manos, controlar la velocidad de penetración y la profundidad de la misma, que rico se sentía, que delicia, no quiero correrme todavía, estaba esperando una venida súper fantástica.
Permanecí dándome por un rato largo, sentía como me vendría fuerte, las sensaciones crecían y mi cuca estaba sonadísima, me empecé a venir, correr, como lo quieran llamar, que orgasmo tan espectacular olas de placer me invadieron y mi vagina apretaba y soltaba el falo que me estaba dando todo ese placer, parecía lo instaba a darme de todo. Caí sobre el lecho y dormí unos minutos, no me di ni cuenta. Desperté excitada de un sueño erótico.
Tome el consolador, todavía húmedo y lo peque al suelo y me le senté encima, auto penetrándome hasta el fondo, Lo monte rápido, despacio, lo deje quieto adentro, solo la cabeza apara luego de un solo tirón volver a metérmelo, que delicia, estaba disfrutando mi nuevo juguete.
Me empecé a correr nuevamente, mi clítoris excitado, con el movimiento de mis dedos, vibraba, este orgasmo fue fuerte, fuertísimo, prácticamente me orine de placer y me deje caer sobre el falo.
En ese preciso momento entro mi novio, y así me encontró, me levanto del cabello como me gusta y me dijo te voy a dar por el culo zorra. Pero eso se los cuento otro día.
Pd. Estoy esperando mi amiga me cuente pronto que paso para contarles a ustedes.
