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Mi lado mas erótico (4 de 6)

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Cuando llegue a casa era mediodía y hacia un calor infernal, ya había picado algo y no tenia ganas de cocinar así que acomode un poco de ropa y cosas del viaje, cerré la persiana dejando medio oscurito el cuarto y me acosté a dormir la siesta que en verdad era dormir porque estaba agotada y atrasada de sueño.

Me levante y me quede haciendo un poco de fiaquita en la cama y haciéndome un poco la cabeza me llegaron ganas de sexo, es mas; me acuerdo con que: haciendo el check-in en el aeropuerto estaba un tipo parado adelante mío en musculosa y tenia una espalda y una cola hermosa. A esto le sumo que dormí desnuda y con el ventilador de techo prendido a full por el calor, levante las piernas un poco, las separe y cuando me puse una mano tapando mi sexo con la palma podía sentir el calor y la humedad como nunca. Empecé mojándome dos dedos con un poquito de saliva y pasándomelos por los labios mayores en "V" y con el dedito mayor sobre el capuchón del clítoris frotando para los costados. Parecía que era la primera vez que tenia sexo por como reaccionaba mi cuerpo; no es que sea tan zarpada; pero no me acuerdo la ultima vez que estuve mas de dos semanas sin sexo de cualquier tipo.

Me estire para la mesita de luz a buscar mis juguetes que los tenía guardados en una bolsita para que no se ensucien. Saque el lapicito, lo prendí y me lo puse entre los pechos. Juntaba los brazos para que quede ahí atrapado mientras con las manos me daba cachetadas en la concha... Tenia ganas hasta de gemir fuerte, cosa que no me pasa normalmente. También me lo ponía de punta sobre un pezón y apretando para adentro. Me gustaría que entiendan también el placer que daba el ventilador tirando una brisa que me ponía a mil, como si alguien me soplara despacito.

Después me moje un dedo y me lo puse adentro, no se para que mojarlo porque de la entrada para adentro era toda humedad hirviente. Y cuando entra un dedo entran dos y el tercero, jalo para arriba y para adentro para tener mi clítoris en la palma de la mano y juntar todo el calor que sale de mi sexo ahí. Estaba re desesperada, quería un orgasmo ya; parecía que si me la metía una vez mas explotaba, pero no, aguantaba una embestida mas y tampoco quería llegar con un juguete adentro; la idea era sentirlo con la mano metida y hasta el final. Seguí con la colada un ratito y cuando me daba la sensación de que se me dormía todo el cuerpo me puse de rodillas con los dedos bien metidos y mirando como los perdía adentro me llego ese momento sublime que me arqueo el cuerpo hacia adelante sin quererlo y hasta que me bajo el calor del todo no pare con la colada. Me acosté boca arriba y abriendo bien las piernas saque la mano y era un enchastre, toda mojada mal, pero la satisfacción; terminar el orgasmo con el aire del techo soplándome... díganme chanchita si quieren pero era una de las pocas veces que no tenia ganas de bañarme, me quería quedar ahí para siempre. Prendí la tele y mientras miraba algo seguí acariciándome un poco, igual tampoco llego a un orgasmo y al toque me levanto; si no busco un segundo o un tercer orgasmo de corrido me quedo frotándome un poquito mas para que el placer baje pero despacito.

Quería, antes de contarles una fantasía, corregirme porque en el relato anterior no me acordaba del nombre del telo y puse que era "Fantastique" el de Viamonte y Uriburu. Al toque de publicarlo me llego la corrección de un porteño: Ese es el de La Rioja y Alsina. Es otro de los que iba, este es más chiquito (el edificio rosa). Es normal que me confunda nombres porque era un momento en el que iba probando distintos lugares con mi novio de entonces para encontrar el lugar en el que este mas cómoda y empezar a ir a ese. Entonces iba a dos por semana más o menos y todos distintos. Por eso cuando me dicen no el nombre, sino el lugar donde queda tal telo es muy probable que me acuerde.

Les voy a contar como hice la fantasía de la mucamita; aunque no es muy pedido tarde o temprano llega la idea y se hace; esta vez la hice bien caserita. Use mucha ropa negra que ya tenia y con cartulina hice los adornos en blanco de los puños de la camisa y el cuellito; aprovechando que de la escuela la cartulina y pegamento me sobra. Además del delantal de cocina mas cortito. Me quedo mas o menos así: El pelo recogido para atrás con una colita con moño, un cuellito bicolor, camisa negra con los adornos, un sostén de media taza negro y delantal adelante. Una mini negra y tanga haciendo juego; medias arriba de la rodilla y zapatos de taco alto; toda en blanco y negro. Me puse mucho perfumito y obvio: el plumero. Le había dicho a mi novio que me esperara en el sillón sentadito hasta que me cambiara. Cuando le salí así vestida el estaba sentado en ropa interior y con el palo afuera bastante crecidito. Lo apretaba con una mano y lo manejaba despacito para arriba y para abajo de forma tan erótica que no podía dejar de mirarlo. Así y todo seguí con la fantasía limpiando, pasando el plumero y agachándome por cualquier pavada solo para mostrarle el secretito que tenía para el debajo de la mini.

Cuando lo volví a mirar ya estaba a mil, y se pasaba babita por la punta con las manos como preparando la que se iba a venir. Me dijo "veni a limpiar por acá" y señalo el piso bien cerquita del sillón en el que estaba recostado. Le respondí con un "si, señor" y me acerque con actitud felina a limpiar al lado suyo, agachándome sin doblar las rodillas y entregándole la cola mal, bien cerquita de la cara. No llegue a pasar el plumero dos veces por el piso que sentí las dos manos un poco mojadas de su saliva agarrándome con fuerza y separándome la cola en dos; y aunque no me chupeteo como me la esperaba sentía el calor de su respiración agitada entre las piernas porque tenia la cara metida abajo mío.

Me dio su segunda orden: "arrodillate y limpia allá" y señalo la mesa ratona. Así me hizo ir a ponerme en cuatro patas a dos pasos de el y a limpiar la mesita. Escuche como se levantaba del sillón, como se ponía detrás mió de rodillas... sentí una caricia bajo la mini, casi en la base de la espalda. Como me bajaba la bombacha y con sus rodillas me separaba las piernas. Algo caliente y mojado acercándose a mi sexo y acomodándolo en la entrada. No me dio tiempo ni de decir "ay". Puso las dos manos en mi cadera y me llevo hasta su cuerpo, penetrándome con ganas. En la primera me entro casi la mitad, y en la segunda embestida ya sentía como me llegaba a tope. Con la tercera mi cola se chocaba contra su pubis y sentía ese sonidito de aplauso y empezó a darme con todo, a bombear sin parar. Me recosté un poco sobre la mesita, con los codos, levante la cola para que me entre bien cómoda y gire la cabeza para verle la cara de placer que ponía. A veces me obligaba a penetrarme; se quedaba quietito con la puntita sola adentro y con las ganas que me dejaba me tiraba para atrás metiéndomela como loca. Yo también le hacia lo mismo. Me quedaba bien durita y el tenia que moverse si quería coger.

Solo me dio un respiro para que me sacara un poco de ropa; me dijo que me quería así: arriba solo el cuellito y el corpiño negro. Abajo solo las medias y los zapatitos. Se fue a sentar en el sillón de nuevo y me dijo que limpie el mismo lugar de antes (yo no me acordaba ni donde había dejado el plumero de tan bien que me tenia), y yo lo único que quería era mas, así que me acerque solo para agacharme y mostrarle la cola, y como me había dejado la entrepierna toda mojada. Así me volvió a agarrar de la cintura y me llevo arriba suyo, de espaldas me caí sobre su abdomen y veía su palo como me salía por abajo, entre las piernas. Lo agarre y estaba bien resbaladizo; para acomodármelo bien en la concha y darle lugar a una sentadita de espaldas. Con las manos enormes que tenia se me prendió de los pechos con el corpiño puesto y empezamos el subi-baja. Cada vez que me entraba se me escapaba un gemido distinto; y a el le salía la respiración bien profunda soplándome la nuca y las orejas (como me gusta).

Cuando sentí que se me venia adentro pegue un saltito y en cuatro patas para que me termine sobre la cola, así que se puso atrás; me apunto y con un par de sacudidas me cayeron esas gotas espesas encima... me gusta mas así porque sigo en esa pose y la leche caliente va cayendo por la raya de la cola y hasta el sexo no paran. Llego el primero al orgasmo; yo tuve el primero después que me diera vuelta y acostada en el sillón me lo buscara con la lengua; algo que no quiero dejar pasar es que me pasaba el plumero por las tetas mientras me hacia el oral y mas que cosquillas era bastante bueno. Así levante las piernas al techo y al ratito me vino; llegue y pase el primer orgasmo y todavía lo tenia prendido con la boca; lo tuve que separar yo agarrándolo de la cabeza porque me comía cruda. Se fue al baño y me dejo ahí: con medio disfraz y hecha pelota. Después la seguimos en la cama pero sin disfraces ni nada; pero eso no se los voy a contar.

Me imagino que a esta altura estarán bastante calentitos... entonces aprovecho para mandarles un besito en la boca a mis lectores/amantes por el apoyo y me quedo con todos los besitos que me mandaron para que me los guarde "ahí" como me dicen ustedes.

Ahora quiero tocar un tema que a todos los hombres les encanta, se lo hagan seguido o si nunca se lo hicieron: el sexo oral, pero bien hecho. Los que están casados con una mujer complaciente y comprensiva tienen que practicarlo seguido, sino no entiendo para que se casaron: igual les voy a tirar un par de consejos para los que tienen una mujer cerquita que no se anima a llevarse a la boca lo que tienen entre las piernas o cosas que podes hacer para que este mas cómoda cuando te lo haga. Para esta parte del relato colaboro Ceci con su experiencia (nos ponemos en rol de maestras).

Les vamos a contar algunos secretitos sobre gustos, cosas que tiene que tener si o si un buen pene para que den ganas de comerla. Primero que todo tiene que tener una belleza estética; lo mejor es que esté mas o menos así: que en todo el tronco no tengo ni un pelo (sobre todo en la base) y en la zona del pubis recortadito (si no se animan a afeitarse todo) Van a hacer que se vea mas la base del pene y por ende, parezca mas grande; la ingle y los huevos también sin pelos. Ya se que al hombre le cuesta mucho hacerlo, que no tienen ganas y todo eso. Yo tuve que insistir varias veces y hasta amenazar para que se pelen ahí abajo. Pero tienen que entender que nadie quiere chupar o pasar la lengua a algo que tiene pelos, sobre todo porque alguno se sale y te queda en el labio pegado y molesta mucho. Segundo es el olor: Lo mejor es que no tenga olor a nada; es feo que huela a sexo muy fuerte o que tenga olor a jabón. Lo mejor es lavarlo con agua sola.

Lo que importa es el gustito salado que tiene, y al chuparlo sale el olor a sexo pero más suave. Otra cosa muy importante es saber mostrarlo; Los que tienen pielcita adelante; lo mejor es tirarla para atrás: mostrar el glande entero, nunca esconderlo. La cabeza afuera da la sensación de que esta listo para la acción. Y que tampoco esté muy sequito, mojarlo un poco con babita le da un brillo a la punta que esta bueno. Otro punto son las poses que hacen que se vea mas erótico y apetecible. A mi me gusta por ejemplo, el hombre recostado en la cama, con una pierna abierta. Así me acuesto sobre el muslo de esa pierna como almohada y me queda un pene ahí al lado enorme; porque lo veo desde abajo. Da muchas ganas de estirar una mano y lo agarrarlo... para otras lo mejor que puede hacer el hombre es pedirle a su mujer que se siente al borde de la cama y acercarse caminando despacito con el aparato al mango. Si ella empieza de cero, hacete la cabeza y trata de llegar rápido a la erección porque es feo jugar con algo fláccido. Casi me olvidaba; no es muy buena idea que le manejes la cabeza, lo mejor es que una la meta hasta donde le llegue y vuelva a sacarla; porque muchos hombres sin conocer hasta donde entra agarran de la cabeza y quieren meterla mas y terminan con la pareja haciendo arcadas. Y busca posiciones que dejen a ella con las dos manos libres. Ahí mas o menos están las claves para que den ganas de hacerlo; ahora abandono el rol de maestra (estoy de vacaciones) y les voy a contar como lo disfruto:

Influye demasiado en la forma de hacerlo las ganas de sexo que tenga; si estoy con mucha calentura, voy al grano: mucha babita, una "mojadita" y hasta el final. Pero si me puedo controlar juego un poco, hago cosas en seco, mucho besito y la agarro para sacudirla mucho. Vamos a fantasear un poco: te voy a contar la mojadita como si te la hiciera a vos y otras formas las dejo para más adelante. Te voy a pedir que agarres los almohadones y los pongas al fondo de cama así te recostas. Sacate todo y quedate en boxers... dejame que te los saque yo. Me visto sexy como me pidas y te muestro lo que sea; pero quiero que cuando me meta en la cama con vos ya la tengas a full, casi rompiendo la ropa interior. Así como la tenés ahora me encanta, me pongo a gatear sobre la cama acercándome y mirando directamente a ese pene de mis sueños y mis fantasías. Te pongo una mano sobre el bóxer y recorro todo tu palo enorme suavecito, acerco la cara y te doy una mordidita suave atrapando el tronco como una perra muerde un hueso. Estoy excitada, mal. Subo hasta tu boca para darte un chuponazo y sentir tu sexo pegado al mío, aunque sea con ropita puesta. Y me miras bajar mientras te beso todo el pecho de arriba abajo y pasándote la lengua por el ombligo. Te agarro del elástico y tiro para abajo porque quiero verlo... cuando aparece se me hace agua la boca. No me puse colita para el pelo, así que agarrame de la cabeza y acariciame el pelo mientras te rasco la ingle con las uñas, son cosquillitas que me gusta hacerte, nada mas.

Espero que estés bien cargadito como me gusta... con una semana sin sexo para que te estrene ahora. Con la mano izquierda envuelvo tu falo y siento lo caliente que esta; lo levanto y me hundo entre tus piernas hasta el comienzo de los huevos y empiezo con besitos, pero con besitos húmedos. Me mojo los labios y te doy los besos dejando que algún hilito de baba nos una. Y chupo. ¿Sentís como tironeo la pielcita?, ¿como abro la boca lo mas que puedo para comerme un huevo y lo mismo con el otro? Se me resbala la cara en esa almohada que tenés bajo el palo y cuando te jalo la verga sequita despacito hacia arriba y hacia abajo siento la misma humedad que puse en tu sexo, pero en mi entrepierna... ¿me das un besito mas? quiero mas babita para empezar lo mejor. Si el masajeo en los huevos que te doy con las dos manos me mojaron las palmas ahora viene la mojadita. Junto toda la saliva que puedo y la descargo en la punta de tu verga. Veo como baja y con la lengua la distribuyo por todos lados, te empapo la verga, la ingle y mi cara de la boca para abajo es todo líquido. Unos masajitos mas con las dos manos, la pongo de punta en mi boca y envolviendo el glande con mis labios me la meto despacito hasta donde llegue. Tu cabeza palpita y choca contra mi paladar cada vez que me la como. Ese es el ruido que escuchas, el chupeteo; y cuando me la saco unos hilos enormes de saliva me unen a tu verga. Con las dos manos los masajes no paran hasta que termines, una en los huevos y la otra pajeandote despacito, así me pones esa carita como diciendo "me estas matando" que me encanta. Te voy a pasar un poco la lengüita por la punta de tu palo... ¿te gusta, no?. Es como una línea chiquitita pero cuando te aprieto se te hace como un agujerito... te paso lengua desde abajo hasta la puntita y aprieto para que salga una gota de tu jugo bien saladito y lo pruebo.

Me siento ahogada, como sin aire; por momentos tengo que sacármela y respirar profundo, tragar algo de todo lo que me da vueltas en la boca, pero mientras tomo aire no me puedo frenar ni dejar de jalártela así. Pongo las dos manos en la base y te pajeo con la boca mal, me la meto y la saco como si fueran las mejores de tus embestidas cuando me coges. Tenés el glande rojísimo y siento como palpita en mi boca. ¿Donde querés dejar la leche? ¿Sobre mi lengua?... yo quiero que tu verga sea como un volcán en erupción; te la jalo a full y la apunto al cielo, quiero ver como te salta y te vuelve a caer encima. Mmm, sale y es muy blanca y espesa como me gusta. ¿Estabas cargadito, no?... y me encanta los gemidos que te salen cuando te sigo pajeando para sacarte hasta la ultima gota de tu placer. Ahora si sabes lo que es una "mojadita"; mirame. Estoy hecha babita y sexo, toda empapada.Y vos también: mirate el abdomen. Toda tu leche y mi saliva. ¿Vamos a bañarnos?... dale que después me toca a mi acostarme y vos me vas a demostrar lo que sabes hacer... ¿si?

En el próximo relato sigo con esto de escribir en clave de "tu"; que me gusto y espero que se hayan dado cuenta lo que es disfrutar del sexo oral. Y voy a aprovechar para hablarles sobre tomar el semen; que seguro es tema "tabú" porque esto ya no tiene que ver con animarse nada mas: te tiene que gustar. De todas mis amigas solo a dos le gusta hacerlo y son casadas las dos; no dice nada porque a mi me gusta y no lo soy. Pero demuestra que la relación tiene que estar muy avanzada como para hacerlo seguido. Yo hasta que no es novio en serio ni a palos que lo haría porque lo quiera o no es una demostración de amor bastante importante y hasta que no sentís ese lazo te da como asco; lo que sentís cuando es leche de novio es como que te pertenece, le cambia hasta el gusto.

Les voy a contar algo que es muy intimo, y espero que no lo mal interpreten: Uno de los últimos novios que tuve (mas de una vez escribí sobre el en mis relatos), con el muchas veces a la noche; si me podía dar tres veces cogiamos dos y a la mañana antes de salir a laburar me levantaba una hora antes y me daba la leche en la boca y recién ahí salía. Y lo digo en serio: era como un desayuno, me hacia sentir mejor y cuando hacia frío a la mañana era mucho mejor porque sale calentita. Obvio que el olor es fuerte, y sobre el sabor al principio no sentís un gusto definido, después se hace muy salado y como es espeso da mucha sed y lo sentís en la garganta todo el tiempo, como si no lo terminara de tragar nunca. Pero como es leche de tu novio es como si fuera de una también, además conozco mujeres que en periodo de lactancia le dan a su pareja la leche materna. Otra cosa es la forma de tomarla porque a muchos les gusta terminar en la cara y no terminas tomando nada.

Lo mejor es que termine dentro de la boca, así lo voy juntando todo ahí y tragando dos o tres veces ya esta. Otra es que se la vuelque encima y después le paso la lengua, y la que me hacia este novio seguido era terminarme en los pechos y con un dedo juntaba todo lo que podía y me lo daba para que lo chupe y así hasta que no quedara nada. Pero siempre es mejor después de coger o de un oral que fuera de la relación. Solo una vez me paso que me levante para empezar el día y me pidió que me saque la bombacha y se la de; se masturbo oliéndola y me vino a buscar a la cocina porque estaba desayunando y me puso la verga al lado para que tome. No es muy lindo así, es mejor cuando una la fabrica con sexo a que ya la traiga de golpe. Al programa "Confidencias" de Cosmopolitan tv escribió una mujer contando que todos los días tragaba semen y preguntaba si le podía hacer mal a los dientes y encías y la respuesta obvia era que no. Es cuestión de gusto y como dice el verso: no hay nada escrito. Espero que nunca juzguen a su pareja por no querer hacerlo, porque es algo que va más allá de la relación sexual.

Me hubiera gustado que este relato tenga menos fantasías y mas de mis practicas; pero como vengo de un mes de vacaciones sin parar no estuve en casa ni dos días seguidos; igual ahora me queda un mes en casa antes de empezar el ciclo lectivo. Seguro que el próximo relato los va a poner al tanto de mi placer porque tengo que recuperar todo el tiempo que me fui. Les cuento lo que espero: creo que dos o tres noches seguidas de puro sexo casero y una de descanso, ese ritmo infernal hasta que empiecen las clases. Y todo lo que pase por mi cabeza y mi cuerpo lo vuelco en la parte cinco de mis relatos.

Vamos a fantasear un poquito más antes de que termine. Les voy a contar porque me gane el apodo de "diablita" pero con más detalle. Ya es dije antes que las diablitas son como las porristas del club y yo salía con un novio con dos caprichitos: uno era el fetiche de mi ropa interior, que se repitió con novios pero ninguno como este. Y el otro detalle es que era tan fana como yo. Me llevaba a cada partido (hasta la provincia me llevaba en auto a Rosario, Córdoba) y como se acercaba su cumple se lo quise agradecer con sexo y con una fantasía muy particular. En la cancha cuando salían las diablitas el silbaba, gritaba de todo y ahí me dio la idea. Unos cuatro días antes de que llegue su cumple empecé a averiguar donde conseguir el disfraz (un conjunto elastizado rojo furioso, muy escotado.

Con una cola de diabla que te sale de atrás y la vinchita con cuernos. Y el escudo del club adelante, obvio). Primero lo busque por las galerías en mi barrio y no lo encontré hasta que me fui por las de Lavalle y lo encontré. Pero era el original, así que me lo compre y al toque se lo mande a una amiga que sabe coser y que le abra la entrepierna para que me de masa con el traje puesto. Me lo pasó al otro día y esperé hasta la fiesta en casa, porque convivíamos. Iba todo bien, estaba por servir la cena, lo hice sentar y le dije que iba al baño, que me esperara. Volando y súper nerviosa me saque todo, me puse el traje (por el agujero que le mande a hacer se veía todo) y le aparecí de golpe vestida de diabla. La carita de felicidad que puso lo decía todo, primero se reía y después se agarraba la cabeza. Se quedo sentado hasta que me acerque para que me revise toda, me giro, metió mano por todos lados y yo veía como se le agrandaba el palo bajo la ropa, metía la cara por el agujero y pasaba lengua, todo (me hacia cosquillas mas que calentarme, porque era un momento divertido). Le iba a servir algo pero me agarro de la cintura con fuerza, me llevo a la pieza y me puso sobre la cama en cuatro. Yo le decía "ahora no, ahora no" y el desesperado sacando el palo como podía, me la enfilo para la raya y con dos empujones me estaba cogiendo. A veces me hacia eso de bajarme el pantalón con bombacha y todo y metérmela rápido, y si yo quería mas tarde me daba vuelta y me lo subía y ya esta, no pasaba nada; pero ahora tenia un agujero enorme que me la metió y no podía decir nada. Igual con dos veces que se movió y me la empujo adentro me di cuenta que no se aguantaba las ganas y yo tampoco.

Me agarro primero de la cintura y bombeo mal y después de la colita de diabla y ahí se puso frenético, me daba y me daba. En cierto momento de la cogida me di cuenta que no era como los días normales de sexo, que me estaba dando con ganas y un desenfreno que lo sentía con cada penetrada. Y me tuvo así un largo rato. Igual no pedí cambio porque ya saben que es mi pose favorita; sino trato que se calme antes de cambiar de pose. Me tuvo así hasta el final, que me mojo toda la cola. Flor de cogida me dio, así nomás. Me dolían un poco las rodillas porque las clavaba de punta. A veces me agarraba de los pies y tironeaba para arriba. Al rato que terminó nos fundimos en un chuponazo como pidiendo perdón, porque las ganas no las pudo frenar ninguno de los dos. Pensar que éramos de cenar tranqui, un postre y charlar y recién ahí a la cama....

Después fui al baño, para asearme, me cambie de nuevo, me puse un vestido y cenamos todo muy lindo, soplar la vela, pedir un deseo y vuelta a transformarme en diablita para seguirla. Y aunque lo había dejado hecho pelota antes de la cena comimos y brindamos, soplo la velita (después me toco a mi, obvio) y recién después del postre tuvimos algo de sexo menos frenético pero igual de apasionado. Se imaginan al otro día, Me junte con mis amigas en casa, a mostrarles el disfraz, se tapaban la boca con las manos. No lo podían creer, me dijeron desde "perra" hasta que se yo. Así les conté como habíamos cogido, como se porto de bien el muchacho. Y bueno, me empezaron a decir "diablita, esto", "diablita, lo otro" y me quedo para siempre.

(9,00)