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DISTOPIA V

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Capítulo V

Jonas 

Después de ponerme el uniforme bajó a comer y veo una silueta asomada a la puerta. Agarro unas rodajas de pan y me dirijo abrirle a Paris. Ella me recibe con un fuerte abrazo, alegre como todos los días.

De camino al instituto íbamos conversando sobre las tareas pendientes y de Manuel, tal párese que se quedo a dormir anoche en su casa sin que sus papas se enteraran.

No podía dejar de pensar en la noche de ayer, me había pasado un poco con Mathias no debí decirle esas cosas, sabía que no podría estar tanto tiempo molesto con él, al solo mirarlo se me olvidaba todo y me hace quererlo cada vez más, tengo grabado aun su perfecto cuerpo bañado de sudor y arena, era un adonis sin dudar. Seguimos hablando hasta que cruzamos la última calle donde se puede apreciar el campus.

Cuando estamos en el instituto todavía era temprano para entrar así que nos quedamos en el campus viendo pasar a las personas de los diferentes cursos,  una de estos era Nicolás quien paso muy rápido a nuestro lado, después se percató de que éramos nosotros y se devolvió. 

- No lo puedo creer!, Jonas tu llegando temprano?. Estas enfermo o algo?-. Me pregunta asombrado. 

- Recuerda que ya no voy a surfear. Bueno, no hasta que me compre una tabla nueva-. Le digo. En eso Paris se levanta y le pregunta. 

- Donde está la maqueta de la clase de infraestructura moderna?, acaso se te ha olvidado hacerla?. 

- Tranquilo chicos, hoy parece que no habrá clases por simulacro-. Nos dice exaltado. 

La verdad no entendía lo que significaba esa palabra, pero a la final me explican, y ruego no ser uno de los elegidos. 

El simulacro era una jornada que se hacía trimestral, en el instituto es una tradición de esta región, donde elegían a dos personas por curso y las ponían a competir con armas que disparaban una especie de sustancia que paralizaba en la parte donde hacia contacto y simulaban en un cuarto una arena de juego, de ahí su nombre. Cada trimestre escogen diferentes paisajes, el pasado estaba repleto de nieve, por lo que el de este año era un total misterio.

Luego de hablar en el campus entramos a la clase, todo parecía ir como un día normal hasta que el director llama a todos los alumnos a reunirse en la zona central del instituto. Nos dirigimos en fila uno detrás de él otro; a mi lado estaba Nicolás muy alegré y en el otro estaba Paris un poco preocupada. La verdad no entendía porque las personas le temían tanto, cuando entramos al centro estaban unos grandes anuncios de 4 metros de altura con el logo del distrito y el de la institución, en el medio residía el director y a su derecha Mathias con su mirada penetrante hacia el horizonte. 

- Oye Nico, que hace tu hermano ahí parado?-. Le pregunto confundido. 

Se  voltea y me explica que fue el campeón de los pasados juegos junto a Tomás llevaba 3 victorias consecutivas, alzando el récord en los pasados juegos recibiendo un reconocimiento y una bonificación adicional emitida por el Capitolio. Mientras el director habla sobre las normas del juego notó que me mira, luego sonríe, yo volteó la mirada hacia Natasha dándole entender que a ella es a quien deben mirar. La autoridad hace una pausa y decide ir al grano diciendo rápidamente la base de estos juegos.

Los concursantes que hayan ganado anterior mente el evento no podrán ser elegidos, al menos de que se ofrezcan como voluntario, de igual forma pasa con las personas que no son elegidas. Los 2 ganadores podrán viajar a la capital y conocer esa maravillosa región por solo 2 días con todos los gastos pagados en un asombroso hotel, además de ser remunerados con una cifra insignificante, todos se quedan asombrados, por lo del viaje, pues según era algo nuevo añadidos por los creadores para hacer el juego más competitivo.

Cuando termina de hablar veo a una hermosa mujer traer un envase muy grande transparente donde están anotados los nombres. Había elegido a Mathias como la persona encargada de sacarlos. 

Empieza a nombrar los de primero, son 2 parejas ninguno se ofrece para sustituirlo, luego los de segundo, otras 2 parejas pero en este si hubo un chico que pidió cambio para salvar a una indefensa joven, nombran los de tercero con normalidad, y llegan a cuarto, donde estoy actualmente, van primero con el curso 305 donde eligen a un chico con contextura fuerte y una chica con el cabello rizado. 

- Sección 306-. Anuncia el director con una voz ronca, todos nos quedamos callados ya que era nuestro curso. Mathias agarra uno de los papeles  que están identificado con el número de la sección, luego de lo entrega al director, este lo lee y dice en voz alta. 

- Paris Hoppert!-. Me quedo asombrado, y volteo a mirarla, se notaba que estaba temblando y cuando iba caminando hacia la tarima siento un terrible impulso y alzo la mano...

- Pido una sustitución!-. Estoy en shock no sabía porque había dicho esto, pero ver a Paris tan preocupada me hizo armarme de valor para ofrecerme como sustituto. 

Noto a todos viéndome asombrado, nadie lo podía creer, cuando me dispongo a caminar Nicolás me abraza y me desea suerte al igual que Paris, cuando voy por el estrecho camino hacia el escenario veo la cara de Mathias un poco extrañado, me paro junto a los otros competidores y mencionan el nombre de quien va hacer mi acompañante todo transcurre como en cámara lenta. 

- Nicolás Dallas!-. Dice el director, veo que alza la mano y se dirige a donde estoy, me abraza y su sonrisa se borra cuando escucha Mathias ofreciéndose como voluntario. 

Todos en el campus murmuran, hasta el director se queda sombrado, dos voluntarios en un solo curso era primera vez que pasaba. Volteo hacia donde esta Mathias y este serio se coloca a mi lado sonriendo. 


La jornada de selección continúo sin mayor otro acto de relevancia, al finalizar nos guían hacia un pequeño cuarto, nos dan las instrucciones más específicas y me entregan la llave de un locker. Cuando lo abro veo unos trajes muy extraños color blanco con el signo del distrito. Aprovecho que no hay nadie en el vestuario para ponérmelo rápidamente en eso entra Mathias y me dice: 

- Sin duda es tu talla, te queda muy bien. 

- Por que lo hiciste?-. Le pregunto. 

- No quería dejarte solo en esto las balas son muy fuertes y hacen mucho daño-. Fue lo único que me contesta. 

Yo me sonrojo y noto que se está desvistiendo. Volteo para no mirarlo y este me sonríe diciendo. 

- Somos hombres, no hay problema en mirarnos nuestras partes íntimas. 

Yo volteo y todavía está desnudo, mi mirada se dirige hacia su entrepierna rápidamente.  Por primera vez vi su pene era pálido como el resto de su cuerpo sin ningún vello y muy grande, más de lo pensado. Lo quedo apreciando varios segundo boca abierto. Era la primera vez que veía una polla de esa dimensión.  

Mis mejillas se ruborizan y trato de no pensar en lo excitante que se ve. Al cabo de unos segundos se pone las botas y me dice. 

- Que tal me veo?-. Arqueando sus cejas. 

- Biii...en-. Respondo. 

- Venga bro, parece que te has quedado flipado con mi verga.

Veo que si noto mis miradas, me siento un poco avergonzado. Salimos y nos paramos en una mesa donde está un mapa, Mathias lo observa con detenimiento y comienza a trazar lo que será su jugadas, los primero pasos. Se veía bello así tan serio y pensativo, provocaba admirarlo durante horas. Me entrega el mapa y lo sigo hasta pararnos detrás de una enorme puerta de metal. Él sonríe y me dice. 

- El plan será, buscar la bandera lo más rápido posible, puede estar escondida en cualquier sitio, yo te cubro. No dejare que nada te pase. Vamos contra todos.

Dicho esto me da un arma muy parecida a las de paintball solo que estas era un verde manzana. 

-La primera vez que recibas una de estas balas te dolerá y se te paralizara la piel, si entras en pánico quedas eliminado de una, lo ideal es mantener la calma y pensar en algo positivo para que el dolor pase con tranquilidad. Después no se sentirá la piel tan estirada-. Me dice poniendo su arma en la espalda y respirando profundamente.

Mi corazón empieza a latir y justo en ese momento la puerta se levanta. 


**********


Mathias

Salgo corriendo, y me escondo entre el gran bosque, volteo y veo a Jonas corriendo atrás, un movimiento de los arbusto hace que cargue mi pistola y lanzo una bala. Oigo un chillido después, me acerco apuntando hasta el árbol y siento un dolor en mi hombro, sabía que me habían disparado y con un rápido movimiento logro visualizar a una chica de cabello rizado, disparó el arma y la bala le posa justo en el pecho. Regreso a donde esta Jonas y le digo. 

- Que haces ahí parado, si no te escondes te pueden encontrar. 

Me mira el hombro preocupado y se acerca rápidamente. Me pasa su mano y hago una mueca de dolor. 

- Debemos curarte-. Dicho esto arranca algunas hojas y me las pasa por la herida. Te sientes mejor?-. Me pregunta angustiado

- Con esos ojos mirándome cualquiera se sentiría bien, además ya estoy acostumbrado a esto-. Le digo poniéndome de pies.

Seguimos caminando en busca de la bandera, en la vía nos hemos encontrado con unas cuantas personas, a todos los e disparado con una puntería extraordinaria. Hasta qué llegamos a una cueva muy oscura. 

- Puede estar por aquí. Le digo susurrando. 

- Un momento, déjame trepar este árbol, así podré tener mayor visualización del lugar. 

Comienza a trepar un enorme árbol, cuando está en la cima me dice gritando. 

- Ya sé donde la podemos encontrar-.  Se baja rápidamente y empieza a correr en dirección a una gran montaña. 

- Hacia donde nos dirigimos-. Le digo jadeando y esquivando las raíces de los árboles. 

- Por esa montaña hay una especie de cascada, vi algo brillando en el medio, como un reflejo. Puede que sea la bandera. Al decir esto se tropieza con una rama y esboza un chillido bastante alto para que las otras personas puedan escuchar. 

- Tenemos que seguir no pares. Le dije ayudándolo a parar, seguimos corriendo y nos topamos con el grupo de sexto, mis amigos de curso, ellos se sorprenden al verme. Max, uno de ellos apunta a Jonas, quien se queda paralizado sorprendido. 

Yo me acerco sigilosamente y le digo: 

- Que pasa Max? Deja al joven en paz. Hagamos como si nunca nos vimos, estamos perdiendo tiempo aquí, otro equipo podría haber encontrado la bandera. 

Max me mira, sonríe, y pasa sus asquerosas manos por la cara de Jonas, apretándole las mejillas. Ver eso hizo que mi cuerpo se calentará, no podía permitir que alguien maltratara a mi hermoso surfista. 

- Este freak ha durado much.......-. No lo deje terminar la frase, mi puño fue justo hacia su cara. Su amigo intenta disparar pero me le lanzo encima, forcejeo para que me de la pistola y al final termina cediendo. 

Luego le disparo directo en su pecho y a Max en el rostro. Agarro de manos a Jonas y salimos corriendo hacia la montaña escucho los chillidos de dolor emitidos por ellos se podía percibir su sufrimiento.  Al llegar descansamos un poco. Me siento a tomar agua de una laguna y veo como una bala pega cerca de mis manos, cuando volteó el enemigo cae al piso.


- Deberías tener más cuidado-. Me dice Jonas extendiendo su mano para ayudarme a ponerme de pies. 

Caminamos por la orilla del lago y al final logramos encontrar la bandera, está colgada de un tronco que sobresale en una hermosa cascada.

Le digo a Jonas que escale en busca de la bandera mientras me quedo vigilando entonces corre y rápidamente intenta subir. Escucho algunos pasos, 
Me escondo en una piedra que esta juntó a la montaña y veo pasar a dos tipos corriendo hacia donde Jonas, uno intenta disparar pero su pistola se atasca, y aprovecho para dispararle por la espalda, este cae y luego siento un terrible dolor en mi pierna izquierda, seguido en mis costilla, caigo en el suelo y me lleno de valor para dispararle...

Abro los ojos y veo el sol a cobijado  por una gran nube. A lo lejos escucha la voz de de Jonas, cada vez más cerca. Mi mente piensa que algo malo le pudo haber pasado, giró mi cara y lo veo correr con la bandera en la mano, que suerte de estar todavía en el juego. 

Intento levantarme pero se me hace imposible de pronto todo se pone oscuro... 

Siento como de dan un leve beso, muy tierno, pienso en los carnosos labios de Jonas, intento prolongarlo por unos minutos imaginándomelo a él. Cuando despierto lentamente descubro los misteriosos ojos grises de mi novia, me abraza y luego se acerca Tomás.  

- Por fin despiertas bro, ya nos tenías preocupado-. Me agarra la mano y me pregunta - ¿Todo bien campeón?. 

Estaba muy confundido no sabía lo que había pasado después de haber estado en el suelo, ¿ganamos? ¿Jonas se encuentra bien?, tenía la cabeza llena de preguntas. Tomás y Natasha me explican lo sucedió, habíamos ganado inexplicablemente Jonas pudo llevarlo al puesto de control. 


- Y ¿como esta?.- le pregunto a Tomás preocupado. 

- Ese freak tuvo suerte de no ser atacado-. Respondió Natasha un poco brusca.- Y la mejor parte fue cuando se le salieron las lágrimas por tu baja, estoy sospechando que ese chico te ve con otros ojos Mathias, ha estado en todo últimamente, parece un fantasma, yo  siendo tu me cuidaría-. Agrega Natasha un poco molesta. 

- ¿Que quieres decir?-. Le digo un poco extrañando. Sabía perfectamente lo que estaba diciendo Natasha y a decir verdad me sentía feliz. 

- Nada, sólo tienes que mirar mejor las personas que te rodean-. Responde ella dándome otro beso. 

- Ya basta!, Jonas es el mejor amigo de Nicolás y el hermano de mi novia. No quiero que vuelvas hablar mal de él, en mi presencia. 

- Es verdad solo es un chico, nada más-. Le respondo sereno, pero sabía que por dentro me molestaba su comentario. Siempre tenía que salir con algo así, era lo mismo todo el tiempo. 

- Bueno amor levántate, ya es hora de irnos-. Me dice Natasha cambiando la conversación.  

Al llegar a casa, mi abuela me espera preocupada, me pregunta cómo me fue, le cuento todo y me dirijo a dormir. Al siguiente día voy con Nicolás caminando para el instituto, estando en la entrada muchas personas se paran a felicitarme. Veo que mi hermano sigue su camino hacia donde están sus amigos entre ellos Jonas, lo veo reírse y conversar con su amiga. 

El día transcurrió normal, charlas, clases y dictado. Hasta qué entra la secretaria del director a mi salón, me llama y camino a su lado hasta la dirección ahí está mi chico, con su atuendo desaliñado típico de la región Este. Lo salude y no respondió, ni me miraba, era como si no estuviera parado a su lado. 

El director nos entrega los reconocimientos, las medallas y una carpeta con la remuneración. Luego entra un señor y nos da a cada uno los folletos y el calendario del viaje a la capital. Se me había olvidado que tendríamos ese viaje, ya quería que llegara el día para estar sólo junto a Jonas y poder pasar tiempo con él. 

Al salir vemos que todos ya se habían marchado, estuvimos casi dos horas escuchando la charla de los profesores, reviso mi móvil y tengo un mensaje de Natasha, la llame y acordamos en que ella me pasaría buscando, así que espero en el campus juntó a Jonas que estaba revisando su movil a cada momento, impaciente como si esperando a alguien. Me le acerco y le digo. 

- Jonas, lo que hiciste ayer fue increíble casi no te reconocía, que puntería tienes. 

Me mira, su mirada parecía oscura, triste. No sabía que le pasaba. Hasta qué por fin hablo. 

- Toma-. Me entrega sus papeles del viaje.- No quiero ir para ese fulano viaje y menos contigo. 

- No puedo creer que todavía sigas molesto conmigo. ¿Por qué no quieres ir?, acaso te intimido?-. Le digo arqueando las cejas en forma de broma. 

- Molesto?. Acaso ¿tengo cara de estar molesto?-. Me dijo señalando su cara.- Te estoy entregando esto para que  puedas ir con Natasha y disfrutar tu estúpido viaje. 

- Y quien te dijo a ti que yo quería ir con Natasha?. Cuento los días para poder estar contigo, acaso se te olvido la apuesta del parque, voy hacer que pienses en mi cada día-. Le digo muy enojado, casi gritando. 

Jonas se queda estático con mi argumentación, no encontraba donde poner su mirada. Lo sentía nervioso, tenía ganas de besarlo, comer esos hermosos labios. En el momento en que me acerco, da unos pasos atrás y con sus tiernos ojos azules bañados en lágrimas me dice. 

- Tiene razón tu noviecita, será mejor que me aleje de ti-. Me dijo esto lanzando sus papeles a mi pecho. 

En eso un carro se estaciona en la acera y se baja un chico alto, se dirigió a Jonas, cuando lo vio su cara paso de estar molesto/ triste a una de felicidad plena. 

- Jonas disculpa la demora se me hizo un poco tarde. Su acento era algo extraño podía jurar que no era de esta zona. 

Este le abrió la puerta de su auto y se fueron, sin decir más.  Debe de ser su ex, pienso molesto. Quería golpear a alguien en ese momento, estaba muy enojado, entonces recordé que había mencionado a mi novia. ¿Qué le habrá dicho Natasha?, de pronto aparece su auto, baja el vidrio y me llama… Continuara.   

 

 

Estamos llegando al climax de la historia, se pondrá cada vez más emocionante y picante. No se olviden de valorar y comentar. El próximo capítulo: Un Cambio de Estilo. Hasta la próxima. 

(9,88)