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DISTOPIA VI

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Jonas

Después de haber ganado en el simulacro llegue a mi casa, estaba muy cansado, decidí a subir a la habitación Verónica estaba hablando con Natasha en la cocina. Las dos me miran pasar y la novia de Mathias sonríe, al acostarme tocan la puerta. Me dispongo abrir cuando entra rápidamente Natasha, observa mi cuarto y luego dice con una voz tranquila y un poco sarcástica.

- Felicidades Jonas, estuviste impresionante, pensé que no llegarías tan lejos, pero claro Mathias tuvo que salvar tu pellejo unas cuantas veces. Parecías un niño indefenso, sino fuera por él te hubieran eliminado en segundos.

No creía lo que decía, parecía una víbora expulsando veneno por su boca. Me quedo en shock, no entendía porque me decía esas palabras si no le he hecho nada, ni siquiera le he dirigido la palabra. La mire fijamente sus ojos comenzaron a ponerse cada vez más rojo, parecía llena de odio.

- Es mejor que te vayas separando de Mathias, últimamente te le apareces en todos lados. He podido observarte y noto que lo miras mucho, más de lo normal, parece como si estuvieras admirando un dios griego. Te me vas ubicando y respetando.... Yo soy la novia de Mathias y decido las personas con quien se rodea. A más de una chica he tenido que echar del camino... No soportan ver a una relación estable como la de nosotros porque la quieren acabar.... Ya estas advertido freak, no te le acerques más en tu vida.

- Que te has creído para venir a decirme semejante cosas en mi casa, en mi propia chabitacion.... Largo de aquí psicópata, maniática... No me interesa el estúpid....

No dejo completar la oración cuando salió del cuarto.

Me pongo a pensar en sus palabras, no me voy a dar el lujo de llorar... Todavía no puedo creer que haya dicho eso en esta casa, era una celopata, trataba a Mathias como si fuera de su pertenencia, un objeto, algo que ella obtuvo y lo muestra como trofeo.

Me acuesto con mucha tristeza tratando de no pensar en lo ocurrido hace pocos instantes, decido llamar a Paris, cuando voy a cerrar mi móvil, me acuerdo de Chris. Pienso en mandarle un mensaje, así saber que le había pasado. Porque se marcho de repente hace unos años.

Jonas: Hola Chris, es Jonas te escribía para saber si nos podemos encontrar y charlar un poco. Espero tu respuesta!Buenas noches...

Me levanto un poco cansado, la jornada de ayer me dejo agotado, me asomo por la gran ventana y veo el sol saliendo de las grandes vallas, siempre he querido saber cómo fueron construidas y cuál fue su duración.

A los concursantes le dieron 3 días libres pero no quería quedarme en mi casa solo, pensado en estupideces. Busco mi uniforme decido vestirme e ir yo mismo en busca de Paris, el no tener tabla de sufrs me daba tiempo de hacer muchas cosas en la mañana.

Mi día transcurrió normal, algunos talleres y al final de la jornada el director llama a Mathias y a mí. Lo noto contentó, al salir de la reunión reviso mi móvil y me llega un mensaje de Chris.

Christian: Hasta que al fin te dignas en escribirme. Te paso buscando me tome la tarea fe averiguar un poco sobre ti.

Jonas: Ahora eres acosador?. Ok te espero.

Me dirijo afuera y esta Mathias esperando un carro, debe ser a Natasha, estoy impacienté por irme y no quedarme con el mucho tiempo. Hasta qué me habla.

-Oye que bueno es saber que eres mi acompañante en este viaje-. Sorie y se acerca más a mí.

Me lo quedo mirando por unos instantes, luego recuerdo las palabras dichas por su novia. Tenía que buscar la forma de separarme de Mathias cuanto antes

-Por que me ignoras? Acaso te hice algo malo Jonas?.

- Ten te regalo los boletos para que puedas ir con tu novia a la capital-. Le digo entregándole los papeles en su pecho. El me mira con una cara de confusión, me clava sus hermosos ojos verdes y me dice.

-No quiero ir Natasha, Jonas me muero por estar contigo, me muero por pasar un rato solo a tu lado-. El me entrega los boletos y agarra mis manos para ponerla en su corazón.

- Tiene razón Natasha es mejor que me separe de ti.

- Natasha te dijo eso?-. Dice asombrado, frunce el ceño luego sigue hablando.- Y que más te dijo?

- Mathias lo suficiente para querer alejarme de ti. Veo como el carro de chris se estaciona en la acera. Le digo unas cuantas palabras luego me montó en el carro de Chris.

- Oye Jonas, porque estas así?-. Me pregunta. Al ver que no respondo me dice. - Quien era ese chico? y..Porque estaban peleando?

Le cuento que es el hermano de mi mejor amigo, y que ganamos el simulacro pero como yo no quería viajar le ofrecí mi cupo y él se molesto. El conducen con una mirada muy serena, me sonríe luego dice.

- Te llevare a un lugar que te encantara.

En medio de la vía dice que cierre los ojos, pues me quería dar una sorpresa. Yo acepto siento como el carro deja de moverse se baja del auto luego me abre la puerta. Puedo notar un fuerte viento chocando de mi rostro y cuando abro los ojos estamos en un hermoso lugar con vista a la playa, parecía como una especie de mirador.

- No se te ha olvidado. Le digo disfrutando del lugar.

- La playa es tu lugar favorito, te traje aquí para que pudieras pensar mejor. Dicho esto se coloco detrás y sus manos se posaron en mis caderas, luego siento su aliento en mi oreja y me dice.- Puedes confiar en mi Jonas, no voy hacerte daño como los otros chicos, recuerda que juré defenderte.

Sus manos acariciaban mi cintura, luego nos sentamos en la grama a conversar de nuestras vidas. Le cuento todas mis vivencias hasta este momento y él me cuenta las suyas.

Sus padres se tuvieron que mudar para la Capital ya su madre se casó con Lord. Alexander Pearce un reconocido ministro de la cúpula central, actualmente cabecera de Jhoanna. Su familia se tuvo que mudar para la capital donde término hace poco el instituto y pudo elegir como labor arquitectura. Después de eso se mudó al norte y actualmente está colaborando en la construcción de un gran centro comercial. Me explica que se irá a la capital mañana a ver a su querida madre, pues no le gustaba dejarla sola por mucho tiempo.

- Deberías aprovechar el viaje, Allá podemos divertirnos-. Me dijo con una sonrisa picara.

- Tendría que pensarlo bien-. Es lo único que le respondo.

- Sería estupendo que fueras. Estas muy cambiado ya no pareces aquel chico indefenso, te noto fuerte-. Me aprieta los brazos luego me pasa la mano por mi abdomen luego dice.- Todavía sigues conservando ese aspecto de chico del Este, debes cambiar un poco y actualizarte si quieres ir a la capital. Allá todo se maneja con el físico a nadie le importa tus sentimiento.

Me agarra de las manos y nos miramos fijamente.

- Es que no quiero cambiar, no me importa lo que la gente piense-. Le digo poniendo mi mano en su hombro.

El intenta besarme pero en ese instante se me viene a la mente Mathias y esquivó sus labios. Chis se separa extrañado luego sonríe y me dice.

- Acompáñame, se dónde ir.

Nos montamos en el carro y vamos en la vía que conduce al centro de la región, se pueden asomar los enormes edificios. Al cabo de unos minutos nos estacionamos en uno de ellos. Se baja de su auto y lo sigo.

Se veía muy apuesto con un pantalón gris, y una camisa azul marina pegada a su cuerpo. Estilo joven ejecutivo. Entra al edificio y lo veo conversar con algunas personas, parece conocer a todos los que pasan. Después de casi 3 minutos en un elevador me lleva con una hermosa mujer de cabello morado corto.

- Sasha! Quiero que le hagas un corte moderno a este chico-. Le dice

- Ok querido déjame buscar las herramientas-. Dice ella saliendo del pequeño salón.

- Oye Chris no creo que sea buena idea-. Le comento asustado, nunca otra me había cortado el cabello siempre agarraba unas tijeras y me lo rebajaba cuando lo sentía largo.

- Tranquilo, confía en Sasha, es la mejor en esto-. Me sonríe luego se sienta en una silla un poco extravagante.

Sasha me llama y entro a un amplio salón con sillas y espejos donde hay muchas personas murmurando y con un aspecto muy moderno. Ella me sienta en una elegante silla y empieza a cortarme el cabello. Al cabo de unos minutos me voltea haciendo que mi rostro quedara frente al espejo. Me veía irreconocible un corte muy similar al de Christian. Me obsequia un pequeño frasco y me da instrucciones de como usarlo en el cabello. Salgo donde esta Christian y este me queda viendo asombrado.

- Listo!, la verdad es que Sasha hace un trabajo increíble.

Salimos del lugar y justo cuando íbamos abandonar el edificio Sasha nos grita desde muy arriba. Parecía un poco desesperada, la vemos corriendo con sus grandes zapatos un poco chistosos hasta que se acerca y nos dice.

- Ni creas que te dejare salir así-. Dijo señalando mi ropa, me agarra de las manos y me conduce por unos largos pasillos, hasta llegar a un salón con muchas prendas masculinas. Elige unas cuantas, me las pruebo y ella opina sobre como me queda. La verdad es que estaba muy cansado llevábamos horas en esto. A la final aparece Christian con unos lentes y un pequeño portafolios.

- Disculpa por dejarte solo, se me presento un pequeño inconveniente-. Me dijo mirándome asombrado.

- Que tal me veo-. Le pregunto confundido por su mirada.

- Wooow!, Jonas pareces otra persona. Espera a que te vean tus amigos.

Al salir del lugar me invita a cenar, luego me platica sobre sus nuevos proyectos y como conoció a Sasha. Resulta que los dos vienen de la capital. Me invita a su casa y yo acepto después de tanto insistir. Cuando entramos  veo muchas cosas lujosas, destapa una botella de vino y me ofrece una copa muy rara.

- Brindemos por ti, por tu cambio y por nosotros-. Me dice dándome un apasionado beso, mi reacción fue dejarme llevar. Sin duda este chico sabía cómo besar, ya no era el de antes un poco tímido, se había convertido en una persona total mente diferente.

Me carga en sus brazos y me arroja lentamente en un mueble muy grande, veo que comienza a quitase la ropa y se queda sólo con sus bóxer, luego se monta en mi abdomen y comienza a besarme, baja lentamente hasta mi cuello y me quita la camisa con cuidado, luego sigue avanzando hasta tocar mis tetillas, cuando pasa su lengua una sensación extraña me hace soltar un gemido. Continúa bajando hasta que me desabrocha el pantalón...

- Para, para. No puedo hacerlo, lo ciento Chris, es que todo paso muy rápido, no sé en lo que estoy pensando. De verdad perdóname pero me tengo que ir.

Agarre mi ropa y cuando iba a salir, sale de su cuarto y me ofrece llevarme. Estaba en shock, que le había pasado al Christian de mi infancia, no era una cuarta parte de lo que solía ser. En el camino íbamos muy callados hasta que me dejo en mi casa despidiéndose con un fuerte beso que se prolongo por unos minutos.

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Mathias.

Natasha no me quiso decir absolutamente nada de lo que había pasado con Jonas. Nos molestamos y ella me dijo que me bajara de su carro casi llegando a casa. No recuerdo haberla visto más enojada cuando le comencé a platicar de él, parecía odiarlo. Tuve que caminar unos cuantos kilómetros hasta que llegue a mi casa, cuando entró veo a Nico y a Paris platicando en el comedor, era muy extraño ver a ellos dos solo sin Jonas.  Al verme me pregunta.

- Bro, que bueno verte, no sabes donde se metió Jonas?-. Me pregunta preocupado.

Lo dicho por Nicolás me hace recordar a Jonas montándose muy feliz en el coche de ese carbón.

- Un chico lo paso buscado y se lo llevo en su auto-. Digo molesto, no encontraba manera de calmarme al recordar la cara de ese tipo.

Paris y Nicolás quedan sorprendidos con mis palabras, noto que se ríen y comentan entre ellos. Me muero por saber que están diciendo.

- Por que tanto escándalo con lo que dije?-. Le pregunto, sabía la respuesta pero quería Aclarar mis dudas.

- Pues entre ellos existe algo más que una amistad-. Dijo Nicolás sonriendo.

- Simplemente creemos que se gustan-. Dice rápidamente Paris.

Yo no pude contener mis emociones y subí enojado golpeado la puerta de mi cuarto. Al siguiente día busque a Jonas en el instituto y al parecer había decidido tomar los días libres, le quería entregar su cupo así que  decidí pasar  mañana por su casa. Estuve concentrado en mis estudios, Natasha seguía sin dirigirme la palabra, así que me la mantuve todo este tiempo con Tomás y Verónica, esta última parecía nunca estar saber de su hermano, cuando le preguntaba por Jonas no sabía responderme.

Al siguiente día salí cuando salí de clases me dirigí a su casa con Verónica, al parecer no se encontraba. Me quede unos minutos esperando a que llegara, la promesa se había invertido, era yo quien no podía dejar de pensar en él y estos días sin verlo me volvía loco pensado que podía estar en manos de aquel chico.

Así que le deje con Verónica su pasaje, pues mañana era el gran viaje. Llegue a mi casa y me puse a empacar mis cosas, había que estar muy temprano el siguiente día en la estación.

Me levanté muy y fui en busca de mis cosas afuera me esperaba Tomas, quien se ofreció a llevarme, Nicolás también quiso venir.

- No saben si Jonas decidió ir-. Le pregunto a los dos un poco ansioso.

- Hable con él en la noche y estaba resignado. Conozco a Jonas y de que algo le pasa, es como si no quisiera ir por ti. Me dijo Nicolás, este estaba en la parte de adelante junto a Tomás.

- La verdad es que ese chico es un poco raro, como puede estar molesto si fueron equipo en el simulacro y le regalaste un precioso collar.

- No, no le hice nada, se los puedo asegurar. El otro día me ofreció su cupo para poder ir con Natasha, pero ir en su compañía es estar amarrado a su lado. Quiero distraerme un buen rato-. Le digo saliendo del carro.

Me despido, luego me dirijo al elegante tren con destino a la capital, al llegar me encuentro con una señora quien es nuestra supervisora y nos guiara en todo el viaje. Estoy en el asiento impaciente mirando el reloj y rogando de Jonas se digné a parecer, siempre se ponía muy difícil nuestra conversación la mayoría de las veces terminaba en peleas. Primera vez que me pasaba esto con una persona.

- Parece que el chico no vendrá-. Dice Jade, así se llamaba la guía.

Me puse un poco triste, no paraba de imaginarme el viaje con Jonas, y ahora que no iba estar sentía rabia hacia Natasha, todo era su culpa, me ha arruinado el viaje.  Jade cierra la puerta y veo por la ventana como el paisaje se desvanece. Ya el tren estaba en marcha.

De pronto se abre la puerta. Y se sienta un chico que me hizo recordar mucho a Jonas. Claro este llevaba un atuendo muy moderno y estilo de cabello diferente.

- Lamento llegar tarde, soy malo para seguir indicaciones, me he metido en 2 vagones por equivocación-. Dijo el chico mirándome a los ojos.

No lo podía creer, eran sus ojos, era su bella sonrisa de niño bueno...Continuara.

Aqui otra entrega, no se olviden de valorar y comentar. Hasta la proxima...

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