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Sin tu amor, me acostumbre a seguir perdiendo (1 de 5)

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Que día tan pesado el que  tuve, y hasta hora solo es lunes, me encantaría poder encontrarme hoy con laura, pero las cosas en la casa cada día están mas complicadas.

Ring, Ring, Suena el Celular.

―Alo.

―¿Cómo esta la mujer más hermosa del mundo?

―bien mi vida, con un día súper pesado y unas ganas enormes de verte y besarte y claro esta llevarte a la cama pues te deseo  con locura.

―Ajajá Ay Marce tu como siempre igual de sensual, pero ese ultimo no están difícil de realizar,  te estoy esperando  en mi cama desnuda solo para ti

―Mmm... que delicia, peroooo... no voy ha poder,  por lo menos no hoy, todo en la casa anda muy complicado.

―Por eso princesa, ven a mi casa te relajas un poco y después te vas a la casa. No me puedes decir que no mira que hoy cumplimos un mes de estar juntas.

―Ok. Tu como siempre tan convincente, dame 30 minutos y estaré en el apartamento.

―Aquí estaré esperándote.

“ Esto cada día esta mas peligroso, las cosas en la casa se complican cada día mas, por mis contantes llegadas tarde y obviamente por mis ausencias prolongadas, siempre me he escusado en que el trabajo me lo exige y pues al parecer la excusa es bastante creíble, por que no ha pasado de un reclamo, pero no se cuanto tiempo pueda mantener esta situación al margen,  Laura es como un vicio, esa droga que por mas que sabes que haces daño, deseas probarla una y otra y otra ves mas. Aun recuerdo el día en que la conocí….”

―hola Ricardo dame por favor un cuba libre bien cargado

―Uy. Eso suena a problemas

―Pues tienes toda la razón, hoy quiero embriagarme hasta perder la conciencia y la noción del tiempo

―Perfecto entonces estaré al pendiente tan pronto desees ir a tu casa para llama un taxi

―Ja. Mi casa eso solo parece un batallón  o un escenario de la tercera guerra mundial

―Mujer, calma igual nadie dijo que seria fácil, tu misma tomaste esa decisión y sabes perfectamente que esto acarrearía alguna que otro choque.

―Si lo se, pero jamás llegue a imaginar que me acarrearía semejantes peleas y que siempre tuviera las de perder.

Tome el vaso y lo bebí hasta el fondo, jamás un cuba libre me había gustado tanto y jamás había sido tan deseado para escaparme de mi realidad no por lo menos hasta hace menos de tres años cuando aun me encontraba superando la ruptura de mi relación con Erika, pero el tiempo pasa y las cicatrices se curan así que el día de hoy solo había tenido una pelea de las constantes que se veían venir en mi casa desde hace 3 meses atrás, estaba tratando de pensar que carajos había hecho que todo se complicara cada día mas pero una vos muy dulce me saco de mis pensamientos.

―Es tu quinto cuba libre, ¿tienes algún problema?

― Ehhh….. no atine a que saliera ningún sonido

―Hola, mucho gusto mi nombre es Laura  (se acerco y me dio un beso en la mejilla) perdona si soy imprudente pero no me parece normal ver a una mujer tan hermosa bebiendo sola y de esa manera.

―Marcela, atiene a decirle …al ver a esa mujer tan hermosa de estatura media, cabello Liso castaño claro, ojos verdes, labios rojizos que insistan a besar ,tez blanca, delgada, y una sonrisa divina que iluminaba su rostro. Me quede sin  palabras

―soy una chismosa ¿verdad? Dijo esto sonriendo levemente.

―No para nada, solo No te vi venir, quieres algo de tomar

―Uno igual al tuyo, por favor. sonrió nuevamente

Después de dos horas en  las que hablamos  (ella mas que yo, ya que no quería comentarle mis peleas, no por ahora) el licor ya nos había subido a la cabeza y estábamos completamente inhibidas, y aisladas del mundo aunque el bar estuviera completamente a reventar, pero eso no fue algo que nos importara solo éramos ella y yo.

―Chicas lo siento pero vamos a cerrar menciono Ricardo

―Ay  no puede ser no me di cuenta que hora era,  mire mi celular

―No te preocupes ya salimos. Dijo laura

Una ves afuera del bar siendo las 2:00 de la madrugada no tenia ni la mas minima idea de adonde ir a dormir, a mi casa no volvería, no a esta hora y menos en mi estado, los cuba libres habían hecho su trabajo y yo estaba muy ebria, hasta ahora había permanecido inmóvil en un poste en la esquina del bar, pensando a donde diablos iría a parar esa noche y descansar o por lo menos que mi cuerpo dejara de hormiguearme y darme vueltas mi cabeza, todo sin darme cuenta que laura me esta mirando fijamente como detallándome.

―Hey? Princesa para donde vas a coger, ¿quieres que te lleve a tu casa?

―No ami casa no. Atine a decir

―Esta bien entonces iremos a la mía

No pude reaccionar, solo vi como me sentó en el taxi y llegamos en no menos de 10 minutos  a su apartamento, bueno vale decir que esta tan ebria que no podría asegurar ese mismo día que solo fueron esos 10 minutos, pero allí estaba yo, parada enfrente de la puerta del apartamento de Laura, era pequeño realmente era un aparta estudio, me llevo hasta su cuarto una cama doble, me recostó y empezó a quitarme las botas, la chaqueta y arropo con las mantas y me dio un beso en la mejilla, de inmediato quede dormida, un ruido extraño me levanto, es mi celular la alarma sonó y eso que hoy es sábado, Uyy, mi cabeza que dolor tan horrible Ey? Donde estoy esta no es mi cama, ni mi manta, Ah¡¡¡ por lo menos tengo mi ropa, salgo por la puerta y veo unas mantas tiradas al lado del sofá cama.

―Por fin despertaste princesa¡ salto de un brinco y dos un paso hasta atrás. Ajajá. Lo siento princesita no quería asustarte- dijo en un tono de vos suave. Solo que pensé los cuba libres no te dejarían despertar. Sonrío y de paso su rostro se ilumino que hermosa era esa mujer

―Hola, lo siento no recordaba donde me encontraba por eso el sobresalto,

―Tomate este Café bien cargado.

―Gracias, me hacia falta,

―Lo se. Me tome el atrevimiento de comprarte algunas cosas, como cepillo y crema dental entre otras, para que puedas asearte

― Gracias no debiste.

―Relájate no es nada. Ninguna de las dos dijo palabra alguna, solo pase a la ducha para asearme.

Que cosa mas loca y que mujer mas divina, tiene un cuerpo que es deseable, acariciar, besar, recorrer de pies a cabeza una y otra ves, esa boca pequeña y labios delgados pero muy provocativos, era una delicia de mujer joven, tranquila, siempre sonriente y muy inteligente siempre me han gustados las mujeres inteligentes. Estaba pensando en su cuerpo en como seria besar sus senos, acariciar esas piernas largas y tersas en como seria su aroma y su sabor mi cabeza imaginaba su cuerpo y  empecé a sentirme excitada, me encontraba ensimismada en mis pensamientos que no la vi entrar a la ducha.

―Ey¡ Estas bien?

―Si por que pregunte entre asustada  y excitada

―Llevas media hora en la ducha pensé que te estabas ahogada o algo así (sonrío)

―No para nada perdona, estoy desperdiciando mucho agua

hasta ese momento no había notado que ella estaba enfrente mió, obviamente por fuera de la ducha pero la división era de vidrio y yo me encontraba completamente desnuda) habiéndose  ella percatado de esto vi en su rostro una mirada de deseo que me devoraba por completo, eso hizo que  me paralizara y aun mas despertó mi deseo por ella, Laura abrió lentamente la bañera e ingreso, me tomo por la cintura y acerco sus labios a los míos, inicio con un suave beso  rozando los labios primero el superior luego el inferior, saco un poco su lengua buscando paso en mi boca yo me deje hacer, su saliva era dulce, sus labios se encontraban calientes, capaces de quemar todo lo que tocaran, al principio un beso  de reconocimiento, tierno, suave, pausado, pero pocos segundos después se convirtió en rápido, un beso de deseo de descubrirnos la una con la otra de ser un solo ser, de conocernos y explorarnos poco a poco hasta perder la cordura, mis manos habían pasado de pasivas a activas empecé a tocar sus senos, tamaño mediano duros por su excitación y en el momento de sentir mis manos tocarlas e invadir su espacio se volvieron mas duros, sus pezones eran cafés, ya no aguantaba mas tiempo lejos de ellos así que me aventure a tomarlos con mi labios, los rodee y pase mi lengua sobre los pezones que se encontraban duros, cuándo los tome con mi boca y succione laura dejo escapar un pequeño gemido de placer.

―no sabes como e deseado que hagas eso desde que te vi en ese bar dijo Laura con vos desencajada por el deseo que le absorbía en ese momento.

 Ahora era su turno, bajando con rapidez a mis senos, no hizo mucho detenimiento en ellos,  bajo lentamente por mi abdomen hasta llegar, a mi ombligo, cuando iba llegando a mi sexo, lo olio y murmuro

―que rico hueles y que mojadita estas, ¿qué estabas pensado mientras te duchabas?

Antes de poder decir palabra alguna sobre mi estado de excitación, tomo mi clítoris, y lo lamió con su lengua, cosa que hizo perder la noción de lo que me encontraba pensando para defenderme y en cambio salio un gemido de mi boca. Agghhhh… que rico se siente, al ver que mi excitación subía y que me seguía mojando mas de lo que me encontraba, pidió que subiera mi pierna derecha a su hombro, para tener mas acceso a mi sexo, lamió de arriba a bajo, y debes en cuando succionaba con su boca mi clítoris que ha ese momento se encontraba muy excitado y grande, succiono, lamió moviendo su lengua de un lado a otro masturbándome con su lengua y se hizo eminente mi primer orgasmo, al ver que un liquido viscoso, y caliente salía de mi sexo, emitió un gemido Aghhh Vente en mi boca, princesita, dicho esto estalle por completo ella lamió el liquido producido por mi orgasmo, haciendo me saber que mi sabor era un manjar delicioso que deseaba probar una y otra ves,  subió lentamente por mi cuerpo y colocando sus manos por mi cintura, cerrando la llave de la ducha.

―No crees que ya estamos lo suficiente mente mojadas, dijo con una cara de picara .

―Si tienes razón dije dándole un beso

―Esos labios los quiero sentir en mi sexo, y esa lengua quiero sentirla penetrándome hasta el fondo  dijo con voz ronca. Vamos quiero que me hagas tuya en mi sala.

Sin decir mas cogimos las toallas para secarnos un poco y poder recostarnos en el sofá, estando allí me indico que me recostara en el sofá boca arriba, e inicio a comerme mis senos de una forma que me enloquecía del placer, sus manos acariciaban mis nalgas y una que otra ves al ritmo de mis caderas introducía su dedito índice en mi sexo, eso me hacia desear mas sentir nuevamente su boca en mi sexo, que lo succionara y lo lamiera con su lengua, esto paso por mi mente cuando  mire hacia atrás al darme cuenta que las cortinas estaban abiertas de par en par, no pude evitar sobresaltarme por la situación.

―Espera Laura las cortinas están abiertas

―Si, Y?

―Ciérralas,  alguien podría estar mirando

―Relájate  ahora vas a decir que no te excita   el que alguien nos vea y se antoje. Tu disfruta que quiero que te vengas en mi sofá.

Dicho esto bajo abruptamente a mi sexo y empezó a succionarlo, las cortinas y los vecinos pasaron a segundo plano, me dedique a sentir esa lengua y esa boca que me estaban haciendo llegar a el segundo orgasmo, inicio nuevamente a mover la  lengua masturbándome el clítoris con ella, se movía rápido de lado a lado produciéndome espasmos corporales haciéndole saber que mi orgasmo esta pronto a llegar, introdujo sus tres dedos medios en mi sexo haciéndome llegar en menos de dos segundos, y provocando gemidos y grito de placer, que duraron por minutos, sentí cuando esos dedos abandonaron mi interior y en poco tiempo laura se incorporaba al lado mío, con una cara de satisfacción por el deber cumplido aunque un poco a la expectativa por que aun no había podido desahogarse como debía, pero aun así lamia sus dedos, aquellos que había introducido en mi sexo.

―me encanta este sabor. Y pasaba su otro dedo a su boca lamiéndolo. Ahora necesito que sacies mi sed.

Sin decir mas se sentó a horcadas sobre mi cara, con vos de mando me ordeno hazme sexo oral quiero sentirte zorra , quiero tu lengua en mi sexo., no tarde mucho en hacerle caso, empecé a lamer e introducir mis dedos en su sexo, su interior estaba húmedo, su olor era penetrante y delicioso, méteme la lengua dijo desesperada, así lo hice su sabor era un manjar para calmar mi sed de sexo, cuando ella sintió el contacto empezó  a gemir y a gritar como loca deseosa.

―Siiii, asiiii dale zorra mas adentro, mas adentro que me quiero correr en tu boca…. Esa boquita de zorra que tienes.

Esas palabras jamás las había escuchado antes pero para la  ocasión todo era perfecto me excitaba escucharla y que me ordenara que debía hacer, que me pidiera sin tapujos, oírla gemir y gritar me encendía mucho mas, pocos minutos se corrió en mi boca,  sus líquidos iniciaron a excitarme y sus gemidos igual asi que vino mi tercer orgasmo, bajo su mano a mi sexo y se percato de mi orgasmo, me dijo.

―que rico mi zorrita se vino con solo hacerme el oral.

Así pasamos sábado y domingo a Laura le gustaba explorar  cualquier parte de la casa, la cocina, el comedor, el estudio, la ventana, y aunque al inicio me mostré reacia, ella empezó a persuadirme tocándose con sensualidad su cuerpo y masturbándose frente a la ventana como si nadie la viera con una mirada sensual llamándome a caer en sus redes, eso causo en mi gran efecto, ya que no dude en  abalanzarme sobre ella como león a su presa; Así pasaron los días  hasta hoy que llevamos un mes saliendo, salir es mucho decir realenté siempre estamos en su casa, teniendo sexo y haciéndolo en cualquier lugar que a laura se le ocurriese, todo lo que me ordenara lo hago de tal manera de complacerle en todo sus caprichos, ella me hacia sentir viva de cierta manera pues desde que inicio nuestra relación las cosas estaban mas complicadas en la casa, había moches en las que no llegaba por estar con laura y sucumbir a todas sus tentaciones, y ahora que iba camino a su casa me estaban matando las ganas de hacerla mía otra ves tenia necesidad de su cuerpo de toda ella de seguro inventaría una cosa súper loca para celebrar nuestro primer mes……

Mientras subía las escaleras mas sentía ganas de estar con ella, sentir su calor, sus gemidos, sus gritos, me Moria por saborear sus orgasmos y hacerla llegar una y otra ves, por fin llegue¡¡¡  mmm... una nota.

―sigue con cuidado las luces se encuentran totalmente apagadas. Te quiere Laura

No puedo aguantar mas deseo tenerla nuevamente, entre y las luces estaban completamente apagadas, seguí a su cuarto y una luz en el piso se veía algo muy tenue,  golpee la puerta y sale ella con un abrigo muy largo, me da un beso tierno y largo, es muy raro en laura siempre le han gustado los besos profundos, besos de deseo y pasión.

―Hola princesa mía, estas mas hermosa que nunca. Sonrío tiernamente

―Tu estas igual, y que tienes preparado me muero de deseo por hacerte mía.

―Ey… calma hoy prepare algo diferente.

―¿Diferente? Me pregunte para mi misma

me puso un pañuelo en mis ojos y me hizo avanzar al cuarto, había un aroma  de sándalo, y se sentía algo caliente, se alejo de mi un momento y puso música suave y romántica, me extraño mucho pues era algo poco inusual en ella, laura solía ser una mujer muy sexual, no le gustaban los preámbulos si no el contacto físico el calor, la humedad los gemidos todo en menos de nada, siempre había optado por tenerme desnuda en su casa para hacerme suya cuando quisiera sin molestias como para ella era la ropa una molestia total, cuando me descubrió  los ojos, me di una gran sorpresa, tenia un vestido finísimo, de seda rojo hasta las rodillas su cabello liso, maquillada sutilmente para resaltar sus ojos verdes, y enfrente de nosotras comida tay, había suchi y arroz con camarones, para mi sorpresa había cocinado ella, empezamos a cenar empezó a preguntarme de mi trabajo y mi fin de semana, el cual había estado en mi casa con alguna que otra tarea familiar, después de haber cenado tomo una botella de vino y brindo por nuestro primer mes de relación y termino diciendo que le encantarían que fueran muchos mas, yo no dije palabra alguna solo levante mi copa y di un Salud¡ con una medio mueca de sonrisa en mi cara. Laura había estado muy rara la ultima semana mas consentidora, mas preocupada por mi, y receptiva a mis cosas, hasta ese entonces no se me hizo raro solo ahora con este “regalo”. Me indico que me recostara en la cama y así lo hice y empezó a besarme tiernamente, yo intente desnudarle pero solo se alejo de mi para decirme

―esta noche no. Hoy será diferente.

Trate de calmar mis ansias de ella y me deje llevar por sus besos, mientras suavemente retiraba mi blusa, esta ves sus palabras eran extrañas para mi, decía que me quería, que deseaba hacer me el amor, que me entregara a ella con el alma, mi cuerpo se bloqueo por completo, todo mi deseo desapareció con escuchar “ALMA”   a  que carajos se refería con esto? Tuve que parar con la escena erótica y al mirarla  a los ojos me di cuenta que había una luz extraña en ellos.

―¿Que sucede? ¿Estas bien? ¿Te molesto lo que te hice? ¿Te lastime?

―No laura nada de eso, solo que…

―Que?

―Que sucede contigo por que me hablas así, por que todo esto (sonrío pero no dijo palabra alguna, en cambio me beso nuevamente despacio, con ternura, con amor, termino con un pico, sonrió y mirándome a los ojos

―Te Amo, Marcela te amo (trate de ver en sus ojos tan siquiera una indicio que me dijera, que era mentira, que era una broma, pero no fue así, era verdad sus ojos lo decían y todo lo que había planeado era para hacérmelo saber, no tuve mas remedio que vestirme y salir de allí lo mas rápido que pudieses.

―Que carajo haces Marcela?

―Me visto y me voy. Acaso no me ves?

―Que? Y nuestra celebración?  y ¿yo?

―Y tu nada Laura, tu nada.

―Por favor no te vallas, prometo no tocarte pero quédate conmigo esta noche, por favor

―No puedo, lo siento tengo que irme me están esperando en casa (verla llorar me dolió, pero aun así no fue suficiente para quedarme junto a ella, no podía no era mi lugar.)

Cerré la puerta, no podía responder a ese te amo, no lo sentía era tan efímero a mi, había dicho en mi casa que tendría que viajar, imaginaba que la celebración de laura llevaría mas o menos una semana, tratando de tenerme como esclava sexual en su casa, pero ahora todo era diferente, se había enamorado y ya no podría estar junto a ella, así que tendría que irme a un hotel……

******************

Quisiera encontrar la forma para que esta situación no me haga daño, a pesar que intento ser fuerte por el amor que he tenido y tengo hacia Marcela, pero esta situación de trabajo y de viajes constantes, me ha golpeado muy fuerte, como me gustaría que estuviese aquí justo en este momento, poder hablar y conversar de cómo estuvo su día, pero hoy cuando se suponía regresaría del trabajo ha llamado para decirme que debe viajar otra semana mas, no  se  cuanto aguante mas, esta mas que visto que los dos Sebastian y yo necesitamos de ella.

―mami, estas llorando de nuevo

―no amor, como crees solo es la gripa. Dije tratando de ocultar mi tristeza y que mi vos no se quebrara por mis lagrimas.

―Entonces ven y te abrazo que ya sabes que son mágicos

―Claro que si bebe

―Te amo mami

―Y yo a ti cielo,  ahora duérmete pronto. Le di un beso en su frente y en pocos minutos se durmió.

Espero la próxima semana  pueda hablar Marcela, contarle de los ajustes que en este mes han surgido para el matrimonio, pensando en como iban los preparativos me quede profunda.

―buenos días mami.

―Buenos días amor, levántate rápido que tienes ir al colegio

―Si, si ya  me ducho decía con vos de dormido aun

―Yo preparare tu desayuno

―Si señora

De esta manera la semana trascurrió como siempre , Sebastian se duchaba, desayunaba terminaba  de arreglarse y salía para coger la ruta para su colegio, a sus cortos 8 años había sido un niño muy inteligente  tanto así que lo habían promovido de grado dos veces por lo cual en este momento se encontraba en cuarto de primaria, además de eso había sido un niño muy comprensivo para el era muy normal estar junto a sus dos mamas Marcela y yo, decía que era una bendición ser premiado con dos mamas en ves de una, además que las dos le consentíamos mucho, yo por mi parte no trabajaba me dedicaba a estudiar mi PHD en logística internacional y a cuidar a Sebastian mientras Marcela se encontraba en su buffet de abogados, no me podía quejar  de nada, ella era una mujer completamente hermosa, altura media, ojos cafés claros, cabello negro, tez trigueña, muy inteligente y diplomática, unos senos que eran mi delirio por ser de gran proporción y obviamente lo que mas me enamoraba su sonrisa esa que hacia que cada día al verle me enamorara mas de ella.  nos complementábamos muy bien, todo lo hacíamos juntas y teníamos muchos planes en mente ahora dos para ser mas exactas 1. Que yo lograra quedar en embarazo y 2. el matrimonio. A pesar de que lo habíamos intentado en varias ocasiones no había resultado, creo que por que no calculábamos muy bien las fechas de mi ovulación, pero ahora seria diferente pues había contratado un doctor para que me ayudara en esa tarea Marcela aun no sabia de él, puesto que hace un mes le contrate pero por los viajes de ella ha sido imposible que sepa de todo lo que ha surgido,  en cuanto al matrimonio pues habían algunos detalles que faltaban por cuadra pues la boda seria en  cuatro semanas mas o menos. En este mes había notado a Marcela un poco lejana a Sebastian y ami, desde la ultima discusión que tuvimos ya que fue muy fuerte tanto así que ese día salio de la casa y no regreso en todo el fin de semana de hay en adelanta había optado por tener un gran volumen de trabajo, pero ya era demasiado un mes sin contacto alguno mas que un celular o mail  así que  este fin de semana hablaría con ella y así le comentaría lo importante que era que estuviera con nosotros,  estaba iniciando el chequeo de los detalles del el vestido, el salón, el lugar para la ceremonia cuando sonó mi celular.

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