Habían momentos en que me sentía sola, pero esa sensibilidad y su talento, el talento de esas manos eran increíble, los primeros minutos trascurrieron, entre charlas y confidencia, disfrutaba congeniar de ese modo. temía que la falta de experiencia causara una fractura entre nosotras dos, pero en la relación conseguimos algo en común, habíamos descubierto un punto de encuentro, era tan placenteros esos minutos libres, todo comenzó esa noche, estaba fastidiada conmigo misma, fastidiada por mi desmemoria tenia que callar ese sonido, ese sonido que no me dejaba escuchar mis pensamientos, a esa contaminación sónica que estaba dentro de mi, ese ruido insoportable rápidamente desapareció restableciendo el silenció en mi interior, mientras tanto mi mente confundió mis pensamientos con un sueño sucio no pude salir de el, tuve que adentrarme .
Al principio creía que era una pesadilla, pero escuchaba unos gemidos en la habitación, estaba una segunda persona era una cómplice, y yo viendo todo desde las sombras, yo era manipulable solo sentía aquel deseo ese placer que me llenaba de éxtasis, que excitaba todo cada vez aun mas. Para mi suerte no me había equivocado, estaba en presencia de la escena mas hermosa, sì yo durmiendo en mi cama viviendo con los ojos cerrados, desde el rincón de mi mente donde me encontraba veía unas imágenes obscenas, veía unas manos que recorrían lentamente un cuerpo que le quitaba la ropa y dejaba al cuerpo desprotegido, poco a poco se descubría su piel. Parecía algo tan tierno y deseoso, tan apetecible antes eso rayos de luna que bañaban caprichosamente su piel, estando en esa oscuridad de la noche que agitaba su cuerpo era algo casi mágico, esos juegos maravillosos entre esas luces y su sombra.
Mi corazón no hacia mas que solo latir como un caballo desbocado, no entendía lo que pasaba pero no podía dejar de mirar ¡NO QUERÍA! no podía despertar mi corazón se me quería salir de mi pecho, comencé a desear estar despierta, para ver si también podía jugar de esa forma tan ardiente; brillaron como rio de plata ante el resplandor de aquella luna, ríos que iban a morir en ese mar, que yo imaginaba dulces y mojados agitados por esos dedos que se hundían, inquietos y desesperados buscaban algo en lo mas profundo de su ser(…) Suspire tras una imagen tan placentera y si lo admito desperté entre mis fluidos, en medio de mi cama y con mi cuerpo desnudo, me pregunte era real o solo fue un sueño, en ese camino que recorrí dentro de mi ser, ese camino que yo no conocía, pude dormir el resto de la noche como un bebe, estaba cansada y agotada.
En la mañana era una amante apasionada reía sin nada que decir estaba apenada por aquel desborde de pasión en esa noche, no sabia que descubrí en mi, pero esa inspiración que descubrí en mis sueños en ese juego en que aquellas manos hacia con gran perfección. “Tenia unos pensamientos prohibidos, pensé en esos ríos en las olas que provocaban en mi esos dedos estando yo en mi cama culposa me sentí una ninfómana” me volví a dormir pero esta vez el deseo se hizo mas profundo tenia que ver como se devoraban sin mediar ni una palabra, la luna me veía mientras yo estaba en mi noche de placer, mi corazón cada vez latía con mas rapidez.
Esa tormenta que se desato en mi interior, no tenia aire suficiente para mi respiración, me sumergí en aquel hechizo, el hechizo de esas imágenes que me hacían una pecadora pero estaba dispuesta quería caer, ya era tarde me sumergía una y otra vez.