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en la cocina

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En la cocina siempre hay momentos para hacer una sesiòn y màs que los momentos, los instrumentos perfectos para hacerte sentir mi perra todo el placer que el dolor puede hacer en ti.

al entrar a la cocina te ordeno te desnudes, he puesto un sendero especial para ti consistente en granos de arroz, garbanzos y hojas de ortiga asì que te indico el sendero que tendàs que caminar, he hecho todo un sendero alrededor de la cocina, dandole vueltas a las sillas y a la mesa para que vayas disfrutando del paseo, el mismo termina donde he dispuesto de dos sillas donde te atare y hare uso de las velas, caminas y puedo ver que tus pies empiezan a sufrir el sendero que te hice, tu te detienes un momento y levantas tu pie, esta lleno de granos de arroz que se han pegado y ya estan rojos por la irritaciòn de las hojas, tù me ves mientras enciendo las velas y preparo las sogas con las que te atare, levantas los pies alternados y despues de un momento asì quieta decides seguir caminando, te es menos doloroso el caminar que el estar de pie esperando que te sigan pinchando los pies, cuando empiezas a caminar alrededor de las sillas, las lagrimas escurren ya por tus ojos, saco la fusta pequeña y con ella limpiare tus pies cuando estes lista atada sobre las sillas, las sillas estan separas a modo de que al estar acostada tu espalda quede justo sobre el espacio vacio dònde estan encendidas las velas, en mis manos tengo una manzana que pondre en tu hocico al acostarte y atarte.

Cuando llegas ante mi tratas de mantener los pies quietos pero es tanta la molestia que sientes que te pones sobre las puntas y subes y bajas sobre tus pies, te ordeno te pongas de rodillas y abras el hocico, tomo la manzana y te la coloco, despues de ello jalandote del cabello te llevo a las sillas que he dispuesto y te colocas dejando las piernas y los brazos colgados, te ato los brazos a las patas de la sillas y antes de atarte las patas te ordeno las levantes, ahi quedan incrustados algunos granos de arroz y tomando la fusta azoto tus patas, tu gimes al sentir los azotes sobre la planta de los pies incluso la retiras y al retirarla te das cuenta del error que cometiste y la vuelves a ofrecer.

Te ato bien y tomo otras velas, tu empiezas a sudar de la espalda por efecto de las velas que he colocado abajo de ti,tomo la vela y empiezo a adornarte, las gotas van cayendo sobre tu cuerpo y veo como te estremeces mientras cubro tus tetas, tu vientre me entretengo ahi y voy bajandolo tù con la manzana en el hocico solo te estremeces y gimes, bajo la vela por tus muslos y voy alternando el adornado en los dos muslos, cuando he cubierto tu cuerpo te digo.

-he cocinado una cerdita y la he adornado con cera gratinada.Ahora vere si la crema de la cerda ha fluido.

meto mis dedos en tu raja y se hunden profundo, estàs muy mojada justo como una puta perra en celo, meto mis dedos y los saco bien embarrados, te saco la manzana de tu hocico y ahi unto tus jugos, sigo haciendolo y despues la vuelvo a colocar en tu hocico que sientas el sabor de tus jugos de perra en celo. Tomo el gato y empiezo a azotarte en las tetas y en la raja, la cera se desprende tu cuerpo y los gemidos aumentan, azoto tus tetas y los pezones de inmediato se ponen erguidos, bajo el gato y continuo azotandote, la raja se te pone roja al recibir los azotes, tus muslos son tambien azotados, uno tras otros los azotes van marcando tu cuerpo, la cera ya ha sido removido de tu cuerpo y estas marcada por las cintas del gato, despues de haber limpiado la cera de tu cuerpo te suelto y apago las velas, han caido muchas gotas de sudor en el piso, quito las velas y te siento en la silla, tu estas llorando pero en tu mirada veo el placer que te causa el castigo que te doy, ahi sentada te recuperas y mientras saco el hielo y lo pongo en un recipiente, tu me sonries, pongo el recipiente a tus pies y tu los pones sobre el hielo, tu mirada y tu cuerpo reciben el impacto del hielo, sobre todo las palntas de tus pies, mientras acomodo bien tus pies, tu suspiras, te dejo ahi sobre el hielo y saco mi verga que se ha puesto dura en el proceso de la sesiòn, te tomo de la cabeza y te obligo a agacharte y meto mi verga en tu hocico, te la hundo bien profunda y tu de inmediato salivas, estas llena en tu hocico con mi verga y en tus pies ya sientes la molestia del agua que se ha formado al irse fundiendo el hielo al contacto con tus pies, meto y saco mi verga de tu hocico y tu baba resbala, resbala mientras te la hundo y la retengo ahi en tu hocico y te aprieto la nariz, tus ojos se ponen a lagrimar y màs baba escurre de tu hocico, la saco y te abofeteo, y te pregunto.

-¿ dime perra, te gusta ser usada en tu hocico?

- ¡ si, mi AMO!

- si, mi perra y voy a bañarte tu cara de perra sucia con mi leche-te digo al momento de eyacular en ti.

Asi bañada de mi leche, voy por las pinzas y te pongo una percha en tus pezones de ellos cuelgo unas papas que ya tenia preparadas y te acabo de adornar los pechos con otras pinzas, te pongo otras en los costados y te digo que te apoyes sobre la mesa con las patas bien separadas, ya que estas ahi, te coloco un pepino grueso en tu raja y en tu hocico coloco unos ajos y un chile y te ordeno:

-nada de chillar o gritar, si se caen los ajos o el chile seras castigada, si vas hacer algo ser morderlos.

tomo una paleta de madera que se utiliza en la cocina y con ella empiezo a azotarte las nalgas, los primeros azotes son suaves pero de vez en vez dejo caer uno con mayor fuerza, tu solo lloras, y aprietas las patas para no dejar caer el pepino, tus jugos son tantos que escurren por el pepino, tus nalgas se han enrojecido y algunas pinzas colocadas en tu costado se han soltado, tu estas sudando y he visto caer pedazos de ajo y el chile, donde tus dientes los han cortado, pero no has gritado ni has pedido que pare.

Dejo de azotarte y tu aflojas tu cuerpo el pepino cae todo embarrado de tus flujos blancos, tu lloras y me pides te abrace, te tomo entre mis brazos y te beso tu frente, tù me dices:

-Gracias mi AMO, me ha hecho arder de placer.

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