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En la playa nudista

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La verdad es que no era un día óptimo para ir a la playa pues hacia poco sol y algo de viento, a pesar que al salir de casa así lo parecía, pero aún así decidimos ir. Nos gusta mucho ir a una playa nudista de nuestra provincia que se caracteriza por la cantidad de dunas y recovecos que tiene, lo cual permite cierta intimidad pues sin estar escondidos tapa un poco el panorama. Normalmente vamos a tomar el sol desnudos pero claro a veces pasa algo, no siempre. La verdad es que al llegar la playa estaba desierta así que nos pusimos a lo nuestro, tomar el sol desnudos. Durante la estancia como hacia un poco de viento mi mujer se arrimó a mi y claro con el contacto de sus grandes pechos, 120, el bicho se puso morcillón. Al verlo mi mujer comenzó a acariciarlo por encima y este se puso ya en mástil. Claro no se podía desperdiciar por lo que ella comenzó a meneármelo. Al poco de estar en ello paso un señor, como a 10 metros. Tendría unos 50 años pues las canas blancas lo delataban. Él también estaba desnudo. Es de los que ella llama legales, porque no nos gusta la gente que va vestida a las playas nudistas, vamos los mirones. Paso de largo pero girando la cabeza para ver el tema. Mi mujer que le encanta provocar por lo que siguió en el asunto, giro la cabeza para ver el tipo, y entonces comenzó a chupármela. El tipo al minuto volvió a pasar cerca, esta vez a unos 5 metros, se paro unos segundos a mirar y luego siguió de largo. En eso me dice mi mujer, “Vaya tenemos admiradores” y yo le dije, “bueno mirar es gratis y yo estoy en la gloria con esta mamadita, si quiere mirar que mire, pero tu sigue cielo”. Eso la encendió mas pues el ritmo de la mamada aumento. El tipo volvió a pasar y se quedo sentado a 3 metros, mirando. Por suerte la playa estaba desierta y podíamos dedicarnos a lo nuestro.

La temperatura aumentaba cada vez mas por lo que yo me puse a chuparle las tetas mientras con otra mano me dedicaba a acariciarle el coño. En eso que el tipo se mueve y se queda distante pero por la parte delantera de nosotros con lo que podía ver con lujo de detalles. Yo para calentar mas la situación comencé a abrirle el coño con los dedos, por lo que el tipo podía ver perfectamente el coño de mi mujer y como le metía los dedos. El tipo muy correctamente se limitó a quedarse sentado mirando.

El calentón de mi mujer la llevó a montarse encima. Abrió sus piernas y se metió la polla en el coño para empezar a cabalgarme. Para esos momentos el tipo ya se acariciaba la polla mientras nos miraba follar. Seguro que podía ver el culazo de mi mujer y mi polla entrando y saliendo perfectamente desde donde estaba sentado masturbándose.

Mi mujer giro la cabeza y le dijo “si quiere mirar y pajearte no hay problema, pero si ves venir alguien avisa, por favor”. El tipo dijo “no os preocupéis, vosotros seguir a lo vuestro que yo vigilo”.

De repente el ruido de una moto lejana nos hizo alertarnos, temimos que fuera la policía pues a veces pasa la patrulla con la mito vigilando. Claro se rompo la magia. El tipo nos llama y nos dice “un poco mas adelante hay una duna profunda que tiene cañas por los lados, quizás allí estaréis mas tranquilos sin preocuparse tanto por si pasa alguien”.

Así pues cogimos las toallas y la bolsa y nos dirigimos al lugar que estaba como a unos 30 metros. Allí encontramos el lugar, una hoyo alargado que estaba totalmente cubierto por cañas excepto una pequeña entrada que le daba el acceso. Tiramos las toallas dentro me tumbé y ella comenzó de nuevo a chupármela. El tipo llegó y se sentó a la entrada del lugar, era nuestro vigilante particular. El vigilaba y como pago podía mirar y masturbarse. En eso que mi mujer se puso a cuatro de cara al tipo y yo comencé a darle desde atrás. Cada vez que gemía miraba al tipo con cara morbosa mientras se relama los labios. Luego nos cambiamos, yo me puse tumbado boca arriba y ella se puso de cara al tipo, me cogió la polla, se abrió el coño y se fue metiendo la polla de cara al tipo mientras le decia “¿Te gusta como se abre mi coño y entra la polla?” El tipo que podía ver todo de frente pues estaba sentado a un metro del espectáculo asintió con la cabeza.

Mi mujer comenzó a moverse enseñando su coño abierto y penetrado por mi polla al tipo. Al poco se giro y cambio la postura para que ahora pudiera ver su culazo montando mi polla. Así anduvimos un rato hasta que me mira a los ojos y me dice “córrete en mi boca quiero que él lo vea”. Me levante se la puse en la boca y ella la mamó hasta que comenzó a salir leche de mi polla directa a su boca. Salió tanta que se le derramó por la comisura de los labios. Entonces mirando al tipo comenzó chuparlos restos que desbordaban para tragárselo todo entre lametones. El tipo estaba rojo de la excitación, así lo indicaba el color de su cara.

Entonces me dice mi mujer “pobre se quedo recalentado el señor” y yo le dije “pues si quieres puedes hacerle una paja”. Yo sabía que follárselo no se lo follaría pues ene so somos muy cautos y no nos juntamos con cualquier persona. Así pues mi mujer se gira, lo mira y le dice” si quieres yo te termino la faena para que te quedes aliviado”. Él sonrió y entonces mi mujer se acerco, le tomo la polla con la mano y comenzó se la comenzó a menear. El tipo solo tardo unos segundos en correrse. Se ve que le gustó tanto que se calló de espaldas y todo.

Entonces ya finalizando la aventura nos limpiamos y con tan solo un “gracias y adiós” nos fuimos dejando al tipo extenuado allí.

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