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MI DON (19)

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Zeus – La casa de Madamme.

Estaba enajenado, faltaba menos de una semana para el regreso de Ana,  y llevaba 1 mes follando sin parar con clientas o prostitutas de alto nivel, para lograr el dinero del piso, pero una vez logrado lo que necesitaba, seguía trabajando con  Madamme, sin motivos.

Para ello había Desatado y controlado a una bestia en mi interior, y asustándome en momentos ante mi personaje, Zeus. Me asustaba de lo que era capaz de hacer, no era yo, era otra personalidad dentro de mi, un tipo dominante, engreído, implacable, egoísta y peligroso si se le enfadaba. Después de la fiesta de ricachones quise alejarme unos días de todo, serenarme, volver a sentirme un tipo normal y regresar a mis objetivos. Mi mente se dividía, como Zeus quería seguir en la empresa de Madamme, quiera ganar dinero e ir reventando a mujeres por la ciudad, sodomizar aún más a Madamme, disfrutar de esa parte oscura y excitante de mi vida, pero él era solo un seudónimo, un personaje, o al menos empezó siéndolo, no tenia poder de decisión, ¿O si?. Yo era Raúl, y tenía que ganarle la batalla, todo me había llevado a esa situación, pero estaba allí por el dinero del piso, aquellos 6.000€ para asegurarnos un sitio donde irnos a vivir mis amigos y yo, con Ana. La idea era disfrutar de la compañía de una mujer, y no de forma sexual, si no en una relación de iguales, de respeto y amor, no de sumisión y deseo, pero Zeus era todo lo que un hombre podía soñar, una maquina de follar que además de tener una polla enorme, había ganado algo más de 80.000€ en 3 semanas largas.

Me descubrí muchas veces teniendo diálogos mentales, o hablando en voz alta, discutiendo entre Raúl y Zeus sobre mi futuro. Mi madre me miraba como si estuviera loco, pero tampoco es que antes fuera un chico muy normal, mi cabeza siempre fue a una velocidad distinta del resto, mi mente echaba a volar y desaparecía de la realidad minutos u horas. Quise hablar con alguien del tema, quizá Eli me entendiera pero sentía en mi interior que era tema mío, que lo debía solucionar yo, y no podría ser de otra forma. Leí artículos de desdoblamiento de personalidad, y me tranquilicé un poco, no daba el perfil, se han de tener crisis de ausencia, errores en la apreciación del tiempo, lapsus mentales o generalmente oír a los demás hablar de cosas que tú no recuerdas haber hecho, así como dolores de cabeza,  arritmias, respiraciones agitadas sin motivo  o abuso de alcohol  o drogas. Nada de eso, yo tenia la mente lúcida, recordaba todo, no tenia crisis, ni tomaba nada, simplemente mi cabeza era muy imaginativa, me había creído mi personaje, y mientras fuera solo eso, Raúl dominaría todo.

Me llamó Madamme pasados unos días, tenía mi trabajo final, quería quedar para comentarme los detalles, al parecer era un trabajo especial, pero temiendo mis reprimendas admitió por teléfono que también quería verme en persona. Le dije  que solo si era en su casa, tenía ganas de ver como sería, obedeció mandado a una de la moles con un coche a recogerme. Llegué a su casa, un chalet en una urbanización de las afueras, de esas con nombre propio, vallas y seguridad privada que pidió identificación al entrar en el complejo. Me abrió la puerta de su casa dónde se quedaron las 2 moles, Madamme me recibió con un camisón de satén y una bata de seda, con su actitud altiva, cuando cerró la puerta se le cambió el rictus, agachó la cabeza y junto las manos por delante, totalmente obediente y sumisa. Si ella adoptó sin reparos su papel, yo asumí el mío de Zeus, cambié mi mirada ante su rostro, miraba de reojo,  y me fui acercando lentamente, hasta olerla el pelo. La notaba temblar, tiritaba ante mi presencia, esa diosa del sexo, una puta experta que era una mujer de bandera y follaba como los ángeles, se encogía al sentir mi respiración en su cuello, le castañeteaban los dientes y se tenía que morder el labio para evitar el sonido. Sin duda las duras sesiones de sexo que tuvimos,  la visión de mí destrozando a  Geisha y la imagen final de mí, humillando a David, totalmente desatado expresando mi furia, la excitaban y la hacían tenerme miedo, pánico  de actuar de cualquier modo, y provocarme.

-ZEUS: no tienes por que temerme, si  puedo ser temible cuando me enfadan, si te portas bien puedo ser bondadoso y dulce - la acaricié por el brazo con una mano y la levanté la cara para admirar su mirada, sumisa y de adoración, con los ojos vidriosos.

-MADAMME: si es lo que deseas, ser dulce y bueno, y crees que es lo que merezco,  lo acepto, pero no es lo que yo espero - una lagrima cayó por su mejilla ante esa revelación, ella no quería que fuera así, pero no podía evitar sentirse atraída por mi y mi forma de dominio, como si fuera algo de su pasado que deseaba no echar de menos, pero que ansiaba encontrar, y lo obtenía solo de mí.

-ZEUS: ¿Quieres que te castigue por apostar por mi sin mi consentimiento, pese a que sé que es lo que quieres, y  que después,  me avisaras del embuste de David?...... - asintió rompiendo a llorar -….. vaya, me dejas en un dilema, te mereces el castigo, pero sé que lo deseas, mi impulso seria no dártelo para hacerte sufrir.

-MADAMME: pero mi señor, quizá no deba castigarme, y si premiarme por lo de David - negociaba de forma inteligente, sin que  pareciera que lo hacia.

-ZEUS: es cierto, pero pese a que te portaste bien…. - cambié mi cara a enfado -…… era tu deber para con tu dios, no te portaste bien, hiciste lo que tenias que hacer, ¿O acaso me hubieras vendido? - la besé en el hombro para dar sensación de  serenidad ante la acusación, eso la hizo temblar de horror.

-MADAMME: ¡No………no, jamás, tienes razón, hice lo correcto y no me merezco premio por ello, siento si os he ofendido al decirlo!

-ZEUS: eso ya es otra cosa, si comprendes que no eres dueña de ti en mi presencia, que todo lo que hagas o digas debe ser lo que yo deseo, irá bien, y te follaré como sé que deseas, pero tendrás que ganártelo……- la quité la bata dejándola caer al suelo, mirándola solo con el camisón, que apenas le pasaba de los muslos, metí mi mano por debajo y agarré el coño por encima de la ropa interior, notándolo encharcado -….. ves como eres mi perra, aún no te he tocado y estás húmeda de deseo.

-MADAMME: dígame que desea y se lo concederé, haré lo que usted ordene por ganarme el derecho a ser castigada - su respiración se aceleraba ante los movimientos de mis dedos en su prenda intima.

-ZEUS: por ahora, desnúdate, déjate los tacones,  y vete a ese sofá de allí, comienza a masturbarte, y mientras me vas diciendo los detalles del último trabajo - obedeció como devota que era, verla quitarse el camisón y quedarse con un minúsculo tanga me la puso dura, se ganó un cachete en el culo al agacharse para quitarse  aquel hilo fino que casi se perdía entre sus nalgas, por ello sonrió, luego se tumbó boca arriba en el sofá y se abrió de piernas, comenzando a masturbarse de forma rápida y caliente, como si yo no estuviera allí, sentado a su lado,  mirándola atentamente.

-MADAMME: es una clienta nueva, es la mujer más guapa de toda la clientela……….uf…………, la conocí en la fiesta de David, es una modelo de 24 años………….ummmm………está muy buena y paga muy bien, casi 20.000€ - se estaba calentando con sus hábiles dedos.

-ZEUS: ¿Y por qué una modelo guapa y rica necesitaría de nuestros servicios? Tendría a 40 hombres con solo chasquear los dedos, y menos un servicio  tan caro.

-MADAMME: es por su forma de ser……..ummmmmmmm uf………..de joven abusaron de ella, empezó muy joven de modelo, a los 16 , y ese mundo es mucho más grotesco de lo que se piensa la gente, la drogaban y abusaban de ella desde el principio ……- se metía ya 3 dedos en el coño, acariciándose los senos -………. ahora dejó a su mánager y a su padre, que  la desvirgó y violó desde los 14 años, es tan famosa y conocida en el mundo de la moda  que fichó por una gran firma y ellos ahora son los que la llevan,  taparon aquello para no dañar su imagen, pero ella ufffffff, ella ya no es una mujer normal, tiene necesidades especiales.

-ZEUS: ¿Y que necesidades son esas?

-MADAMME: necesita ser violada, desde que se separó de esa gente ha estado con hombres, pero todos la tratan como si fuera de cristal,  es una muñeca rota, necesita sentirse humillada y sucia, abusada para poder disfrutar, está desesperada, y acudió a nosotros al verte follar en la fiesta, ¡¡¡DIOSSS!!! - se corrió, pero como no había dicho nada de que parara,  siguió - ……..lo hemos montado para que este fin de semana esté libre, y tú la “violes” todo el fin de semana.

-ZEUS: no soy ningún salvaje, no pienso follar si no es consentido.

-MADAMME: no es una violación en si, solo un juego, mira la carpeta de la mesa, hay un contrato firmado de consentimiento, con unas fotos suyas, está todo atado y preparado para que parezca real,  pero no lo será, en el móvil tienes un vídeo, como te gusta, con ella firmando el contrato y conmigo comentándoselo todo - lo hice, vi y leí el contrato, con cláusulas millonarias en caso de que se sepa por ambos lados, firmado por Madamme, nuestro abogado y la modelo.

Al ver las fotos no me lo creí, era una famosa modelo nacional, evidentemente no puedo decir quien era, pero la había visto durante semanas en los carteles de las paradas de autobús y en anuncios de TV, y acababa de lanzar una campaña de unos grandes almacenes.Era una belleza espectacular, rubia de ojos azules y  cuerpo perfecto.

-ZEUS: vaya, como son las cosas, ¿Esta dulzura y belleza necesita que la violen?

-MADAMME: más que eso, ella llegará el viernes a casa y  has de asaltarla en el portal, luego una vez dentro de su casa has de hacer lo que te de la gana, átala,  azótala,  maltrátala, todo  sin pasarte ni marcarla, vive de su cuerpo, ella actuará como si fuera real  y has de hacer lo mismo, durante todo el fin de semana es tuya y puedes hacer lo que quieras, ella aceptó, solo impuso que  cuando estés con ella, tendrás que ponerte la colonia de su padre, son  las únicas condiciones ……- se volvió a correr en su mano pero estaba tan excitada que apenas se le notó -…..el domingo por la tarde solo has de liberarla e irte. ¿Si es que deseas hacerlo?

-ZEUS: pues así se hará, pero asegúrate de que no me afecte de ningún modo negativo.

-MADAMME: no es la 1º vez que hacemos algo así, no habrá problemas, me ocuparé personalmente.

-ZEUS: me gusta lo del vídeo, me lo voy a mandar a mi móvil para asegurarme, esto es portarse bien, me gusta como lo has llevado todo - sin dejar de masturbarse, camino de su 3º corrida,  levantó la mirada sonriente ante mis palabras.

-MADAMME. ¿Estás contento? - preguntó ilusionada.

-ZEUS: mucho, has obedecido y me has hecho una buena ofrenda, y eso merece premio, por ahora súbete encima mía y fóllame, no quiero que me beses ni me toques a mi o a ti, solo ensártate  y viólame tú a mi - yo ya me estaba masturbando con el rabo fuera ante su énfasis en el dedo que se hacia,  de un bote me cabalgó y se ensartó toda, su mirada era de logro y satisfacción.

Obedeciéndome me violó, su cadera cogió ritmo de crucero apoyada en el respaldo del sofá, al poco de empezar se corrió, pero no dejó de moverse. Alternaba movimientos, unas veces  estaba subiendo y bajando todo el cuerpo  y otras solo movía la cadera, quería ganarse el castigo así que no paró hasta verse agotada, casi  1 hora más tarde, era eso justo lo que quería, Zeus podría ser un dios,  yo era humano. Si yo  arrancaba de 0 podría no llegar a abrumarla, pero  si dejaba que ella se desfondara 1,º seria sencillo. La dejé un rato más cabalgándome exhausta hasta que me corrí dentro de ella, dejándola otro minuto subiendo y bajando por mi polla flácida hasta volver a ponérmela dura, había gritado mucho y la había abierto  todo lo posible.

-ZEUS: así me gusta, eras un perra buena y obediente,  te has ganado que te destroce como sé que deseas …..- se le iluminó la cara, la besé dándola permiso para devolvérmelo. Su lengua era una maravilla y no aguantaba más sin probarla, su forma de usar la boca era obscenamente atractiva, seguía sacándome la lengua y chupándomela como una felación, eso me encantaba, y le daba azotes continuos en el culo cada vez que dejaba de penetrarse mi miembro. Mis manos se fueron a su pecho, trabajándola los pezones, sabia que la volvía loca así que lo hice a conciencia, dejándolos duros y mordidos, eso la aceleraba el ritmo, y se corrió sobre mi otra vez -…. vaya, me has dejado bañado, antes de abrirte el culo déjamela limpia con la boca, y recuerda no usar las manos.

Me gustó como obedeció, como si le quitaran dinero cada décima de segundo que tardaba en reaccionar, se arrodilló ante mi y poniendo las manos a su espalda  engulló hasta ¾, para seguir apretando poco a poco. Casi le saco la mandíbula del sitio, pero logró metérsela toda, con claros gestos de atragantarse,  aguantó así unos segundos, dejó que su boca sintiera todo mi poder y que fuera babeada por ella, lo hizo varias veces para luego ir trabajando el tronco con sus labios y el glande con su lengua. Era una gozada, y aún sin las manos me estaba llevando a mi 2º corrida, apretaba mi falo contra mi vientre para sujetarlo, y repasaba con sus labios de forma lateral todo mi tronco. En vez de hacerla parar, la agarré la cabeza y me la follé por la boca, al inicio le dejaba la cabeza inmóvil pero después la movía en contra de mis embestidas sacándola una arcada con cada una de ellas, nunca antes me había follado a alguien por la boca, me la habían chupado de 1000 maneras y se lo habían tragado otras tantas, pero eso no era una mamada, era penetrar un agujero. Madamme lograba jugar con su lengua, regurgitaba saliva y se le llenó la cara de babas,  me corrí en su boca explotando en numerosos chorros que cayeron directos a su garganta, que ella no paraba de tragar, le moqueaba la nariz, sollozaba y se ahogaba, pero aún soltándola la cabeza siguió chupándomela hasta volver a ponérmela dura.

-ZEUS: eres muy buena con la boca, pero ahora me toca a mi, y te voy a partir el culo,  te voy a meter algún consolador por el coño para que no te relajes, ¿Dónde tienes?

-MADAMME: en mi cuarto, arriba.

-ZEUS: coño, pues vamos a tu cuarto - me la subí encima y la penetré, se cruzó de piernas rodeándome y besándonos como posesos,  la subí al 2º piso, dándola fuerte en cada descanso contra la pared, y al llegar a su cuarto  me la bajé de encima.

Se fue directa a un cajón a buscar el consolador, la muy animal volvió con uno tan grande como la mía. Yo me fijé en el cuarto, era una cama normal pero toda la habitación estaba llena de cadenas, cuerdas,  postes y esposas, con trajes de hombre de látex, hasta un columpio.

-MADAMME: ¿Este le vale a mi señor?

-ZEUS: perfecto, vaya cuarto,  te gusta ser una dominatriz por lo que veo.

-MADAMME: si, desde que dejé las calles la única forma de sentirme viva es dominando a hombres.

-ZEUS: y ahora estás a mis pies – quería preguntarlo, pero sonó como era Zeus, orgulloso y engreído.

-MADAMME: pero es que tú no eres un hombre, eres un dios, eres mi dios - se hundió en consolador en el coño hasta metérselo entero.

-ZEUS: pues este dios te va a atar a ese columpio y te va a dar por el culo hasta que ruegues perdón - se le erizó la piel y se echó a temblar de nuevo, hasta ahora me había contenido, pero me cansé de juegos.

Ella se puso en el columpio y se ató sola, quedó tumbada boca arriba, con las piernas bien abiertas a una altura perfecta de penetración, con el coño abrumado por el  descomunal consolador allí alojado. Me acerqué y no trabajé su ano, directamente apreté el glande hasta penetrarla, gritó descosida a la que le di un tortazo en una teta, cogí unas pinzas unidas con una cadenita, y se las puse en los pezones, quedaban tirantes y con cada movimiento de las cadenas tiraban más, eso la hizo chorrear tantos flujos que su ano se humedeció. Ayudó a que mi penetración fuera más rápida en el culo, pero cada centímetro que la abría era un movimiento de cadenas, y un  placer descomunal en ella. La dejé dentro hasta notar cierta comodidad, entonces la balanceé hacia delante y la ensarté con la vuelta, eso casi la hace desmayar de gusto al momento,  explotó en otro orgasmo haciéndola tirar de las cadenas y tirar de sus pezones. La sujeté un poco de las caderas y saqué a la bestia, ya no habría piedad, ¿Quería el castigo?,  lo iba a tener. Aceleré sin parar hasta coger el ritmo de animal salvaje, y no paré, se corrió tantas veces que perdí la cuenta y pasó más de 1 hora y media hasta que me volví a  correr en su culo, el movimiento de las cadenas la ponía tan excitada que no se desvanecía, disfrutaba como una perra, pidiendo más.

-ZEUS: déjate las cadenas de los pezones, pero estoy viendo allí unas maderas, póntelas y túmbate sobre la cama boca abajo, a ver como se te ve así.

Disparada lo hizo, tardó unos segundos en soltarse del columpio y colocarse las maderas, el aparato era complejo, pero se tumbó sobre la cama y se lo terminó de colocar. Era una especie de cepo para la cabeza y las manos, pero que al quedar atado, otro madero aprisionaba sus pechos. Até la cadena a un gancho del artilugio, y con cada mínimo movimiento le tiraba de los pezones, luego puse la almohada en su vientre para levantarla la cadera y até sus piernas con unas esposas, una a cada lado de la cama a unas varillas, dejándola totalmente abierta de piernas.

La imagen os la podéis imaginas, una mujer voluptuosa y exuberante, casi a 4 patas,  con el consolador dentro de su vagina,  y el ano rojo abierto goteando flujos y semen, sin poder cerrarse de piernas sujeta por los tobillos, totalmente expuesta e inmóvil por un cepo que la presionaba los senos,  reteniéndola del cuello y las manos. Le metí el consolador de nuevo en el coño, se le había medio salido, y admirando el agujero que se cerraba en su ano, la volví a arremeter, totalmente ofrecida y estirada de piernas, como las gimnastas en el suelo. Recibió mi ira en su culo, la azotaba sin parar cada vez que se corría, que era muy a menudo, sin soltarla,  sin dejar de destrozarla el culo.

Empezó a no disfrútalo,  a sufrirlo, a desear que acabara, pero era justo lo que quería, aguantar mi violencia, deseaba ese dolor, y yo se lo di,  le reventé en culo hasta que se desmayó, allí paré y la abofeteé la cara hasta despertarla, para seguir abriéndola. Madamme rogaba por su vida, lloraba y pedía clemencia, pero sus ojos  decían otra cosa, pedían más, y su cuerpo se hacia fuerte contra mis penetraciones, goteando fluidos sobre la cama. Para cuando me corrí en su recto de nuevo, la mujer balbuceaba cosas sin sentido,  estaba ida y rendida, destrozada, pero sonreía. Era lo que quería, le gustaba sentirse arruinada, al sacarme la polla vi sangre mezclada con fluidos y semen.

-ZEUS: eres una buena mujer, y ahí tienes lo que has pedido, tu dios te ha reventado y suerte tienes de que deba irme, por que si no seguiría toda el día…… – mentira, estaba exhausto -…..mándame todo de la modelo cuando lo tengas, y si todo va bien, esta será la última vez que me veas -  pensé en Ana y el piso por 1º vez, por 1º vez Raúl apareció y tomó una decisión que Zeus no quería tomar.

-MADAMME: no……yo quiero……….no………..no vayas…………..soy yo……..no……..- la quité unas ataduras, y la dejé en ese estado, ida y convulsionando lentamente, como pequeñas descargas eléctricas que la hacían doblarse sobre si misma.

Me di una rápida ducha y le dije a una de la moles que Madamme había ordenado que me llevaran a casa. Así lo hicieron, una vez cerca de casa les dije que pararan, ya me acercaría andando, sin que ellos vieran dónde vivía. Descansé todo lo que quedó de tarde, pensé en mis próximos días hasta el viernes, mi cita con la modelo.

El lunes Ana ya estaría aquí, y tenía muchas mujeres a las que saciar antes de “retirarme” del mercado. Llamé a mi Leona, y quedé en ir a verla por la tarde del día siguiente, por la mañana quedé con Yasmine a tomar un café, habían vuelto ella y su hermosa madre Eleonor, del eterno viaje con su padre, me contó que estaban ya en casa pero su padre se había quedado por temas de negocios en brasil, me dijo que no había ido nada bien, y que discutieron mucho en el viaje.

Se me ocurrió una buena despedida de mis colombianas,  acompañé a Yasmine a su casa, dónde estaba su madre, y según entré se desnudó avisando a su madre, buscando unos tacones grandes. Su madre bajó sonriendo y desnuda, dios, hacia mucho que no las veía, estaban buenisimas, el culo de Yasmine pedía guerra, y las tetas de Eleonor aún más. Comentamos algo del viaje de pasada, pero yo no tenía tiempo, las azoté un par de veces recordando que yo era su macho, me las llevé a la piscina y allí me ventilé a las 2- Yasmine estaba desentrenada y apenas me duró una hora por el coño, pero Eleonor venia de intentar recuperar a su marido, bien entrenada, la tuve que abrir el culo y activar a la bestia de Zeus para sacarla gritos de dolor y pasión. En menos de 30 minutos cayó agotada e ida, era la 1º vez que sintió a la bestia en su interior, para entonces ataqué de nuevo a Yasmine, ya recuperada, y la di su parte de bestia por el culo. Era una gozada reventar contra esas nalgas  jóvenes, y la hice comerle las tetas a su madre hasta sacarla aquellos pezones enormes que  me volvían locos. Estuve toda la mañana follándomelas sin parar, sacando a la bestia de vez en cuando y haciéndolas rogar por piedad, pero siempre que terminaba con una la otra le cogía el relevo. Me corrí comiéndole las tetas a la madre, estaba deliciosa, y gritaba guarradas sobre lo mierda de su marido y que yo era mucho más hombre que él. Terminamos los 3 en la cama de matrimonio,  fornicando como conejos en celo, Yasmine fue la 1º en irse al país de nunca jamás, fue  Eleonor la que recibió por las 2, sacándola orgasmos que la partían por dentro, y matándola al final  sacando a la bestia. Salió una fuente de chorros y gritos de Eleonor, que llenó la cama antes de caer ida  junto a su hija, ambas inconscientes y medio dormidas,  con espasmos musculares, y sonriendo de manera perversa. Yo aún tenía aguante, pese a disfrutarlas, mis últimas sesiones con Madamme me dieron unas ansias desorbitadas.

Comí en casa de las colombianas mientras dormían en la cama, y me fui sin despedirme, dejando una nota,   ya sabrían de mi. Me fui directo a casa de mi Leona, que me esperaba desnuda,  se me subió encima y me pidió que la destrozara como las últimas veces, las que me ayudaron a  domar a la bestia. No necesitaba pedirlo, iba para  ello, su lengua y su boca me la puso dura, y abriéndola por el culo la destrocé 3 horas. Si con las colombianas me coartaba, no lo haría con ella, corté la cadena y dejé que la bestia se divirtiera con aquel trozo de carne que tenia delante. Mercedes tuvo suerte de mi sesión matutina con madre e hija, si no, hubiera sido mucho más cruel con ella. La terminé por dejar agotada y muerta en la cama, dormí con ella para volver a follármela de forma animal al día siguiente, no sabia si me iba a despedir de ella también pero me aseguré de que fuera la follada más animal que pude darla. La desgarré por dentro, y notaba como ella se derretía, la empotraba contra la pared y la clavaba mi polla hasta el fondo sacándola alaridos que los vecinos oían, fui la fuerza de la naturaleza que sabia que ella soportaba a duras penas. Al acabar,  se sostenía en pie de milagro, la dejé irse a trabajar al instituto, pero casi no podía ni con su alma. Llamé a un par de chicas más que andaban detrás de mi, y me las tiré en una orgía en casa de la Leona, con ellas no tuve ni que sacar a la bestia, no me duró ninguna más de 30 minutos a un ritmo normal, las que se dejaban por el culo las hundí hasta el fondo desgarrando y haciendo sangrar a más de una. Tanto yo, como ellas, quedamos satisfechos, era una buena forma de acabar. Me fui dejándola una nota a Mercedes, igual que a las colombianas,  pidiéndola disculpas por las chicas de la habitación que se encontraría al volver a casa, y que seguiría siendo mi Leona,  siempre que quisiera serlo.

 

Kira – Acecho.

Ya estaba en paz, despedido de todo, de mi vida de cazador, de mi vida de prostituto de lujo y de mis chicas que tanto placer me habían dado, y habían sentido gracias a mí.  Me preparé para una última fiesta, una última cacería, la modelo que Madamme me preparó para tener que “violarla”, de forma consentida, todo un fin de semana. Busqué y leí en Internet videos y relatos de violaciones, (Así descubrí ciertas  páginas), quería información, trucos e ideas.

Es asombroso lo fácil que resulta encontrar información de algo delictivo, y que está tan socialmente repudiado. No es algo que me haya gustado ni haya planeado nunca, pero supongo que como todos los hombres, he fantaseado con ello, sobretodo antes de la operación, coger  a una chica mona, llevarla a un lugar apartado y obligarla a follar contra su voluntad, pero yo no soñaba con la violación, no me atraía forzarla,  si no que al comenzar la mujer se diera cuenta de lo buen amante que era y terminara dejándose, la violación era solo para romper el hielo, ese hielo que por entonces me parecía infranqueable, pero jamás pasé de pensamientos tan sucios. Ahora, tenía que hacerlo, y pese a que fuera consentido, un escalofrío de conciencia repasaba mi cuerpo.

También busqué información sobre ella, la modelo, llamémosla…..Kira. Había estado muy ocupada desde que fichó por una gran firma, antes había hecho trabajos esporádicos, pero también me sorprendió la facilidad con la que se puede saber un montón de cosas de gente con cierta fama. El rumor sobre los abusos de su padre, y el manager, no era tan secreto, aunque encontré referencias similares a casi todas las modelos que encontré, o todas pasaron por lo mismo o era un rumor extendido entre el gremio. Era una autentica belleza, un mujer despampanante, pasó de ser modelo infantil a una mujer de bandera, medidas perfectas 90-60-90, y en alguna web o paginas rosa, vi fotos en top-less o descuidos con minifaldas, sesiones de fotos,  cosas así, todo, pero ninguna referencia a novios o pareja. Madamme me mandó la dirección y la hora del viernes, todo estaba listo.

Llevé una mochila, con algo de ropa y algunas cosas que podría necesitar. Me presenté 3 horas antes de la indicada, estudié la zona, revisé cámaras,  incluso llevé algo de propaganda para meterme en el portal sin llamar la atención, me fue inútil. Era un chalet a las afueras, solitario y alejado,  estudié la distribución, incluso me asomé por encima  de la verja de su jardín, pensé en que zona seria mejor atacarla y como hacerlo sin llamar la atención de nadie. No seria difícil, eran chalets muy alejados unos de otros. Observé el dispositivo de seguridad, la alarma, tenia que esperar a que la desactivara para actuar, pero debía hacerlo antes de que cerrara la puerta, si venia en coche tendría que meterme detrás de él al abrir la verja del garaje y atacarla al abrir la puerta del chalet. Amagué e hice tiempos, de cuanto tardaba desde x lugar a la puerta o de x sitio a la verja del aparcamiento, lo tenia todo calculado, incluso me sentí extrañamente entrenado para la situación.

Me quedé agazapado detrás de unos arbustos  a la espera, la sorpresa llegó cuando se presentaron un par de coches y camionetas de agencias de noticias, “Paparazzis”, eso me podía acarrear problemas, no podía abordarla con 10 periodistas en la puerta. Pensé en llamar y cancelarlo todo, no podía hacerlo con ellos allí, pero Zeus volvió a escena. Me coloqué una gorra hacia atrás, una cinta que llevaba para las llaves me la colgué al cuello y le puse un bono de transporte público dado la vuelta, con una cámara de fotos que me llevé. Salí tranquilo y me dejé ver, daba el palo como fanático o admirador perturbado,  más que como periodista, y me preguntaron de dónde era, solté alguna de las web donde había visto fotos de Kira, y pareció colar, de hecho hasta me felicitaron por los logros de alguna de las fotos robadas  de la web de otros personajes. Era todo muy falso, se notaba que me adulaban para soltarme la lengua por si tenía noticias frescas.

Por lo que yo sabia, esa no era la casa de Kira, si no un chalet de alguien que se lo prestó para ese fin de semana. Devolviéndoles el favor, les sonsaqué a los reporteros que alguien de la agencia de modelos les vendió la información del lugar, tácticas habituales, pero era información que solo sabían unos pocos. Me preguntaron como la conocía yo, me vi algo pillado, y gané tiempo preguntado si aquel coche del fondo era ella, se pusieron como locos a grabar y pedir paso en directo a las TV, falsa alarma, me lo había invitando. Luego les respondí que tenía algo comprometedor contra la agencia de modelos, se me echaron encima como buitres acosándome para que les dijera el qué, aludiendo al compañerismo y al buen rollo, pero me negué fingiendo soberbia. Me hizo mucha gracia como los tenía a todos comiendo de mi mano con solo decir palabras falsas. Por desgracia mi madre se tragaba esos programas de media tarde, programas rosas hablando horas de si a tal famoso se le cae un diente o si a tal famosa la duele un pie, de más joven lo miraba con ella, o lo tenia de fondo haciendo deberes, siempre me parecieron escoria, y ahora que los tenia delante, más, eran basura que se tragaba cualquier bulo, y eso me dio una idea.

Comencé a inventarme historias, como que a tal modelo le pasaba esto, o que  tal agencia me había dicho no se qué, y a los pocos minutos hacían conexiones en directo soltándolo como verdades inamovibles. Me separé fingiendo una llamada, y pese a que me dejaban de lado,  notaba sus miradas clavadas en mí, suponían que si yo estaba allí, era la mejor conexión con la noticia. Me aparté lo suficiente para hacer una llamada.

-MADAMME: dime, ¿Algún problema?

-ZEUS: unos 20 en realidad, esto está lleno de periodistas, me he hecho pasar por uno de ellos pero nos los tenemos que quitar de encima si quiero actuar.

-MADAMME: mierda, ¿Como se han enterado del lugar?

-ZEUS: por lo visto a alguien de la agencia le gusta más el dinero que la intimidad, eso ahora no importa, lo que interesa es que los tengo comiendo de mi mano, se creen que tengo hilo directo con alguien, y se tragan lo que les diga, tengo que darles algo para que se vayan de aquí.

-MADAMME: te escucho.

-ZEUS: busca en tu catálogo a una chica de las tuyas, que de el pego como Kira, haz que se vista como una de esas famosas, con gafas grandes y bien tapada para que no de el cante, mándala a alguna cafetería lejos de aquí, sácala unas fotos de refilón, sin que se note el cambio, y mándalas a alguna agencia de noticias anónimamente, yo me los trabajaré aquí para que se lo traguen, y hazlo rápido, falta poco para la “hora 0”.

Según colgué, pensé fríamente, y volví al grupo. Estaban atentos de mi llamada, puse cara de decepción, al instante me preguntaron, me hice de rogar pero al final les dije que lo del piso era información falsa, que nos la habían colado a todos, era un bulo para dejarla irse a su casa tranquila, y hasta que la habían visto en una cafetería de la otra punta. Se rieron de mí, se mofaron por que me habían engañado, y ellos tenían información de 1º mano de que ella acudiría a esa dirección. Aún así, llamaron por teléfono y preguntaron a sus fuentes, en realidad nadie la había visto desde hacia horas,  y se quedaron en su sitio, volviéndose locos con cada coche que pasaba, siendo todos falsas alarmas. A la media hora les empezó a sonar el móvil a todos, mensajes y llamadas, las fotos de una mujer que se parecía a ella en una cafetería les estaban llegando a todos, eso, y mis palabras, bastaron. Con una prisa descomunal empezaron a recoger e irse, quise subirme a alguno de los coches, pero como ratas que son, me decían que me buscara la vida, y con sorna me  agradecieron el soplo, se iban riéndose a carcajada limpia mientras yo fingía desesperación, cuando me estaba tronchando de todo aquello por dentro. Llamé a Madamme.

-ZEUS: ha colado, gran trabajo.

-MADAMME: gracias, pero en cuanto lleguen y la vean sabrán que no es ella y volverán a la casa, no podemos dejar que estén fuera mientras montas el numerito.

-ZEUS: cierto, habla con tu chica, dila que cuando les vea llegar se tape la cara y se suba a un taxi, que no la vean la cara de cerca, una vez en el taxi mándala a la casa de verdad, y que repita el proceso, entrando en la casa que se tape, después solo tiene que quitarse el disfraz y salir tranquilamente como una vecina más. Se quedarán a las puertas de su casa vacía todo el fin de semana.

-MADAMME: dalo por hecho.

Di un par de vueltas a la finca, más lejos y más cerca para asegurarme  que no quedaba nadie con una cámara con lente de gran alcance, si fuera cosa mía, yo lo hubiera hecho, pero por lo visto esa escoria no tenia presupuesto para ir dejando gente “por si acaso”.

Retomé la situación, guardé mis trastos,  me coloqué un pasamontañas en la cabeza, y me escondí detrás del seto, mi corazón se aceleraba con el paso de los minutos, me sudaban las manos y estaba nervioso, cada coche que pasaba casi me daba un vuelco el corazón, hasta dudé de mi capacidad de resolución, pero eché rodilla a tierra, me calmé y dejé que Zeus se ocupara de esto. Sería un cabrón peligroso, pero Zeus tenía los nervios de acero. Por fin, sobre la hora acordada, pasó un coche y se paró enfrente de la casa, se quedó allí, parado, unos segundos mientras la verja del aparcamiento se abría, y una vez abierta se quedó parado, no sé si queriendo darme tiempo, o si por que tenía dudas. No podía ver bien desde mi posición el interior del coche, parecía haber solo el conductor, que al final aceleró despacio y entró al garaje, sabia que tardaría 7 segundos en colocarme en la puerta, y que tendría que girar el coche hacia la derecha, eso le dejaba un ángulo muerto al aparcar que tendría que aprovechar antes de que saliera del coche. Pasó el utilitario por la verja, y eché a correr bajando el pasamontañas, llegué apurado cuando se cerró la verja, pero aún así me dio tiempo a pensar 1 segundo antes de entrar, ese segundo casi me cuesta un disgusto,  por los pelos entré y me puse agachado detrás del coche, siguiendo su maniobra hasta que aparcó. Aprecié mejor el interior, solo había el conductor, y vi una melena rubia, “Es ella”.

Se quedó unos segundos con el motor en marcha,  luego otro minuto con el coche apagado, yo no quería que me viera, así que no sabía si dudaba o  me daba tiempo  actuar, y no podía asomarme a mirar. La puerta de su casa quedaba de su lado, así que según salió, y caminó, yo me moví para quedar siempre en su ángulo muerto. Podía adivinar su posición al verla los pies por debajo del coche, se bajó y  se quedó parada, veía unos bonitos pies metidos en unos zapatos de tacón dignos de la inquisición, ya que eso solo podía generar dolor, y el terreno de gravilla no ayudó a su andar. Se dio la vuelta y fue a la puerta de la casa, hasta la zona de un camino de cemento. Allí me asomé con cuidado y vi su caminar, era modelo, sin duda, “Vaya manera de menear el culo”, que estilo y que elegancia. Su cabello rubio caía suelto hasta su cintura, liso, en un brazo doblado llevaba el bolso y una chaqueta, en la otra mano jugaba con las llaves. El torso lo cubría una camiseta de mujer, azul,  de tela fina y reflectante, muy ajustada, y de remate una minifalda rosa, con algo de vuelo, que apenas la tapaba el culo, desde mi posición agachada pude admirar su ropa interior, la parte abultada de su coño, y al subir 2 escalones de la entrada,  un tanga rosado que la separaba las nalgas. Sus andares casi me hacen olvidarme de por qué estaba allí, reaccioné a tiempo mientras intentaba abrir la puerta de su casa y me arrastré hasta la parte de los escalones, detrás de una planta, muy cerca de ella, casi la oía respirar, pero no me veía, yo a ella si por los huecos de las hojas de la planta. Kira abría la puerta lentamente, lo hacia de forma torpe y adrede, esperando que pasara algo, abrió la puerta y sonó la alarma, me asusté un poco pero la vi abrir la tapa del teclado, marcando el número de desactivación, que anoté mentalmente, y esperar, recibió el aviso de la centralita pidiéndola la palabra clave.

-KIRA: pradera

-CENTRALITA: muy bien, disculpe la molestia y tenga usted un buen día - sonó el teclado y se puso todo en verde. Kira  se quedó parada con la puerta abierta, se dio la vuelta y se puso a mirar buscando algo, o ha alguien, me quedé inmóvil.

-KIRA: pues nada, otro que se raja, otra vez será, al menos tengo el finde tranquilo - estaba claro que creía que me había cagado,  y no lo iba a hacer.

Se dio la vuelta y fue a entrar en la casa, yo pegué un salto y me puse detrás de ella, no me oyó, así que se dio la vuelta para cerrar la puerta, y entonces vio mi corpulencia a menos de 1 metro de ella.

Se sobresaltó y su 1º instinto fue cerrar la puerta al verme con el pasamontañas, puse el pie mientras ella intentaba cerrarla, al 3º intento le di una patada a la puerta que la abrió del todo, golpeándola y tirándola al suelo. Su cara era de autentico pánico, ya se había dado por rendida creyendo que no pasaría nada, y mi sorpresa la abrumó. Trató de ponerse en pie pero los tacones no la dejaban, se dio la vuelta gateando, dejándome una visión de su culo al aire de primera, trataba de huir torpemente mientras cerré la puerta, caminé despacio hacia ella, dejando que el pánico entorpeciera más sus movimientos. La alcancé pasado medio pasillo, la agarré del pelo de la cabeza y tiré de él, se había sacado el móvil del bolso, pero de los nervios ni lo había desbloqueado, se lo cogí y lo estampé en mil pedazos contra la pared.

-ZEUS: ¿A quien querías llamar zorra estúpida?

-KIRA: ¡por favor, yo no, déjeme! -  ponía las manos en posición  defensiva, tratando de calmarme, pero sonreía pensando en que, por fin, alguien la iba a dar lo que pedía.

-ZEUS: ¿Dónde esta el dinero?...... - se le cambió la mirada y se borró la sonrisa -… ¿QUE DÓNDE ESTÁ EL PUTO DINERO? - quería confundirla, que pensara que era real, que no buscaba violarla,  si no robar.

-KIRA: ¡No…….no lo sé! No es mi casa, no sé si tienen o no, por favor….- la levanté de los pelos poniéndola en pie, la hice caminar,  sujetaba mi mano para que no la hiciera daño.

-ZEUS: vamos a dar una vuelta por la casa,  y me vas a decir dónde esta el puto dinero……- lo hicimos, la zarandeaba y la amenaza con golpearla, pero ya estaba suficientemente horrorizada,  el no saber si era real o no la tenía confundida, repasé cada habitación rompiendo teléfonos fijos, revisándola el bolso, y mirando por las habitaciones, suplicaba que la soltara, que me daría lo que llevaba en el bolso, pero no la hacia caso - ……¡¡Me cago en tu  puta madre, aquí no hay nada!!

-KIRA: ya se lo dije, no es mi casa, me la han dejado el fin de semana, suélteme por favor, le daré lo que llevo encima y se podrá ir.

-ZEUS: ¿Te parezco un ratero de poca monta? Ya he mirado tu bolso, y 400€  no es botín suficiente, quiero joyas, TV, lo que se pueda sacar de esta casa de ricos.

-KIRA: aquí no hay nada de valor, solo estamos nosotros, por favor coja lo que quiera y se podrá ir………- estaba temblando y cada vez que tiraba de su pelo la veía suplica en su mirada, estaba muy confundida.

-ZEUS: mira, más te vale que saque una buena tajada, por que si no me enfadaré, y no quieres verme enfadado, te voy a atar a ese radiador, y voy a poner esta casa patas arriba, como no encuentre nada vendré a por ti, y te haré daño, ¿Entiendes?

-KIRA: ¡Si, pero por dios, no me haga daño! Soy modelo, puedo pagarle mucho más,  déjeme que salga y vaya a un cajero…- la solté un bofetón.

-ZEUS: puta de mierda,  ¿Te crees que soy imbécil?, No vas a salir de aquí, ya me has dicho que tenemos todo el fin de semana para nosotros solos, y me lo voy a cobrar de una forma……….- la metí  mano en el culo-……. o de otra, modelo - lamí su cara de forma grosera.

-KIRA: ¡No, no por dios, suéltame desgraciado, no me toques! - la solté otro bofetón.

-ZEUS: deja de gritar o te arranco el tanga y te lo meto en la boca para después cerrártela con cinta - se hizo el silencio al instante, sollozaba y me miraba tratando de adivinar, realmente no sabia si era el juego o no, había logrado eso, sus maravillosos ojos azules me conmovieron, o lo hubieran hecho si no fuera Zeus ene se momento.

Cogí unas bridas que llevaba en la mochila, la tiré al suelo y la até de pies y manos, dejándola atada al tubo del radiador. Me moví por toda la casa, haciendo más ruido que rompiendo cosas, dejándola pensar, y me eché una abundante cantidad de la colonia que me había indicado Madamme, la que usaba su padre.

Ya había jugado lo suficiente, su mirada era de pánico absoluto, y quería tranquilizarla,  hacerla saber, sin decírselo, que era un juego. Volví cabreado, enfadado moviendo los pesados muebles y sofás delante de ella, haciendo una exhibición de fuerza para amedrentarla, cuando le di la vuelta al sofá de 3 piezas de una brazada  su cara era de horror. Se encogió sobre si misma, se hizo una bola sin querer mirarme, totalmente sobrepasada. Me acerqué a ella lentamente, notando como con cada paso se pegaba más  al radiador, la quise levantar la mirada pero hacia fuerza para no hacerlo, temía ver algo para reconocerme. Me pegué a ella y la agarré la cabeza para que me mirara, sus ojos azules estaban abiertos, cristalinos y húmedos, algo rojos de haber llorado, o de estar a punto de hacerlo, entonces lo notó, olió la colonia, inspiró fuertemente para reconocerla y cerró los ojos, se tranquilizó al entender que era yo, y no otro cualquiera, y a la vez noté como su cuerpo se excitaba. Fue un atisbo, su lenguaje corporal cambió ligeramente, sacó un poco la espalda del radiador, y  dejó su cuerpo relajado sobre el suelo en vez de estar en tensión.

-ZEUS: aquí no hay nada de valor, nada,  salvo tú…….- la agarré del pelo, una cosa es que supiera que era un juego y otra que dejara de jugar, abrió lo ojos de nuevo pero su mirada era de calentura, de hecho notaba como se frotaba los muslos uno contra otro - ….nos lo vamos a pasar bien este fin de semana, pero estoy harto del pasamontañas, y como no puedes reconocerme te voy a poner una cinta en los ojos, y no te la quitarás en todo el fin de semana, si lo haces te mato, ¿Me entiendes? - asintió relamiéndose.

Saqué de la mochila una cinta preparada, la eché unas gotas de la colonia y se la puse, la até fuerte y me aseguré de que no viera nada, la solté del radiador y la cogí de la atadura de las manos, la levanté los brazos y la pegué contra una pared, de frente a mi, totalmente estirada sobre la pared, casi colgando. Saqué un cuchillo, uno de estos de metal sin filo, de los que se usan para untar la mantequilla o cosas así, pero ella no lo sabia, y al notar el frío acero sobre su mejilla se estremeció.

-ZEUS: bien, ahora que he captado tu atención, voy a poner unas normas, si te portas bien, me iré el domingo, te dejaré libre y seguirías con tu vida, esto no habrá pasado, pero si no las sigues te cortaré esa bonita cara, y el cuerpo, de forma que no volverás a trabajar, ¿Entiendes, modelo?... – asintió - …..bien, la 1º norma  es que no gritarás a no ser que yo te lo pida, si entiendo que  pides ayuda de algún modo, te cortaré……. - jugaba con el filo del cuchillo por su cuello - ……la 2º norma es que vas a ser mi puta, harás y dirás lo que yo quiera, y no tendrás opinión ni personalidad,  eres mi zorra y harás lo que yo quiera que hagas, o te cortaré ……- le rompí el 1º primer botón de la camisa en el escote -…..  si sigues esas 2 normas sencillas, todo irá bien, pero si tratas de huir, si tratas de pedir ayuda,  si te quitas  la cinta de los ojos, me desobedeces o simplemente no me obedeces inmediatamente, ¿Adivina que te haré……..?

-KIRA: me cortarás……- le rompí el 2º botón de la camisa azul reflectante, atisbando ya su sujetador, su respiración se agitó, su precioso escote subía y bajaba de forma sensual.

-ZEUS: bien, puedes hablar y pedir cosas, te dirigirás a mi como “amo”, si quieres ir al servicio o si necesitas comer o descansar puedes pedírmelo, yo decidiré si te portas bien  y mereces ser atendida, y ten por seguro que te voy a violar, y vas a saber lo que es un hombre de verdad….. - le pegué mi polla semi erecta en el muslo, eso la hizo morderse el labio, eso y oler la colonia en mi y en la cinta, podía notar como se contoneaba para frotarse los muslos -…….. ¿Probamos si lo entiendes?

-KIRA: si……..amo - la rompí otro botón dejando ya su sujetador rosado a la vista, quedando solo 2 uniendo la camisa en su vientre plano.

-ZEUS: bien, me gusta que las zorras como tú colaboren, por que vas a colaborar.

-KIRA: si, amo - la metí el cuchillo en la boca asustándola.

-ZEUS: no era una pregunta, vas a colaborar…………- le metí la mano debajo de la falda notando gotas de fluidos cayendo entre sus muslos -…….. y veo que te gusta jajajajjaa, eres una zorra como todas las demás ……- la rompí con las manos la camisa  del todo, dejándola con el sujetador bien a la vista, como si fuera una chaqueta,  “Que preciosidad de tetas”, se merecía cada € que cobraba -…… dilo, admítelo, que eres una zorra y te gusta esto.

-ZIRA: lo soy, amo, soy una zorra, como todas, y me gusta ser así - su cintura se contraía, sentir mis dedos en su coño la encendieron.

-ZEUS: así es, y yo sé como tratar a las zorras, ahora mismo te voy a dar una ducha fría, no vas a disfrutar hasta mañana de mi rabo partiéndote, y lo vas a disfrutar no lo dudes, ahora te voy a dejar toda la noche atada a la barra de la ducha, y por tu osadía de contestar sin ser un pregunta,  te voy a dejar con los tacones puestos, vestida,  empapada, y vas a estar toda la noche así, ¿Estás conforme?

-KIRA: si, amo.

-ZEUS: genial, por que me da igual que no lo estés.

La bajé los brazos y como si fuera un perro, dando saltos por la brida de sus tobillos,  la llevé a uno de los baños, la dejé orinar,  delante de mi, su torpeza me ponía a 100, la metí en una  ducha, resbalaba con los tacones, y la quité las bridas poniéndole unas esposas con terciopelo, para no dejarla marcas, en muñecas y tobillos. La levanté los brazos y se los pasé por la barra de la ducha, la esposé y me aseguré de que fuera seguro, encendí la ducha, dejé el agua tibia y  coloqué la alcachofa en su soporte, mojándola la cabeza y todo el cuerpo, empapando su camiseta,  su sujetador,  la mini falda y sus piernas,  destrozándola los zapatos, serian caros supongo, y me puse de pie a su lado, viendo como no paraba de escupir agua que le caía en la cara.

La visión de una mujer mojada siempre me la ponía dura así que me hice una paja allí, delante de ella, sin que  supiera si estaba  o no, la veía tratando de forcejear, soltarse o moverse, pero estaba inmóvil de pies y manos, cada intento la costaba un resbalón y trataba de alzarse de nuevo…….no me siento orgulloso pero reconozco que me corrí como un animal ante esa visión tan desvalida, tan frágil y tan erótica.

Después me fui al salón, recogí mis cosas y me instalé en una habitación, me di una buena ducha en otro baño. Estaba empapado en sudor, me fui a vestir, pero pensé. ¿Por qué?, así que me quedé en pelotas, y no me puse nada más en todo el fin de semana. Se hacía tarde y me fui a  acostar, echando un vistazo a Kira antes y durante la noche. Me llevé un portátil y pasé gran parte de la noche riendo y viendo películas o series, haciendo ruido para hacerme notar y que me oyera de lejos, o pasándome en silencio para ver que hacia. Con los tacones era bastante alta, así que le dio para darse la vuelta y sentarse en el borde de la ducha, pero con los brazos totalmente estirados, las últimas veces la vi dar cabezadas, se dormía de pie, se le cansaban las piernas, “No es mi problema”,  así que me fui a dormir cerca de las 4 de la mañana.

 

Kira - Sentimientos perdidos.

Me desperté sobre de las 10, últimamente con 6 horas de sueño rendía todo el día, y no quería tener a Kira  más tiempo así, hice algo de ruido para que ella notara mi presencia con mi rutina higiénica y me fui a por ella. La visión era de película de miedo, ella estaba colgada de los brazos,  doblada de las piernas y con el agua corriendo por todo su cuerpo, movía la cabeza así que estaba despierta, pero no podía ponerse de pie.

-ZEUS: buenos días zorra, te has portado bien, así que te voy a quitar las esposas, y te voy a dejar que te adecentes en el baño, pero estaré justo a tu lado ayudándote, no hagas tonterías por que tengo a mi amigo de metal a mano - se lo pasé por el escote.

Al soltarla las manos cayeron rendidas, la ayudé a levantarse, pese al agua tibia estaba tiritando, la quité la ropa, despegándola de su cuerpo húmedo. La desnudé despacio, dejando que se apoyara en mi, de lo contrario se caía, al quitarle el sujetador vi sus tetas al natural, mucho mejor que en fotos, tersas,  firmes y bien colocadas, con unos pezones pequeños pero tiesos del agua. La minifalda cayó a plomo al abrirla un poco la cremallera,  estaba empapada, me dejó un cuerpo perfecto ante mí, solo con los zapatos, la venda  y un tanga diminuto  de color rosa oscuro, debido al agua. Se lo fui quitando desenrollándolo por sus largas piernas, descubriendo un coño rasurado y un culo que rozaba la excelencia, era la provocación hecha mujer, me pareció que le faltaban 2 o 3 kilos para ser idónea, al menos para mi, se le notaban demasiado las costillas o los huesos de la pelvis.

Noté como se estremecía ante mis manos, la sensación de vulnerabilidad era total, y me eché gran parte de la colonia, ella lo olió y se volvió a estremecer, lo tenía que pasar muy mal cuando iba por la calle o en el trabajo y alguien más usaba esa colonia, seguro que con solo ese olor podías tirártela.

La dejé sentada en el retrete, y mientras orinaba le quité los zapatos, estaban para tirarlos, ella suspiró de placer, no sé si por el alivio en su vejiga o en sus pies. Al volver a ponerla de pie quedó sensiblemente más abajo que antes, con los zapatos casi era de mi altura, pero sin ellos le sacaba una cabeza, era alta pero yo era mucho más grande y corpulento. La dejé beber de un zumo que había en la nevera, tragó como si le fuera la vida en ello, la volví a meter en la ducha, pero esta vez yo con ella, la cogí por detrás dejando que mi rabo se notara entre sus piernas y encendí la ducha de nuevo, esta vez más caliente, y nos duché juntos.

Ya me había duchando pero puestos a sujetarla y sobarla ¿Por que no otra? Se sostenía bien, ya sin los zapatos, el zumo la dio energías, pero la apretaba contra mí mientras enjabonaba los 2 cuerpos, me pasé 1º hora repasando todo su contorno, acariciando y frotando sin parar aquella belleza de mujer, portada de revistas de moda y de lencería, en mis manos, desnuda y dócil, con solo una cinta tapándola los ojos. Cuando me centré entre sus muslos la oía gemir, y cuando le separaba las nalgas con mi mano enjabonada pude sentir como se corría en mi mano.  Llevé mis dedos  a su boca obligándola a chupármelos, con el cuchillo en su nuca, los chupó temerosa, más que por lo que le clavaba en la nuca, por lo que sentía entre sus piernas. Yo la tenía durísima,  sobresalía y se había abierto paso entre sus largas piernas. Kira jugaba,  con miedo a reprimendas,  a apretar los muslos, tuve la tentación de reventarla allí mismo, pero me contuve, dios sabrá como, me centré en el champú y su cabello, no ayudó. Con cuidado se lo saqué todo dejándoselo por fuera de la venda de los ojos,  era un rubio platino excitante, aún más mojado. Al salir de la ducha le acerqué su bolso y a tientas sacó algunos objetos de higiene personal que vi al registrarlo, delante de mi se secó de la ducha, se  cepilló los dientes y se echó crema  por todo el cuerpo, me pidió  permiso para lavarse la cara quitándose la venda, se lo negué.

-ZEUS: vamos a ir abajo, he preparado un desayuno, unos zumos y cereales con tostadas, yo voy a desayunar eso, tú me la vas a chupar,  si logras que me corra, y te lo tragas,   antes de que termine, te dejaré desayunar ……- le puse el cuchillo en el cuello -……….. pero  como noté tus dientes no se volverá a saber de ti,  ¿Has entendido?

-KIRA: si, amo.

-ZEUS: bien, me gusta verte desnuda, no te volverás a poner nada de ropa si yo no te lo mando,  me molesta no poder quitarte la venda, eres realmente guapa, no como esas modelos que viven de fotografías retocadas o maquillaje ostentoso …- era cierto-…. pero por ahora bastará. Camina delante de mi, te iré dando indicaciones, y si fallas te azotaré en el culo.

Obedeció sin más, iba palpando las paredes, le iba dando indicaciones y cuando se equivocaba o tardaba en reaccionar la partía mi mano en sus nalgas, las primeras veces gimió de sorpresa, o dolor, pero después el calor y rojez de sus nalgas se elevó, y disfrutaba,  incluso fallaba a propósito. La coloqué al lado de la mesa y la golpeé para dejarla de rodillas sobre la silla, tiré de su pelo hasta elevar el torso y me senté en esa misma silla, se apoyó en mis piernas.

-ZEUS: bien, que comiencen los juegos del hambre, te aviso, como muy deprisa, y si no haces que me corra, no solo no comerás si no que te volveré a poner los tacones y no te los quitaré.

Mordí una tostada para hacer el disparo de salida, ella palpó con sus manos hasta encontrar mi polla tiesa como una vela por culpa de la ducha, según la palpó se le abrió la boca de forma grotesca.

-KIRA: mi amo, tiene usted una polla enorme - me eché una gotas de colonia por el cuerpo.

-ZEUS: ya lo sé, no necesito de adulaciones de zorras como tú, empieza a chupar o ve pensando en unos zapatos dolorosos.

-KIRA: amo, no se si me entrará en la boca.

-ZEUS: no es mi problema, aunque si quieres, puedo ayudarte….. - le metí el cuchillo en la boca de nuevo,  tirando de su mejilla, si fuera cortante seria hasta peligroso - ……¿Ye ayudo?

-KIRA: no, muchas gracias amo,  ya me las apañaré.

Y bien que lo hizo, comenzando una masturbación a 2 manos,  besaba y chupaba la punta de mi polla, mientras yo desayunaba lentamente, la iba a dejar ganar esa carrera, y ciertamente la visión de una supermodelo con los ojos vendados agarrando con ambas manos y chupando mi rabo a duras penas, me estaba encantando.

El ritmo de sus manos iba aumentando, y la cantidad de carne que engullía también, dejaba que mi miembro chocara de lado con su cara y le penetrara hasta inflarla los mofletes, luego trabajaba mi tronco con su lengua, y al oler las gotas de colonia se volvió loca, se abofeteaba la cara con mi rabo, y no de forma cariñosa. No sé muy bien cómo, su boca se abrió tanto,  engullendo  media polla entre arcadas y babas, que estuvo 20 minutos fuera de si tragando falo como poseída hasta que me corrí en su boca. Ella cerró los labios alrededor de mi glande y dejó que la llenara de semen, cuando terminé se separó y tragó de forma clara, (Me encanta ese sonido).

-KIRA: ¿Ya me dejas desayunar papá?........... - se dio cuenta de su lapsus -…….. Digo amo.

-ZEUS: no, tranquila, me gusta esa palabra, mejor que amo, que es muy fría, llámame papa - sonrió ante mi ocurrencia.

-KIRA: está bien………..papá, después de haberte comido la polla hasta tragarme tu semen, ¿Me dejas desayunar? – lo decía contoneándose de forma sensual.

-ZEUS: perfecto hija mía, ven y siéntate en el regazo de tu padre, para que te de de comer.

Sonreía mucho, y  lo entendí,  esa mujer no necesitaba ser violada, ahora lo veía claro, no quería dominio de macho, quería que yo fuera su padre, y que su padre abusara de ella, una vez entendí eso, solo era cuestión de manejarla. La senté sobre mi regazo pegando su coño húmedo y su culo enrojecido a mi polla flácida, dándola zumo y cereales, le ofrecía de comer como si fuera mi hija, jugando con ella, Hablábamos como padre e hija y bromeábamos, con ella explicándome su vida de forma detallada y atropellada, sin parar de llamarme papá.

A mi me costó seguirle el hilo, tenía un jaleo en la cabeza de cuidado, era Raúl, siendo mi personaje, Zeus, que hacia de violador anónimo, que fingía ser el padre de una supermodelo. Me centré en ella, en cuidarla, mimarla y alimentarla bien,  jugar de forma inocente pese a que sus movimientos me la estaban poniendo dura, y ella lo notaba, ¿Cómo no podría?

-KIRA: oye papá, se que es mucho pedir, pero me gustaría quitarme la venda, se que tú no quieres pero me hace mucho ilusión, hace mucho que no te veo ……..- no sabia que hacer, ella era consciente del juego, y en el fondo era la clienta, si quería pasar de una violación a una relación con su padre,  tenia su derecho, ¿Pero me podía permitir dejar que me viera?

-ZEUS: hija, sabes que me incomoda, desde la operación estética parezco diferente…….- improvise, y probé si seguía el juego.

-KIRA: ya lo sé papa….. – una sonrisa enorme se dibujó en su cara -…..  y si no quieres no lo hagas, pero me encanta que me folles mirándome a los ojos, y quiero que me folles ahora mismo……. - su cuerpo se echó para atrás y se frotaba contra mi, poniéndomela dura hasta el punto de salir disparada entre sus muslos, mientras me besaba la mejilla -…… venga papá, solo quiero que me abras el coño como antes de separarnos, te echo de menos dentro de mi -……. sin duda la balanza de poder había cambiado, no era una dulce cría de la que habían abusado, era una despiadada mujer que obtenía lo que quería gracias a su cuerpo, o si alguna vez fue esa niña, ya no quedaba nada de ella, me recordó a Rocío, la zorra del instituto, la mujer que todo lo que creía tener era su físico, y se aprovechaba de los palurdos de los hombres que babeaban por ella, pensé en volver a mi papel de violador, de dominante, de quitarla esa idea de la cabeza, pero me llamó más la curiosidad  ver hasta que punto su padre, o su manager, abusaron de ella, o ella abusó de ellos.

-ZEUS: mira que sabes que no te puedo negar nada cuando te pones así……- asumí el papel de padre calzonazos -….. pero te lo tienes que ganar, te llevo al sofá y si te corres antes que yo te la quito, pero si me corro antes yo,  te la quedas puesta.

-KIRA: si papá, eres el mejor…….- aplaudía y reía mientras se levantaba, tanteó con las manos hasta llegar al sofá y gateó hacia  él, moviendo su culo de forma provocativa, la iba dando azotes en él mientras ella echaba la cabeza hacia atrás recibiéndolos encantada, al llegar se tumbó boca arriba y se abrió de piernas frotándose el coño mojado de excitación, era una manipuladora nata - …..venga papá, ven a follarte a tu hija.

Si era lo que quería, se lo iba a dar, el papel y la lógica me dictaban ello, esa preciosidad de mujer, una modelo que provocaba infartos a su paso, estaba desnuda abierta de piernas y masturbándose,  pidiendo que la follara como si fuera su padre, hasta Zeus tiene sus limites. Me fui a por ella poseído, me dejé caer sobre su cuerpo besándola, y jugando con sus tetas mientras mi polla cabeceaba en la entrada de su coño.

-ZEUS: joder hija mía, me la pones a reventar.

-KIRA: pues fóllame de una vez, no seas nenaza, papá.

Metí mi mano en su coño, mientras jugaba con mi lengua en sus pezones, la trabajé y penetré un poco para prepararla, y cuando lo estuvo, la empalé como un soldado ataca al enemigo, no me sorprendió que a la 1º le entró toda mi polla, de muñeca de cristal no tenía nada, era una autentica guarra de 1º nivel, y me la follé más de 1 hora así. Besándola por el cuello o los pechos, sin dejar de acelerar el ritmo de mi cadera y sacándola gritos de pasión y lujuria, la sujeté la cadera y aguanté un buen ritmo hasta empezar a notar sus espasmos, se corrió sin parar, se frotaba el clítoris mientras seguía siendo percutida.

-KIRA: ¡Joder papá! En la operación te agrandaron la polla, me estás partiendo como nunca, sigue así papá, sigue así papá, me he corrido pero aún quiero más, antes de quitarme la venda.

-ZEUS: te gusta que tu padre te destroce el coño ¿Verdad?, ¿Tu padre se está portando bien contigo?

-KIRA: si, no quiero que te alejes de mi, sigue follándome hasta que te vacíes dentro de mi, quiero sentir el semen de mi progenitor bañándome por dentro.

El sexo era más bien normalito, pero la situación era explosiva, sus palabras eran de delirio, realmente estaba trastornada con el tema de su padre. Siendo precavido me llevé la colonia y cuando estaba por reventar nos bañé a ambos con ella, ese gesto en si la volvió a sacudir el cuerpo en otro orgasmo, esa vez con un chorro de fluidos que me bañó. Metí la 5º marcha casi sacando a la bestia para terminar llenándola de semen, caí sobre ella sudando, y ahogando sus lamentos con mi lengua.

-KIRA: joder papá, así da gusto.

-ZEUS: tu padre ya no es ese mierda al que manipulabas, ahora es un hombre de verdad y te va a hacer temblar todo lo que queda de fin de semana. Quítate la venda - lo hizo, y le costó unos minutos enfocar y ver bien, tenia algo de rímel corrido, pero sus ojos azules era un espectáculo, para cuando me vio,  sonrío,  yo ya estaba tieso de nuevo y sentándome me la subí a horcajadas encima.

-KIRA: papá, la operación te ha sentado genial, pareces mucho más joven y vigoroso.

-ZEUS: lo soy, no lo parezco, y si no lo crees vas a ver ahora lo que es follar de verdad.

La ensarté entera sacándola un gemido de gloria, su forma de arquear la espalda me encendió,  bajé la cadera y  hice sitio. Kira se retorció como una serpiente, le regalé mi mejor posición y comenzando suave fui subiendo las embestidas, paulatinamente,  cogiendo mesetas de ritmo en las que la hacia temblar, se corrió varias veces mientras se movía como loca encima mía, quería llevar ella el ritmo, dominar a su padre con el sexo, pero yo no era su padre.

Saqué a la bestia y dominé a aquella yegua, aceleré hasta el máximo, hasta que el sonido de las pelvis chocando llenaba la sala y eran tan seguidos que no sabias cual era el final de uno y cual el inicio de otro, una penetración constante a alta velocidad que la abría sin parar. Ya no se movía a los 10 minutos, se agarró a mí y soportó el vendaval, con un gemido constante, solo cortado para coger aire, y para sus explosiones en cada orgasmo. Pusimos frente con frente y su mirada de azul cielo,   llena de pasión y lujuria, me calentó aún más, debía  sujetarla para que no saliera despedida con cada embestida, y cuando la electricidad de cada orgasmo que la cruzaba,  sus piernas trataban  de zafarse de mi, pero no di cuartel, estuve una hora hasta correrme otra vez, e ir parando poco a poco hasta notarme vacío dentro de ella.

-ZEUS: así folla tu padre ahora, y más vale que me respetes, aquí ya no manipularas a nadie.

-KIRA: lo que tú digas papa, ¿Si me follas así quien te puede cuestionar? Dios, estoy llena de ti, de tu semen, de tu sudor y tus babas, me siento sucia,  guarra……………… y feliz.

-ZEUS: pues vamos a la ducha, y allí te pienso abrir el culo - la di un azote para que se saliera de mí.

-KIRA: papá, con esa polla enorme no sé si me va a doler,  te la chupo otra vez y…….- la aplasté contra mi besándola y metiendo mis dedos en sus nalgas.

-ZEUS: he dicho que te voy a abrir el culo, soy tu padre, obedece.

-KIRA: si papi, como antes, me abrirás y me harás gritar de placer jijijiji….. - se fue corriendo, no entendía muy bien la relación con su padre, estaba claro que ella manipulaba, pero no era una femme fatale, solo quería hacer feliz a su padre,  y solo sabia hacerlo follando.

Cuando subí la visión de su cuerpo desnudo siendo masajeado en la ducha me la puso dura al momento, entré y me coloqué detrás de ella, besándola el cuello y dejando que mi tronco frotara su coño goteante de agua,  semen y fluidos, acariciándola un pecho con una mano.

Llevé mis dedos de la otra mano a su ano, con el agua y la excitación se lo abrí sin problemas y le metí el glande sin dificultad, al ir penetrándola es cuando noté presión,  gritos y tensión, paraba y dejaba que se acostumbrara, después volvía a penetrar su ano. Así hasta tenerla totalmente empalada, de puntillas, suspirado de presión. La dejé así hasta que sus pies se colocaron en el suelo del baño, arqueando su espalda y disfrutando de la sensación de plenitud, la agarré por las nalgas y  las separé,  notando cierto espacio, la bombeaba lentamente sacándola gemidos de gozo. Fui aumentando el ritmo hasta volver a sacar a la bestia cuando le entraba toda del tirón, eso la mató, se acariciaba el clítoris mientras yo la percutía, se movía en contra de mi cadera para sentirse  más llena. La dominé del todo, pegándola a la pared del baño, y totalmente recta y estirada sobre ella,  la violé el culo sin compasión, en varios momentos me pidió que parara o que su padre no la trataba así, pero no lo hice, fui un martillo neumático que terminó por rendirla al placer y a disfrutar de aquella sensación, Al ir a correrme apreté el ritmo y de la fuerza de las embestidas terminaba levantándola los pies de la bañera con cada una de ellas. Me vacié en su ano dándola un buen azote en el culo.

-ZEUS: así me gusta ahora,  hija mía, y voy a reventarte así toda la tarde y mañana hasta que me vaya, asúmelo ahora mientras me voy a ver la TV, cuando quieras más,  solo has de bajar y pedírmelo educadamente - me di una agua rápida para dejarme limpio y me fui al salón, dejándola confusa, tirada en la ducha.

No sabia si eso la gustaría o no, si mi forma de actuar la excitaba o la enfriaba, si me había pasado o no. 1 hora estuve viendo la TV,  esperando a que ella se decidiera, o se recuperara, la había dado bastante fuerte aunque sin pasarme. Ya era por la tarde cuando la oí andar detrás de mí, se puso enfrente y con la cara compungida me miró a los ojos con cara de niña buena.

-KIRA: papá, me gusta que me folles así, me hace más feliz que me partas con tu enorme polla, y quiero que,  por favor,  me vuelvas a abrir el culo, “por fi”- tenia preparado toda eventualidad en mi cabeza.

-ZEUS: está bien, si es lo que quieres, lo haré, pero antes vas a tener que ganártelo, ya no basta con que lo pidas.

-KIRA: ¿Que quieres que haga papi? – se mordía un dedo mientras balanceaba una de las piernas abriéndola y dejándome ver su desnudez.

-ZEUS: hazme un pase de modelos, de ropa interior, ponte unos buenos tacones y demuéstrale a tu padre que sigues siendo mi pequeña.

Salió disparada al coche, desnuda y todo, temí que se fuera a escapar, la miré desde la casa,  sacó una maleta y la metió en la casa. Me sentó en un sofá y dejó la maleta en la parte de la cocina, tenia 2 puertas así que iba, se ponía algo sexy y se hacia el paseo como modelo saliendo por una de las puertas, se paraba delante de mi y hacia poses y gestos excitantes, realmente conocía el oficio, luego se daba la vuelta y salía contoneando su culo,  elevado por unos buenos tacones,  por la otra puerta.

Me la puso dura desde el principio, los conjuntos eran de ropa interior fina y elegante, pero muy excitante, bragas de encaje, tangas minúsculos, sujetadores que iban decreciendo, ligueros, medias,  corsés, camisones y corpiños, sumados a sus hábiles y estudiados gestos. Me fui a por la cámara, que ya había usado con ella con los ojos cerrados, y la puse en modo grabación, era un espectáculo memorable, aún así me aseguré de no dejar de grabar y enfocar el sofá. Pasado un rato me harté, la tenia muy dura y sabia que solo una mujer me calmaría, y esa supermodelo inestable  con un complejo de Electra del tamaño del Himalaya,   iba a ser mi víctima. Me escondí detrás de un puerta, cuando ella salió a la siguiente,  se quedó parada buscándome, la asalté por detrás, la metí mano de mil maneras masturbándome con su trasero.

-ZEUS: has calentado a papi, y ahora te va a hacer gozar - sonrió.

La aparté el tanga que llevaba, ni se lo bajé, simplemente se lo dejé a un lado y la penetré por el coño desde atrás. La sujete fuerte y la masacré, su posición aprisionada y sus tacones la tenían a una altura perfecta para desatarme y así lo hice, no paré de golpear hasta sacarla un orgasmo que casi la desvanece.

Empapó sus piernas con sus fluidos mientras yo seguía percutiendo, sonando el “chop chop” de mi polla en su inundado coño, se apoyaba en mi brazo que la tenia agarrada por la cintura y trataba de subirse a él, ganar espacio para que mis penetraciones no la llegaran tan dentro, pero eso solo me calentó más. Kira gemía  gritando que su padre la estaba destrozando y  que le encantaba, cuando le arranqué el 2º orgasmo se dejo ir, la tuve que sujetar y dejarla a 4 patas sobre el sofá, me eché gran parte de colonia y dejé que eso la reactivara de nuevo. Entonces se la saqué del coño y la hundí en su ano, no me costó nada metérsela entera pero ella gritó de dolor, la di por el culo lo más fuerte que pude, sacando a la bestia de mi interior, azotándola sin descanso cuando notaba que me bañaba con su coño, estaba disfrutándolo como una perra, como la zorra que era, y yo también, empalar a aquella modelo me estaba volviendo loco, cada azote era un desahogo. Cuando cayó su torso al sofá, exhausta y dejándose violar el ano,  pegué el acelerón final corriéndome dentro de su ano de forma animal.

-KIRA: ¿Estás contento papi? – hablaba entre suspiros, girando la cadera jugando a sacar y meter mi miembro flácido de ella.

-ZEUS: claro que si hija, eres un regalo del cielo, y te has ganado un buen descanso, pero esta noche te voy a volver a follar.

-KIRA: claro que si, quiero que mi padre sea feliz y se sienta orgulloso de mi.

Se dio la vuelta y gateando se me subió encima, estabamos agotados pero nos besamos y chupamos por todo el cuerpo. Notaba sus espasmos al notar mi falo creciente de nuevo en su vientre, y la volví a follar por el coño de cara, clavando nuestras miradas y viendo como disfrutábamos el uno del otro. El ritmo de sus caderas aceleró, su pelvis tomó vida propia, se sacaba casi entero mi rabo y se lo volvía insertar sin descanso, se corrió un par de veces ante el grueso de mi estaca y la fricción generada, mientras no dejábamos de besarnos con lengua cuando se paraba a descansar. Al final ella no podía más y tomé yo el mando, la cogí en brazos y me levanté empotrándola en la pared,  con ella en el aire,  penetrándola hasta rendirla sobre mi, para  terminar corriéndome en su coño, bañándola entera. Kira a me cogió la cara,   se relamía de placer entre bocanadas de aire, le encantaba la sensación de que la llenara de semen.

Se nos había hecho tarde, comimos algo para retomar fuerzas y seguimos jugando como un padre y su hija, haciendo el tonto. Estabamos agotados,  nos dimos una ducha rápida juntos, casi la vuelvo a penetrar allí, pero ella jugaba a huir de mi. Nos tumbamos en la cama juntos y se me echó encima, más que de forma sensual, de forma de niña, queriendo sentir el pecho  de su padre, su corazón, su olor. Me hablaba, me decía que me echaba de menos pero que sus nuevos jefes no le querían cerca de mí, y que se sentía sola y poco querida, pero que conmigo allí todo cambiaría.

Mientras jugaba con su pelo dorado con tacto de seda,  pensaba en lo rota que estaba la mente de aquella chica, la pena que me daba, no me creía que una cosa tan bella por fuera, estuviera tan podrida por dentro. Creí que en algún momento follaríamos, pero se quedó dormida, por momentos se metía el dedo pulgar en la boca, era como un bebé,  que al sentir el latido de mi corazón se tranquilizaba, se sentía segura,  a salvo, y se acurrucaba contra mi. Nos tapé a los 2 con una sábana y mi calor corporal la sumió en un sueño dulce e inocente, tener a aquella modelo desnuda sobre mi no me calentó nada, es más, me generó cierta sensación de bienestar, el hecho de dormir con una mujer sin tener que tirármela me recordó a mis inicios con Irene, mi 1º novia, la que me dio lo que buscaba, esa paz interior que te da la confianza de otra persona en tu vida.

Casi me dormí siendo Raúl, eso se me pasó al despertar, tenia a Kira comiéndome la polla,  haciéndome un 69. Mi mala costumbre de empalmarme por las mañanas me demostró que todas las mujeres al verme así no podían resistirse a ello, ya me pasó con las colombianas o con mi Leona en varias ocasiones. La dejé a Kira hacer hasta que me corrí y se lo tragó, tuve la tentación de comerla el coño, ¿Pero para qué?, sin decir nada se volvió a dar la vuelta y se recostó sobre mi pecho.

-ZEUS: así da gusto levantarse.

-KIRA: sé que te gusta una buena mamada por las mañanas papá, y a mi me encanta chuparte esa pedazo de polla.

-ZEUS: sabes que esta tarde me he de marchar………- me abrazó muy fuerte.

-KIRA: si, pero no quiero, me siento feliz contigo a mi lado, papá.

-ZEUS: pues aprovechemos el tiempo, hagamos lo que tú quieras, pásalo bien y así recordarás este momento cuando estés triste - yo pensaba en sexo.

-KIRA: claro papa, eres muy bueno conmigo, solo quedémonos así un rato más.

-ZEUS:  bien…….- le concedí su petición, la verdad es que estaba cansado, llevaba 1 mes a todo ritmo, y la mamada me había dejado relajado, no me dormí pero si entré en ese estado de domingo por la mañana, de saber que no tienes que levantarte, y por lo tanto,  remolonear, de hecho los 2 lo hacíamos.

Estuvimos así un par de horas, fui al baño y me volví a la cama, y ella hizo lo mismo minutos después, la recibí con los brazos abiertos  pegando su cabeza a mi pecho, acariciando su cabeza y su espalda, ella solo se dejaba hacer.

Estabamos disfrutando de esa tranquilidad, ella de mi tórax subiendo y bajando a cada respiración, y yo de la sensación de su cuerpo sobre el mío, sin atisbo de erotismo. Me rugieron las tripas pasada otra hora, reímos por ello y me cogió de la mano llevándome a la cocina, allí comimos algo, mirándonos fijamente mientras nos alimentamos, casi no hacían falta palabras, de vez en cuando se echaba sobre mi para abrazarme, solo para sentir mis brazos rodeándola y mi olor. Al acabar de comer nos tumbamos en el sofá, yo detrás de ella, apoyando su cabeza en uno de mis brazos y agarrándome la otra mano con la suya,   me la pasó por encima de ella, cubriéndola, protegiéndola, haciéndola sentir segura. Al rato se dio la vuelta quedando cara a cara, dormitábamos, nos mirábamos a los ojos, y de vez en cuando nos dábamos algún beso en la nariz, la mejilla o la frente.

Mis temores se hicieron realidad, no íbamos a follar más, pero eso, aunque me hubiera gustado un polvo de despedida, me gustó, era dulce, inocente y cariñoso, cosas que llevaba mucho sin sentir, y supongo que ella también. Al final llegó la hora de irme, ella fue un lapa pegada a mi, no se separaba y jugaba a deshacer mi mochila cuando la hacia, la azoté el culo por traviesa, pero su forma de ser había retrocedido en el tiempo, era una cría de 10 años. Me vestí con dificultades, ella se propuso ponérmelo difícil, me puse rudo, serio, y entendió que aquello debía de acabar, se puso un camisón para no ir en pelotas, y me acompañó a la puerta.

-ZEUS: adiós, mi pequeña, espero volver a verte pronto.

-KIRA: adiós no, hasta luego,……….papá - se acercó y me dio un tierno, suave y largo beso en los labios, se dio la vuelta y cerró la puerta lentamente hasta que la perdí de vista. Me quedé parado en la puerta, analizando aquel fin de semana tan raro, a aquella supermodelo que pasó de querer ser violada, a ser controlada por el sexo,y terminó siendo una niña que echaba de menos a su padre.

El camino a casa fue extraño, le mandé un mensaje a Madamme, informándola de que todo fue bien y de los gustos especiales de Kira, despidiéndome con un “Hasta pronto”, que no me volviera a mandar trabajos y que, hasta que yo no lo hiciera, no se pusiera en contacto conmigo de forma alguna. No tenia intención de volver a trabajar con ella, pero nunca se sabe.

Pensaba en ese último día con Kira, camino a mi casa en el bus, en lo a gusto que estuve, no diría felicidad, todo era un juego,  pero si sentí una sensación de armonía que me arropaba, de haber encontrado en aquella casa una parte de mi,  olvidada o aparcada. Y me gustó darme cuenta de ello, de que pese a que Zeus era divertido,  excitante y peligroso, no lograba llenar ese vacío, o no me hacía alcanzar esa sensación de plenitud que rocé esas horas abrazado a aquella mujer, sin malicia ni oscuridad,  una mujer por la que pagarían millones, caerían reinos y desatarían guerras.

Estaba cansado, agotado, hastiado de todo de nuevo, volvió la sensación al salir del instituto, aquella sensación de vacío, de ser un trozo de carne sin más,  pero esta vez seria diferente. Mi “prima” llegaría pronto, y eso me iluminó por dentro, recordar que todo lo acontecido ese mes, era solo el camino, y ahora  llegaba a la meta, Ana.

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