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La noche en que me cogí a mi hermosa hermana.

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Hola a todos me llamo Miguel. Y bueno para comenzar les quiero platicar un poco sobre mi familia. Mis padres, mi hermanita, mi hermano y yo vivíamos en un casa muy pequeña de dos cuartos. En un cuarto dormían mis padres y en el otro dormía mi hermano Luis.

Recuerdo una cosa muy clara y era que yo no tenia novia. A esa edad siempre estaba caliente y recuerdo agarrar los calzones de mi madre María y masturbarme al pensar que me cogía a mi madre. Ya que mi madre esta rebuena. Bueno este todo era igual hasta que empecé a notar el desarrollo de mi hermanita Alexandra . Si mi hermanita se empezó a desarrollar un cuerpecito hermoso. Yo lo notaba por que al verla de reojo pensaba que era mi madre y en muchas me equivocaba y le llamaba “Mari”. Al voltear a verla me daba cuenta que era mi hermanita. Hasta mi padre se dio cuenta de el desarrollo de mujer de mi hermana por que hasta mi padre se confundía y la llamaba por el nombre de María.

Bueno todo siguió normal, pero no dejaba de verle los pechitos hermoso que mi hermana había desarrollado y tampoco descarte el culito parado que mi hermanita se cargaba. Pero no pensé en más sobre ella ya que se trataba de mi hermana. Aunque me masturbaba pensando en mi madre todo cambio por que ahora me masturbaba pensado en el culito de mi hermana.

Una noche cuando mi hermanito Luis, que tenia tan solo 3 años dormía en el otro cuarto. Yo dormía en el suelo y ponía unas cobijas como cama. Y mi hermanita dormía en el sillón Y a media noche, cuando esta buena la noche, me empecé a masturbar pensando en una compañera de clase que esta rebuena. Y baje el sierre de mi pantalón suavecito para no hacer ruido y no llamar la atención ya que mi hermana dormía en el sofá.

Entonces con mi mano derecha me empecé a masturbar. Y me le quede viendo a mi hermana por si llegara a despertar. Y al ver a mi hermanita mis ojos no dejaron de ver su cuerpecito hermoso. Y muchos menos notar que tenia puesto un chor y una blusa blanca para dormir. Yo me empecé a masturbar pensando en que le metía mi verga en ese culito paradito. Ya que mi hermana dormía boca arriba.

Después de un buen rato, siga masturbándome, pero en eso ya no pude mas y ya no estaba pensando normal. Ya la calentura se me había subido a la cabeza y decidir cogerme a mi hermana a las buenas o  de violarla si era necesario. Mis padres de seguro estaban durmiendo o cogiendo.

Me pare lentamente y ya con mi pantalón bajado tenia mi verga bien recta. Me hacer a mi hermanita. Con la punta de mi verga le rozaba su brazo.

-hay que rico. – Pensaba yo.

Agarre mi verga con mi mano derecha y suavemente roza mi verga en el brazo de mi hermana. Al ver sus hermosas piernas no pude aguantarme las ganas y empecé a rozar mi verga en esas piernas blancas que tenia.

Después de un ratito jugando con mi buenota hermanita. La mire a la cara y sus ojitos estaban cerrados. Decidí darle un besito. Y lo hice con mucho cuidado para no despertarla. Mi hermana no reaccionó a mi beso. Entonces pensé.

-       Hay hermanita que buena estas. Ahorita te voy a meter la verga por esa boquita tuya. Quiero que te la trajes toda.

Agarre mi verga y poco a poco la deregi hacia la boquita de mi hermana. Y le roce la boquita con mi verga. Y segui poco a poco. Pero decidir dejarle la verga en los labios de su boca para que se acustumbrara. Y asi lo hice y mi hermanita no habria los ojos.

Entonces poco a poco le empecé a meter la verga hasta adentro. Y Alexandra no se despertaba.

-Que rico- pensaba yo. Esta puta esta bien dormida que no siente nada.

Y segui con los empujes de saca y mete. Hasta que de un rempujón le metí toda la verga. Y mi hermanita no habria los ojos. Y yo segui con el mete y saca. Después de cinco minutos, la cual me olvide completamente de mi hermanita, ya que estaba viendo hacia el cielo y el placer y la sensación de tener mi verga en esa boquita, note que mi hermanita tenia abierta los ojos. Y nos miramos. Mi hermana cerro su boquita atrapando mi verga. Y cerro los ojos dándome a saber que se la estaba pasando muy bien. A mi hermanita le gustaba mi verga. Y yo segui metiéndosela y ella me la mamaba.

Después agarre más confianza y le empecé  a agarrar los pechos por encima de su ropa. Y decidí meterle la mano bajo de su blusa y note que sus chichis estaban duritas. Mi hermanita esta caliente.

Ya con mas confianza le meti la mano debajo de su chor. Y le metí un dedo en su panocha. Ella gimió. Y abrió mas las piernas para facilitar que le metiera el dedo. La panocha de mi hermana estaba mojadita. Y me dedo le entraba fácil. Decidí meterle otro dedo y ella gimió otra vez y dejo un suspiro.

-Ahhh.-

le bajo los chores y su calzón blanco. Me bajo el pantalón y me subo sobre ella. Y trataba de meterle mi verga pero no podía mi verga no le atinaba a la panochita de mi hermana.

Mi hermana se dio cuenta por que me dijo.

-Aquí va.-

y me agarra la verga y se la derige a la entrada de su panochita.

-Dale.- Me dijo ella.

Y yo le meto la verga de un solo golpe.

-Ahhhh- gritaba.

-Callate Alex que nos van a escuchar.- Le dije yo.

-ahh.. es que esta rico.-

Alexandra me agarra las nalgas y me empuja hacia su cuerpo para poderle yo meterle mas profundamente mi verga.

-Asi no pares.- Gemia mi hermana.

Y yo me la cojo por unos minutos y me corri dentro de ella.

Al bajarme la calentura me puse nervioso por que miraba como mi lechita le salía de su panochita.

Ella se dio cuenta y me dijo.

-No te preocupes hermanito. Yo tengo unas pastillas muy milagrosas que no pasa nada.

Al decirme eso me dio mas ganas de cogérmela y entonces le dije.

-Hermanita voltéate.-

-Hay que rico! Me vas a culiar?-

-Y como sabes?

-Hay hermanito no crees que no te visto ver porno en la tele?-

Y mire la televisión en frente de mi.

-yo te he visto que prendes la tele y le bajas a todo volumen para no despertarme pero me despierto fácilmente. Y después te veo darte unas pajas.

-Hay bueno hermanita. Empinate!

Alexandra se pone como una perra y me la empiezo a culear. Me gustaba el ruido que hacia cuando mi huevo chocaban con sus nalgas. La estuve culeando por una media hora hasta que por fin me salí.

Nos quedamos acostados en el sofá. Y mi hermanita me dice.

-Ya vete a dormir. Mañana seguimos cojiendo.

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