Mi nombre, bueno eso no importa, estoy casada llevo cinco años de matrimonio, con un hija y un esposo. Mi esposo en la cama creía que era bueno, pero ahora sé que no, no mentiré a veces me provocaba un orgasmo o tras veces ninguno, pero bueno o malo me trataba de complacer, pero por el trabajo o quizás porque ya tiene a otra, ya no lo hacíamos frecuentemente como antes. Yo mientras tanto cada vez me encontraba más caliente cada día, pero no podía acostarme con cualquier conocido eso me trajo muchos problemas en el pasado, tenía que buscar a un hombre desconocido, que no tuviera ninguna relación con nuestras amistades y vecinos.
Con mis noches aburridas, decidí llevarme a la cama a alguien. En una madrugada hize un viaje algo largo con el pretexto de ir a dejar un pedido, le dije a mi marido que necesitaba ir, y que iria en la madrugada para poder regresar en la tarde para hacer mis quehaceres, el de acuerdo me llevo y me dejo en la estación. Llevaba puesto unos pantalones apretados y una blusa normal, nada provocativa, mientras esperaba me fije en un hombre alto y bastante grueso sentado en una de las banquetas, yo disimuladamente me acerque cerca de el, resulto que era un hombre negro, maduro como de 43 años, enseguida me empezó a hacer platica, me conto que era de honduras y me dijo donde iba a vajar, la platica era un poco agradable y no perdia la oportunidad de decirme lo hermosa que era. De pronto el chofer aviso que ya íbamos a partir no contábamos muchos pasajeros cuatro personas conmigo y aquel negro. Yo como las demás personas me sente en los acientos cerca del chofer, mientras que mi negro se cento en los asientos del fondo.
Había pasado como dos horas y el transporte hizo su primera parada, yo me fui inmediatamente al baño, cuando Sali el negro estaba sentado en una mesa cerca del baño, cuando iba a pasar el me llamo me pidió que me sentara junto a el, yo con mucho gusto fui, nos la pasamos riendo hasta que el chofer volvió a llamarnos, igualmente todos los pasajeros se sentaron cerca del chofer y el negro se fue a sentar atrás, a mi nose que me paso, pero no me sente en el mismo asiento, me fui acentar con el negro en el fondo.
Y sin nadie viéndonos poco a poco fui abriendo mis piernas, fui dejando que la pierna del hondureño me rozara, yo me empezaba a calentar, recuerdo que el meciono que se iba a bajar en un pueblo, y que faltaba como una hora y media. Yo no podía dejar pasar asi nada mas esa oportunidad, ahí nadie nos conocía y nadie nos estaba viendo. El negro por su parte mañosamente acercaba su mano a mi pierna izquierda, yo lo fui dejando hasta que su mano agarró completamente mi pierna, sin saber que mas hacer le pedi que cerrara la ventana, mientras el la cerraba yo cruce las piernas y le sonreía, el me sonrio y disimuladamente fue agarrándome la pierna izquierda de nuevo y me lo froto de arriba a bajo, yo solo me quedaba quieta, el negro ya sabia que era lo que yo quería, giro un poco con su otra mano agarro mi otra pierna, se acerco un poco mas, murmuro nose que cosa de seguro algo lindo, eche valor y delicadamente acaricie su pecho con mi mano, el se acerco aun mas y me beso tiernamente, lo mire a los ojos y nos volvimos a besar, voltie a ver si nadie nos estaba viendo y lo volvi a besar ahora con mas ganas, coloque mis brazos en su hombro, sentí su lengua en mi boca, el negro me agarro fuertes las nalgas y me siguió besando cachondamente, le vehia la entrepierna, se veía un bulto enorme. Aunque encima del pantalón se lo empece a acariciar, uno de los pasajeros voltio un instante, pero eso me valio madres ya estaba muy prendida, hasta me abri mas la blusa se podría ver la mitad de mi brazier, el me beso y me fue bajando un lado del brazier, uno de mis pezones estaban en descubierto, el enseguida lo empezó a mamar, el estúpido me lo mordio, detuve el grito, y lo segui besando en la boca,mientras mi mano se perdia dentro de su pantalón no había agarrado algo asi rea tan gruesa, carnosa, grande y dura, el me pregunto si me gustaba su verga. Yo solo me rei y continue besándolo. El me dijo que faltaba poco para que el bajara y me dijo que si bajaría con el, yo me puse bien mi blusa y le dije que si, que nos bajaríamos aquí mismo.
Paramos el transporte, nos vajamos agarrado de las manos en medio de la carretera, en las afueras de aquel pueblo, caminamos un poco hasta que encontramos un pequeño espacio entre las rocas del cerro suficiente para que no nosviera algún caro que pasara por la carretera, “y ahí estaba una ama de casa caliente en medio de la carretera sola con un negro vergon” en pleno dia como a las nueve, sin perder tiempo me quite la blusa y el brazier frente al negro, el se quito su playera, nos besamos, fui bajando lamiéndole sus pechos, le desabroche el pantalón, saque esa tremenda verga a fuera de su calzoncillo, la frote mas fuerte mas dura se ponía, era una verga negra bien parada lo que tenia frente a mi, no aguente mas las ganas me arrodille y me lleve toda esa cosa en la boca una y otra vez., estaba muy mojada se me escurria las ganas entre mis piernas,
Por suerte me pare el enseguida me quito los pantalones, luego el blúmer, el blúmer ya lo había mojado, me froto un poco mi concha, yo empine de una vez apoyada de las rocas necesitaba esa verga pero ya, me pegaba sola la cabeza de su vega yo quería toda, trátate de moverme para tragármela toda de un solo jalon, pero el me la fue metiendo poco a poquito, solo la cabezota se sentía como toda de mi pequeño marido, me zangoloteaba ya tenia dentro la mitad, yo quería toda, le pedia que mediera toda, salvaje, que rico papi le decía, métemela, entre ahahi ahahi me fui tragando toda, una ves bien abierta el negro me empezó a bombear duro, rico, me daba tremenda nalgadas, casi lloraba de placer, chillaba como niña y era asi por que yo solo tenia 24 años y aquel negro 43, no pude mas me vine estando su verga dentro de mi, me agarro del cabello y me empezó adar dura me estaba rompiendo, pero lo mataria si se hubiera detenido, sentí un orgasmo inimaginable, increíble, después saco su verga dentro de mi cayeron gotas al suelo crei que se había venido pero era yo eran mis gotas me había corrido, nunca mi concha y yo habíamos astado tan felices, bien aguadas y huangas si, pero nunca me habían cojido asi de esa manera, lo bese de nuevo, el me alzo agarrándome de mis nalgas, yo por supuesto me meti esa verga con mis manos, me clave en su vergota lo cobalgue hasta que mis fuerzas se agotaron completamente.
Me encontraba clavada en su verga como trapo, el negro desgraciado montándome se fue saliendo poco apoco de donde estábamos escondidos hasta llevarme mas afuera, de ahí cualquier vehiculo que pasara podría vernos cogiendo, el seguía moviéndome insertándome en su verga una y otra ves la verdad no quería que eso parara, sin saber ya lo que estaba haciendo pasa una camioneta, el negro camino unos pasos para mostrar como me estaba cogiendo, estaba desnuda insertada sobre la verga de un negro, paso la camioneta, yo mas que temblar creo que vibre, una sensación sumamente cachonda, el negro por fin termino se vino dentro de mi, me baje de el y corriendo fui a recoger mi ropa me vestí, el se vistió nos paramos en la carretera a pedir un aventón para llegar al pueblo, después de un rato nos dieron un ray ya en el pueblo el hondureño se fue y me quede esperando que llegara el siguiente trasnporte para terminar con mi mandado, para llegar a tiempo a casa y prepararle una rica comida a mi querido marido.