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Jarron de porcelana

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La abuela tenía un jarrón de Porcelana China que había heredado de su Madre. Una Antigüedad de 85 y pico de años.  Lo que tenía la abuela también era una bisnieta bastante hot Marta, se llamaba. 

Marta tenía 17 años una cola parada muy redonda que con cualquier cosa que se pusiese era deseable. Unas tetas – que para su edad eran la envidia del barrio, y sus extremidades inferiores llamaban la atención hasta de los no videntes.-  Un día pasó por mi negocio a comprar unas golosinas. Yo no podía dejar de mirarla con su uniforme de la secundaria tan sexy.

Lo que también tenía Marta,- y que no sabía su bisabuela es que “la nena” es afecta al trago. La nena se tomaba “hasta la molestia”. Y fue así como nos conocimos – Hola, buenas me dijo. – Hola!! Saludé.-

Compró lo que tenía que comprar y se fue.  A la noche, ya era tarde y la veo por la calle, Tambaleándose.   En una lucha por mantenerse en pie.

-Perdón, vos no sos…-   Siiiiii dijo ella riéndose,  soy yo ! –  ¿ Tú eres tú ?  

Si, le dije. No tendrías que andar a esta hora por la calle y Asi, en ese estado. Y así vestida.  Vestía su uniforme de colegiala. Pollera corta, bucaneras blancas con tacos negros.

-No deberías estar acá.-   ¿Me llevas a casa, dijo ella con un aliento a bebida tremendo,. Enseguida le dí una pastilla de menta para disimular el aliento a alcohol.  Acompañame,  Pues como un caballero la acompañe. Me pidió que la lleve a lo de su bisabuela que quedaba a una cuadra de mi negocio.

Me invitó a pasar a la casa, yo le dije que no corresponde, igual ella me insistió y me enpujó adentro. Vives sola pregunté. No es la casa de mi bisabuela, yo vivo con mis padres. Ellos están en una fiesta y también mi bisabuela está con ellos. Yo estoy cuidando hasta que lleguen.  Pues así mucho no vas a cuidar la casa le dije.

Me dijo.  Quiero un “rapidito”- yo no me pude resistir más…  Y empezamos sobre una mesa abierta de piernas, y yo comiéndole la boca, besando sus piernas, sus tetas toando sus nalgas  hasta que ella se movió para un lado y el Jarrón de porcelana china se hizo pedazos.

Para , para… el jarrón, se ha roto. Una relíqua familiar   Si. Te van a matar , no importa.. sigue…  a esta altura la pollera estaba por la cintura y yo con los pantalones bajos.. Después de cuarenta minutos le dije, Nena… estás muy Ébria. Esto se termina acá, yo mañana debo trabajar. Me voy.   No si antes ayudarla a tirar los restos del jarrón.

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