Hola mi nombre es Juan, tengo 39 años actualmente estoy casado, todo ocurrió cuando yo tenÃa 17 años, en esa época vivÃamos en un pueblo a las afueras de Bogotá con mis padres y mis 2 hermanas llamadas Liliana y Sandra las cuales les llevo 1 y 2 años de diferencia.
A mis padres les gusta hacer asados y compartir con mi familia los cuales siempre asisten, llegaban tÃos, tÃas, primos, primas, los novios de mis hermanas era un grupo bastante grande.
Se tomaba y se bailaba, la pasábamos bastante bien, la casa es muy grande tiene 6 habitaciones y mi madre siempre las arregla con colchonetas para los que se quieran quedar a dormir.
Yo ese dÃa la pase con mi prima SofÃa, ella en esa época tenÃa 17 años también, estuvimos bailando y tomando contábamos chistes la estábamos pasando muy bien, ya a eso de las 9 de la noche nos encontrábamos bastante prendidos por los tragos que habÃamos tomado y comenzamos a tener conversaciones más atrevidas con mi prima SofÃa,ella ya tenÃa un cuerpo bien desarrollado y formado.
Juan:¿Prima eres virgen?
SofÃa: No primo no soy virgen, he tenido varias relaciones con mi novio, pero que no me siento a gusto con él, porque tiene un pene muy chiquito, yo quiero tener una polla bastante grande y sentirme llena.
Juan: Primita mi polla es bastante grande…
SofÃa: No te creo primo.
Juan:¿quieres que te la muestre primita?
SofÃa:¿Está bien muéstramela, pero en dónde?
Juan: Ve a la parte de atrás de la casa al depósito, donde mi mama guarda los enseres que no utiliza.
SofÃa  se paró y se dirigió para allá ya que en la casa estaban todos mis familiares y no podÃamos despertar ninguna sospecha, yo la seguà en seguida.
SofÃa:¿Bueno ya estamos aquà muéstramela?
Juan: Me baje los pantalones y se la mostré, en ese momento yo ya la tenÃa bastante erecta por el morbo que sentÃa.
SofÃa se quedó mirando mi pene con los ojos de sorprendida.
SofÃa: huy primito te felicito tienes un pene hermoso y bastante grande vas hacer un gran machote con las mujeres, que envidia.
Juan:¿Quieres tocarla primita?
SofÃa: Somos primos y eso está mal.
Juan:¿por favor prima tócala no más?
En ese momento ella la cogió con la mano y hay sentà un escalofrió de excitación enorme no podÃa aguantar, cogà a SofÃa y le di un beso en la boca la cual ella acepto sin ningún reparo, después le mande la mano a unos de sus senos y comencé a frotárselos, ella comenzó a excitarse y a gemir de placer, la querÃa clavar en ese instante, cuando de repente comenzaron a buscarnos para la foto familiar, escuchábamos Juan SofÃa donde están.
En ese momento me subà los pantalones y salimos de ahà sin que se dieran cuenta.
Juan:¿Prima  SofÃa te espero en mi cuarto después de que nos tomen las fotos y compartamos un rato con ellos para no levantar sospecha alguna?
SofÃa: Listo primo, quiero tener tu polla dentro de mÃ, quiero sentir una polla de ese tamaño, no me voy a marchar de tu casa hasta que me penetres esa cosa tan rica que tienes.
Esas palabras de mi prima SofÃa me excitaron bastante, estuvimos un buen rato compartiendo con toda mi familia. Â
Al cabo de una hora le hice señas a mi prima SofÃa para que nos fuéramos a mi habitación y ella me respondió con señas que sÃ.
Ella arranco adelante y yo espere unos 15 minutos para no levantar sospecha alguna y la seguà a mi habitación.
Llegue a mi habitación la luz estaba apagada y bastante oscuro solo podÃa ver la silueta del cuerpo de SofÃa acostada en la cama, en ese momento de calentura y morbo me quite la ropa y me lance a la cama sobre ella, le quite la ropa con bastante delicadeza, no pronunciábamos ninguna palabra, le comencé a chupar los senos, parecÃa un ternero mamando, ella tenÃa sus senos bastante duros una delicia, después baje mi mano en su vagina y comencé a frotarle el clÃtoris, ella a penas se retorcÃa de placer y gemÃa, ya la tenÃa bastante húmeda, ella después se inclinó y me comenzó a mamar mi pene que lo tenÃa súper erecto, yo le hice una mamada en su cuevita espectacular, no podÃa aguantar más, le quite la cabeza de mi polla la acomode en cuatro dirigà mi polla a su rico orificio vaginal y la comencé a penetrar despacio, mi verga bregaba mucho para darse paso en esta concita hasta que se la metà completamente, para ser virgen mi prima estaba muy estrecha, ella gemÃa de placer, comencé el vaivén del meter y sacar y ella gemÃa de placer estuve unos 15 minutos asà hasta que no aguante más y me vine dentro de ella, la llene de mi leche, ella apenas gemÃa y su respiración entre cortada, quede bastante exhausto y me recosté un rato con ella.
Cuando de repente escucho a SofÃa decir: ¿Camilo estuviste espectacular?
Yo no entendÃa por qué me decÃa Camilo, me levante y encendà la luz, ohhhhhh sorpresa que me llevarÃa, era mi hermana Liliana ella duras penas tenÃa 16 añitos.
Los dos quedamos estupefactos incrédulos, nos quedamos como 2 minutos mudos y con una cara de sorprendidos.
Después de eso reaccione y le dije a mi hermana Liliana ¿Que está pasando aqu�
Liliana: Eso mismo te pregunto yo.
Liliana: Pensé que tú eras Camilo mi novio.
Juan: Yo pensé que tú eras SofÃa la prima.
Liliana: Hermano que hemos hecho, hemos tenido sexo los dos, que vamos hacer.
Juan: Hermanita todo fue una confusión, por favor no nos culpemos.
Liliana: En la reunión tuve problemas con mi novio Camilo y yo le dije a él que si querÃa arreglar las cosas lo esperaba en la habitación tuya, ya que esa habitación mi mama la deja para nosotros, porque los otros familiares utilizan las demás y como la familia es de tiro largo, yo podrÃa tener un encuentro Ãntimo con mi novio.
Juan: Yo me cogÃa la cabeza no sabÃa qué hacer.
Liliana: Hermanito no tenemos la culpa fue una confusión….
En ese momento me vestà y salà de mi habitación totalmente confundido y me preguntaba dónde está mi prima SofÃa, la comencé a buscar hasta que la encontré y le dije: que te hiciste.
SofÃa: Fui a tu habitación y vi a tu hermana Liliana acostada yo me retire y volvà a la reunión familiar y tu porque te demoraste en buscarme.
Juan: Me puse a hablar con mi hermana porque estaba de pelea con su novio y le estaba dando algunos concejos.
SofÃa:¿Quiero probar tu polla?
Juan: espérame aquà ya regreso….
Me dirigà a mi habitación y le dije a mi hermana Liliana que me dejara solo en la habitación ya que vendrÃa SofÃa.
Liliana: Ve por ella que yo ya bajo……
Volvà donde estaba SofÃa y cuando veo a Liliana con mi familia le hago señas a SofÃa para que vaya a mi habitación.
Ya en ese momento ya estaba recuperado de la penosa faena que habÃa tenido con mi hermana, he iba a tener la segunda con mi prima SofÃa. Llegamos a mi habitación, nos desvestimos, la cogà y la empuje en la cama la comen se a besar con desespero lamia sus senos le acariciaba su clÃtoris y ella comenzó a chuparme el pene que ya estaba en su máximo esplendor.
SofÃa: Huy primo tu pene me huele a fluidos vaginales.
Juan: Es impresión de tuya, es por lo que estas bastante excitada.
No sé si se comió el cuento pero seguimos en lo nuestro, la cogà y le abrà sus dos piernas y me puse en posición para penetrarla en su vagina que se encontraba bastante húmeda, puse mi pene a la entrada de su cuevita y comencé a perforarla, ella gemÃa de placer.
SofÃa: Huy primo que verga tan deliciosa tienes, me estás haciendo ver estrellas, métamela toda hasta el fondo, quiero tener toda tu leche dentro de mÃ.
No puede aguantar mucho tiempo cuando explote dentro de ella derramando gran cantidad de leche llenándole toda la vagina de semen, nos quedamos uno 20 minutos hay nos cambiamos y volvimos a la reunión fue una experiencia deliciosa.
Al otro dÃa mis familiares se fueron y nos quedamos mis padres y mis 2 hermanas en casa, mis padres comentaban que la reunión habÃa salido muy bien y que todos se fueron contentos.
En ese momento nos miramos con mi hermana Liliana con cara de asustados.
Ese mismo dÃa llame a mi hermana y le pregunte que paso con Camilo y ella me respondió que habÃa hablado con él por celular y que habÃan terminado la relación, también me dijo que cuando le dijo que lo esperaba en la habitación él se habÃa marchado para su casa, me dio pesar y le dije eres muy bonita y hay bastantes hombres los cuales puedes conocer, y que lo que habÃa pasada entre nosotros dos, tendrÃa que ser un secreto que llevarÃamos hasta la sepultura y ella me dijo que no me preocupara.
Pasaron unos 3 meses, cuando de repente mi hermana Liliana comenzó a sentirse mal, mi madre preocupada la llevo al médico para que le hicieran exámenes y oh sorpresa mi mama llega a casa y nos dice que Liliana está embarazada, eso fue un baldado de agua frÃa para todos ya que ella tenÃa en ese momento 16 años.
Mi padre se cogÃa la cabeza no podÃa creerlo, yo quede de una sola pieza, mi padre se puso furioso y le dijo a Liliana que si el papa de ese niño era Camilo el novio de ella.
Liliana: No padre.
Padre:¿Liliana quién es el padre  de esa criatura?
Liliana: con Camilo termine hace rato, el padre del hijo que estoy esperando, es un chico que conocà y es extranjero, no tengo ningún dato de esa persona, ya que estaba de excursión por Colombia y las cosas pasaron muy rápido.
No podÃa creer lo que estaba pasando, me volvió el alma, respire profundo ya que estaba preocupado que le dijera mis padres lo sucedido.
Padre: Liliana debes asumir las consecuencias de lo sucedido y no la tendrÃa más en la casa.
Las cosas en casa transcurrieron con un ambiente bastante incomodo yo me dirigà a donde mi hermana y le dije: ¿Liliana quién es el papa? Â
Liliana: No se haga el pendejo Juan, pues usted imbécil, si yo me voy de casa usted tendrá que ayudarme económicamente.
Juan: No te preocupes cuenta conmigo.
Liliana: Tu sabes hermano que yo nunca contarÃa este secreto.
Paso un mes más cuando mi TÃo llama a mi papa y le dice que SofÃa esta embrazada, que tiene 4 meses.
Mi padre nos comenta y todos quedamos frÃos, yo con mi hermana nos miramos a los ojos ya que ella sabÃa que yo habÃa tenido sexo con SofÃa.
No podÃa creer lo que estaba pasando, mi padre nos dijo: nos vemos más tarde voy a verme con mi hermano que él quiere hablar conmigo personalmente.
Yo quede frio y con una mirada de susto que no podÃa ocultar, mi hermana Liliana se acerca y me dice tranquilo esperemos a ver qué pasa y que regrese mi papa a ver que nos dice:
Cuando vemos que mi papa llega a la casa con una cara de histeria gritando JUUAAANNNNN venga para acá, yo estaba muy asustado, me cogió y me dio una cachetada y me dijo: ¿si sabes lo que has hecho? embarazaste a SofÃa.
Yo quede de una pieza, mi hermanas me miraban mi madre agacho la cabeza estaba acorralado, mi padre me dijo pues ahora caballero tendrás que responder por ese hijo ya hable con su TÃo y se tendrán que casar.
Padre: Váyase Juan de aquà que no lo quiero ver.
Me fui y me encerré en mi habitación, al rato me golpean la puerta, era mi hermana Liliana la hice seguir y me dijo lo hecho, hecho esta, que afrontara las consecuencias.
No podÃa creer que iba a ser padre por segunda vez, habÃa embarazado a mi hermana Liliana y a mi prima SofÃa.
Cuando SofÃa tenÃa 7 meses de embarazo y mi hermana también, mi familia me mando a vivir con SofÃa.
Pasaron los meses y mi hermana Liliana tuvo un hermoso niño y a los 2 dÃas SofÃa tuvo una hermosa niña. En ese tiempo yo vivÃa ya con mi prima en un pequeño apartamento que nos habÃa dado mi tÃo en Bogotá y estaba trabajando en la empresa de él.
Asà transcurrió un año, mi hermana con el niño y mi prima con la niña, cuando estaba teniendo sexo con SofÃa ella me dice:
¿Juan te acuerdas que cuando tuvimos sexo en tu casa y te estaba mamando el pene y te dije que te olÃa a fluidos vaginales?
Juan: Si me acuerdo, era impresión tuya ya que estabas muy excitada.
SofÃa:¿Yo sé quién es el papa del hijo de tu hermana?
Juan:¿Quién es?
SofÃa: Es tu hijo, mi prima Liliana ya me lo confeso.
Yo volvà a quedar mudo y le dije a SofÃa que habÃa sido una equivocación y le explique lo ocurrido.
SofÃa me miro a los ojos y me dijo que ella no habÃa hablado con mi hermana Liliana, que me habÃa dicho eso porque tenÃa sospechas y yo como un imbécil caà en su trampa y le confesé todo a mi prima esa noche.
SofÃa: no te preocupes Juan, yo no diré ni una sola palabra.
Al cabo de un años me llama Liliana y me dice: Hermano estoy aburrida viviendo en casa de mis padres, es insoportable vivir con ellos, será posible que me des posada unos meses con el niño mientras, consigo algún trabajo en Bogotá y me ubico.
Juan: Tengo que hablar con tu prima a ver qué me dice.
Le comente a SofÃa lo hablado con mi hermana y ella me dijo: Juan no hay ningún problema, ella es tu hermana y eres el papa de esa criatura hay que ayudarlos.
Al dÃa siguiente llame a mi hermana Liliana y le dije: Hermana vengase a vivir con nosotros.
Liliana: Gracias  hermanito en la noche estaré ahà con nuestro hijo.
Fue asà que ella llego y la recibimos, le habilitamos un cuarto para ella y el niño.
Paso un mes y todo marchaba bien, un viernes llegue al apartamento tarde.
SofÃa y mi hermana Liliana estaban tomándose unos tragos, me cambie de ropa y pase a acompañarlas, me ofrecieron un aguardiente y comenzamos a hablar, en ese momento mi prima y mi hermana estaban un poco prendidas.
De repente se levanta SofÃa y dice: juguemos a la verdad o se atreve.
Liliana: SÃ juguemos. Â
Juan: Está bien.
Comenzábamos de derecha a izquierda en mi lado estaba SofÃa y le tenÃa que decir a mi hermana ¿la verdad o se atreve?
Liliana: La verdad.
SofÃa: ¿Cuál ha sido la mejor experiencia sexual que has tenido?
Liliana: Con el papa de mi hijo ya que con el perdà la virginidad.
Con SofÃa nos miramos y luego mire a mi hermana que tenÃa los cachetes del rostro colorados.
Ahora le tocaba a mi hermana hacerme la pregunta la verdad o se atreve, yo le contesto: la verdad.
Liliana:¿Antes de dejar embarazada a mi prima SofÃa, te gusto alguna otra mujer?
Juan: Si... precisamente hubo una mujer antes que SofÃa con la cual la pase muy rico.
Mi hermana se puso colorada y SofÃa nos observaba.
Ahora me tocaba a mà preguntarle a SofÃa la verdad o se atreve:
SofÃa: La verdad.
Juan:¿Qué es lo que más le gusta de m�
SofÃa: La verga que tienes, la tienes bastante grande, gruesa y caliente, me encanta cuando me llenas la vagina de leche.
Nos estábamos poniendo bastante cachondos con las respuestas y estábamos bastante prendidos por los tragos que consumÃamos.
SofÃa: ¿Prima Liliana la verdad o se atreve?
Liliana: la verdad.
SofÃa:¿Quién es el papa de tu hijo?
Liliana: Un extranjero que nadie conoce prima.
SofÃa:¿La verdad prima, yo no te creo eses cuento?
Mi hermana me miro y luego le dijo a mi prima: un extranjero.
SofÃa de inmediato se paró y le dijo a mi hermana: Yo ya se lo que paso, le saque la verdad a tu hermano poniéndole una trampa, mi hermana Liliana agacho la cabeza y se puso a llorar.
SofÃa: Tranquila prima, es un secreto y nadie se enterara.
En ese momento ya estaba todo consumado y mi hermana se tranquilizó, mi hermana me pregunta: ¿la verdad o se atreve?
Juan: La verdad.
Liliana:¿VolverÃas a tener sexo conmigo?
Juan: Por supuesto hermanita, si tú prima SofÃa me lo permite lo harÃa de nuevo.
SofÃa:¿Liliana la verdad o se atreve?
Liliana: Me atrevo.
SofÃa:¿Quiero verla teniendo sexo con tu hermano otra vez?
Mi hermana se levantó y me miro, se comenzó a quitar la ropa hasta quedar totalmente desnuda luego se dirigió hacia mà y me bajo la bragueta, me saco la polla y comenzó a mamármela.
SofÃa la miraba y se acariciaba los senos, en ese momento mi hermana me comenzó a quitar toda la ropa, ya cuando me tenÃa desnudo me sentó en el sofá y se subió sobre mÃ, cogió mi pene y se lo coloco a la entrada de su vagina y con un movimiento sutil se sentó hasta que tenÃa toda mi verga dentro de su conchita.
Comenzó a mover sus caderas a un ritmo frenético, yo estaba feliz, estaba teniendo sexo con mi hermana otra vez, en ese momento estaba que estallaba y le dije a mi hermana que me iba a correr, ella me dijo que no lo hiciera ya que no estaba planificando.
SofÃa: Liliana tienes que recibir toda la leche de tu hermano para eso se atrevió y yo quiero verte a ti Juan como la llenas totalmente.
Juan: SofÃa como voy a hacer eso, la puedo dejar otra vez preñada…
SofÃa: No me importa, ojala deje preñada otra vez a tu hermana…
Nos miramos con mi hermana Liliana y seguimos la faena hasta que no aguante más y me corrà en su vagina, era mucha leche la que tenÃa la deje totalmente llena, mi hermana estaba súper excitada se levantó con la piernas temblorosas y apenas salió mi pene de su vagina le comenzó a escurrir gran cantidad de esperma de su conchita, dejamos el sofá súper mojado.
SofÃa al ver ese espectáculo estaba excitadÃsima.
SofÃa: Ahora prepárate Juan porque quiero que me preñes a mà también.
Juan: SofÃa dame unos minutos hasta que coja energÃas.
Mi hermana estaba todavÃa desnuda sentada en un sillón y SofÃa se comenzó a desnudar, querÃa imitar a mi hermana he hizo lo mismo que ella, comenzó a mamarme el pene me chupaba los huevos hasta que yo ya volvà a tener energÃas, mi pene se puso de nuevo erecto y ella lo tomo con sus manos y se lo ubico en la entrada de su vagina, se lo fue introduciendo hasta que desapareció mi verga, comenzó a cabalgarme era toda una vaquera del viejo oeste, de repente mi hermana se paró del sillón y comenzó a frotarle los senos a mi prima mi entras ella me cabalgaba, no aguanto mucho SofÃa lo excitada que se encontraba y tuvo un orgasmo bestial, sentà que se le fue la respiración volteo los ojos y quedo sobre mi pecho.
En ese momento yo no me habÃa corrido dentro de SofÃa, levante a mi prima con sutileza y la deje aun lado del sofá. Cogà a mi hermana de un brazo y le dije:
Juan: Hermanita no alcance a correrme dentro de SofÃa.
Liliana: hermanito no te aguantes esa calentura, te ofrezco otra vez mi conchita.
En seguida  cogà a mi hermana en el borde del sofá y comencé de nuevo a penetrarla, dure unos 10 minutos asà hasta que de nuevo la deje inundada de leche, apenas le corrÃa mi semen en medio de sus piernas, nos quedamos ese dÃa en la sala, al dÃa siguiente nos levantamos como si nada hubiera pasado, habÃa mucha confianza.
Pues a los 2 meses mi hermana Liliana me dijo que tenÃa un retraso, yo le dije que abortara y ella me dijo que habÃa hablado con SofÃa y que ella le habÃa dicho que lo tuviera.
Liliana: hermanito lo voy a tener él no tiene la culpa de nuestros actos.
Juan: Hermanita estamos haciendo algo indebido.
Liliana: Lo indebido ya lo hicimos hace rato.
SofÃa: No se preocupen los dos, somos una familia y eso es lo que importa.
Juan: Ahora faltas tú SofÃa que también me digas que estas embarazada.
SofÃa: Huy eres adivino Juan, claro que no me dejaste embarazada como a tu hermana, ella me lleva 20 dÃas de ventaja, ya que ese dÃa no te corriste conmigo, pero te cogà a los 15 dÃas y dejaste tu semillita es algo por lo que hay que celebrar.
Juan: No puedo creer lo que ustedes dos me están diciendo, son unas locas no están cuerdas de esa cabeza.
Liliana y SofÃa: No te preocupes las dos estamos de acuerdo y queremos tener una familia numerosa y que mejor que contigo Juan.
Ya tenÃa otra vez a mi hermana y mi prima embarazadas, en ese entonces mi hermana ya tenÃa 17 años pasaditos, SofÃa 18.
Al cabo de 5 meses toda nuestra familia se enteró, sabÃan que tenÃa a mi prima SofÃa embarazada y que mi hermana Liliana estaba embarazada también.
Juan:¿Hermana y tú que vas a decir? tú sabes que lo mÃo es normal con SofÃa pero usted…
Liliana: No te preocupes hermanito yo voy a decir que quiero ser una madre soltera y ya tengo edad para tomar mis decisiones.
Todo ocurrió normal ya toda mi familia estaba enterada, no podÃan hacer nada y lo mejor es que no se levantó ninguna sospecha, nuestro secreto estaba asegurado.
Hasta una inesperada visita que cambio nuestras vidas.
Un fin de semana mi otra hermana Sandra, le dio por hacernos la visita al apartamento, querÃa ver a mi prima a mi hermana y a sus sobrinos es algo normal, ella en ese entonces tenÃa 16 años.
Ese dÃa recibimos a Sandra con alegrÃa, preparamos una cena ya que ella se quedarÃa con nosotros todo el fin de semana, estuvimos hablando hasta tarde, hasta que llegó la hora de acostarnos.
Liliana: Hermanita Sandra quédate en la habitación con tus sobrinos, yo dormiré en la habitación de SofÃa y Juan, ellos tienen un sofá asà estaremos todos cómodos.
Sandra: Gracias hermanita.
Como de costumbre mi prima, mi hermana y yo siempre dormÃamos en la misma habitación y tenÃamos sexo ya que éramos una familia, para nosotros era algo normal.
Al dÃa siguiente como a eso de la 7 de la mañana, mi hermana Sandra entra a la habitación a llevarnos unos cafés y se lleva que sorpresa.
Nos encuentra en la cama totalmente desnudos, SofÃa me tenÃa abrazado de espaldas y yo tenÃa ensartada a mi hermana Liliana con mi verga por detrás.
Sandra: ooohmy god, que está pasando acá.
Enseguida mi prima SofÃa y mi hermana Liliana se levantaron de un susto, lo más impresionante es que mi hermana Sandra se dio cuenta cuando mi verga salÃa del culo de mi hermana Liliana.
Sandra salió despavorida de la habitación, no podÃa creer lo que habÃa visto.
En seguida mi hermana Liliana y mi prima SofÃa salieron de la habitación para poder hablar con mi hermana Sandra.
Liliana Y SofÃa: Sandra queremos explicarte todo, pero cálmate un momento.
Sandra: Como se atreven a decirme que me calme, Â y tu Liliana mi propia hermana clavada por mi hermano y tu prima acolitando todo esto.
Liliana Y SofÃa: Sandra no es lo que parece, déjanos explicarte.
Sandra:¿Explicarme qué? Que tienen sexo los tres.
Liliana Y SofÃa: Mira Sandra tomate este calmante y déjanos hablar.
Al fin mi hermana Sandra se calmó un poco, seguramente por el calmante que le habÃa dado Liliana y SofÃa.
Liliana Y SofÃa: Sandra déjanos explicarte todo desde un comienzo por favor y veras que nos vas a entender.
Ellas dos comenzaron a hablar con Sandra y le explicaron todo lo sucedido, ella como que supo asimilar la situación y entendió todo lo que nos habÃa pasado.
Sandra: Huy tenaz hermanita y prima por todo lo que les sucedió, entiéndanme la impresión que me lleve, ahora nos las culpo y las entiendo.
Liliana Y SofÃa: Ahora te pedimos a ti Sandra que guardes nuestro secreto.
Sandra: No se preocupen que yo no diré nada, dÃganme una cosa y esos hijos que están esperando son también de mi hermano Juan.
Liliana Y SofÃa: Si Sandra, tomamos la decisión de tener una familia numerosa.
Sandra: Bueno pues los felicito a los tres, pero yo solo les voy a pedir un favor a ustedes.
Liliana Y SofÃa: ¿Qué favor seria Sandra?
Sandra: Ustedes saben que yo tengo 16 años y en 4 meses cumplo los 17.
Liliana Y SofÃa: Si sabemos que en 4 meses cumple los 17 ¿y qué quieres de nosotras?
Sandra: En 4 meses sabrán lo que yo quiero y espero me cumplan, no es una extorsión simplemente quiero que me cumplan.
Liliana Y SofÃa: Listo Sandra nosotras haremos todo lo que esté en nuestras manos para cumplirte, no te preocupes por eso.
Al cabo de 4 meses, mi hermana Sandra  visitaa Liliana y ha SofÃa.
Sandra: Hola Prima y hermanita las felicito por esos bebes tan hermosos que tuvieron.
Ellas dos habÃan parido mis otros 2 hijos con una diferencia de 20 dÃas una de la otra, fueron 2 hembritas.
Sandra: Bueno hermanita y prima, ahora necesito que me hagan el favor que les habÃa pedido.
Liliana y SofÃa: DÃganos Sandra que serÃa…
Sandra: Mis padres van a venir el fin de semana a visitarlos y yo quiero que mi hermano Juan me visite a mà en la casa.
Liliana y SofÃa: No te entendemos Sandra lo que dices.
Sandra: Fácil necesito que ustedes dos hagan que mis padres se queden el fin de semana con ustedes y que mi hermano Juan se quede conmigo en la casa.
Liliana y SofÃa: ¿Que dices Sandra?
Sandra: Si es lo que están pensando, yo quiero que mi hermano Juan me haga mujer como lo hizo con ustedes dos.
Liliana y SofÃa: Sandra por favor recapacita, nosotros no le hemos dicho nada a Juan.
Sandra: Tendrán que convencer a Juan si quieren que les guarde el secreto a toda la familia.
Liliana y SofÃa: Listo Sandra hablaremos con tu hermano para que te quedes con esa boca callada.
En seguida recibà una llamada en la empresa de mi TÃo, era SofÃa y mi hermana Liliana diciéndome que tenÃamos que hablar urgentemente.
Yo enseguida me asuste y pedà permiso para ir al apartamento y hablar con ellas dos.
Juan:¿Que paso SofÃa y Liliana?
Ellas dos me explicaron lo sucedido y me dijeron que no habÃa alternativa que yo debÃa hacer lo que pedÃa mi hermana Sandra o sino toda la familia se enterarÃa de lo nuestro.
Juan: Toca acceder a sus peticiones para que se quede con la boca callada o si no se nos vendrÃa el mundo encima.
Liliana y SofÃa se comunicaron con mi hermana Sandra para decirle que todo estaba preparado que yo habÃa aceptado.
Llego el famoso dÃa, mis padres habÃan ido a visitar a mi hermana Liliana y a mi prima SofÃa para conocer sus nuevos nietos y habÃamos quedado que yo me quedarÃa tomando unos tragos con unos amigos.
Yo me dirigà a casa de mis padres para encontrarme con Sandra, llegue a casa y mi hermana me saludo con un beso en la boca.
Sandra: Hola hermanito te tengo preparada una sorpresa.
Juan:¿Hola hermana como estas?
Sandra: Muy bien hermanito contenta de verte.
Juan: Me alegra mucho ¿y qué sorpresa me tienes?
Sandra: Hermanito quiero que me des mi regalo de cumpleaños.
Juan:¿Y qué quieres de regalo?
Sandra: No te hagas el bobo, yo creo que mi hermana y mi prima ya te dijeron.
Juan:¿Sandra estas segura de lo que mes estas pidiendo?
Sandra: Por supuesto que estoy segura, me excita todo lo que les ha pasado a ustedes y quiero ser participe también.
Juan: Hermanita piénsalo bien.
Sandra: Ya lo he pensado y estoy decidida.
Juan:¿Bueno Sandra y donde lo quieres hacer?
Sandra: En la habitación de nuestros padres, ellos no van a estar sino hasta mañana.
Nos dirigimos a la habitación de nuestros padres, mi hermana entro al baño y yo me recosté en la cama, al salir mi hermana del baño tenÃa un liguero puesto, se veÃa hermosa dejaba ver sus senos bien paradito redonditos y un culazo hermoso yo enseguida quede asombrado.
Juan: ¿Bueno hermanita que quieres hacer?
Sandra: Quiero que me hagas tu hembra quiero perder la virginidad contigo.
Juan: ¿Eres virgen hermanita?
Sandra: Si hermanito soy virgen, solo me he masturbado todos estos años y ahora quiero ser tu hembra para que me folles, quiero entregarme a ti hermanito como lo has hecho con mi prima y mi hermana.
Eso me puso súper cachondo, en seguida la cogà de un brazo y la jale hacia la cama, la comencé a besar y ella me correspondÃa con una pasión increÃble, le besaba el cuello y luego me dirigà a hacia sus senos los chupaba con tantas ansias y pasión que mi hermana gemÃa de placer, le comencé a sobar su vulva con mis manos le baje los pantis que tenÃa puestos y le comencé a meter un dedo luego dos le acaricia el clÃtoris, ella apenas se retorcÃa de placer, luego dirigà mi cabeza hacia su rica conchita y comencé a meterle mi lengua succionaba todos sus juegos estaba muy húmeda, ella ya no podÃa respirar de lo caliente que se encontraba.
Enseguida me quite la ropa que llevaba y salió esa imponente verga que tengo ya se encontraba súper tiesa, mi hermana al verla la agarro con sus dos manos y comenzó a chupármela lo hacÃa con desespero yo le dije: cálmate más despacio, seguramente por lo inexperta que era, en ese momento ya estábamos muy caliente y ella muy arrecha me levante y le dije:
Juan: Bueno hermanita ya es hora que pruebes un verdadero machoy que pruebes algo de sal, ya es hora de quitarte esas ansias que tienes.
Me dirigà a mi pantalón para sacar los condones que llevaba, cuando Sandra me dice:
¿Qué haces hermano?
Juan: Sacando los condones que traje, tenemos que protegernos.
Sandra: Ni lo pienses hermanito yo quiero tener tu verga dentro de mà vagina y sin ninguna protección, quiero sentir todo tu semen dentro de mi conchita, quiero saber que se siente.
Juan: Pero Sandra como vas a hacer eso acuérdate que paso con nuestra hermana.
Sandra: Son mis condiciones y si no las aceptas ya sabe que puede pasar.
Juan: Listo Sandra tu asumirás las consecuencia.
En seguida la cogà y la jale con bastante fuerza y me le monte encima, comencé a meterle mis dedos en su conchita con bastante rabia, la muy zorra antes lo disfrutaba, eso me puso muy cachondo, le abrà las piernas ubique mi glande en la entrada de su vagina y se la clave de sopetón con mucha rabia para que aprendiera a no extorsionarnos, mi hermana torció esos ojos parecÃa poseÃda se le fue la respiración yo pensé que la habÃa jodido, saque un poco mi pene de su conchita y ella volvió a reaccionar me asuste bastante, entonces comencé el vaivén del meter y sacar, ella parecÃa una mujer de otro mundo tenÃa una mirada desorbitada a los 15 minutos ella me abrazo con sus piernas mi cadera y comenzó a mover la cadera, ya se estaba acostumbrando a mi trozo de carne, en ese momento comencé a metérsela con bastante fuerza y ella ya lo gozaba y yo también, duramos en esa faena como 20 minutos, le dije a mi hermana que estaba a punto de correrme y que iba a sacar mi pene de su vagina para no dejarla preñada, ella al escuchar eso cogió sus pierna y abrazo mis caderas no se querÃa soltar parecÃa una chimpancé, por más que yo querÃa soltarme no podÃa, no aguante mucho cuando me vengo dentro de ella, se me fue la respiración sentÃa que de mi pene salÃan litros de leche, ella al sentir toda mi leche caliente dentro de su vagina dio un suspiro y pego un grito, ella habÃa tenido un orgasmo fenomenal lo sabÃa por las contracciones que tenÃa, al cabo de 5 min ella abrió las piernas y me soltó la cadera.
PodÃa ver como salÃa chorros de mi semen de la conchita de mi hermana era impresionante.
Al rato mi hermana Sandra me dice:
Huy hermanito eres delicioso, me dejaste exhausta eres todo un semental, nunca pensé que esto fuera tan maravilloso, me dejaste viendo estrellas me llevaste a otra dimensión, nunca pensé que dentro de mi cuevita me cabÃa ese trozo de carne tuya, me siento inundada por dentro, siento todo tu semen dentro de mà algo muy caliente, gracias hermanito.
Juan: ¿Ya he cumplido con mi trato hermanita?
Sandra: TodavÃa no hermanito, acuérdate que tenemos este fin de semana para los dos ya que nuestros padres están en tu apartamento con Liliana y SofÃa.
Juan: ¿Y que más quieres hacer Sandra?
Sandra: Quiero tener sexo contigo toda la noche.
Yo quedé sorprendido, mi hermana Sandra era toda una zorra en celo, esa noche tuvimos 3 faenas más, ella ya se habÃa acostumbrado a mi trozo de carne y no lo querÃa soltar, hicimos poses que nunca nos habÃamos imaginado, ella supo sacar provecho y me saco hasta la última gota de leche que tenÃa.
Al otro dÃa mi hermana llega a la habitación con un suculento desayuno.
Sandra: Despierta hermanito a desayunar porque nos toca aprovechar el último dÃa que nos queda.
Juan: ¿Cómo asà Sandra?
Sandra: Si hermanito quiero entregarte también mi culito, quiero que tú me desflores mi ano, ya te entregue mi conchita falta mi ano.
Juan: ¿Estas segura Sandra, eso te va doler mucho más?
Sandra: Si otras mujeres pueden y mi hermana Liliana también, porque yo no voy a poder.
Juan: Como tú quieras Sandra.
Al momento llega mi hermana totalmente desnuda y tenÃa embadurnado todo su cuerpo en aceite de almendra, se acercó y me dijo: bueno es hora hermanito relájate y saco mi pene de mi bragueta y comenzó a darle una mamada bestial, en seguida mi miembro le correspondió a esas mamadas y se comenzó a poner tieso parecÃa un roble.
Sandra se puso encima de mÃ, cogió mi pene y lo dirigió a su conchita con su mano, lo ubico a la entrada de su cuevita y comenzó a deslizar su cuerpo hacia abajo, podÃa ver como mi pene comenzaba a desaparecer dentro de su vagina, ya entraba con más facilidad dentro de su almeja, hasta que se lo trago todo y ella comenzó a cabalgarme un buen rato, movÃa sus caderas como una bailarina árabe yo estaba feliz viendo como mi hermanita gozaba, de pronto se quedó quieta torció los ojos echo la cabeza hacia atrás dio un suspiro y se desvaneció habÃa tenido un orgasmo bestial.
En ese momento yo no me habÃa corrido y le dije Sandra te encuentras bien y ella me respondió que sÃ, que el orgasmo que habÃa tenido era algo fantástico.
Ella volvió a coger mi pene y comenzó a mamármelo yo me encontraba en la gloria, ahora hermanito prepárate para lo que viene.
Sandra volvió a ponerse encima mÃo cogió mi verga y se lo ubico a la entrada de su ano y comenzó a introducirse ese trozo de carne, no podÃa creer lo que veÃa, mi hermana menor se estaba tragando mi verga, logro introducir mi glande dentro de la entrada de su ano, ella gemÃa por el dolor que sentÃa y me decÃa: hermanito creo que no voy a poder con tu verga tan grande, yo le dije hazlo muy suave para que no te lastimes, duramos como media hora y nada más le habÃa entrado la mitad de mi verga, en ese momento yo la cogà de las caderas y de un sopetón le clave toda mi verga, ella metió un grito espantoso aayyyyyyy desgraciado me rompiste, yo creo que ese grito lo escucharon todos los vecinos, mi hermana me decÃa: eres un hijo de puta y yo más le sostenÃa las caderas la tenÃa clavada totalmente ella me gritaba suéltame y yo le decÃa: eso no eras lo que querÃa, desgraciado suéltame y yo le decÃa no te voy a soltar, duramos como 10 minutos en esa situación hasta que ella se calmó, creo que ya no sentÃa dolor, yo comencé con un movimiento muy suave y mi hermana comenzó a disfrutar, la fui soltando de las caderas para ver como ella reaccionaba y para mi sorpresa comenzó a mover sus caderas estaba totalmente ensartada con mi verga y la estaba gozando, de repente mi hermana me dice: hermanito quiero tu leche dentro de mis intestinos lléname por favor, esas palabras fueron afrodisiacas para mà no aguante mucho y de repente estalle con una gran cantidad de leche, mi hermana al sentir inundado sus intestinos metió un grito apretó los dientes y se desvaneció en mis hombros, quedo como privada, al rato mi hermana me dice en el oÃdo, por favor no la saques déjamela hay, le hice caso nos quedamos dormidos con mi verga dentro del culo de mi hermana Sandra.
Al cabo de 4 horas movà a mi hermana Sandra y con delicadeza retire mi verga de su culo, al sacarla  pude ver como comenzaba a escurrirle gran cantidad de semen de su culo, me bañe, me cambie y me dirigà a mi apartamento a Bogotá ya que mis padres estaban de regreso y no podÃa levantar sospecha.
Paso un mes y medio y yo no me hablaba con mi hermana Sandra, hasta que un dÃa me llama.
Sandra: ¿Hola hermanito porque tan perdido?
Juan: Hola Sandra como esta.
Sandra: Yo muy contenta y feliz
Juan: Y eso porque estas tan contenta.
Sandra: Porque voy a hacer madre y tu papa otra vez.
Juan: Que dices Sandra, que estás diciendo.
Sandra: Si hermanito eres todo un semental estoy preñada de ti y eso era lo que yo querÃa.
Juan: Sandra que lo cura piensas hacer, por favor no me hagas eso.
Sandra: Yo también quiero darte hijos hermanito asà como mi prima y mi hermana Liliana y además ellas no pueden decir nada ya que tenemos que guardar este secreto mutuamente y quiero gozármelo a ti como ellas te gozan.
No podÃa creer lo que me decÃa mi hermana Sandra ya no habÃa reversa tenÃa que asumir otro descalabro en mi vida.
Enseguida me comunique con mi prima SofÃa y mi hermana Liliana y le comente lo que me habÃa dicho me hermana Sandra.
Liliana y SofÃa: No te preocupes Juan, ya suponÃamos nosotras que Sandra estaba buscando lo mismo, ella simplemente se aprovechó de las circunstancias.
Juan: ¿Y ahora que vamos hacer?
Liliana y SofÃa: Pues será que lo tenga y asumir que se venga a vivir con nosotros, asà podremos cumplir con nuestro proyecto de tener una familia numerosa, además tú Juan vas a tener tres hembras más con quien gozar, véalo positivamente.
En ese entonces yo tenÃa 20 años y ya era padre de 5 hijos, paso el tiempo y efectivamente mi hermana Sandra también se fue a vivir con nosotros y tuvo nuestro hijo, al cabo de 1 año adquirimos una casa más grande, ya que la familia estaba creciendo.
Yo me tenÃa que turnar para tener sexo con ellas, un dÃa dormÃa con mi prima SofÃa al otro dÃa con mi hermana Liliana y al siguiente con mi hermana Sandra pero los fines de semana dormÃamos los tres y tenÃamos unas orgias monumentales ya era una rutina que llevábamos.
A los 25 años yo ya tenÃa 5 hijos con mi hermana Sandra era la más fértil no la podÃa ni tocar porque quedaba preñada, con mi hermana Liliana tenÃa 4 hijos y con mi prima SofÃa 4 hijos también.
Yo continúe trabajando en la empresa de mi TÃo mis hermanas también consiguieron trabajo allá, la familia nos colabora mucho y SofÃa siempre se quedó en casa cuidando los pequeños para ayudarnos mutuamente.
Mi jefe inmediato en la empresa de mi tÃo es mi tÃa Patricia.  Ella es la menor de mis tÃas, tiene 31 años y está recién casada, la voy muy bien con ella, yo le entrego los informes que yo elaboro en la empresa hablo mucho con ella y de nuestras cosas, ella me pregunta por SofÃa tenemos mucha confianza.
El fin de año mi TÃo siempre hace la despedida en la empresa todos asistimos, esa noche estando celebrando en un club vi a mi tÃa Patricia llorando y le dije:
Juan: ¿TÃa Patricia que te pasa?
Patricia: Nada sobrino no te preocupes
Juan: TÃa dime por favor no te puedo ver asÃ.
Patricia: Sobrino tu sabes que llevo un año de casada y con Enrique no hemos podido tener hijos yo no sé si soy estéril o si es él. Lo hemos intentado y nada que quedó embarazada yo amo a mi marido mucho y le quiero dar hijos no sé qué hacer.
Juan: ¿TÃa y tú ya te hiciste exámenes para saber si tienes algún problema?
Patricia: la verdad no sobrino, me da miedo enterarme que yo sea la del problema y mi marido me abandone.
Juan: ¿TÃa no me gusta verte sufrir te propongo algo pero no lo tomes a mal?
Patricia: ¿Dime sobrino como me puedes ayudar?
Juan: Tu sabes tÃa que yo he tenido hijos con SofÃa tu sobrina y he sido muy efectivo, porque no probamos los dos y miramos a ver qué pasa, asà tú te darÃas cuenta si tienes algún problema.
Patricia: Huy sobrino eso está mal.
Juan: Piénsalo tÃa es una solución.
Paso un mes cuando me llama mi tÃa Patricia a su oficina y me dice: Sobrino ya lo he pensado y quiero conservar mi hogar con Enrique ¿tu propuesta sigue en pie?
Juan: Por supuesto tÃa yo quiero que tú seas feliz con Enrique.
Patricia: Sobrino te espero el jueves en la noche en mi casa ya que Enrique estará de viaje y podemos aprovechar ese momento.
Juan: Listo tÃa cuenta con eso hay estaré.
Llego el jueves y me dirigà a la casa de mi tÃa Patricia, ella me estaba esperando en falda y con una blusita ceñida a su cuerpo que deja ver sus enormes senos.
Juan: ¿Hola tÃa como estas?
Patricia: Bien sobrino sigue ¿quieres tomar un vinito?
Juan: Bueno, gracias tÃa.
Me tome el vino y mi tÃa me dice: Sobrino subamos a mi habitación, nos dirigimos los dos con las copas de vino y nos recostamos en su cama, yo veÃa a mi tÃa que estaba bastante nerviosa.
Juan: TÃa relájate no te preocupes.
Patricia: Sobrino tengo miedo por lo que vamos a hacer.
Juan: Tú quieres a tu marido pues conserva tu hogar, vamos a salir de dudas y asà tú sabrás si tú tienes algún problema para tener hijos.
Ella me dio un beso en la boca y sin más reparo se comenzó a desvestir hasta quedar totalmente desnuda, yo quedé sorprendido con el cuerpo de mi tÃa, era una mujer muy voluptuosa unos senos grandes y un culo bastante pronunciado, en seguida yo también me comencé a desnudar y al ver mi tÃa mi verga me dijo:
Patricia: ¿Huy sobrino sà que estas bien dotado que pene tan grande tienes lo tienes mucho más grande que mi marido, mi sobrina SofÃa debe estar muy contenta contigo?
Juan: Si tÃa ella está muy satisfecha.
Patricia: ¿Qué quieres te haga sobrino?
Juan: Lo dejo a tu iniciativa tÃa.
Enseguida mi tÃa cogió mi verga y me la comenzó a mamar, era toda una profesional.
Juan: ¿Huy tÃa que rico que lo mamas?
Patricia: ¿Si te gusta sobrino?
Juan: Me encanta tÃa.
Patricia: AcarÃciame mis pechos sobrino que eso me excita, chúpamelos.
En ese instante comencé a acariciarle los senos y comencé a besárselos, ella comenzó a gemir.
Patricia: Eso sobrino asà me encanta, me estas excitando mucho, te gusta cómo te chupo tu verga.
Juan: me encanta tÃa me estás haciendo llegar a la gloria.
Patricia: Sobrino me voy a poner en cuatro y quiero que me folles duro, quiero sentir todo ese tronco dentro de mÃ.
Juan: Si tÃa acomódate ponte en cuatro que te voy a dar gusto ya lo veras.
Ella se puso en cuatro yo acomode mi verga en la entrada de su vagina y enseguida se la introduje, ella al sentir la estocada gritaba como una loca era muy escandalosa.
Patricia: Huy sobrino que cosa más rica tienes, métamela hasta el fondo quiero sentirme llena dame duro, quiero que me revientes.
Yo estaba dándole duro a mi tÃa y ella gozaba como una loca.
Patricia: ¿Sobrino te gusta la conchita de tu tÃa?
Juan: Si tÃa esta riquÃsima eres muy ardiente y caliente.
Patricia: Pues aprovéchala sobrino es toda tuya.
Juan: TÃa estoy a punto de correrme.
Patricia: Pues córrete sobrino que yo también me voy a correr.
En ese momento no aguante más y me metà una corrida espantosa era mucha leche que recibÃa mi tÃa en su conchita, ella la sintió y también tuvo un orgasmo fabuloso.
Patricia: Sobrino yo no habÃa recibido tanta leche en mi vagina, me sentÃa llena eres fantástico, vea como escurre mi conchita y me sigue saliendo semen.
Juan: Gracias tÃa, espero que eso te ayude para descartar el problema que tienes.
Patricia: Si sobrino espero que funcione, pero tenemos que tener otras sesiones para estar seguros.
Juan: Si tÃa no te preocupes.
Patricia: Vamos sobrino y nos bañamos los dos, yo sé que SofÃa te está esperando.
Juan: Si tÃa SofÃa y mis hermanas.
Nos metimos al baño con mi tÃa para bañarnos y enseguida ella me cogió la verga en la ducha y me dio otra mamada fenomenal.
No aguante mucho y mi verga otra vez estaba tiesa, levante a mi tÃa y le di la vuelta le abrà las piernas y se la introduje en su culo, ella no puso mucha resistencia y la recibió con mucho agrado, comenzamos un vaivén hasta que me corrà dentro del culo de mi tÃa.
Patricia: Huy sobrino siento como llenas todo mi interior, siento tu leche caliente dentro de mis entrañas, eres un monstruo.
Juan: TÃa voy a sacar mi verga de tu culo.
Patricia: Sobrino sácala despacio.
En ese momento retire mi verga del culo de mi tÃa y a ella le comenzó a salir todo mi esperma de su orificio.
Me bañe me cambie y le di un beso a mi tÃa de despedida.
Patricia: Sobrino que te vaya bien, gracias por todo y nos vemos en la empresa mañana.
Juan: Si tÃa nos vemos mañana.
Al dÃa siguiente mi tÃa me llama a la oficina y me dice que hoy trabajaremos hasta tarde.
Juan: ¿Y eso tÃa?
Patricia: Acuérdate sobrino que tenemos que tener varias sesiones para comprobar si yo soy infértil.
Tuvimos que trabajar hasta tarde con mi tÃa 8 dÃas seguidos, los empleados se iban y yo me queda con ella teniendo sexo en su oficina.
Al cabo de 40 dÃas mi tÃa me llama y me dice:
Patricia: Sobrino no me llega la regla creo que estoy preñada, el fin de semana me hago la prueba de embarazo y corroboro lo que está pasando.
Juan: Listo tÃa cualquier cosa me informa.
El domingo mi tÃa me llama al celular y me dice:
Patricia: Sobrino estoy preñada, la del problema no soy yo es mi marido.
Juan: ¿TÃa y que piensas decirle a tu marido?
Patricia: Que estoy embarazada de él.
Juan: TÃa como vas hacer eso, yo tuve relaciones contigo para comprobar si tú tenÃas algún problema, pero nunca dijimos que lo tendrÃas, lo mejor es que abortes ya que quedo comprobado que tu estas sana.
Patricia: No sobrino lo voy a tener y le voy a decir a Enrique que va hacer papa.
Juan: TÃa por favor no me hagas eso.
Patricia: No te preocupes sobrino será nuestro secreto y nadie se enterara.
En ese momento yo quede confundido y en mi mente pasaban muchas cosas.
Pasaron los meses y mi tÃa Patricia tuvo un hermoso niño era mi hijo, ella se veÃa muy contenta y su marido Enrique no se cambiaba por nadie estaba feliz.
Ese secreto nunca se lo comenté a SofÃa ni a mis hermanas.
Seguà trabajando en la empresa normalmente, la relación con mi tÃa era normal como si nada hubiera pasado.
 Al cabo de un año mi tÃa me llama a su oficina.
Patricia: Sobrino tengo un problema grave con mi marido.
Juan: ¿Que pasa tÃa se enteró de algo?
Patricia: No sobrino no es nada de eso Enrique quiere tener otro hijo.
Juan: Y que vas hacer tÃa, ya no cuentes conmigo.
Patricia: Sobrino no me hagas eso por favor yo quiero complacer a mi marido.
Juan: ¿TÃa tu sabes lo que me estas pidiendo?
Patricia: Si sobrino pero no me abandones en este momento.
Me dio pesar con mi tÃa y comenzamos a tener nuestros encuentros sexuales para complacer sus demandas, dure follando con mi tÃa como mes y medio hasta que volvió a quedar preñada, ella medio las gracias y me dijo: te agradezco en el alma todo lo has hecho por mÃ.
A los siete meses me llama mi tÃa y me dice:
Patricia: Sobrino te felicito, me mande hacer una ecografÃa y voy a tener mellizos.
Juan: Como asà tÃa ¿de verdad?
Patricia: Si sobrino no es fabuloso, mi marido está súper contento.
Juan: Y eso tÃa como se dieron las cosas para que tu esperes mellizos.
Patricia: Sobrino creo que como esta vez follamos más tiempo las cosas se dieron, eres todo un semental.
Juan: Pues los felicito y espero que estén contentos.
Patricia: Gracias sobrino a ti.
Pasaron los meses y mi tÃa dio a luz mis nuevos hijos, mi legado que estaba creciendo bastante.
Cuando yo ya tenÃa 26 años ya contaba con todo un equipo de futbol.
Mi prima SofÃa tenÃa 3 mujeres y un varón, Mi hermana Liliana 2 mujeres y 2 varones, Mi hermana Sandra 4 mujeres y un varón y mi tÃa Patricia 1 mujer y dos varones, ya tenÃa un total de 16 hijos.
Cumplà los 27 años y me propuse no tener más hijos, una noche me llama mi tÃa Patricia y me dice que Enrique tiene una amante y que las cosas van de mal en peor, que se sentÃa muy sola.
Juan: TÃa no te preocupes cálmate.
Patricia: Sobrino hace 4 meses no tengo relaciones con mi marido y eso me está matando.
Juan: TÃa toma las cosas con mesura no te precipites.
Patricia: Sobrino ya he hablado con Enrique y nos vamos a separar y yo quiero que tú te enteres, ya que te tengo mucha confianza.
Juan: Piensen las cosas tÃa.
Patricia: La decisión ya está tomada.
A los 2 meses mi tÃa se separó de Enrique, al cabo de ese tiempo mi tÃa me comenzó a buscar.
Patricia: Sobrino que vas hacer el fin de semana te invito a la casa a tomarnos unos vinos me siento muy sola.
Juan: Bueno tÃa te puedo acompañar un rato.
Patricia: Te espero sobrino.
Ese dÃa le dije a mi familia que irÃa donde mi tÃa ya que tenÃamos mucho trabajo represado en la empresa he Ãbamos adelantar.
Me dirigà donde mi tÃa ese dÃa, ella me abrió la puerta y me hizo seguir, para ese entonces mi tÃa tenÃa 33 años y yo 27, me sirvió un vino y me dijo que se iba a poner algo mas como, subió a su habitación y yo me quede en la sala.
Como a la media hora ella se asoma por las escaleras y me dice:
Patricia: Sobrino sube que estoy en la habitación.
Juan: listo tÃa subo enseguida.
Entre a la habitación de ella y que sorpresa me llevarÃa, la encontré vestida con un liguero ceñido a su cuerpo y unas tangas diminutas se veÃa espectacular yo quedé asombrado.
Juan: Huy tÃa te vez espectacular que cuerpo tan hermoso tienes.
Patricia: Te gusta mi cuerpo sobrino, vez como me he cuidado después de tener nuestros hijos.
Juan: Me encantas tÃa, veo que te han servido los embarazos que has tenido conmigo.
Patricia: Si sobrino tú tienes muy buena mano eso te lo agradezco.
Juan: Gracias tÃa.
Patricia: Acomódate en la cama sobrino que la vamos a pasar fenomenal.
Juan: TÃa si vamos a tener sexo quiero que nos protejamos yo no quiero tener más hijos.
Patricia: No te preocupes sobrino que cuando tú te vayas a correr las sacas.
Comencé a besar a mi tÃa con mucha pasión y ella me correspondÃa de la misma forma, unimos nuestras lenguas, le besaba el cuello, las orejas estaba súper excitado y ella también.
Patricia: Sobrino desvÃstete.
Juan: Si tÃa lo que tú digas.
Al estar yo desnudo ella me empujo sobre la cama y se montó encima, se quito sus diminutas tangas que tenÃa puesta, abrió las piernas y se introdujo toda mi verga en su conchita me cabalgaba como una desesperada.
Patricia: Huy sobrino que delicia me estás haciendo llegar a la gloria, hace rato necesitaba esto, extrañaba mucho tu verga.
Juan: Aprovéchala tÃa es toda tuya disfrútala.
Al cabo de un buen rato de estar cabalgando mi tÃa sobre le dije:
Juan: TÃa estoy a punto de correrme.
Ella no me escuchaba estaba en un trance y seguÃa cabalgándome.
Juan: TÃa levántate que me voy a correr.
Y ella seguÃa sin entenderme, ella se encontraba en otro mundo, no aguante mucho cuando me corro dentro de mi tÃa sentÃa como le llenaba toda su vulva y mi tÃa seguÃa cabalgándome, al rato mi tÃa echa la cabeza hacia tras y da un gemido de placer, era su orgasmo yo lo sentà me dejo totalmente empapado mi abdomen.
En seguida ella se levantó saco mi verga y podÃa ver cómo le escurrÃa mi esperma con bastante lÃquido vaginal de ella, parecÃa una llave abierta.
Patricia: Estuviste fenomenal sobrino.
Juan: TÃa yo te dije que te avisa cuando me fueras a correr.
Patricia: Sobrino no te escuche estaba en otra dimensión.
Juan: Y si te dejo otra vez preñada tÃa.
Patricia: Pues sobrino lo tendrÃa con mucho gusto, no te preocupes.
A los 2 meses mi tÃa me llama y me dice que otra vez está preñada y que lo iba a tener.
La familia se enteró que mi tÃa estaba preñada y el exesposo de ella le pregunto que quien era el padre y ella le contesto que no se metiera en la vida de ella, que para eso estaban separados y que el habÃa tomado la decisión de vivir con su amante.
A esa altura yo ya contaba con 17 hijos, seguà teniendo sexo con mi aren incestuoso ya no podÃa hacer nada y a todas me tocaba darle placer, claro que todas ellas comenzaron a planificar.
Comencé a criar a todos mis hijos 11 mujeres y 6 varones, cuando mis hijos estaban dentro de las edades 9 años y 5 años ellos me preguntaron qué porque yo dormÃa con sus mamas al mismo.
Yo les dije que éramos una familia muy especial y que éramos miembros de una filosofÃa antigua.
Mis hijos comenzaron a cuestionarme y hacerme preguntas: ¿Ósea papa que tú puedes tener sexo con ellas?
Juan: Si hijos es algo normal para nosotros, solo nosotros practicamos esa filosofÃa nadie tiene porque saberlo.
Hijos: Ósea padre que nosotras podemos tener sexo contigo.
Juan: Si hijas ustedes pueden tener sexo conmigo y sus hermanos con sus mamas, pero entre ustedes no pueden tener sexo ya que la raza se puede degradar.
Hijos: ¿Padre y a qué edad podemos tener sexo?
Juan: Hijos yo creo que en la etapa de pubertad, creo que es una edad adecuada.
Comenzó mi primera camada de hijas a cumplir los 16 años he hijos también, en ese entonces ya contaba con 6 hijas en esas edades y 2 varones.
Hijas: ¿Bueno papa nosotras queremos tener sexo contigo ya estamos en edad para hacerlo?
Juan: Listo hijas voy a comenzar cada dÃa con una, les pasare un calendario.
Lo mismo hicieron SofÃa, Liliana y Sandra con los varones.
SofÃa Liliana y Sandra: Juan hemos hablado entre nosotras y vamos a dejar de planificar, queremos que dar preñada al azar.
Juan: Listo no veo ningún problema.
Efectivamente comencé a tener sexo con mis hijas y les quite esa pureza he inocencia que tenÃan en sus rostros las estaba haciendo mujercitas, lo mismo hicieron SofÃa, Liana y Sandra con los varones era mucho el sexo que se emanaba en nuestra casa.
Al cabo de un año yo ya tenÃa a mis 6 hijas preñadas, lo mismo pasó con SofÃa, Liliana y Sandra ya no sabÃamos quién las que las habÃan preñado si mis hijos varones o yo.
Nuestra familia se metió una crecida monumental ya éramos 26 miembros contándonos todos.
Al cabo de 2 años salió mi otra camada de hijos eran 3 mujeres y 3 varones con los cuales continuamos con nuestra rutina incestuosa.
Seguimos con nuestras rutinas hasta que mi segunda camada de hijas quedaron preñadas lo mismo paso con SofÃa, Liliana y Sandra también ya no tenÃamos control era todo un desorden yo tenÃa 11 hebras en mi hogar las cuales me las follaba a mi antojo y SofÃa, Liliana y Sandra 6 varones para follar cuando quisieran.
En esa época ya vivÃamos en una finca a las afueras de Bogotá ya los miembros de nuestra familia se habÃan multiplicado parecÃamos conejos.
En 3 años al casamos a tener 54 miembros en nuestro hogar era algo descomunal.
Yo me seguÃa viendo con mi tÃa Patricia ya que ella era la madre de mis hijos y tenÃamos mucho sexo cuando nos veÃamos, ella si siguió planificando menos mal. Los hijos de ella me veÃan como su primo yo los consentÃa y los paladeaba.
Ya estaban grandes los varones tenÃan 17 -16 años y las hembras 17 y 15 ya que una de ella era melliza.
Una vez los invite a la casa para que visitaran a todos sus primos y se quedaran ese fin de semana y ellos aceptaron con gusto.
Al llegar  ellos se pusieron  a jugar con todos sus primos y yo me dedique a tomarme unos tragos en la casa, al sentirme un poco prendido cogà a unas de mis hembras de la mano y la lleve a mi habitación y comencé a follarla con frenesÃ, ella se quejaba jadeaba y gritaba de dolor pero al final resulto gozando mi verga.
Al rato entra a mi habitación mi hermana Sandra y me dice:
Sandra: Que haces Juan mira lo que estás haciendo, te estas follando a tu prima, la hija de mi tÃa Patricia.
Yo ya en ese momento tenÃa toda mi verga dentro de la conchita de Margarita y no habÃa nada que hacer, tampoco me habÃa dado cuenta que era Margarita seguramente por los tragos que me habÃa tomado y ella en ese momento ya gozaba de mi miembro dentro de su vagina
Margarita: Primo no pares sigue por favor.
Ella no sabÃa que yo era su padre, mi hermana al escuchar las palabras de Margarita cerró la puerta y nos dejó seguir con lo que habÃamos comenzado.
Margarita: Huy primo que cosa más rica, me estoy encuentro en otro planeta es algo maravilloso lo que estoy sintiendo.
No aguante más y me corrà dentro de su cuquita, ella encogió su cuerpo torció sus ojos y dio un suspiro, habÃa tenido un orgasmo fabuloso también. Â
Al sacar mi verga de su cuevita me di cuenta como le escurrÃa toda mi leche entre fluidos y sangre habÃa desvirgado a mà otra hija sin ella saber que yo era su padre.
Margarita me dio un beso en la boca y me dijo gracias primo, nos cambiamos y salimos.
Mi hermana Sandra apenas me miraba pero no decÃa nada.
Después de esa faena Margarita se la pasa conmigo, al dÃa siguiente Margarita me busca y me dice:
Margarita: Primo tu sabes que yo tengo mucha confianza con mi hermanita Julia y le comente lo sucedido.
Juan: Como le vas a contar lo nuestro a tu hermana Julia.
Margarita: Tranquilo primo que ella no contara nada.
Yo en ese momento no sabÃa que decirles aparte que ellas no estaban enteradas que eran hijas mÃas.
Esa noche Margarita me dice:
Margarita: Primo quiero volver a tener sexo contigo.
Juan: Claro que si Margarita quiero que te vayas contenta para Bogotá.
Margarita: Primo quiero hacerlo junto al árbol de mango y en la oscuridad de la noche.
Juan: Si mi amor nos vemos a las 9 de la noche junto al árbol de mango.
Llego la hora y me dirigà hacia el árbol de mango estaba muy oscuro y Margarita ya me estaba esperando.
Tendà una sábana en el pasto para estar más cómodos en seguida le dije: Margarita quiero que me chupes la verga quiero que aprendas conmigo muchas cosas, ella me respondió: Si primo lo que tú me digas, me baje los pantalones y saque mi verga ella la cogió con las 2 manos y comenzó a chuparlo se sentÃa delicioso.
Luego yo comencé a quitarle la ropa con delicadeza y comencé a frotarle la vaginita, ella comenzó a excitarse, lo sentÃa por su respiración entre cortada que tenÃa, duramos un buen rato acariciándonos hasta que ya estábamos totalmente desnudos.
Juan: Margarita acuéstate que te voy a dar de probar más lechecita.
Margarita: Si primo pero hazme pasito con cariño.
Juan: No te preocupes tendré cuidado.
Margarita abrió las piernas y yo ubique mi trozo de verga a la entrada de su cuevita comencé a introducirla pero la verdad no me entraba.
Juan: Margarita hoy amaneciste muy estrecha.
Ella no pronunciaba ninguna palabra, volvà a intentarlo y a duras penas entro mi glande. Margarita dio un grito y se tapó la boca con las dos manos para no hacer ruido, veÃa que le estaba saliendo lágrimas de los ojos, la seguà introduciendo y veÃa como mi verga habrá camino con mucho esfuerzo dentro de su cuevita hasta que entro totalmente yo sentÃa mi verga aprisionada la deje en esa posición unos 10 minutos para que ella se fuera acostumbrando al tamaño, al cabo de ese tiempo comencé con movimientos suaves y ya Margarita se sentÃa mejor comenzó a disfrutarla comenzó a decirme huy primo me dolió un poco pero ahora me siento bien.
Juan: me alegro Margarita que la estés gozando.
Margarita: Que bien se siente primo me siento llena.
Me di la vuelta sin sacarle la verga de su cuevita y le dije a Margarita que se montara sobre mÃ. Ella enseguida me hizo caso, ya que con esa pose ella era la que me cabalgarÃa. Comenzó con movimientos muy suaves en su cadera y al cabo de 15 minutos ya era toda una profesional cabalgándome, se movÃa como una potranca salvaje estaba gozando de mi polla duro 5 minutos más y se desvaneció sobre mi pecho, sentÃa sus fluidos internos y calientes en mi verga, sentÃa que me quemaba, era evidente que habÃa tenido un orgasmo. Yo en ese momento aproveche para correrme dentro de ella era impresionante como la llenaba, me salÃa leche por montones, ella no reaccionaba nos quedamos recostados pecho con pecho unos 20 minutos cuando ella me dice en el oÃdo.
Gracias primo, ha y de por cierto no soy Margarita soy Julia.
Era mi otra hija la menor la hermanana de Margarita las dos muy astutas se habÃan con fabulado para esto y como son tan parecidas no me di cuenta.
HabÃa desvirgado a las hijas que me faltaban y sobre todo a Julia con apenas 15 añitos, cuando saque mi verga de la conchita de Julia pude observar cómo le escurrÃa un hilo de sangre de la vagina.
Actualmente creo que somos la familia más numerosa e incestuosa del mundo, ya que actualmente contamos con 72 miembros y mis otras dos hijas que también la deje preñadas.
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Espero les haya gustado mi historia.