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Mi mujer entregada a mi empleado (4 ¿Y fin?)

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Lo que os conté en las otras dos partes, aconteció hace dos años y medio. Los otros relatos están en el apartado de infidelidad, aunque el último y este el apartado sería mejor en este otro de trios. Antes de meterme en la cuestión creo conveniente explicar  algunos hechos que han acontecido desde entonces. Nuestras reuniones de fin de semana fueron convirtiendose en una rutina y por diversos motivos se fueron espaciando en el tiempo. Unas veces por motivos laborales, otras por  que llegaban a nuestra caso nuestros hijos y nietos a pasar el fin de semana (tenemos un hijo y una hija casados, mi hija con dos hijos de 3 y 7 años, mi hijo con una de 8 años), ni que decir que los nietos son nuestra debilidad (de mi mujer y mia) y entre el hecho de pasar un fin de semana de fiesta y estar con nuestros nietos, la elección es bien sencilla. Lo cierto es que mi hijo es hoy por hoy quien poco a poco ha hido asumiendo mis responsabilidades en la empresa, yo cada vez tomo menos decisiones aunque mi mujer y yo seguimos  manteniendo el 51% de las acciones, otro 48% es a partes iguales de mis hijos y el 1% restante  se lo hemos cedido a Luis. Pronto cuando yo me juvile le cederé algo mas a Luis (se lo merece). Lo cierto es que en nuestra casa por unas cuestiones y otras (incluidos los días que dábamos de permiso al servicio), decidimos no organizar mas citas sexuales para no lebantar sospechas. Asique algunos ibamos a casa de Luis, otros a hoteles y otros ya los menos en nuestra casa.

Desde hace un año decidí  comprar una finca en un pueblo pequeño, a las afueras. En esa finca decidí construir una cabaña de madera la cual encargué a una empresa valenciana. Una pequeña cabaña que no pasa de 50 metros cuadrados por lo que en ese Ayuntamiento no pagamos impuestos por ello. El agua la obtenemos de un pozo artesiano, las aguas residuales van a un pozo septico y la electricidad la obtenemos de placas fotovoltaicas y por si acaso hay un generados de gasolina. La cabaña está muy bien aislada y tiene un comedor con chimenea francesa, una habitación con una amplia cama, un servicio con ducha y un pequeño porche. La finca está totalmente cerrada con un amplio muro de piedra para que  nadie tenga oportunidad de observar hacia adentro y dos pastores alemanes y un señor del pueblo son los guardianes de la finca. Esto solo lo sabemos Luis y yo. Ni tan siquiera mi  mujer y mucho menos mis hijos a los cuales no les diré nada para que no me la pidan fines de semana. Se hacercaba el momento de estrenarla, la madera ya estaba barnizada y todo en su sitio, incluidos los pocos muebles que necesitamos. Ahora era el momento de darle la sorpresa a mi mujer. Pasaríamos un fin de semana en esta cabaña, ausentes del mundo viviendo nuestras aventuras amorosas los tres juntos.

Luis me planteó una idea, dar un paso mas...probar con una persona mas para salir de la rutina, "¿Te has dado cuenta que las últimas veces Alicia (así digamos que se llama mi mujer), nos dicia de vez en cuando que aún le quedaba un agujero libre?". "¿tu crees que lo decia por solicitar una polla mas y no por hacer una gracia?" le preguntaba yo sorprendido. "No lo se, por que lo diria, pero podemos salir de dudas en nuestra próxima cita" -  contestó Luis. Este se encargó de hablar con un amigo suyo que se dedicaba a lo mismo  que se habia dedicado él. Quedamos en que ambos irian directamente a la cabaña y yo llebaría a mi mujer. Esto ocurrio el sábado pasado 7 de noviembre de 2015. 

Así lo hicimos, yo me dirigí a la cabaña con mi mujer sin decirle a donde nos dirigíamos, solo le dije que teniamos una cita con Luis. Para lo cual se preparó a conciencia, pues sabia que las citas con Luis ira una noche de folleteo. Llegamos a las 5 de la tarde la puerta exterior estaba abierta con lo cual nos introdujimos con el coche hasta junto a la puerta de la cabaña. Allí estaba Luis con el guardián de la finca, yo no veia a nadie mas con lo cual me imaginé que no habria podido venir su amigo. Tras los saludos pertinentes le dije  al guardian que no necesitábamos mas sus servicios hasta el lunes. Alicia me miraba con cara de asombro ¿A que venia el haberla llevado a aquel sitio?, ¿Por que le daba órdenes a aquel señor?.... Cuando el guardian se retiró comenzamos Luis y yo a enseñar a Alicia la finca, con su cesped bien cuidado, un cenador junto al pozo de agua, Una pequeña cabaña donde se guardan las herramientas, un camino adoquinado desde las berjas hasta la cabaña. Rosales en toda la parte interior del cierre (amí me encantan los rosales), luego la pase al interior, Alicia no salia de su asombro, le encantaba lo bien diseñada que estaba la cabaña, los espacios, la chimenea francesa ya encendida, un pequeño espacio  con sillones y una mesilla baja al lado de la chimenea, una cocina y comedor en el mismo espacio separados por una barra alta como en un bar. que servia para pasar la comida de la cocina, de bar o de mesa para  comer, con cuatro taburetes altos. 

"Todo muy guapo, pero ¿cuanto cuesta alquilar este nidito de amor?" - Preguntó Alicia.

Luis y yo nos miramos con una sonrisa pícara

"Esto es nuestro, cariño" - Le dije a Alicia

"¿Como, has comprado esto para nosotros? - Preguntó Alicia sorprendida

Hace casi un año que llevo con esta obra, eso si te pido que por favor no diagas a nuestros hijos que tenemos esto, por que si se enteran  pronto nos comenzarán a venir aqui de retiro los fines de semana..

Mi mujer me brazó y me pegó un fuerte y largo morreo, la sorpresa le habia encantado. 

Nos sentamos a tomarnos un cubalibre al calor de la chimenea, el fresco de la tarde ya abanzada se hacía notar en la calle y ya comenzaba a anochecer debido al reciente cambio de horario. En aquel trisillo estábamos  los tres, Luis a la derecha, Alicia en el medio y yo a la izquierda. Despues de casi tres años ya no teniamos aquellas primeras dudas, ahora si algo nos apetecia ibamos directos al grano. Las persianas ya estaban totalmente bajadas y la puerta trancada, o comencé a magrear las tetas de Alicia la cual se prestaba a ello, poniendonos sus dos manos entre la entrepierna. Luis le lebantó su falda, le quitó el tanga y comenzó a magrearle el coño. Estábamos en plena faena y Luis tubo una llamada de teléfono, al ver el número se incorporó y salió de la cabaña, yo lo sentia alejarse hablando por el mismo. Mi mujer y yo dejamos lo que teniamos entre manos y seguimos bebiendo mientras esperábamos a Luis. Al poco Luis entro de nuevo  en la casa, no trancó la puerta  con llave y sentándose mi guiño un ojo sin ser visto por mi  mujer. Nos desnudamos y  comenzamos un primer precalentamiento en el trisillo. Alicia tumbada a todo lo largo encima de nuestras piernas con la cabeza hacia la polla de Luis a quien se la comenzó a chupar despacio. Yo por mi parte comencé a magrearle el clítoris y a meterle dos dedos en aquel húmedo coño. Así estuvimos un rato. Tras un primer orgasmo de mi mujer, nos incorporamos, seguimos tomando, nos desnudamos completamente y decidimos pasar al dormitorio. Luis despues de una leve penetración a mi mujer sin dejar que  se corriese y yo metiendosela en la boca, le propuso vendarle los ojos y  hacer el amor a ciegas.

Mi mujer se prestó a ello y así lo hicimos, comenzamos a magrearla. ella nos chupaba la polla a relevos (no le entraban en la boca las dos juntas pese a que en alguna ocasión lo había intentado). Luis se lebantó se fué a la puerta he hizo entrar a su compañero Angel. Un hombre alto de 1:80 atlético, el cual tras un pequeño saludo hacia mí lebantando la mano pero sin hablar se comenzó a desnudar dejando ver una larga berga de 20 cm aunque de un perímetro mas o menos  como la mia. Luis retomó su posición y Angel se quedó allí magreandose la polla a la espera que Luis le diese permiso para  incorporarse al juego. Luis hizo  que mi mujer se pusiese encima de él y le comenzó a follar el coño, yo comencé a excitarle el culo con algo de lubricante, el cual por otra parte no necesitaba, pues su culo se abrio a la primera de cambio. Luis me hizo una señal de callar y que me retirase. Le hizo una señal a Angel para que la comenzase a penetrar por el culo, mi mujer comenzaba a dar gemidos de placer por la polla de Luis, pero al verse penetrada por el culo comenzó un movimiento de caderas que le excitaba aun mas. Angel poco a poco le introducia mas y mas aquella polla en el culo y mi mujer intentaba mirar hacia atras, habia algo que no le cuadraba y es que aquella polla la estaba penetrando mas de lo normal. "¿Que pasa, hoy estas muy bien puesto, yo diria que esta polla no es la tuya". Yo me sonreia a la vez que me excitaba viendo a mi mujer siendo insertada por dos pollas diferentes, mi pajeaba viendo la escena. Luis cogio la cara de mi mujer y la puso hacia donde yo estaba diciendome a mi por señas que se la metiera en la boca. Así lo hice y mi mujer se llevó un pequeño susto ¿Otra polla? pensaria, no dijo nada, superada la primera impresión comenzó a chuparmela con gran ímpetu, ya sabia que tenia tres pollas metidas en sus tres agujeros, esto la excito de sobremanera y tuvo un profundo y largo orgasmo que hizo que se tumbara sin fuerzas encima de Luis, mientras nosotros tres continuamos un tremendo y acelerado mete saca, primero se corrio Luis en su coño después Angel se la sacó del culo y se corrio en su espalda y por último yo me corrí en su boca.

Los tres nos quedamos relajados unos instantes, luego mi mujer se quitó su venda para ver lo que pasaba. Se quedó embobada mirando a Angel quien entre sonrisas le tendio la mano. "Hola soy Angel, el que te acaba de follar el culo", mi mujer se dio la mano y con una pícara sonrisa como algo abergonzada y todabía con  la cara de sorpresa le dijo " Hola Angel, yo soy Alicia, la mujer a la que acabas de follar su culo". Tos¡dos tuvimos unas carcajadas y decidimos pasar al salón a conversar. Nos servimos algo de beber he hicimos las presentaciones ya de forma mas informal. Luis habia sido un compañero de abenturas de  Luis como corneador. servia de segunada polla a los matrimonios que habian entrado en una rutina demasiado fuerte Angel nos contaba que los matrimonios que entran en la rutina cotidiana tendrían que probar ya sea como trios, ya sea como mirones (los maridos), o como cornudo consentido. No conozco a ningún matrimonio que haya roto despues de probar esta experiencia. Le contamos a Angel nuestra experiencia y lo bien que lo llevábamos, lo buena que era nuestra vida sexual. Cada uno en su sitio, pues Luis jamas habia intentado tomar mi puesto ni nunca habia puesto en duda lo que mi mujer y yo decidiesemos, desde luego era una gran persona que sabia cual era su sitio en este trio. Angel nos contó que se habia casado y desde entonces no habia vuelto a practicar, de eso hacia ya dos años, hasta hoy que lo habia llamado Luis, y no se pudo resistir pues a parte que le encantaba la idea, le debia un par de favores. Aunque no le complacia ponerle los cuernos a su encantadora mujer. "Pues a mi me ha encantado que le hayas puesto los cuernos, por que a parte de estar bueno y mantenerte en forma, tienes una buena polla, la cual ya habia notado que no era la de mi marido, por que me entro mas de lo normal en el culo"- dijo mi mujer.

La noche transcurrio entre relebos follándonos a mi mujer, Angel y yo relebándonos en el culo, o el coño, si luis se la tenia en la boca. Alicia no se atrevía todabía a que Luis se la metiese por el culo. Entre unas posturas y otras se nos pasaba la noche. A las dos de la mañana nos duchamos y decidimos dejar el folleteo. Luis, Alicia y yo dormiríamos en la cama. Angel en el trisillo, pues no habia sitio para mas en la cama.

Pronto nos quedamos dormidos hasta que a eso de las 7 de la mañana yo sentía unos pequeños suspiros. Alicia no estaba en la cama, se habia lebantado y estaba follando con  Angel. este la tenia a cuatro patas y le  daba envestidas un poco en el coño y otro poco en el culo. Yo desperté a Luis y ambos nos pusimos a ver aquella escena de forma discreta entre sonrisas. Angel se puso de pie cogiendo a mi mujer por las piernas hizándola por encima de sus caderas como si fuese una pluma, le metio la polla de una metida en el coño y comenzo a hacerla subir y bajar a todo lo largo de su larga polla, cuando estuvo a punto de correrse la quitó la puso de rodillas en el suelo y metiendosela en la boca se le vino en ella. Nosotros nos volvimos a acostar (era m uy temprano) sentimos la ducha y al poco Alicia tomo su sitio en la cama entre los dos.  "Os gusto lo que visteis?" nos preguntó... "O sea que nos viste mirando"... "si, y vi la mirada de salidos que teniais los dos". Nos reimos, yo abrace a mi mujer hacia mi, Luis se puso en forma de cuchara bien pegado a Alicia y en esa postura nos volvimos a dormir hasta las 10 de la mañana.

Angel se tenia que ir así que Alicia preparó un opíparo desayuno para recuperar fuerzas. Hantes de irse Angel nos dejó apuntado un número de teléfono.

-Este  es el teléfono de un nuevo miembro del club de los corneadores de Madrid, es un chabal de 25 años, es negro aunque nacido aquí en España, es de origen caboverdiano, tiene una polla de mas de 25 cm. (eso lo dijo mirando a Alicia) y es una persona muy encantadora, es el que se está beneficiando a las mejores parejas. Si deseais sus servicios alguna vez, me llamais a mí primero para que os haga un buen precio y para que os aga un hueco especial de fin de semana. 

Dicho esto se despidió dando  un largo morreo a mi mujer y la mano a nosotros.

- "¿Te gusto la nueva experiencia?"- Le pregunté a mi mujer

- Me ha encantado, todo en si. La sorpresa de esta cabaña, el haber tenido otra polla mas... en fín todo, pero chicos que sepais que a mi me llega con vuestras pollas, no necesito mas.

-  Como alguna vez que otras insinuaban que te quedaba un agujero libre

- Bien, y si que muchas veces cuando me follabais los dos a la vez, pensaba en como sería tener todos mis agujeros llenos es decir tener otra polla, pero ese deseo hicisteis que lo cumpliera hoy y ya está.

- O sea que no quieres que este mandingo te meta su polla de 25 cm.

- Nunca se sabe, por si acaso guarda ese número de teléfono, pero la verdad tengo de sobra con estas dos, dijo poniendo sus manos en nuestros paquetes.

Aun antes de retirarnos aquel domingo, tanto Luis como yo le hechamos un polvo mas a Alicia, esta vez primero Luis y despues yo, para que así se corriese dos veces, no nos apetecia de otra forma.

¿Que pasará en un futuro?... no lo se esto que os cuento sucedí hace unos días, si algún dia decidimos hacer algo nuevo os lo contaré.

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