Tu mirada y sonrisa... la curvatura de esos labios entre gruesos y finos, esos que tanto hombres como mujeres desean probar...
La respiración y desviación de miradas que logran penetrar con tus ojos oscuros, mostrando lujuria y seguridad en cualquier lugar que te encuentres...
El roce de tus labios, tus caricias, tus gemidos y movimientos son un sin fin de sensaciones indescriptibles...
Ese manejo de tu sentido del gusto... El movimiento circular de tu lengua, el batir del sube y baja de sólo la punta de ese órgano húmedo y temperatura perfecta; que enloquece mis carnes...
Tus dedos largos y sedosos, que con vida propia hurgan en mi ser para lograr que mis sentidos se disparen y mis placeres se incrementen...
¿Será qué hay algo más excitante que esto?
¿Será que mis más oscuros e irremovibles secretos sean descubiertos por ti?
Por ahora seguiré viviendo en esa fantasía en la que sólo tú has podido llevarme cada noche que pasamos en nuestro nido de amor.