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Aprendiendo a ser sumisa ll (la marca)

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Al día siguiente me levante temprano estaba muy adolorida por la noche anterior, pero tenía que cumplir con las ordenes de mi amo, antes de bajar de su auto me prohibió usar bragas y ordeno que un vibrador me lo tenía que meter en el culo y otro en el coño así lo ice y me fui a la escuela me sentía muy incómoda con los vibradores dentro de mí pero no podía quitármelos las horas continuaron y yo solo deseaba que el día acabara, la última clase era la de mi amo entre sin mirarlo a los ojos me senté frente a él como me lo había ordenado la noche anterior separando mis piernas para que el viera que lo había obedecido y no traía nada más que el vibrador en el coño el miraba disimulada mente durante la clase no podía creer que nadie lo había percatado.

La clase estaba por terminar solo faltaban unos diez minutos cuando de pronto deje de hacer mi trabajo cuando sentí como algo comenzaba a vibrar dentro de mi culo inmediatamente supe lo que era mire a mi amo el cual me miraba con una sonrisa sádica con su mirada me dijo que continuara escribiendo, lo intente pero de pronto el vibrador de mi coño comenzó a funcionar a lo que deje escapar un gemido ahogado intentando simularlo mire a mi amo y con mi cabeza le dije que no pero eso solo lo motivo a subir la potencia de ambos vibradores, me mordía los labios intentando no gemir, los mordí hasta hacerme daño ya no aguantaba necesitaba sacarme los vibradores lleve mi mano por debajo de mi falda pero enseguida la intensidad subió muy bruscamente no pude contenerlo más di un gemido muy fuerte que todo el salón me miro apenada agache mi cabeza sin pronunciar palabra a lo que mi amo dijo

-¿Qué le pasa se siente bien?

Él sabía perfectamente lo que había pasado, me sentía tan humillada y apenada que solo me retranqué contra mi butaca sin decir nada.

-muy bien chicos ya váyanse a sus casas el trabajo se califica mañana.

Cuando todos salieron él se levantó de su escritorio fue hacia mi butaca y me susurro al oído

-no puedo creer lo puta que eres.

No podía decir nada me sentía tan sucia y avergonzada que solo veía mi butaca. El me tomo de la quijada muy fuerte tanto que me hizo daño, me hizo levantar la mirada y dijo:

-eres una sucia, maldita guarra de mierda no sabes las ganas que tengo de castigarte por ser tan puta.

Me soltó y camino hacia la salida, sabia en donde tenía que esperarlo para que el me recogiera así que me levante y fui hacia ese lugar no tardó mucho en llegar, subí al auto con la mirada baja.

-hay algo que quisieras decirme putita tienes permiso para hablar (me dijo mientras tomaba una bolsa negra detrás del asiento)

-no amo, sé que lo que acaba de hacer me lo tenía bien merecido por ser tan puta y necesito un buen castigo por serlo (dije sin mirarlo a los ojos).

-claro y lo tendrás putita ayer fui muy blando contigo ya que fue tu primera vez, pero con lo que hiciste hoy en el salón merece un buen escarmiento (dijo mientras sacaba un collar de la bolsa negra).

Levante la cabeza sabía que tenía que ponérmelo, el me lo puso y junto con el también una correa de perro.

-ahora eres oficialmente mi perra (dijo jalando fuertemente la correa haciéndome caer a unos pocos centímetros de su verga).

El comenzó a conducir yo baje su cremallera y saque su enorme polla, la lamí y posteriormente comencé a mamársela, no la metía completa debido a que no quería tenerla hasta mi garganta, pero él me volvió a tomar del pelo y dijo:

-cómetela toda puta tienes que aprender que siempre tiene que ser toda.

De nuevo comenzó a manejarme sin dejarme respirar, de pronto me soltó y dijo:

-masajea mis huevos y también chúpalos.

Comencé a hacerlo sin chistar no quería que mi amo se molestara, lo hice hasta que llegamos a su casa, el tomo la correa y la jalo haciendo que yo saliera junto con él, no podía seguirle el paso en cuatro patas así que él me jalaba muy fuerte si la correa se tensaba, al cerrar la puerta inmediatamente comencé a desvestirme hasta quedar completamente desnuda frente a él de rodillas el aún tenía la correa en sus manos la cual jalo haciéndome quedar en 4 patas y dijo:

-ahora ya tienes un collar de perra tendrás que comportarte como una, a partir de ahora quiero que, si quieras pedir permiso para hablar, des tres ladridos y cada vez que yo te lo ordene tienes que ladrar como la perra en celo que eres me entiendes.

-¡guau!

-eso es aprendes rápido puta, ven acá que te tengo que castigar por ser tan ramera (dijo jalando mi correa).

-guau (dije caminando detrás de mi amo).

Entramos a su habitación y quitándome la correa me aventó en la cama saco los vibradores de mi coño y de mi ano y saco del armario unas pinzas unidas por una cadena de metal y otra casi igual pero las pinzas eran diferentes, unas las coloco en cada uno de mis pezones, estaban muy apretados y no pude evitar soltar un quejido

-si ya sé que duela, pero eso te ganas por ser tan zorra, no te pudiste aguantar un orgasmo en el salón he, querías que todos vieran lo puta que eres he, querías que alguno de esos imbéciles te clavara su verga verdad (dijo apretando cada vez más las pinzas).

-¡Guau! ¡Guau! ¡Guau!

-si putita tienes permiso de hablar.

-amo perdóneme por ser tan puta no puedo evitarlo, pero la única verga que quiero es la suya amo yo aria lo que sea por su verga (dije tratando de aguantarme el dolor).

-no tienes mi perdón, guarra, si quieres mi perdón vas a tener que ganártelo con sangre (dijo desabrochándose el cinturón).

Se bajó los pantalones y dejo ver su vergeta erecta apuntando hacia mí, se acercó y de manera violenta metió su enorme verga dentro de mi coño perfectamente lubricado, comencé a gemir sin parar, pero el jalo la cadena lastimando mis pezones y dijo:

-no ladra perrita, ladra.

-¡Guaaau! ¡Gu... Haaa... Haaa guaaau! Mmm... Haaa... Haaa... Haaa... ¡Guau! ¡Guau!

-eso es zorra ahora dime putita que eres (dijo embistiendo más fuerte).

-ss... Soy... Soy una pe... Haaa... Haaa... Tu perraaa... Soy tu puta... Haaa... Haaaa... Haaa.... Solo sirvo para haaa... Haaa complacerte sexualmente.... Yo no valgo na haaa... Haaa... Haaa... Amo por favor déjeme correrme corrámonos juntos.

De inmediato saco su verga y dijo:

-no si quieres correrte tendrás que hacerlo por ti misma.

-no, no amo por favor se lo suplico cójame de nuevo por favor no me deje así se lo suplico haga que me corra por favor se lo ruego haré lo que me pida, pero por favor cójame (le dije pidiéndoselo de rodillas).

-si quieres que te coja te dejaras que te marque con un cigarro la frase "soy una puta" con un cigarrillo en las nalgas (me dijo mientras sonreía de manera dominante).

Ni siquiera lo escuche bien de tanta excitación que tenía solo acepte para que me cogiera de una vez así que me tumbo de nuevo en la cama y comenzó a cogerme con violencia hasta que llegue a mi orgasmo al terminar él me dijo:

-bien ahora en cuatro.

Saco de su pantalón una cajetilla y encendiendo un cigarro me dijo:

-hasta donde llega tu putería ahora tendrás esa marca por siempre para recordarte lo puta que eres.

Comenzó a pegar el cigarro encendido en mis nalgas comenzando a escribir, mientras que yo gritaba y suplicaba que parara, pero él dijo:

-lo prometido es deuda zorra.

Cuando termino como un artista orgulloso de su trabajo firmo mis nalgas y dijo:

-listo puta ahora quiero que te vayas a dar un baño para calmar el ardor y luego te llevare a tu casa.

Me bañe y al terminar él me dijo:

-mañana te espero donde siempre a la 10 quiero tenerte todo el fin de semana como mi esclava así que te vas inventando algo para que tus padres no pregunten por ti este fin.

-amo este fin iría a visitar a un pariente (dije).

- no te estoy preguntando perra te estoy avisando y pobre de ti si no estás ahí (dijo dándole la última inalada al cigarrillo).

-si amo ahí estaré.

Continuará.

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