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La primera vez que mi esposa le mamó la verga a su jefe

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Vivo en una provincia de México, cerca del mar, mi esposa trabaja en una empresa de importaciones desde hace varios años, tiene unas tetas riquísimas y unas nalgas exquisitas, unas piernotas que se le quedan viendo en la calle; además tiene una cara de niña dulce y tiene un jefe al que ha cachado viéndole las nalgas y las tetas.

He de decirles que mi esposa me cuenta todo lo que le dicen los hombres, aunque ella nunca ha estado con nadie más, y aunque es un poco penosa, le he comentado que me gustaría que probara otra verga; un día en casa ya acostados en nuestra cama me dice que estaba excitada porque ese día su jefe le había dicho que se veía muy sexy con ese vestido que llevaba y que su cuerpo lucia muy atractivo, a lo que no contesto, solo sintió que se ponía roja, pero que se éxito mucho de lo que le dijo y le dijo que si al día siguiente le aceptaba una invitación a tomar algo; le dije que le aceptará la invitación y que quizás con un poco de suerte podría probar otra verga, que me contará después lo que había pasado.

Al día siguiente se fue a la oficina y se vistió con una blusa camisa con botones al frente, una falda ajustada arriba de las rodillas sin llegar a ser minifalda, panty tipo bikini y sostén de media copa y pantimedias caladas, en la noche llegó a la casa ya la estaba esperando y le pregunte qué había pasado, entonces me dijo con una sonrisa que me iba a contar todo con detalle y es lo que les comparto a ustedes.

Cuando llegué a la oficina mi jefe me dijo que necesitaba que lo acompañará a hacer unos trámites a una de las aduanas estaban rumbo a la zona costera, nos subimos a su camioneta y mientras íbamos en camino, me empezó a platicar que no tenía  buena relaciones con su esposa; mientras me platicaba saco una caja de chicles y me lo ofreció, el cual acepte y comencé a masticarlo, cuando me di cuenta había tomado camino rumbo a la zona de restaurantes de la playa y de inmediato le pregunte «¿no que íbamos a la aduana?» y me dijo «No... eso fue un pretexto para estar contigo a solas y platicarte algunas cosas» y me preguntó si conocía esas playas y le dije que sí que eran muy bonitas y muy tranquilas.

Durante el trayecto me siguió platicando de su esposa, hasta que llegamos a la zona de restaurantes me dijo que lo esperara, al poco rato regreso con una hielera, con vasos y refrescos y licor, siguió rumbo de la zona más alejada de la playa y se estacionó, me platicaba que ya casi no convive con su esposa... y que casi no tiene relaciones sexuales... que lo hace muy rara vez. Para esto, ya me había servido una cuba y cuando ya me había tomado como la mitad, me empecé a sentir caliente y no sabía que me estaba pasando, después de un rato me dijo que nos pasáramos al asiento de atrás, que era más cómodo.

Nos pasamos al asiento de atrás y el siguió platicándome de su esposa... se acercó a mí y me abrazo... yo le dije cosas para animarlo..., no tuve fuerzas para decirle que no me abrazará, le dije que sentía mucho lo que estaba viviendo... y mientras le decía eso me dio un beso en la mejilla y me dijo que me agradecía la confianza y que, desde que me conoció, le gustaba y me dio un beso en la boca... el cual no rechace.

El aprovecho mi desconcierto y cogió una de mis manos y la puso en su verga que estaba ya como piedra... bien dura ... y sentí una corriente eléctrica que recorrió mi cuerpo... y dejé mi mano ahí sin decirle nada y puso una de sus manos en una de mis tetas y.… wowww... nuevamente sentí esa corriente en mi cuerpo y cada vez más excitada y empecé a apretarle la verga... la tenía como piedra... el me besaba apasionadamente y apretaba más y más mi teta.

En eso, se bajó el cierre del pantalón y saco su una tremenda vergototaaa como de 25 cm y gruesota y me puso la mano en ella y se la empecé a apretar bien fuerte y empecé a masturbarlo ... el entonces me empezó a besar en el cuello... y a decirme que así, que así se la moviera..., mientras me besaba el cuello... desabotono mi blusa y me saco las tetas del bra y las empezó a mamar... fuertísimo... yo... me sentía cada vez más caliente con lo que me hacía, el seguía diciendo...  “así... así me gusta sentir tu mano en mi verga” y empezó a llevar mi cara hacia su verga para que se la mamara, pero se detuvo y me dijo... “Píntate los labios” y sin responderle tome mi bolso y saque un lápiz labial rojo y empecé a pintarme los labios; mientras me subía la falda y empezó a acariciar mis piernas.

Después me puso la mano en su verga de nuevo y llevo mi cara hacia su verga para que se la mamara y me dijo... quiero que se despinten tus labios en mi verga, me sentía cada vez más y más caliente y excitada mis pezones estaban durísimos y a punto de reventar…. le empecé a mamar la verga y se la apretaba y lo masturbaba... con su verga en mi boca, que me llegaba a la garganta y ... le faltaba como la mitad para que me entrara toda, le pasaba la lengua por el glande y la chupaba, le mordisqueaba la cabeza que era enorme y con el líquido se veía brillosa, le decía que verga más rica tiene que vergota mmmmm que rica esta que dura se sienteee, mientras el me apretaba las tetas... y pellizcaba mis pezones y eso me ponía más y más caliente, yo seguía mamándole su vergota que me tenía asombrada, la disfrutaba y cada vez se sentía más dura hasta que sentí el chorro de leche en mi boca y que bárbaro salió una cantidad enorme de leche, no puede evitar tragarme el primer chorro y los siguientes cayeron en mis labios, en mi cara y en las tetas y me decía “eres maravillosa que rico la mamassss ahhhhh que deliciosa boca tienes ahhhhhh", después que se vino se la deje limpiecita.

Después se guardó la verga en el pantalón, yo me acomode las tetas dentro del bra y cerré la blusa, sirvió otras dos cubas una para él y otra para mí y me siguió platicando de su esposa, yo me sentía bien caliente y... bien húmeda de mi panocha y de la leche que derramo en mis tetas, cara y bra que quedó todo empapado y batido; después nos pasamos a la parte de atrás de la camioneta para seguir tomando nuestras cubas y entonces me dijo no sabes  que bien que me has hecho con la confianza que me estás dando", me tomo de la cintura y me subió para que quedara sentada en la cajuela.

Como nos habíamos terminado las cubas sirvió otras dos, él se acercó y puso sus manos en mis piernas... sobre la falda y empezó a subirla y mientras me acariciaba las piernas y comenzó a quitarme las pantimedias y yo ayudándole a hacerlo cerrando las piernas, volvió a desabotonarme la blusa, mientras yo me la sacaba de la falda para que la desabotonara completamente, lo cual hizo y saco mis tetas del bra y las empezó a mamar.... me mordisqueaba los pezones, yo gemía y estaba en la gloria, le decía que rico que delicioso siento, mámamelas asiiiii sigue mamándomelas mmmm, le acariciaba el cabello y apretaba su cabeza contra mis tetas, estaba bien caliente y mi panocha estaba empapada.

El seguía mamando mis tetas y acariciando mi piernas y en ese momento me tomo de la cintura y me bajo de la cajuela y quede parada frente a él con las tetas de fuera y el sostén abajo y no me había dado cuenta que él se había sacado la verga y quede parada frente a él con la falda hasta la cintura... y su vergota quedo entre mis piernas, él se acomodó para que su verga quedara acomodada y yo cerré mis piernas para apretarla y.… me decía... "así, así apriétamelas mmmm asiii" y empezó a moverse ... como si me la estuviera metiendo... yo sentía como su verga resbalaba entre mis piernas, rozaba mi panocha encima del panty, el no dejaba de acariciar y apretar mis tetas y pezones y se movía como si me estuviera cogiendo, me sentía bien caliente y excitada sentía que la panocha me chorreaba de lo caliente que estaba y solo decía mmmmm mmmmm que rico me da.

Después sin pensarlo me hinqué y le empecé a mamar la verga de nuevo y alcance a escuchar un susurro que decía... "ordéñala mamacita mmmm ordéñala, asiiii putita así mámamela"!!!!, eso me prendió mucho más y comencé a mamársela más y más fuerte, le apretaba la verga, con mi boca la chupaba, la succionaba, así estuve mamándosela como unos 5 minutos... el empujaba mi cara contra su verga, me agarraba con sus dos manos mi cabeza y.… me cogía por la boca... la metía y la sacaba fuerte muy fuerte, me decía así mamacita comete mi verga putita cometela, se ve que sabes mamarla, como tenía ganas de tenerte así putita mamándome la verga ahhhhh, tienes unas tetotas riquísimas y un culo delicioso, lo que me decía me excitaba más y más y me sentía más caliente, no me reconocía de lo que estaba haciendo, mamándosela a mi jefe; después él se agacho, me tomo de las tetas  y me levanto.. quede de nuevo frente a él y con su verga entre mis piernas. Así se estuvo moviendo como si me cogiera hasta que se deslecho, esta vez me baño todas mis piernas y mis panties, yo quería venirme... quería que me tocara mi panocha y me hiciera verniiirr... ya no aguantaba las ganas.

Después el me volvió a tomar de la cintura y me volvió a sentar en la cajuela, abrió mis piernas y las empezó a acariciar, llego a mis pantys y las hizo a un lado... metió tres dedos, al sentir sus dedos exhale un suspiro prolongado ahhhhhh y sentí que me chorreeeabaa todaaa, estaba hecha una puta, me empezó a dedear mi panocha yo solo gemía mmmm mmmm y decía que rico mmmm, sigueee sigue que ricooo, apretaba mis piernas para sentirlo más, me mordía los labios, él me decía que rica estas que papayota rica tienes y húmeda putita, así te gusta, te gusta verdad putita me decía él y yo le contestaba siiii me gusta soy una putita siiiiii sigueee ahhhh que ricooo ahahah y estaba a punto de venirme cuando apretó una de mis tetas y me pellizco y estiro fuerte el pezón que exhale un suspiro prolongado ahhhhhhhh siiiiiiiiiii y grite me vengoooo ahhhhh me vengoooooo y.. siii... me vineeeeee ricoooooo, sentí que me oriné, sentí un súper orgasmo como no lo había sentido.

Cuando termino yo me acomode la ropa como pude... metí mis tetas en el bra, cerré la blusa, me puse las pantimedias y no me importo que mis pantys estuvieran mojados de leche; mientras el... prepara otra cuba y.… nos sentamos los dos en la cajuela sin hablar, después de un rato le dije que nos regresáramos a la oficina que podían sospechar la tardanza y más que sabían que estaba conmigo y que era casada, me respondió que, si nos regresáramos, ¡pero lo hiciera venir una vez más con mis manos!

Sin decir más sacó su verga del pantalón... de nuevo ya la tenía como piedra... durísima y empecé a acariciársela y a masturbarlo más y más rápido, después de un rato... lo volví a deslechar con una súper venidota... se deslecho muchoo... y.… fue la tercera vez que lo desleche... se vino en mi mano ... me la llenó de leche que limpie con mi boca y le dije que ya regresáramos a la oficina.

En el trayecto de regreso me dijo que no quería causarme problemas en mi matrimonio y que esto que había pasado había sido la calentura del momento y el deseo que tenia de estar conmigo; yo le conteste que sí que había sido la calentura y que no se volvería a repetir.

Cuando término de contarme tenía la verga parada y pude comprobar que su bra y pantys estaban manchadas por doquier de la leche que derramó su jefe en ellas.

 

Esta es la historia contada por mi esposa, espero haya sido de su agrado y la hayan disfrutado como yo cuando me la contó, cualquier comentario al correo [email protected]

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