Quiero contarles una experiencia real
Hace mucho que tenía la fantasía, el deseo de estar con una travestí, la suma de pene y tetas me dio siempre morbo.
Llamé, arreglé y fui a visitar a una de las chicas que publica. Es famosa por lo cogedora.
Me hace pasar, me esperaba en pollerita como yo le pedí. Me besa mientras me toquetea el asterisco. Me hizo chuparle ese monstruo que le cuelga entre las piernas, me la mete tan adentro que no me deja respirar, se da cuenta y lo saca cada tanto para que yo tome una bocanada de aire. No me daba placer, pero me fui sintiendo cada vez más afeminado, sumiso y dominado. Se dio cuenta, tiene mucha experiencia y es como si fuera leyendo mi mente, estaba totalmente a su merced.
¡Me acomoda en su cama y me la puso de una por la cola y sin preservativo!!!
Yo sé el altísimo riesgo de contagio, pero en ese momento yo solo quería que ella hiciera lo que tenía ganas de mí. Que estuviera caliente y que me desee mucho.
Me hizo doler horrores, y parecía que verme así la excitaba más y buscaba la forma de hacerme doler más. Cuando me veía lagrimear, me pedía que me calmara y relaje la cola, la sacaba y me la ponía de una hasta el fondo. Estuvo así cogiéndome, martirizándome por lo menos media hora, me cambio varias veces de posición, hasta que me pregunto dónde quería la leche, y yo solo supe decirle que en la boca y me la trague toda. Me lavé y me fui. Me dolió la cola una semana, me dejo todo lastimado.
No puedo olvidarme ni un momento de todo lo que me hizo, no puedo entender bien que es lo que le da placer. No sé si la odio o la amo.
Esperé 6 meses angustiado para hacerme el análisis de HIV que por suerte dio negativo. Besos.