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Lo que hace el alcohol...

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Como casi siempre luego de una semana de largas guardias y cansancio normal por las cosas diarias nos sentamos a tomar unas smirnoff, le alabe la forma en que se veía, le hice notar que expresaba mucha seguridad y trasmitía una belleza que por alguna causa le sentaba bien por demás...

Luego de una hora de tomar y reír por las cosas triviales y aprovechando que el alcohol ya estaba haciendo su efecto de desinhibición le disparé una pregunta que nunca le había hecho directamente, le pedí que me dijera cuál era su mayor fantasía y si había alguna manera de realizarla a lo que sin pensarlo mucho me responde que cuando esta excitada fuera de casa, más específicamente en su trabajo la idea de hacer "el amor" con muchos hombres la calienta muchísimo y aunque ya lo hizo con dos hombres a la vez su fantasía (y se ríe cuando me lo dice) es algo que nunca voy a hacer pero es mi fantasía de toda la vida.

Aquí es donde luego de un suspiro me doy cuenta como el calor empieza a arrasarla y su excitación se pone a millón, me dice que ha tenido en un par de oportunidades que lavarse la cara para refrescar sus deseos de ponerse puta con algún familiar de los pacientes y que su cuerpo se pone en un estado de excitación tan grande que no le importa nada más que pensar en cómo hacer para ver como ese hombre que tiene al frente la baña con su semen, me confiesa que le excita el olor a leche recién eyaculada y que cae en un estado de shock cuando le dicen cosas obscenas y groserías en su cara, sus cachetes se ponen rojos y con su mente puesta en mi verga solo se recuesta un poco y sin previo juego se traga la cabeza y la chupa como si estuviese salvándome la vida con su boca.

De verdad veo como ha adquirido técnica, me agarra las bolas y las aprieta mientras sin dejar de chupar sube y baja con su cabeza y se devora mi verga con desesperación, la única cosa que quiere en ese momento es sacarme la leche como trofeo, me mira directo a los ojos y veo su hambre por el semen y para no hacer más largo el relato les comento que no solo se relamió mi leche sino que de un trago termino su smirnoff y me dijo que si no estaba listo para metérselo que prendiera la camioneta y saliéramos a buscar a su amigo el taxista para que complete el trabajo...

Otro día, otra historia...

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