Nuevos relatos publicados: 6

Mi primera vez con Leo -2-

  • 5
  • 20.024
  • 8,73 (51 Val.)
  • 2

Cuando me levanté seguía desnuda y Leo no estaba en la habitación, después de aquel polvo necesitaba una ducha así que fui al baño, observé en el espejo mi cuerpo desnudo y pude ver la marca de los mordiscos y los cardenales que habían provocado en mi culo las envestidas de Leo...

Cuando estaba en la ducha noté una presencia en él baño y antes de darme cuenta Leo estaba metido conmigo en la ducha dándome un morreo, que digo el morreo de mi vida el enlace entre su lengua y la mía hacia que saltaran chispas por todo mi cuerpo.

LEO- Es tarde deberías volver a casa no quiero que castiguen a mi zorrita.

YO- Tienes razón… pero... ¿Por qué ahora me tratas así después de tanto tiempo siendo dulce...?

LEO- siempre que me escribías me lo pedías y los dos hemos comprobado que no sólo eres una zorplacer, si no que te gusta que te trate como tal.

Le respondí con una mirada en la que se leía perfectamente "tienes toda la razón, pero no voy a aceptarlo".

LEO- como te gusta resistirte… mañana es sábado y no tienes clase inventate alguna excusa para venir mañana sin ropa interior y una camiseta en la que se noten tus pezones duros con ganas de verme. Y ahora vete.

.....

A la mañana siguiente me desperté bien temprano, no había descansado bien, acostumbro a dormir boca abajo y el intenso dolor que aún tenía en el pecho no me dejó dormir bien.

Me di una ducha de agua fría para que mis pezones se pusieran aún más duros me coloqué una blusa blanca escotada que no sólo marcaba mis pezones si no que dejaba trasparentar mis grandes areolas, unos jeans cortos y tomé un taxi hacia el hotel. Cuando llegué allí Leo estaba sentado en recepción leyendo el periódico, me acerqué a él y ni siquiera me miró.

LEO- ¿quieres que te folle o que te haga el amor?

Ante esa pregunta no tenía repuesta, después de lo del viernes no tenía claro nada.

LEO- vamos, te he hecho una pregunta, si no quieres responderme también he pensado en un juego...

YO- ¿en un juego??

LEO- sí, ve al recepcionista apoya tus tetas en el mostrador comienza a coquetear con el hasta que tengas el coño bien húmedo y luego le dices al oído que vas a follar conmigo o que vas a hacer el amor conmigo, tú decides, tienes que decírselo al oído, pero dilo lo suficientemente alto para que yo lo oiga, después vendrás aquí para que te meta la mano en los pantalones para comprobar si estás realmente mojada. Ah mientras estás apoyada en el mostrador alza bien tu culito quiero una buena panorámica.

Sin rechistar me acerqué al mostrador comencé a preguntar al recepcionista horarios de buses mientras notaba como algún turista aprovechaba para rozar mi trasero al pasar.

Al recepcionista poco a poco se le iban los ojos más y más hacia mis escote hasta que ya fue indisimulable, estar expuesta así y que el recepcionista comenzará a hablar sin sentido mientras metía la mamo en su bolsillo me hizo mojar, se acercaba el momento tenía que decidir follar o hacer el amor...me acerque a su oído y le dije " aquel hombre de allí ayer me folló como la perra que soy, pero hoy me va a hacer el amor" me di media vuelta y con la mirada incrédula del recepcionista a mi espalda Leo metió una mano bajo mi pantalón y me asestó un beso que me dejó sin respiración.

LEO- Eres una buena perrita, y te mereces que te trate como a una princesa.

Subimos a su habitación cogidos tiernamente de la mano, al llegar había pétalos de rosas y velas.

YO- ¿cómo lo sabías?

LEO - solo calla y disfruta.

Me besó gentilmente comenzó a acariciar me por la cintura y fue levantándome la camiseta con una dulce caricia hasta quitármela, se puso a besar mi cuello y fue bajando hasta llegar a mi vientre  con mucho cariño desabrochó mi pantalón, lo dejó caer al suelo, me tendió la mano y fuimos hasta la cama, me tumbó en la cama y comenzó a besarme desde mi boca mi cuello, besos en el pecho que me hacían saltar hasta que llegó a mi rajita comenzó a lamerla suave y luego fuerte y luego suave y metiendo la punta de la lengua en mi entradita.

LEO- confía en mí.

Se puso sobre mí, apoyó su verga en mi entrada y la fue metiendo poco a poco, esta forma de hacer me tenía extasiada, cuando Leo entró del todo se quedó ahí unos segundos hasta que comenzó un va y ven que poco a poco aumentaba el ritmo hasta que culminó con los dos corriéndonos de placer.

Ésta también había sido mi primera vez, la primera vez que hacía el amor, es muy distinto a follar, me había sentido querida princesa y tratada con gentileza sin embargo los pocos modales hacían que deseara tener dentro a Leo de una forma casi obsesiva… no sabía que vendría después.

Después de hacer el amor descansamos y le dije que podía comer con él y pasar la tarde juntos...

Continuará.

(8,73)