Continuación de “Un tipo con suerte”.
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Tal cual les había contado mi segunda salida con mi vecina Ana no pudo ser ya que tuvo una emergencia médica lo que me permitió conocer un poco más a fondo a su hijo René y su amigo Kai.
Pasaron los días y todo se fue normalizando. Salí varias veces con Ana que fueron maratones de sexo, la mujer era incansable.
Al que tarde en verlo fue a René quien una mañana me toca la puerta y me dice.
—no puedo ir al colegio, puedo quedarme aquí —y le respondí− si claro, pero que tu madre no se entere o tendré problemas.
Entró y se acomodó en el sillón diciendo.
—hoy te quedas en casa, parece.
—sí, estoy unos días de descanso que aprovecho para estar con tu madre –dije.
—pues ella acaba de salir a trabajar así que tienes casi todo el día libre – replicó.
—así parece, aprovecharé para acomodar algunas cosas que aún no terminé desde la mudanza —respondí— y tú qué piensas hacer hoy –agregué.
—No sé, esto es inesperado —dijo— pero nos sirve para charlar un poco sobre cómo sigue la cosa.
—sí, podríamos –dije— sobre qué quieres charlar.
—Kai ayer justamente preguntaba por vos, quería saber si volveríamos a repetir lo de la última vez –dijo.
—Claro que sí —le respondí— solo avísenme.
—te tomo la palabra —dijo y enseguida agregó— ¿no podría ser ahora mismo?, yo llamo a ver que hizo él con este examen.
—bueno, si claro, ¿por qué no? –dije y noté que con solo pensar en una nueva reunión con ambos la pija empezaba a pararse.
Enseguida René advirtió el bulto y acercándose a mí, me acaricia el paquete diciendo.
—por otro lado, podría quedarme solo yo.
—también —le dije− aunque creo que hay para los dos y no hay que ser egoísta ¿no te parece? —agregué ya que me calentaba mucho más estar con los dos.
La verdad era que cogerme nuevamente a René era una muy buena perspectiva sí, pero esa reunión con los dos, el solo recordarla la pija se ponía a full.
—bueno déjame hacer unas llamadas —dijo René.
Agarró su celular e hizo unas llamadas, vi que hizo al menos tres, para volver después y decirme que ya estaba todo arreglado.
—Cómo anda todo con mamá —me dijo mientras esperábamos yo tomando un café.
—Bien, bien —le dije, y agregué— ¿sabe algo de tu condición sexual de gay?
—Creo que si lo sabe, aunque no pregunta directamente, además no soy gay soy bisexual, Kai es gay —replicó.
—además eso tampoco me preocuparía mucho porque es una mujer muy abierta, ya la conocerás bien —agregó riéndose.
— a ver explícame —le dije— que no entiendo la risita.
—es una mujer abierta al sexo de todo tipo, eso quise decir, le gusta de todo por lo que pude apreciar y no critica a los demás.
—no te entiendo bien —le dije.
—bueno llegó la hora que conozcas los secretos familiares que pocos sabes, incluso creen que yo no los sé —mencionó riéndose.
—de que secretos hablas —dije.
—mira —dijo— desde chico he visto cosas y las he entendido. Mi madre por ejemplo es amante de su hermana mi tía y juntas hasta donde se han intervenido en algunas fiestas grupales.
—¿y cómo lo sabes? —pregunté.
—tengo un oído muy fino, además también me cogía el ex novio de mamá y él me contó varias cosas, el resto es simple deducción.
—O sea que a veces estuvieron juntos todos —pregunté.
—al menos mamá, mi tía y él sí —replicó— y sin saberlo a ciencia cierta, hasta me animaría decir que sabía que de vez en cuando me costaba con su novio, sin decirme nada.
Quedé anonadado, conocía a Ana y sabía que le gustaba mucho el sexo, pero esto modificaba muchas cosas, abría grandes perspectivas como la hermana, reuniones.
—Y vos nunca has participado con tu madre en alguna cosa juntos — pregunté.
—No para nada, ni con mamá ni con la tía —me dijo mirándome con cara de asombro.
En ese momento sonó el portero y René abrió la puerta de abajo, creí ya había llegado Kai y me esperaba una buena sesión de sexo, así que dejé de pensar en eso, de eso me ocuparía más adelante.
Tocaron la puerta del departamento y al abrir entraron 4 chicos y 2 chicas, de Kai ni noticas. Me acerqué a René y le pregunté:
—¿qué es esto, no venía Kai solo y encima él no está?
—Kai entró a clases —dijo— así que llame algunos amigos de la escuela que concurren al mismo boliche al que vamos juntos.
—se va a enojar conmigo cuando se entere que lo hicimos sin el —y se reía.
—Además —me dijo sonriendo— no hay chicas hoy son todos varones y están aquí para que vayas eligiendo sin problemas.
Eran entonces 6 chicos de la misma edad que René y Kai, me llamó la atención que tan rápidamente consiguiera tantas personas.
Dos de ellos pasaban por chicas, hasta tenían caderas anchas y algo de busto, chico, pero tenían.
Enseguida René organizó todo.
—chicos ese es el dormitorio a ponerse cómodos.
Todos ingresaron al dormitorio unos minutos después salieron cambiados, vestían ropas sueltas camisolas sin pantalón o polleras. Las dos con aspecto de chicas por ejemplo vestían solo bombachitas chicas sin nada arriba lo que mostraba un par de tetitas turgentes y atrayentes.
Pusieron música, René sacó bebidas y bajaron las luces quedando todo casi en penumbras, algunos comenzaron a bailar.
Yo me senté en el sillón simplemente mirando. Vi como algunos ya bailaba juntos y empezaban a tocarse, se contorsionaban.
De pronto veo que en un costado sobre la alfombra ya uno de los chicos le chupaba la pija a otro, se estaban formando parejas que se intercambiaban constantemente.
Se me acerca René y me dice:
—desentonas así vestido, ponete algo más cómodo y volvé conmigo.
Yo fui al dormitorio y me cambié colocándome una camisa solo abrochada por los dos últimos botones que dejaban a la vista el velludo pecho que tengo. Abajo solo los calzoncillos.
Salí y busque a René, ya estaba ocupado, estaba haciendo un 69 con otro chico sobre el sillón, además junto a él uno de los chicos penetraba a otro y se movía para todos lados.
La pija la tenía a 1000 ya estaba bien parada.
Se me acerca uno de los chicos con pechos.
—hola soy Sam —me dijo— Sam de Samanta, ¿vamos a bailar?
Me toma de la mano y me abraza despacio. Empezamos a bailar pegados, se abraza a mi pecho y juega con los pelitos. Se da vuelta y se pega a mí mientras seguimos bailando, solo tiene colocada una bombachita muy diminuta, así que mi pija se apoya en su canal casi de inmediato. Lo siente y aprieta hacia atrás, yo lo abrazo acariciando esos pechitos con mis manos.
Seguimos así por varios minutos, después me dice:
—vení —y me lleva al sillón, haciéndome sentar entre René y la pareja que estaba cogiendo.
Me siento, me abre las piernas, se arrodilla frente a mí y me quita el calzoncillo, mira la pija, sonríe y empieza a besarla despacio. Al mismo tiempo siento que me acarician desde ambos lados, René con su mano desde la izquierda y el chico a quien cogían desde la derecha
Sam seguía besando ya tenía la pija en la boca y chupaba, veo que el chico de mi derecha que estaba en cuatro sobre el sillón baja la cabeza y también empieza a chuparme el tronco de la pija mientras otro se lo coge. Enseguida ambos me comparten sin decir palabra.
Siento como van chupando, mientras me acarician las bolas, las piernas, la espalda, estoy gimiendo como un marrano y cierro los ojos.
De pronto los abro y veo que Sam se había sacado la bombachita y está por sentarse sobre mi pija, se abre los cachetes y siento como va entrando, empieza a subir y bajar, está de espaldas a mí, le beso la espalda se la lamo, se la mordisqueo.
Miro a mi derecha y lo que veo me impresiona, como dije había una pareja cogiendo, pero a su vez detrás de ellos alguien comenzó a penetrar a quien penetraba y se hace una cadena de tres que se mueven al unísono.
En el departamento solo se escucha la música y muchos gemidos de placer.
Ante todo, esto se ve que me pongo lento para terminar, no siento que quiera hacerlo, pero sí me doy cuenta que Sam lo hace y eso me calienta aún más. Sam se levanta y me sonríe, lo agarro, lo acerco y comienzo a chuparle las tetitas, se estremece, quiere agarrarme la pija, pero no puede, ya me la está chupando quien estaba con René, quien desapareció de mi vista
Sam se levanta y se aleja, buscando algo para tomar yo quedo en el sillón mientras dos chicos me chupan la pija uno a la izquierda y otro a la derecha y yo les acaricio las colas.
Veo pasar un chico que me había llamado la atención, un culo hermosísimo, con la cintura quebrada hacia afuera al caminar, eso lo mostraba aún más salido.
No aguante más y me levanté, lo tomé de la mano y lo acerqué al sillón.
—te quiero chupar ese culo —dije, solo sonrió diciendo— hola soy Bea.
Lo di vuelta y se puso en cuatro sobre el sillón, comencé a besarle el culo, comenzó a gemir. Sentí que alguien, después supe que René empezaba a chuparme el culo, y las bolas a mí.
Jugaba yo con la lengua en esa colita tan bien formada, lo cual me calentaba aún más. Una vez llena de saliva empiezo por meterle un dedito despacio, entra de a poco siento que se resiste un poco, pero sigo muy despacio y mojándolo constantemente hasta que entra totalmente.
Percibo que al lado debajo de una pareja cogiendo, hay un pote chico de crema, lo agarro lleno el dedo de crema y de nuevo embisto despacio. El dedo entra casi sin problemas, siento que se afloja cuando empiezo a moverlo despacio, lo meto lo saco, lo doblo un poco adentro girándolo. Pronto empiezan los gemidos y eso me anima a tratar de colocar dos dedos, que antes lleno de crema.
Empiezan a entrar nuevamente dos dedos, detecto cierta resistencia y aflojo, pongo más crema y empiezo de nuevo. Ya va la mitad de los dedos y empieza a aflojar despacito, los enpujo todos adentro y los muevo de apoco, tranquilo.
Nuevamente escucho los gemidos, yo continuo hasta que escucho que me dicen al oído –metésela—, reconozco la voz de Sam que era uno de los que estaban junto a mí, le hago caso, levanto la pija y empiezo a empujar, pero no entra, el trata de zafar, veo que aún duele. René me alcanza la crema y le con eso baño toda la pija.
Comienzo a penetrarlo de a poco, se resiste, pero lo agarro y no lo dejo moverse.
La pija va entrando de a poco y siento que quien la recibe gime, eso me envalentona y la empujo de golpe, pega un grito, todos lo escuchan, todos se acercan y empiezan acariciarlo y a besarlo.
—es su primera vez —siento al oído en la voz de René, ahí me doy cuenta que antes no gemía, sino que lloriqueaba.
Ya hacía unos minutos que la pija había entrado hasta el fondo así que pensando en cómo le dolía trate de sacarla y escucho.
—no la saques movete pelotudo —que me dice Bea.
Empiezo a moverme despacio, hacia afuera hacia adentro, Bea empieza a gemir no se mueve, pero gime y veo que es de placer, sigo bombeando y de a poco siento que se empieza a mover ayudándome en la tarea.
Unos minutos después siento que el explota y eso hace que yo también termine entonces la saco chorreando semen y Bea agarrándola con las manos comienza a tomarse toda la leche, limpiándome la pija de todo y dejándola limpita nuevamente.
—Gracias, me gustó mucho, fuiste muy dulce —dijo y se alejó despacio.
Yo me siento y me quedo quieto, entonces otro de los chicos se acerca y empieza nuevamente a chuparme la pija, esta se levanta nuevamente.
René se acerca desde atrás al chico que está chupándomela, y lo penetra, empieza a bombear.
Siento que quien me la chupa lo hace con más ímpetu, más energía, al rato evidentemente acaba y pierde interés, se levanta y se mueve de lugar.
Se me acerca René y me dice:
—Papi aun no me la metiste, y eso no te lo voy a perdonar —mientras comienza él a chuparme la pija.
—sentate arriba —le digo.
—no, vení —me dice y se acuesta boca abajo en la alfombra— metémela así.
Me acuesto sobre él y apoyo la punta de la pija en el agujerito del ano, empujo y la pija entra fácilmente, se ve que ya fue penetrado varias veces hoy.
Empiezo a moverme y a ambos empezamos a gemir de placer, siento que alguien empieza a chuparme el culo. Volteo la cabeza y veo a Bea que me sonríe.
Alguien se sienta delante de René con las piernas abiertas y le ofrece su pija que él acepta en su boca con placer. René esta desatadísimo, ya lo puse en cuatro y está siendo perforado analmente por mi mientras le hace una paja a Bea y por otro lado le chupa la pija a otro.
Esta situación me pone a 1000 y siento que voy a explotar dentro de René, pero la saco antes y le acabo en la espalda algo más arriba que la cola. Bea y el otro chico se acercan y empiezan a lamer la leche de la espalda de René.
Me siento cansado, ya acabé dos veces así que me siento y observo el panorama.
Veo a Bea que está siendo penetrado por el otro chico y a su vez le chupa la pija a René.
A la derecha Sam se monta a otro chico y a su vez es montado por otro que trata constantemente que no se le salga la pija de ese culo, pero mucho no lo logra con el frenesí de Sam.
El departamento es un descalabro.
Tocan el timbre, quien será, me asusto quizás los vecinos escucharon algo y se quejaron, no sé.
Me fijo por el mirador y veo a Kai, lo hago pasar. Ve lo que pasa y dice, parece que llegué a tiempo.
—no tenías examen hoy —le pregunto.
—ya terminó, duro solo dos horas —contestó y ahí tomé conciencia sobre el tiempo que había pasado.
Mira alrededor y me pregunta:
—abajo tengo 2 chicas que vinieron conmigo, te molesta si las hago subir.
A esa altura ya nada me sorprendía así que le hice la seña que sí. Les habló por el portero y las hizo subir, yo me dirigí al baño, único lugar donde podía descansar un poco sin que nadie tratara ni de chuparme la pija, ni de apoyarme el culo para ser cogido.
Pasados 5 o 10 minutos salí y veo a dos chicas de la misma edad riéndose con Kai y señalando a los otros que estaban en plena faena.
—Te presento a Ali y a Cris —me dice Kai— se van a incorporar a la fiesta —y las manda al dormitorio a ponerse más de acuerdo al ambiente.
—Pero son mujeres —le digo asombrado a Kai, y riéndose me responde:
—sí claro, cual es el problema muchos acá son bisexuales, ¿o no te distes cuenta?, vos, por ejemplo.
Ahí caí que Kai tenía razón, y me senté en el sillón a pensar un poco.
Aparecen las chicas casi desnudas, una de ellas tenía un cuerpo espectacular, casi 85 de busto bien paradito, comienzan a bailar y se empiezan a besar, el resto ni se inmutaba.
Aparece nuevamente Kai en calzones y me dice:
—¿te gusta alguna? O las dos, simplemente tomalas, no tienen problemas —agregó mientras miraba mi pija caída y dice— veamos si te podemos ayudar un poco —y se agacha metiéndose la pija en la boca.
Empieza a jugar con la lengua sobre el miembro casi muerto. Aparece otro chico que se para detrás de Kai y de apoco lo penetra. Con el correr de los minutos mi pija comienza a despertar y al cabo de un rato ya está arriba nuevamente
Ahí es donde Kai levantando la cabeza, se dirige a las chicas y les dice:
—ayuda acá chicas hay un palo que las necesita —se corre y empieza a disfrutar la pija que le entra por el culo.
Las chicas simplemente e acercan y se sientan una a cada costado mío, toman la pija y mientras Kai que ya acabó, se levanta y va hacia René, Ali −la del cuerpazo− se mete toda la pija en la boca y empieza a jugar con ella mientras Cris me empieza a chupar los huevos.
Miro a Kai y a René, éste último me sonríe y me guiña un ojo como diciendo dale nomás.
Que chupada estoy sintiendo Dios, que bien que lo hacían ambas, se turnaban y lamian y chupaban querían llegar a lamerme el culo y me obligaban a levantarme un poco.
Acosté a Ali en el sillón y empecé un 69 con ella mientras Cris me chupaba el culo.
Qué rica sentía esa chochi toda depiladita, le daba lengüetazos a 1000, trataba que la lengua entrara, buscaba los bordes y los mordisqueaba.
Al rato sentí que ella llegaba al orgasmo y ahí apure más con la lengua, se agitaba debajo de mí, escuche a mi oído –ahora me toca a mí−, era Cris.
Cambiaron lugares y repetí el proceso con Cris hasta que sentí que ella también tenía un orgasmo, entonces me levanté y tomé a Ali, colocándola en cuatro, busqué su chochi y traté de empujar.
—Nooo — escuche— a ninguna por allí no queremos quedar embarazadas con profiláctico no nos gusta, tratá por otro lado —entonces baje un poco y encontré el agujerito del ano. Hacia allí dirigí la boca haciéndole una lamida a fondo que la hizo temblar de placer. Cuando sentí que estaba punto levanté la pija y comencé a penetrar. Como respuesta Ali, levanto la cola y empujo hacia mí. Mientras Sil se ponía delante de mí y me ofrecía sus tetas para que las chupara, cosa que por supuesto no dejé de hacer a fondo. Al llegar Ali al orgasmo, tuve que repetir todo con Cris y chuparle las tetas a Cris.
Finalmente, ya casi sin baterías acabé dentro de la cola Ali y fue Cris quien se encargó de limpiarme toda la pija con la lengua.
Al rato ya estaban todos vestidos y listos para salir. Cada uno de ellos al salir me decía –hermosa fiesta, no la olvidaré— y me acariciaban la pija por sobre el pantalón.
Los últimos fueron René y Kai quienes dijeron – un éxito, yo sabía que así sería—
Salimos todos al palier y en ese momento entraba Ana, la madre de René que saludando preguntó qué pasaba
—nada, que teníamos unas dudas de matemáticas y él se ofreció a ayudarnos. Estuvo muy bien —dijo riéndose.
—Que bien —dijo y me agregó al oído— paso en un rato por tu casa.
—No —contesté— justo salía y tardaré en volver —respondí sabiendo que si ella quería algo de sexo me sería imposible por un larguísimo rato complacerla.
En otro capítulo les cuento como siguió esta historia.