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Pensamiento

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IRENE

Hace algunos años me encontraba solo, tenía una vida extraña llena de fantasías que rondaban por mi cabeza; todo era normal o eso creía la gente que me rodeaba, siempre he tenido un aspecto pícaro y serio al mismo tiempo por ello no estoy precisamente rodeado de chicas…

Mientras conversaba con un amigo ella paso caminando a toda prisa, con su mirada firme en el suelo, con un aspecto extraño, pero al mismo tiempo curioso. Evito la mirada de mi amigo y por supuesto también la mía, fue impresionante y quede enganchado a esa sensación. Pasaron algunos días, pude verla algunas veces más y notaba un nerviosismo terrorífico en ella, tenía tantas ganas de hablarle, tal vez preguntarle su nombre y algunas cosas más.

Su olor era particular, aunque nunca supe si era mi imaginación o tal vez su hermoso cuerpo.

Continúe mirándola unos días más esto ya no me estaba gustando. Al principio quería conversar solamente, ser su amigo o tal vez tenerla solo para mí.

Eso no era una mala idea, me quedaba pensando noche tras noche como seria poder quitarle su camisa lentamente besar sus pálidos labios y hacer que posara sus glúteos sobre mi cuerpo.

Solo deseaba poder tocar sus pechos desnudos sentir su piel sudada, tenerla toda la noche sin parar enseñarle que jamás tendría que poner esa cara triste de nuevo, hacerla sentir que solo me necesitaba a mí y solo a mí.

Pude acercarme lo suficiente a ella, pude tocar su pelo y besar su cuello

Pude sentir sus manos temblorosas y su respiración

Una respiración que me causaba erecciones y todo tipo de sensaciones. Temía su reacción era tan solo una chica inexperta y asustadiza, no quería hacerle daño o bueno tal vez si, pero quería que lo disfrutara.

Los días pasaban lentamente, en mi cabeza solo estaba su dulce aroma y el sabor de sus delicados labios pálidos, no podía pensar la otra cosa que no fuera recorrer su cuerpo con mi lengua y sentir su delicada y seguramente virgen vagina.

Un deseo que todos o todas han tenido alguna vez.

Solo que ese era el pensamiento más decente, conforme conocía sus ideas supe lo que estaba buscando, jamás nadie la avía tocado, jamás nadie tuvo el privilegio de sentirla tan cerca.

No podía creer todo lo que me susurraba al oído todo lo que tenía en mente

Me alegro de que la mayoría de las cosas no hayan pasado de unas erecciones y algunas risas nerviosas. Trataba de ser discreto, aunque siendo honestos ella sabía todo el itinerario que tenía en mente yo solo quería encerrarla bajo llave tenerla solo para mí, quería poder morder cada rincón, manipular su cuerpo de maneras extremas, el miedo ya no existías más lo único que me importaba era verla sonreír, tenía mucho tiempo, ideas, y sobre todo un cuerpo virgen un hermoso y joven cuerpo virgen.

La anatomía humana es sumamente compleja y eso dejaba en segundo plano la vagina, boca y algunas cosas más, dejare a la imaginación del colectivo todos los detalles…

¿Pensar en cosas así te convierten en depravado?

Hasta este punto solo pude intimar con ella la oportunidad no estaba muy lejana todo era parte de un plan muy bien elaborado 5 horas de soledad con ella resguardados entre la obscuridad del universo no era mucho tiempo, pero si lo suficiente, ver el calendario solo provocaba dolores de cabeza y un montón de ideas a considerar; ahora yo parecía la pequeña asustada mientras ella se veía tan segura.

El momento llego de imprevisto todo lo planeado se fue al demonio, estaba frente a mí de una manera sencilla y sin una palabra me quede congelado, sentía que era un sueño, sentía como un gran pastel y las ganas de arrancar cualquier pedazo, pero no sabía cuál…

Me quede congelado ella puso mi mano fría sobre su hombro y la empezó a deslizar.

Sabía que era el momento.

Acto seguido se quitó la camisa y se podía observar unos pechos pequeños nada podía ser más perfecto solo que esta vez la gran sonrisa la tenía ella una sonrisa de rebelión de venganza.

¿A quién? No lo sé, pero parecía todo menos amor.

Parecía hacerlo por probarse a sí misma.

Y caí en el pensamiento que tanto tiempo estuvo distorsionado en mi cabeza.

Así que recogí su camisa y se la coloque en sus manos bese su frente y le pedí que se marchara.

Esa noche fue la más larga de mi vida jama supe nada mas de ella, pero seguro me odia y cree que soy un idiota.

Cualquier persona habría hecho de todo con un cuerpo así

Todas esas fantasías estúpidas y sádicas me llevaron a un único resultado.

Amarla.

Y cuando se ama a alguien de verdad prefieres lastimarlo en tus fantasías que en la vida real…

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