Nuevos relatos publicados: 7

La mejor noche

  • 3
  • 16.599
  • 8,82 (22 Val.)
  • 1

Después de muchos años de relación con Javier yo sentía que algo faltaba, a pesar de lo que sentía por él.

Una noche después del trabajo fui a un bar para tomar un trago, ahí fue cuando conocí a un chico alemán, más o menos de mi edad; su nombre era Aleksander, cuando lo vi de inmediato me atrajo.

Se acercó a mí, me invitó un escocés en las rocas y charlamos por unas dos horas, luego me levanté para ir al sanitario; entré a lavarme la cara, al salir lo vi esperándome, con su brazo me bloqueó la salida y me hizo entrar de nuevo al sanitario. Nos besamos y luego le quité la camisa y lamí su pecho lentamente, pude sentir como su pene crecía y endurecía.

Antes de continuar recibí una llamada de Javier, Aleksander me preguntó quién era, y se lo dije. Pensé que se enojaría, pero no fue así, era un tipo liberal y con una mente pervertida que me encantó. Se le ocurrió algo excitante, y lo pusimos en práctica.

20 minutos después de la llamada llegué a casa con Javier, él estaba dormido en el sofá, aproveché y fui a buscar cinta adhesiva para inmovilizarlo. Procuré no hacer mucho ruido, pero me fue imposible. Se despertó y me preguntó que hacía, no dije nada, le sonreí y cubrí su boca con cinta.

Me dirigí a la puerta y dejé que Aleksander pasara, Javier estaba en shock. Mientras Aleks me tomó por la cintura, me besó y me quitó el vestido rojo que llevaba. Vi la expresión de Javier y dudé en seguir, pero Aleks comenzó a lamer mis pezones y no resistí. 

Me acosté en la mesa mientras Aleksander me hacía sexo oral, lamía mi clítoris intensamente y metía sus dedos en mi vagina y ano. Yo le regresé el favor y le hice una mamada, me tomó fuerte del pelo y me presionó contra él.

Me gire para ver a Javier, el gemía y trataba de liberarse. Aleksander me tomo de la cara e hizo que continuara mi trabajo. Luego me puso en cuatro, me separó el trasero y me escupió, luego me penetro analmente (qué sensación y qué placer) de nuevo vi a Javier, pero esta vez noté que estaba excitado. Me separé de Aleks y fui hacia Javi, le abrí los pantalones y comencé a chupar, estaba tan excitada que sentía como lubricaba mi vagina. Aleksander se arrodilló y continuo penetrándome, pero ahora vaginalmente.

Liberé una de las manos de Javier y este me tomó la nuca y me presionó contra él mientras elevaba sus caderas, una y otra vez. También quité la cinta de su boca y pude oírlo gemir, me encantaba oírlo. Me levanté y me senté en él, me movía frenéticamente, solo me detuve para liberarlo por completo, se quitó la camisa y siguió penetrándome, Aleksander se acercó a mí y le di una mamada.

El final fue glorioso, los tres tuvimos un orgasmo simultáneo, Javier eyaculó dentro de mí (ah, esa sensación deliciosa) y Aleksander acabó en mi boca.

Fue la mejor noche de todas, ahora ya no me falta nada.

(8,82)