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Vero, su mamá y su hermana, todas por la causa.

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En mi juventud, en los primeros años de nuestra democracia, me invitaron a trabajar en un partido político, la causa me pareció noble y a la democracia había que hacerla crecer entre todos así que comencé a militar.

Allí conocí a una morochita muy simpática y muy fuerte que se llamaba Verónica, a Verónica le rondaban unos cuantos chabones pero no les daba mucha cabida.

Tenía 21 añitos y les tengo que decir que estaba muy buena, Tenía un lindo par de tetas, no muy grandes, pero sí muy firmes dada su edad y rara vez se ponía corpiño, y una cola redondita que siempre llevaba calzada dentro de unos jeans apretados que realzaban más su redondez.  Era bajita, no más de 1,60 mts.

Me pusieron a trabajar con ella y ahí fue cambiando mi interés hacia la política. Desde ese momento la causa se llamaba Verónica y el interés era cogerla. La patria me seguía interesando pero en especial me interesaba intimar con la ciudadana Verónica.

Las reuniones, los encuentros y las convenciones nos ayudaron a conocernos y pude ver que me tenía más en cuenta a mí que a los otros y eso me envalentonó.

Una noche después de una reunión partidaria la invité a cenar y allí hablamos mucho de nosotros, ella notó mi interés pero me aclaró que por ahora no quería estar en pareja, me dijo  que le gustaba compartir cosas con migo y le gustaba como persona. eso me dejó caliente pero esperanzado, solo debía ser paciente y seguro ya caería en el lazo. No me tenía que dormir!

La acompañé hasta la puerta de la casa, charlamos otro ratito y la noté muy entregada, para despedirse me dio un pico y yo me fui a mi casa con un soberano palo.

Al otro día me dijo que no la mal interprete que yo le gustaba mucho pero que quería esperar. Y yo le dije, en un gesto de romanticismo que no me caracteriza, que la iba a esperar hasta el último día de mi vida. (quehijodepu...)

Las cosas cambiaron cuando nuestro líder político realizaba un acto en el obelisco y había que llenarlo.

Verónica era una de las encargadas de la organización del acto y estaba a full. Nos encontramos dos horas antes y ella estaba con su hermana Marita. Marita tenía 19 años y era petisita como Vero pero tenía un par de tetas más grandes que la de su hermana y su cola era también mayor.

Vero me dijo si era tan amable de quedarme todo el acto con su hermana para que no le pase nada y si después la podía acompañar hasta la casa ya que ella tenía que trabajar hasta más tarde.

Cómo podía negarme? Ahí me quedé con Marita, que a diferencia con su hermana tenía cara de más turrita.

En un momento de nuestra charla previa al acto me dijo: -así que vos sos el que se quiere coger a mi hermana?

Me quedé helado ante tal pregunta y le dije que Vero me gustaba y que nos llevábamos bien. Viendo mi cara me dijo -Jaja es una broma, no pongas esa cara!!

Durante el acto se paró adelante mío y cuando salió nuestro líder se puso a saltar como todos pero rozando su culo contra mi pija de manera intencional, me puse al repalo en dos segundos y ella se daba vuelta y me sonreía sin dejar de hacerlo. Sin pensarlo más la agarré con una mano de la cintura y la apreté aún más contra mi pija ella seguía refregándose y yo con la otra mano le acariciaba las tetas firmes y grandes en medio de todos y sin que nadie se diera cuenta. El líder explicaba su plan para salvar al país y nosotros nos fuimos hacia el telo más cercano que encontramos.

Apenas entramos a la habitación le arranque la remera y le empecé a lamer sus tetas superduras, ella estiró su mano y comenzó a sobarme la pija por arriba del pantalón. Con mi mano solté el botón de su jean y deslicé mis dedos por debajo hasta su concha que estaba mojada y caliente. Cuando llegué a su clítoris suspiró fuertemente y después de dejarse tocar un rato se paró, se quitó toda la ropa y yo aproveché para hacer lo mismo, y se prendió a chuparme la pija con una maestría inusitada, la traje hasta mi y la subí arriba mio hasta que le quedó su concha en mi cara y me dediqué a lamerla con pasión... Que placer!! después me subí un poquito y le lamí el culito llenándoselo de saliva para meterle un dedito adentro... el agujerito era muy apretadito y me imaginaba cogiéndoselo con mi pija y me calentaba mucho, volví a su concha pero sin dejar de jugar con mi dedo en su culo y ella se retorcía de placer mientras su lengua me cosquilleaba en mi pija volviéndome loco, cuando estaba a punto de acabar, acabó ella , su cuerpo se sacudía de placer y se tragó mi pija hasta el fondo logrando mi acabada y tragándose mi leche caliente hasta la última gota.

Descansamos unos minutos y luego se subió encima mío y comenzó a hamacar su cuerpo de manera que primero rozaba mi pija con su concha para luego refregar sus tetas en mi pecho arqueando su espalda. Este jueguito me puso al palo y cuando ella lo notó calzó mi pija en su concha y comenzó una cabalgata infernal, gritaba y gemía como si fuera su vida en eso, su cuerpo transpiraba y me mojaba el pecho, yo agarré sus tetas con mis manos acariciando sus duros pezones así estuvimos un rato hasta que ella acabó gritando y aflojó su cabalgar ahí la agarre y la di vuelta, la puse en cuatro y le empecé a meter mi dura pija en su culo. Cuando le metí la cabeza gritó de dolor, no se si se lo desvirgué pero se ve que no lo tenía muy "usado", con cada bombazo se la fui metiendo más y más hasta que se la puse toda, empecé a darle, primero despacio y después cada vez más fuerte hasta llegar a un ritmo de locos, sus gritos de dolor se convirtieron en jadeos de placer y su cuerpo se fue deslizando hasta quedar acostada en la cama, yo seguía mi faena y no podía creer el culo que me estaba comiendo, apretadito y rico que me estimulaba muchísimo y hasta que no pude más y acabé, ella, al sentir el chorro de leche caliente en su culo, acabó también y quedamos los dos tirados en la cama exhaustos por un rato.

Volvimos para el acto pero ya había terminado y la gente se desconcentraba así que la llevé a su casa.

Marita insistió para que pase un momento y allí conocí a su mamá.

Malena (así se llamaba) era una mujer de unos 50 años, viuda desde hacía más de diez, medio rellenita pero no gorda, o sea, buenas tetas y buena cola y una cintura un poco más ancha propio de su edad pero era una mujer que se cuidaba y se mantenía bien y era muy coqueta. Según me contaron sus hijas no había vuelto a formar pareja, pero era una linda mujer y muy simpática.

Cuando nos vio llegar con cara de cansados nos sirvió algo fresco y nos dijo: - Se ve que se cansaron en el acto., no? -No sabes mami, no damos más! dijo la muy turrita de Marita y yo me reía por dentro.

Charlamos un rato y Malena me pareció una mujer muy piola, y hasta me invitó a cenar. Arreglamos para el viernes siguiente y me fui, Marita me acompañó hasta la puerta y me dijo: - MIra, lo de hoy fue solo sacarnos la calentura, yo se que te gusta mi hermana y no me voy a meter en el medio, solo que ella es lerda y yo le comí al pibe antes que ella, jaja!

Esa noche miré todos los noticieros y al otro día leí los diarios para enterarme del discurso, no quería pisar en falso cuando hablara con Vero.

A la tarde me llamó y me agradeció que le cuidara a su hermana...si supiera como se la cuidé!!!

Quedamos en vernos esa tarde y nos encontramos en un bar del centro. me dijo que se había quedado mortificada por cargarme la responsabilidad de cuidar a su hermana y que al final no había estado en el acto con migo como quería , que a veces se daba cuenta que la militancia política le hacia perderse de las cosas linda de la vida pero que estaba a tiempo de remediarlo y dicho esto me dio un tierno beso en la boca que yo respondí jugando con mi lengua bien junto a la suya.

Me dijo: Acá a la vuelta hay un hotel lindo, vamos! Era el mismo telo que había ido con su hermana!!!!!!!!

El conserje me miró como diciendo, todos los días venís con una distinta! pero obviamente no dijo nada y yo puse mi mejor cara de boludo y entré.

Vero era mucho menos polvorita que su hermana, todo en ella era dulzura y delicadeza, su manera de chuparme la pija suave y dulcemente, la manera misma de gozar, gimiendo suavemente, eso me calentó mucho, no cogimos, hicimos el amor como hacía mucho que no hacía, y aun hoy recuerdo toda esa dulzura, Cuando se subió arriba mío me cabalgó muy lentamente, como queriendo que no termine nunca y luego que la puse en cuatro le llené la conchita con mi pija y la bombee muy lentamente hasta hacerla acabar y por ultimo acabé yo y con cada chorro de leche en su concha logré sacarle un espasmo en su segunda acabada. Terminamos abrazados y ya me estaba arrepintiendo de lo de su hermana pero tenía su promesa de no jodernos y eso me aliviaba. Y si bien había gozado muchísimo de tanta explosión sexual, con Vero era todo distinto, me hacía sentir más pleno.

Ese viernes concurrí a la cena en lo de Vero, su mamá cocinaba muy rico y se había vestido de lo más hermosa con una camisa blanca un poco desabrochada que dejaba ver el comienzo de su escote y demostraba de dónde venían las hermosas tetas de sus hijas y una pollera apenas unos centímetros por encima de la rodilla que dejaban ver que sus piernas todavía eran hermosas y le marcaban su redondo culo aun apetecible. Las nenas estaban lindas como siempre, esa noche jugué de "más que amigo" de Vero, y aunque oficialmente no éramos novios, la mano venía por ahí.

Marita se portó muy bien según había prometido y solo se limitó a alguna risita pícara y a un par de gestos muy hot cuando no la veían.

La que estuvo muy animada fue la mamá, si bien respetó mi rol de festejante de la nena, estuvo demasiado amable con migo, parece que le caí muy en gracia y que la señora hacía rato que no la atendían como era debido.

La cena pasó de lo más cordial, me hicieron sentir muy a gusto, peo el destino tejía su trama macabra y que poco a poco se iría revelando.

A los dos o tres días llamo a la casa de Vero quería verla (recuerden que no había celulares, lo más parecido era el zapatófono de Smart pero no lo teníamos ja!) me atiende su mamá y me dice que había salido con una amiga pero que calculaba que no tardaría mucho si quería que pase por ahí.

Llegué a su casa y su mamá me hizo pasar, era una calurosa tarde de primavera y fuimos hasta una mesa que tenía en el jardín, me invitó con unos mates y me dijo que la había llamado Vero y que se quedaba a cenar en lo de su amiga, bueno, no importa, le dije, igual te acepto unos mates y después me voy.

Malena estaba vestida con una remerita escotada y unos shortsitos bastante apretaditos y les digo que estaba para pasarla por las armas, entre su vestimenta sugestiva y lo amable y cariñosa que era me estaba despertando el indio, la veía moverse alrededor mio y me excitaba bastante pero quería mantenerme en regla, no quería que por un rapto de calentura se estropeara mi relación con Vero. Pero me dije, bueno, conformate con mirar y admirar a la veterana que todavía esta buena.

Pero claro, Malena no era tonta y se dio cuenta de que manera la estaba mirando y me dijo: - Me parece a mi o uno que yo se me está comiendo con los ojos?

-Bueno -le dije riendo- lo que pasa es que estoy descubriendo de donde salieron esas dos chicas tan lindas!

-Gracias por el piropo -me dijo- te parece que todavía estoy en carrera?

El nivel de leche en sangre me pudo más y le dije -En carrera es poco, estás muy buena....cualquier hombre quisiera tener algo con vos!

Se acercó a mi y poniendo su cara muy cerca de la mía me dijo en tono sugerente -Y vos tendrías algo con una viejita como yo?

- Por supuesto! Le dije y ya sin poder aguantarme le dí un corto pero húmedo beso en la boca.

Ella se abalanzó y me besó metiendo su lengua en mi boca hasta el fondo y luego me dijo: -haceme tuya, me tenes recaliente desde que te conocí, hace mucho que no estoy con un hombre y me llevó hasta su pieza y nos tendimos en su cama sin dejar de besarnos, acaricié sus tetas y aunque ya no estaban tan firmes como las de sus hijas eran muy suaves. ella estaba encima mio y yo acariciaba con una mano sus tetas y con la otra su culo arriba del short Ella gemía y me decía que era lindo recordar las caricias de un hombre. Al rato se deslizó hacia abajo y fue desabrochando mi jean despacito, como queriéndose encontrar con mi pija de a poco, en cima me acuerdo que mi bragueta tenía botones en vez de cierre y los iba soltando de a uno, luego acarició mi pija sobre mis calzoncillos y de a poco corrió el elástico hasta dejarla al descubierto, la besó y lamió como un chico que hace mucho que no tenía un chupetín en su boca. Lo disfrutaba y yo la dejé hacer tranquila un rato, lo fue mordisqueando y tragando muy despacio yo estaba muy caliente y como quería que la fiesta durara más tiempo la separé y bajándole los pantaloncitos y la bombacha me perdí en su concha que estaba bañada a mas no poder, mucha lujuria desatada después de tanto tiempo... al rozar sus labios con mi lengua gimió muy profundamente y cuando llegué a su clítoris estalló en un orgasmo intensísimo que me obligó a parar y abrazarla. Cuando se recuperó me dijo: - Cogeme!! haceme tuya que no aguanto más!! Ahí como estaba le metí mi pija y si bien su concha estaba super lubricada, la ausencia de visitas por un largo tiempo hizo que sintiera la estrechez de su vagina. Ella se retorcía de placer mientras que yo la bombeaba muy despacio y le besaba sus dulces tetas.

Jadeábamos los dos, yo entraba hasta el fondo y después la sacaba y le metía solo la punta y le bombeaba así, despacito hasta que ella se desesperaba de placer y le iba hasta el fondo. La tuve así un rato largo hasta que no aguanté más y le llené la concha de leche. Al sentir ese chorro caliente dentro suyo volvió a acabar tan fuerte como la primera vez , me abrazó fuerte y sus ojos se llenaron de lágrimas.

Cuando se repuso me dijo: -Gracias por hacerme sentir mujer otra vez. Se que hice mal y que vos estas con mi hija, pensaras que soy una puta pero me calentaste y sentí la necesidad de tener un hombre dentro mío otra vez.

Le dije: - No te hagas problema, ni vos sos una puta ni yo soy un santo, yo también me sentí atraído por vos y espero que te haya servido para que pienses en rehacer tu vida, todavía sos joven y tenes que vivir. y con respecto a Vero, todavía no somos novios y mientras no se entere....

Ya eran dos cosas de la que no tenía que enterarse... Que mal comienzo para una relación, no?

Pero bueno, había que aprovechar, la vida no te da estas oportunidades todos los días...es más, no te las da casi nunca!!! jaja, (o por que se creen que todavía las tengo grabadas en mi memoria?)

Pero todavía quedaba una más.

Una tarde me llamó Marita y me dijo que Vero me quería ver en su casa. Allí fui, sus actividades partidarias nos tenían un poco alejados y tenía muchas ganas de verla.

Llegué y me abrió la puerta Marita, cuando pasé dio un salto y se me colgó del cuello dándome un beso en la boca. Cuando pude zafar le dije: -Que haces, estás loca? nos va a ver Vero y se va a podrir todo!

-Quedate tranquilo que no nos va a ver porque no está y no va a venir hasta tarde y mi mamá tampoco esta, no se lo que le pasó pero de repente se acordó de que estaba viva y hoy salió con un amigo nuevo que tiene.

-Entonces, me llamaste a propósito para estar con migo! -le dije-

- Uyy, te diste cuenta! me dijo cargándome.

_No podemos seguir jugando el jueguito de comerme a las dos hermanitas - le dije, pero en si pensaba las dos hermanitas y la mamita!

-No, quedate tranquilo, cojamos hoy y después no te jodo más -me dijo mientras que me ponía la mano encima de mi pija que ante la propuesta ya estaba muy dura. Ahí no más se arrodilló y sacando mi verga se la empezó a comer muy golosa. Que bien que lo hacía, pasó mucho tiempo hasta que sintiera algo así nuevamente. La dejé un rato y luego la levanté y la llevé hasta el sillón del living, le arranque la ropa y metiendo la cabeza entre sus piernas, comencé a lamerle la concha que ya estaba muy caliente y jugosa. Ella gritaba de placer y yo la puse culo para arriba y desde atrás se la puse en la concha de un bombazo y le empecé a dar y dar prendido de ese hermoso culo. La guacha gemía y gozaba y se sacudía con mis pijazos. acabó con todo, sus jugos les chorreaban por las piernas, estaba muy caliente y yo también se dio vuelta y se metió de nuevo la pija en su boca hasta que le llené la boca de leche, que la muy puta saboreó hasta la ultima gota.

Fuimos hasta la cocina a tomar algo fresco, los dos desnudos como estábamos, ella logró calentarme en extremo y al verla así, con ese culo y esas tetas, la tenía dura otra vez, se sentó en la mesada y agarró mi pija y me empezó a pajear diciéndome:- Cogeme de vuelta putito! Y ahí no mas se la puse otra vez, ella sentada en la mesada con las piernas abiertas y yo parado entre medio, bombeandola y chupándole sus deliciosas tetas . Ahí le dimos un buen rato hasta que me dijo: Ponemela por el culo como el otro día por favor, partime el culo!!. La agarré y la llevé hasta la mesa del comedor, la acosté de espaldas con las piernas colgando y no necesité lubricar tanto el culo porque ya estaba bien mojado le puse la punta y de a poco se la fui metiendo, hasta que se la metí toda y ahí la empecé a bombear, jugué un poco con su clítoris pero no hacía mucha falta, ella también estaba pasada de rosca y gritaba y gemía con cada bombeada que le daba. Sus gemidos parecían llanto y la verdad me calentaban muchísimo. Ver mi pija entrar y salir de ese agujero y yo agarrado de esos cachetes monumentales me hacían sentir en la gloria, por suerte, la proximidad con el primer polvo hizo que aguantara bastante hasta la segunda acabada y pude gozar y hacerla gozar un montón. Al fin acabé y quedé exhausto, me temblaban las piernas, nos fuimos de nuevo al sofá y nos abrazamos y besamos.

-Como sigo con tu hermana después de esto? Si nunca cogí de esta manera con nadie?

-O como dejo a tu hermana por vos sin romperle el corazón?

-No te hagas problema, esto se terminó acá. -me dijo- Me había quedado muy caliente con vos el otro día y por eso te armé la trampita pero no me voy a meter entre vos y mi hermana, esto queda entre nosotros y nunca más se va a repetir.

La verdad tenía mis serias dudas, la petisa era muy decidida y tenía miedo hasta que me extorsionara por sexo, pero no, al poco tiempo conoció un chico y en un par de meses se fue a vivir con él a Córdoba. A veces me imagino en como cogerían y lo bien que la debía pasar el flaco.

La mamá consiguió pareja y nunca más volvimos a tocar el tema y con Vero seguimos un tiempo, teníamos buena onda y cogíamos muy copadamente, pero su lealtad al partido hacia que la viera cada vez menos y lo nuestro se fue enfriando y se terminó cortando.

 

En las últimas elecciones logró una banca de diputada, le fue bien en su carrera política y eso me alegró mucho, obviamente la voté.

(9,50)