Nuevos relatos publicados: 13

En el metro caliente

  • 5
  • 14.732
  • 9,22 (9 Val.)
  • 0

¡Hola queridos! Soy Tania Love travesti de closet y les traigo una historia muy reciente se puede decir que me dieron mi fin de año jiji.

Resulta que me dirigía a mi trabajo como siempre alrededor de las 7:40 am, el metro iba medio lleno y bueno... Como siempre, elegí el último vagón (quien conoce el metro de CDMX sabe muy bien por qué) ese día no vestía nada especial, pantalón pegado, playera negra y tenis, eso sí, debajo llevaba unos lindos cacheteros de encaje que resaltaban la redondez de mis nalgas y las hacían lucir paraditas y apetecibles.

Siempre me han dicho que aunque vista de chico, tengo una fuerte carga sexual femenina que proyecto aún sin quererlo y lo creo, ya que al subir al vagón más de uno volteó la mirada hacia mi y entre empujones me rodearon inmediatamente.

Ninguno se animaba a dar el primer paso, pero se notaba como todos esos hermosos caballeros necesitaban una caricia matutina que yo por supuesto podía darles jiji.

Fue entonces cuando uno se colocó justo delante mío, pude ver unos hermosos ojos café que me miraban fijamente, se trataba de un lindo macho maduro, unos 50 años, me gustó su porte, era fuerte, aunque un poco bajito y despedía un olor delicioso... A hombre en celo.

Me miraba a los ojos mientras se acercaba más a mi hasta que entre los dos no cabía nada más, con su mano se tocaba invitándome a conocerlo. Así que decidí actuar... Lentamente subí mi muslo derecho hasta que pude sentir su verga ya dura, tenía buen tamaño y sobre todo la sentí muy dura, eso me excitó demasiado y bajé mi mano casi por instinto. Sus ojos no dejaban de mirar los míos mientras mi mano acariciaba su paquete sobre el pantalón.

Se notaba que disfrutaba de mi mano porque sus ojos se entrecerraban de vez en cuando y sentí que tenía la responsabilidad de hacerlo terminar ahí mismo, así que bajé el cierre del pantalón y se la saqué muy rápido (tengo algo de experiencia jiji) comencé a acariciar aquel pedazo de carne muy despacio al principio sin dejar de mirar sus hermosos ojos, su cara comenzó a ponerse roja, entonces comencé más rápido desde su glande hasta la base del tronco, se estaba volviendo loco...

El señor que iba a un lado de él se dio cuenta y comenzó a acariciar mis nalgas que, por instinto y en automático se pararon más para permitirle sentir mejor, desabroché mi pantalón para dejar que su mano entrara por la parte de atrás, cosa que entendió perfectamente y su mano entró sin problema hasta mi culo, sus ojos brillaron al sentir el encaje de mis cacheteros y comenzó a buscar la entrada de mi ano, una vez que lo encontró sacó su mano y mojó con saliva dos de sus dedos y volvió a meterla está vez con sus dedos apuntando a mi culito que ya lo esperaba ansioso. Cuando los metió no pude evitar gemir como putita y varios voltearon a mirar que sucedía.

Yo estaba muy caliente y estaba dando un trabajo de primera con mi mano, ya iba a llegar a mi destino así que apresuré el movimiento de mi mano para que mi macho pudiera terminar y así fue, mi pantalón quedó lleno de leche porque no había otro lado a dónde descargar, sentí su leche caliente en mi muslo y mi mano que inmediatamente y con la sorpresa de los que me vieron llevé hasta mi boca para limpiarla completa, su leche estaba deliciosa y espesa.

El otro macho se conformó con meter sus dedos en mi ano y cuando ya iba a bajar sacó su mano con una palmada en mi nalga como señal de agradecimiento.

Pensé que eso era todo, una mañana caliente en el metro rumbo a mi trabajo y listo... Pero al día siguiente el macho de los ojos lindos me estaba esperando a la misma hora en Tacubaya que es la estación donde me subo.

Ahí estaba en el andén buscando con esos hermosos ojos que me enamoran y al verme brillaron, me hizo una señal con la mano, me di cuenta que no iba solo, iba con dos hombres más así que ignoré su señal y subí al metro, ellos hicieron lo mismo, adentro no dejaba de mirarme y me puse nerviosa, me hizo otra señal para que me acercara y bueno, tímida, pero lo hice. "No te preocupes ya les hablé de ti" me dijo refiriéndose a sus acompañantes que ya me miraban con lujuria y morbo, me los presentó, eran compañeros de trabajo y sin más uno de ellos me dijo "queremos ver si nos puedes visitar mañana viernes" uff yo quedé petrificada! Me estaban invitando a ser suya los tres! Se notaba su inexperiencia y que no eran de aquí ya que el otro me dijo "ándale te pagamos algo"

Miré al macho de los ojos bonitos y con la cabeza hizo un ademán de convencimiento, sus ojos... Ah sus ojos! No pude resistirme así que les dije que si, me dieron la dirección, Yo pasaría después de mi trabajo en la noche, me despedí de ellos tocando sus vergas sobre sus pantalones y noté que los tres estaban muy duros ya de solo pensar e imaginar.

Llegó el viernes, Yo estaba nerviosa y excitada, no sabía aún si ir o no, por un lado me daba miedo pero por otro me excitaba tanto la idea de entregarme a esos tres machos... Además tenía que pensar en qué le iba a decir a mi pareja, ella no sabe que soy más puta que ella jaja! Bueno, se me ocurriría algo.

Me vestí normal, de hombre como siempre lo hago para ir a trabajar sólo que esta vez por debajo de mi ropa normal llevaba unas pantimedias negras extra transparentes y con abertura por atrás para facilitar las cosas, una tanga chiquita del mismo color y un top transparente, mis pies los cubrí con unos tines muy chiquitos y coquetos porque hacia frio.

Continuará...

Gracias por leer queridos como siempre les pido sus mensajes que me mantienen calientita [email protected].

¡Besos!

Tania Love.

(9,22)