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Jugando con los dildos de mi tía

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Hola a todos, me llamo Lorena, esta historia ocurrió en la vida real y se la he contado a esta relatora para que os muestre a ustedes como ocurrió todo, todo sucedió en el verano de 2020 en plena pandemia de covid19, vengo de una familia numerosa y que está distribuida por toda España, yo vivo con mi madre y mis 2 hermanos menores, Daniel y Sofia. Cuando comenzó lo del coronavirus más o menos en mayo de 2020 mi tía Paola tuvo que viajar hasta Madrid y nos pidió que cuidáramos de su casa pues quedaría sola, ella vive a las afueras de la ciudad acá en Barcelona España, yo accedí a cuidarle la casa porque era un momento difícil. En fin, llegue a casa de mi tía y todo iba normal, en aquellos meses pasaba el día entre chats hots, viendo Netflix, y un poco de porno para masturbarme antes de dormir o cuando me provocaba a cualquier hora del día, cabe destacar que soy lesbiana y tengo 22 años.

Mi tía siempre ha sido liberal, es la típica mujer que le gusta siempre andar de fiestas y desde que tengo uso de razón siempre se ha vestido muy bien y es muy putita en su caminar, tiene un cuerpo de infarto pues nunca tuvo hijos y pues a sus 48 años se ve genial tiene las tetas y un culazo hermoso operado, no puedo negar que varias veces me he masturbado pensando en su hermoso cuerpo. Cierto día limpiando unos estantes para retirar el polvo me encontré una llave, cabe destacar que mi tía había dejado su habitación cerrada y yo dormía en el otro cuarto que si estaba libre.

Ese día pensé en verificar que puerta abría esa llave. Mi mayor sorpresa fue cuando fui a su habitación y pues la llave coincidió en su cerradura. Entre a su cuarto y desde ese día me mude a dormir a esa gran cama con sabanas de seda que la muy putita de mi tía tenía en su cuarto. A la mañana siguiente empecé a curiosear en la habitación y revisando unas gavetas me encontré el botín que tanto ocultaba mi tía. Su colección privada de dildos, habían 12 de diferentes tamaños e incluso uno doble para penetración anal y vaginal que se coloca sobre la superficie de una pared y se adhiere, para mí eso fue lo máximo, pues para comenzar ya me había aburrido de solo darme dedos esos días atrás viendo videos porno lésbicos hasta media noche.

Conseguí sus vibradores, lubricante de varios sabores y e incluso unas bolas anales que tenía guardadas, aquello parecía un sexshop y no podía creer lo putita que era mi tía, y no paraba de imaginarme lo bien que se la pasaba cuando estaba sola en casa. Me encantaba estar en aquella casa con todos esos juguetes disponibles para mí, empecé a probar todos y cada uno de ellos. Me acosté sobre la cama con sabanas de seda y empecé a frotar sobre mis pezones el dildo más grande de unos 30 cm de largo, lo moje con saliva mientras con mi otra mano frotaba mi coñito ya húmedo con otro dildo en forma de espiral fucsia q me gusto, empecé a meterme aquel dildo rosaaa y ufff que rico muy pronto empecé a botar mucho fluido, cuando ya estaba super dilatada me puse a cuatro patas y empecé a meterme el dildo de 30 cm poco a poco, al ser grueso costaba un poco mas pero al estar completamente húmeda mi vagina iba cada vez más profundo llegando a entrar en mi unos 22 cm de esa polla de plástico, sentía que el dildo tocaba mi ombligo mientras yo lamia el otro con forma de espiral que había estado en mi vagina antes… Chorros de fluidos empezaron a salir de mi cuando me vine por primera vez con semejante monstruosidad de dildo dentro de mí, me cambie de posición y lo adherí del piso colocándolo en posición vertical y dejándome caer poco a poco sobre esa enorme polla de plástico que intentaba partirme en 2 jajaja.

Aquella tarde noche ufff me di una rica masturbada con esos dos dildos, ya me quedarían otros más para probar. Al día siguiente, entre a una sala de chats y allí conocí a una chica con la cual hablando por texto luego terminamos en una video llamada, y le comenté que tenía un vibrador que se podía controlar a distancia, ella me explico que con una aplicación ella podría controlarlo a distancia si lo usaba y que luego yo haría lo mismo con ella puesta también la chica llevaba uno.

Pues así fue, ya excitada viéndola a ella frotarse su lindo y rosadito coñito todo depilado y yo dándome deditos ya estaba super húmeda, coloque el vibrador en mi vagina y ella comenzó a darle velocidad mientras yo iba frotándome el clítoris de repente ufff subía mucho la intensidad y baja, como también había momentos en que se quedaba muy fuerte la vibración y deeeooos que rico mis piernas no dejaban de temblar y allí estaba mi vagina super húmeda frente a la cámara de mi laptop y esa chica al otro lado del mundo divirtiéndose con mis gemidos.

L: oh si coñooo joder tia que rico me encanta que rico uf si si mmm

Me encantaba estar sola en aquella casa con tanto placer para mi sola, definitivamente que en medio de mis masturbaciones pensaba en lo rico que se la pasaba la putita de mi tía cuando estaba sola en casa.

La chica siguió torturándome con la vibración hasta que ufff me di una espectacular acabada que estuvo genial mi cuerpo quedo estremeciéndose de placer y uf que rico me encanto vivir ese momento de adrenalina con aquel vibrador.

A la mañana siguiente llamo mi tía por video llamada y pues me dio mucho morbo que ella me preguntara que, si todo estaba bien por casa, hablamos un rato y pues me dijo que me depositaria para comprar algo de comida, en un momento no aguataba las ganas de reírme de pensar que ella creía que su secreto estaba a salvo conmigo.

Revisando el refri me di cuenta que ya no quedaba casi nada así que me di una buena ducha me arregle y salí al supermercado a comprar algunas cosas en el camino, me lleve otro vibrador más pequeño metido en mi vagina, me coloque una tanga muy sexy que escogí del cajón de mi tía pues tiene unos modelos que uf me encantan y por suerte a mí también me quedan las de ellas pues somos casi parecidas en contextura física, me coloque un vestido y me fui al super, en el camino en una cola de tráfico me di una rica masturbada con el vibrador tanto así que en medio del orgasmo me tocaban la bocina pues no avanzaba en el vehículo jajaja.

Llegue al supermercado y pues llevaba toda la tanga mojada y sentía como el fluido corría en mi entre piernas, no me importo eso para nada y fui a comprar las cosas que necesitaba y pues fue genial andar así con el vibrador metido y caminar por los pasillos del supermercado.

Al llegar a casa descargué todo, me di un rico baño que claro tenía que incluir otra masturbada esta vez con uno de los dildos que se pega en la pared, empecé a darme bien rico con ese dildo y uf lo hundí todo en mi vagina hasta correrme como loca, movía mis caderas bien rico contra la pared y gemía como una puta, me encanto correrme mientras el agua fluía por mi cuerpo.

Esas fueron noches intensas en las que probé uno a uno todos los dildos de mi tía, luego de eso cuando logramos vernos por video llamada la miraba y sonreía dándome mucho morbo saber que tenía todos esos objetos en casa, de los plugs anales que tenía me robé uno y pues luego fui experimentando en mi casa con él y uf masturbarse analmente es otro placer divino.

Espero que les guste este relato, valórenlo y coméntenlo, saludos.

(9,50)